
Por
Anónimo
Mi cuñado y mi hermana
Os contaré como ocurrió todo esto.
Hace un par de meses me separé de mi pareja, y aunque no estaba realmente enamorada, las rupturas no son agradables y andaba un poco depre.
Mi hermana, que tiene un pequeño apartamento junto a una preciosa cala, me dijo que fuese a pasar el fin de semana con ellos dos y que así dejara un poco libre la mente.
La verdad es que el lugar es idílico; un pequeño apartamento en un pequeño conjunto residencial al lado de una pequeña cala de dificil acceso y unas vistas desde la terraza inmejorables ya que se ve una puesta de sol increible.
Bueno pues como os decía me había invitado a pasar el fin de semana con ellos y yo accedí.
Iba dispuesta a pasarlo bien, sería un fin de semana de playa, copas y diversión, y así comenzó. Llegamos el viernes por la noche, nos alojamos en nuestras habitaciones y nos dispusimos a salir de cena y mas tarde tomar unas copas.
Con mi hermana tenía mucha confianza y con mi cuñado, la verdad, es que también, hablabamos de todo, no teniamos temas tabú.
Pasamos una noche muy buena comimos y sobre todo bebimos un monton, nos fuimos a las tres o las cuatro de la madrugada par el apartamento un poco chispados.
Al llegar nos pusimos comodos y nos dispusimos a tomar la última copa antes de irnos a la cama.
Mi hermana se quedó en bragas pues hacía bastante calor y mi cuñado llevaba un pantalon de deporte sin nada debajo por lo que se apreciaba, yo salí con un vestido corto de tirantes muy comodo que usaba solo para estar en casa.
– Si llegas a salir esta noche con ese vestido no te habrías quitado los moscones de encima.comentó mi cuñado.
– Ya me los hubieras quitado tu, contesté.
Esto eran charlas muy típicas entre mi cuñado y yo siempre estábamos de cachondeo.
No se si fueron las copas o la situación, pero de pronto noté como algo iba aumentando su tamaño debajo del pantalón de mi cuñado, cosa que empezo a calentarme.
Nos fuimos todos a la cama, y yo empecé a fantasear con aquella polla de mi cuñado, pues aunque no era un hombre que estuviera buenisimo si que tenía un cierto atractivo, un no se que.
Así que me dormí con esta calentura.
Al cabo de un rato me desperté escuchando los gemidos de mi hermana al otro lado de la pared.
Mi hermana y mi cuñado se estaban dando un homenaje.
No pude resistir la tentación y me levanté a ver si veía algo.
Efectivamente no habían cerrado la puerta y allí estaba mi hermana sobre la cama toda abierta de piernas mientras mi cuñado le comía el coño haciendola gemir como una perra.
Esto me puso a cien, pues una comida de coño era un de las cosas que más me gustaban y hacía un tiempo que no follaba ni nada por el estilo.
Mi cuñado le comía el coño con gran maestría mientras mi hermana le pedía más y yo desde la puerta no pude hacer otra cosa que pasarme la mano por el interior de mi tanga y empezar a masturbarme.
Así estuve un rato masturbandome mientras escuchaba sus gemidos con los ojos cerrados y concentrada en todo el placer que me estaba dando mi dedo recorriendo mi clítoris.
De pronto sin saber como solté un gemido, lo que hizo que ambos me miraran con mirada maliciosa y lasciva.
-¿Nos acompañas? preguntó mi hermana.
Yo me quede parada sin saber que hacer.
Pero de pronto note que mi cuñado me cogía de la mano y me acercaba hacía la cama donde se encontraba mi hermana estirada.
-Sigue acariciandote. me dijo mi cuñado mientras continuaba con lo que había dejado.
Al ver de nuevo a mi cuñado comiendose el clitoris de mi hermana me volvió a subir la temperatura y seguí masturbándome hasta humedecerme totalmente y comenzar de nuevo a gemir.
Acto seguido note que la mano de mi cuñado buscaba entrar en mi coño, sus dedos se hacían hueco con gran maestría, lo cual izo que me pusiera todavía mas cachonda y me lanzara a comerle aquella polla sin pensármelo dos veces.
Mientras le comía la polla mi hermana había comenzado a acariciar mis tetas y pronto note su boca en mis pezones, lo cual hizo que se me pusieran duros como piedras.
mi cuñado acariciaba mi chocho con gran maestría y de pronto note uno de sus dedos acercándose a lo que siempre había sido mi zona prohibida para los hombres: mi culo.
Nadie , nunca me había metido nada en él, pero no se porqué, no pude evitar que aquel dedo entrara con delicadeza.
-UMMMM, que gusto.esto no me lo había hecho nadie. dije mientras gemía de placer.
De pronto la boca de mi hermana se encontró entre mis piernas pasando la lengua por mi clítoris.
No podía creerlo mi hermana me estaba comiendo el coño y algo se había introducido en mi culo y yo me estaba muriendo de placer sin hacer nada por evitarlo.
Así seguimos un rato, hasta que no se como ni de que manera la que estaba comiéndole el coño a mi hermana y con la polla de mi cuñado metida hasta el fondo en mi culo.
Esto fué una experiencia maravillosa me ha encantado ser sometida. Espero que se repita.
2 respuestas
-
Compré lеncería sexу nueva. ¿Quiеres vеr? – http://analsex4.fun
-
Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.