El regalo de mi novia
Cuando mi novia me hablo de su amiga Karen jamás pensé que pudiera ser la clave que cumpliría mi fantasía. Teníamos un par de meses saliendo y ya éramos la pareja perfecta en la cama. María se convertía de la mujer más tranquila y la niña más dulce en la perra más perversa y salvaje apenas estábamos solos. En más de una ocasión no aguantaba lo suficiente para desnudarte completa y sentarse sobre mi pene que siempre se mantenía erecto en su presencia. Disfrutábamos muchas fantasías y el sexo era alucinante, sabía que ella no se negaría a cualquier cosa que le propusiera, pero un trío con una mujer era algo que no habíamos hablado bien.
María me había hablado mucho de Karen, una de sus mejores amigas, pero jamás la había descrito físicamente, así que no me esperaba lo que vi cuando cruzo la puerta del apartamento.
Karen no era muy alta, de piel blanca pero no pálida con el cabello castaño largo y una cara sin muchos rasgos diferenciales, en cualquier circunstancia su apariencia pasaría desapercibida, la había visto en fotos con mi novia y nunca me había fijado mucho en ella. Este día seria la excepción a la regla, un vestido corto y sugerente que mostraba unas piernas cortas pero bien proporcionadas, y unos senos inmensos que parecían querer salirse de la tela que las cubrían. Su cabello estaba suelto y le caía por el pecho cubriéndolo ligeramente, seguro para evitar miradas indiscretas. Vestía unas sandalias que mostraban unas uñas bien arregladas pintadas de color rosado claro, el preferido de mi novia. Sus manos al igual que sus pies eran delicados pero grandes, no era una mujer muy delicada pero si muy bien arreglada. A diferencia de ella mi novia es hermosa, delgada de piel canela, rasgos finos en su rostro que me vuelve loco y un cabello largo que pide ser halado cada vez que la penetro desde atrás.
María se había preparado de la mejor manera para recibir a su amiga. Vestía un top corto negro que delineaba sus hermosas téticas y no usaba sostén por lo que yo podía ver sus senos cuando la observaba por encima del hombro. Una falda, corta, blanca y muy ceñida a su cuerpo mostraba un culo estupendo con una panty muy fina que lo cubría todo. Al estar en caza andaba descalza mostrando sus pies con uñas pintadas de rojo que yo adoraba lamer cada vez que podía. Tenía su cabello castaño largo suelo pero echado hacia atrás y se había maquillado muy bien. María en realidad estaba vestida muy sexy, yo sabía que jamás saldría así a la calle de día, pero sabía que su amiga era una ocasión especial aunque no me imaginaba que tanto.
Apenas se vieron se dieron un largo abrazo en la puerta, no dejaba de ver como Karen acariciaba la espalda de María de arriba abajo con una mano mientras la otra le acariciaba el cabello, María hacia lo mismo y le daba pequeños besos en la mejilla y en el cuello de Karen, al separarse aun andaban agarrados de la mano. La escena me había puesto a mil, había algo escondido debajo de tanta ternura, pero se lo atribuí a mi mente perversa, sin embargo note que María se había sonrojado un poco y sonreía levemente, pero Karen detrás de ella se había puesto rojísima, respiraba fuerte y sus pezones se marcaban rabiosamente por debajo de la tela.
Las dos mujeres hablaron largo rato incluso después de la pizza y la botella que habíamos abierto. La conversación paso de lo general a lo emocional, Karen hablaba de lo sola que se sentía después de romper con su novio, pero en vez de ponerse triste menciono lo caliente que estaba, supongo que el alcohol la desinhibió conmigo, en un momento María me vio observándole el escote cuando Karen se agacho frente a nosotros a recoger algo del piso, como andaba bebida se tardo un poco en esa posición por lo que puede ver un par de inmensos melones libres sin sostén, me puse durísimo. Pensé que María al verme se molestaría, pero para mi sorpresa acerco su mano a mi entrepierna y apretó durísimo mi erección. Me dio un beso caliente que prometía más. Al incorporarse Karen me levante a buscar otra botella.
Volví al poco rato pero me detuve un poco a ver la escena que se desarrollaba. Escuche como María le agradecía haber venido a su amiga y esta sin mediar palabra la beso en los labios. Al principio pareció un beso tierno pero vi como al final saco la punta de su lengua y lamio los labios de María. Mi novia, sonrió, agradecida y acaricio su mejilla. Sin embargo su mano bajo por su cuello y se metió en el canal de sus senos, acariciándolos con sus largos dedos. Colocaba su mano entre ellos, tocándolos suavemente, ambas mirándose. No pude aguantar más y me saque el pene que ya me dolía y empecé a masturbarme con la escena, mi fantasía al fin se cumplía. María hubiese parado allí si no fuese porque al voltear a donde yo estaba me vio disfrutando de todo. Así que con una sonrisa que indicaba que mi puta estaba por complacerme continúo el juego de caricias.
María y Karen se comenzaron a besar nuevamente y mi novia deslizo su mano hasta la vagina de su amiga lentamente, allí decidí que debía unirme a la acción. Comenzó a besar a María por la espalda mientras ella besaba apasionadamente a su amiga. Poco a poco se acostaron y al poco rato María estaba comiendo la vagina húmeda y caliente de Karen. No soportaba la sensación e inmediatamente retire la ropa interior de mi novia y observando su grandioso culo lubrique con mi saliva su vagina y la comencé a penetrar.
María y Karen llegaron al orgasmo casi al mismo tiempo. Sentía la cuca de mi novia apretarme más hasta que dio un pequeño grito con la cara aun metida en la vagina de Karen que gemía como una perra en celo. Le hice saber a mi novia que ya estaba cerca de acabar cuando ambas mujeres se arrodillaron frente a mí, Karen lamia mis bolas y María se trago mi pene hasta el fondo. No dure mucho antes de llenar sus caras y bocas con un torrente de leche.
María mantenía la iniciativa de la acción. Se desnudo por completo y colocándose frente a Karen abrió sus piernas y se acerco hasta que la vagina de su amiga tocaba la de ella. Ambas mujeres se ensartaron en una tijera rozándose los clítoris mientras me acercaba a la amiga de mi novia y esta chupaba mi pene hasta el fondo. María me pidió que penetrara a su amiga en la misma posición que lo hice con ella y mi novia se coloco al frente de su amiga para recibir placer con su boca. Ambas mujeres gemían y yo sabía que tenía dos putas a mi entera disposición.
Continuará
2 respuestas
-
Compré lenceríа sеxy nuеva. ¿Quieres vеr? – http://analsex4.fun
-
Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.