Me frotó los ojos, me escuecen. Quizás fue por llevar ayer esas gafas. No sirvió para nada, te diste cuenta enseguida.

Los abro y aún incluso con la poca luz q asoma entre las cortinas, veo q sigue dominando el mismo color de ayer.

Diferentes tonos, distintas intensidades.. Tu pelo, tus labios, algunas gotas en la ropa de cama… Noto escozor también en mi espalda… Quizás al final nos dejamos llevar demasiado. Aunque ninguno protestó.

Miro a los pies de cama. El mismo color en tu ropa revuelta en el suelo. Tu abrigo con capucha. Recuerdo uno de los momentos de la noche. Cuando dijeste tenías frío y fue lo único q te pusiste. Como luego te montaste sobre mi… Uff… Me giro y te veo ahora dormir tan plácidamente. Ayer no se quien fue más bestia.

Creo q si hubiera aparecido un leñador como en el cuento se hubiera unido a la fiesta… No se, igual no me hubiera importado.

He de reconocer q cuando entre en la casa tenía hambre. Y después de saquear la nevera fue curiosidad…

Ver las fotos, esas gafas de sol rollo vintage de la mesita me molaron… Seguí rebuscando. Lo de la peluca fue por hacer el tonto… Nunca me había metido en una cama con sabanas de seda y tenía curiosidad de cómo sería el tacto sobre mí piel. Las cosas q guarda debajo de la cama me produjeron curiosidad… Llámalo morbo, o es q estoy enfermo, aunque no me dio tiempo a entrar en detalle.

Cuando te oí entrar las metí rápidamente ahí otra vez y cerré las cortinas. En la penumbra eso de «estoy ronca, es que me molesta la luz, es que tengo fiebre…» No creo q colara en ningún momento. Tu rollo en plan uber food… No sé si creérmelo. Pero a quien le importa. Al final acabamos comiéndonos el uno al otro.

Me giro y miro tu nuca, tu espalda blanca. Ahora más relajada q ayer. No puedo evitar mirarte y recordarlo. Ya no llevas ese minúsculo tanga negro de anoche…

Me inclino sobre ti para ver tu cara. Mi respiración en tu cuello. Inconscientemente me paso la punta de la lengua por el colmillo. Abres un poco los ojos lentamente y sonríes. Retiro mi lengua para poder decirte…