Estoy casada pero ultimamente me da por pensar en viejitos. No se que tendran los señores grandes pero me vuelven loca. Quizas es que mi marido ya no me prende igual o que quiero experimentar algo diferente. El caso es que cada vez que veo un señor de como 70 años en el mercado o en el parque se me antoja que me lleve a su casa y me de hasta por debajo de las uñas.

Imaginen esto un señor con canas arrugas en la cara pero con esa mirada de hombre experimentado que ha vivido mucho. Que me agarre de la nuca y me de un beso con olor a tabaco mientras me baja el calzon. Que me diga «ya veras lo que es un hombre de verdad mijita» mientras me desgarra la blusa y me chupa las tetas con su boca sin tantos dientes.

Ayer fui al mercado y vi un señor como de 75 años comprando verduras. Tenia las manos callosas y se le marcaba algo en el pantalon. Me puse a imaginarlo en su cuarto conmigo. El me quitaba la ropa despacio porque a su edad ya no puede ser tan rapido. Me tocaria todo el cuerpo con sus manos temblorosas y me diria «que carnecita tan rica tienes hija». Despues se bajaria el pantalon y me mostraria su verga arrugada pero dura. «A ver si aguantas lo que te voy a dar» me diria mientras me escupe en la cara.

En mi fantasia el me pone en cuatro en su cama que huele a medicinas y me mete la verga por detras. Como es viejo no puede dar tan fuerte pero si bien profundo. Sentiria sus bolas arrugadas golpeando mi culo mientras el jadea y suda. «Asi me gusta viejo dame toda tu experiencia» le gritaria yo. El me agarraria del pelo y me diria «callate puta» mientras me llena de moretones en las caderas.

Lo mas excitante seria cuando se venga dentro de mi. Un chorro caliente de leche vieja que me llenaria por dentro. Despues se recostaria jadeando y me daria dinero para el camion. «Vuelve cuando quieras mijita» me diria con su voz ronca mientras se pone sus lentes.

Hoy en la tarde fui al parque y me sente en una banca cerca de donde jugaban domino unos señores grandes. Uno de ellos me miro fijo y se ajusto la entrepierna. Le sonrei y el me guiño un ojo. Me levante y fui al baño publico del parque. A los cinco minutos entro el señor. «Te ando vigilando desde hace rato muchachita» me dijo mientras cerraba la puerta con llave. Tenia como 70 años pelo blanco y panzón.

Ahi mismo en el baño sucio con el olor a cloro el me bajo los jeans y me metio los dedos. «Que chocha mas jugosa» murmuro mientras me abria las piernas. Yo solo atine a gemir y agarrarme del lavamano. El se bajo el cierre y saco su verga que estaba mas arrugada de lo que imagine pero bien parada. «Prepárate que te voy a dar lo que nadie te ha dado» dijo y me la metio de golpe.

Duro como diez minutos dandome mientras yo gritaba y los que pasaban afuera tocaban la puerta. «Callense viejos verdes» gritaba alguien pero a nosotros nos valia madres. Cuando el señor se vino grito «toma toda mi leche de cuarenta años» y me lleno por dentro. Despues se limpio con papel y se fue como si nada.

Yo me quede ahi temblando con las piernas abiertas y su leche escurriendo. Fue lo mas rico que me ha pasado en mucho tiempo. Ahora cada vez que veo un señor mayor me mojo al instante. Quiero que otro me lleve a su casa y me de en su cama de soltero con fotos de sus nietos en la mesa de noche. Que me use como su puta personal y me pague con monedas del pension.

Si alguien conoce un señor de 70 que quiera una amiguita yo soy Rosa y tengo 40 años pero parezco de 30. Mi telefono es el 55-12-34-56-78. Llámenme viejitos ricos que los espero con las piernas abiertas y las nalgas listas para que me den hasta quedar satisfechos. Prometo ser discreta y no decirle a sus familias. Solo quiero un buen polvo con experiencia que me haga sentir mujer otra vez.