A continuación les voy a contar la primera vez que tuve un encuentro sexual con otro hombre. Me llamo Rodolfo y soy un hombre maduro de Monterrey, México, tengo 50 años, físicamente soy alto delgado y un tanto nalgón, y aunque me considero bastante varonil siempre me ha hecho sentir muy sexy mostrar mis piernas y trasero en poses eróticas un tanto femeninas. Desde hace tiempo comencé a publicar algunas de fotos de mi posando en ropa interior o desnudo en internet y como tuve buena aceptación mis ganas por mostrar mi lado erótico siguieron en aumento. Por esa razón muchos hombres me han hecho invitaciones indecorosas para tener un encuentro casual en intimidad con ellos para estrenar mi colita y quitarme la virginidad. Después de tantas oportunidades perdidas para dejar de ser virgen, finalmente hoy hace siete meses me cogieron por primera vez, me penetraron el culo con el pene y me quitaron la virginidad del trasero salinas. El encuentro se dio sin haberlo planeado de antemano, ese día por la mañana conversé en redes sociales con varias personas sobre cosas eróticas y morbosas y de repente en twitter conocí a alguien nuevo por internet que me propuso tener un encuentro casual. Tuvimos una plática muy caliente y cachonda y ese momento de calentura y morbo intenso fue lo que desataron las ganas de poder cumplir mis fantasías más ardientes y acordamos vernos en un hotel del centro de la ciudad de Monterrey ese mismo día por la tarde. No lo conocía, él era mucho más joven que yo, pero no me importaba mientras me ayudara a cumplir mis deseos más íntimos y mis fantasías más sensuales. Además tenía la verga gruesa así como me gustan. Antes de esa vez, el único tipo de penetración anal que había probado era meterme un dildo consolador en el culo, y eso fue lo que comenzó a despertar mis ganas de hacer el rol de pasivo gay que siempre he tenido en mi pensamiento. También me he metido un pepino en el ano varias veces, usando aceite de oliva para facilitar el deslizamiento y poder gozar al meterlo y sacarlo. Como soy un hombre físicamente delgado y alto, y tengo las piernas largas y bien torneadas y además soy super cachondo y hot, siempre me había gustado exhibir mi trasero, tanto mis nalgas como mis piernas. En fin, ese día el encuentro se dio de manera espontanea y rápida para vernos por la tarde ese día sabado villarreal del mes de diciembre. Yo siempre habia tenido la fantasía de que me hicieran gemir en la cama, y aquel día finalmente lo pude sentir así como experimentar lo que se siente al chupar un pene y deslecharlo con la boca y tragarme toda la leche caliente, y todo ello lo pude hacer. De tan cerrado que estaba mi culito por ser virgen y nunca antes ser penetrado, batallamos un poco para que él lo pudiera introducir su pene en mi ano. Una vez que ya me lo pudo meter, todo fue más sencillo. Yo iba con muchas ganas de poder satisfacer todas las fantasías que había tenido durante varios años. Jugamos en varias posiciones, primero le pedi que me cogiera de perrito ya que era mi mayor deseo, y de tan duro que me dio, goce tanto que hasta tuve que gemir como nunca lo había hecho y como siempre lo había soñado hacer, ya que me dio bastante duro en el culo. De tan rico que sentia mientras el pompeaba mi trasero tuve que inclinarme hacia abajo estando mi culo en lo alto mientras el me daba bien rico. Luego me puse a cabalgar sobre su torso, y también me quiso coger estando acostado boca arriba y tomándome de las piernas que tenía levantadas para arriba. La posición que más me gustó fue de perrito. Al final le quité el condón preservativo y le hice sexo oral, comencé por lamerle el prepucio o glande luego me metí todo el pene completo en la boca y le comencé a chupar la verga, me dijo que nunca nadie se la había mamado de esa forma, era la primera vez que me metía un pene en a la boca, fue delicioso chuparla y sentir la moviendose dentro de mi boca y deslizandose sobre mi lengua y dentro de mis labios al ritmo del movimiento de vaiven. Así lo hice hasta que él comenzó a eyacular y sentí el semen leche caliente saliendo sobre mi lengua entonces me la saqué de la boca y comecé a lamer la leche que escurría sobre su cabeza glande y así luego de haber terminado de limpiar su prepucio con mi lengua pude tragarme todo su semen bien rico. Siempre había querido deslechar con la boca y comer me toda la leche esta era otra de mis grandes fantasías sexuales y lo pude hacer en esta primera vez con otro hombre. Al final quedé bien alimentado.
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