Últimos Relatos sobre Sexo anal
Por
Anónimo
28 septiembre, 2025
Hola, nunca había echo esto, pero lo que contaré es una experiencia real, es algo que me dejo bastante confundió pero al mismo tiempo me gustó que sucediera.
0
0
54
Por
28 septiembre, 2025
Después de salir del trabajo, una mujer se entrega a un encuentro secreto con el hombre que despierta su deseo más profundo. Entre miradas ardientes, caricias prohibidas y un juego de dominación y sumisión, ambos se sumergen en una noche de placer intenso donde los límites se rompen y el éxtasis los consume.
0
0
16
Por
28 septiembre, 2025
La monté como una animala. Sus gemidos me prendían más mientras sus tetas ahogaban mis gritos. Le llené el chocho de leche cuando vino, temblando sobre mí.
0
0
40
Por
28 septiembre, 2025
Mi clímax es una ola que rompe en docenas de cuerpos a la vez. Ser su fantasía me libera; en la exhibición más pública encuentro mi intimidad más profunda.
0
0
16
Por
28 septiembre, 2025
Mi recatada compañera de noche nos sorprendió follando a uno. Para guardar el secreto, accedió a complacer a los tres. Fue una locura laboral que las cámaras grabaron.
0
0
43
Por
28 septiembre, 2025
Me vuelve loca que me usen como su puta, sin miramientos. Ya se lo he insinuado a mis compañeros de trabajo: que me empoten contra la fotocopiadora y me vacíen dentro, solo puro sexo animal. ¡Necesito que alguno se anime!
0
0
37
Por
27 septiembre, 2025
Se la saco y ella como un resorte se tiro a comérsela, sangre, semen y flujos entre otras cosas, pero se recreo limpiándola la polla a su macho.
5
0
103
Después de años de morbo, al fin me cogí a mi prima Katy en su hotel. Le di por el culo por primera vez y gritó mi nombre como una loca.
0
0
150
Por
Anónimo
27 septiembre, 2025
Le di permiso a mi esposa para que se cogiera a un jovencito mientras yo viajaba. Los escuché por teléfono mientras ella gemía y le decían puta. Me corrí como nunca escuchando cómo se la cogían tan rico.
0
0
158
Por
27 septiembre, 2025
Mi cuerpo se volvió un escenario. Cada ángulo de luz y cada susurro eran para el público invisible, cuyos deseos anónimos eran dedos de fuego sobre mi piel.
0
0
48