Les pongo a mi esposa en charola de plata
Les pongo a mi esposa en charola de plata.
Les voy a contar como entregue a mi esposa.
Ella se llama Susana, tiene 38 años, es de piel trigueña, mide 1.62, con unas tetas grandes, cadera y culo marcados, cabello café que le llega a media espalda, ojos también cafés, labios gruesos y caliente a mas no poder.
Un día me encontraba en mi fabrica en el área de ensamble, por flojera de ir al baño en las oficinas decidí entrar al de los empleados y cuál fue mi sorpresa al ver pegado en la puerta por dentro de uno de los cuartos de baño un recorte de revista donde aparece mi esposa.
Ella habia salido en la revista por un trabajo de modelaje que hizo, habían puesto una libreta donde ponían lo que le quisieran hacer, algunos describían sus fantasías con ella y pues me dio curiosidad y me puse a leer.
Yo siempre e tenido la fantasía de ver como se la coge otro y al leer esto me puse super caliente, lo malo era que no decía quien era el autor de cada fantasía, algunos solo querían tener una noche romántica con ella, pero otros, ufff, habia de todo, desde violarla hasta preñarla, eso me puso bien caliente y decidí encontrar la forma de cumplirle la fantasía a alguno de ellos, seria un desafío, pero ya me lo habia metido en la cabeza.
Seleccione 3 y me di a la tarea de investigar quienes eran los autores, después de varios días los encontré, supe quienes eran, los tres tenían la fantasía de violarla y hacerle de todo, escogí a ellos por que seria lo mas fácil, Susana seria violada y no sospecharía, esto me traía como loco.
Decidí hacer una reunión con los tres para decirles que ya estaba enterado de lo que le querían hacer y les propuse un trato, ellos cumplirían su fantasía y a cambio me entregarían un video de todo lo que le hicieran.
Yo les pondría a mi esposa y les daría instrucciones de cómo, donde y cuando.
Ellos no lo podían creer, pero estuvieron de acuerdo.
Después de planear todo, los volví a reunir, les dije que les habia conseguido un lugar al que la llevarían, habia implementos y juguetes sexuales que deberían utilizar, habia colocado cámaras en todos lados, tendrían bebidas alcohólicas y el placer de cogerse a mi esposa como quisieran, sin límites ni tiempo.
Llego el día, les dije que mi esposa estaría saliendo de una reunión donde yo la tenia que recoger, le llamaría y le diría que no podía y que le habia mandado un chofer, ellos irían por ella y de ahí seria lo que ellos quisieran hacerle.
La recogieron y la llevaron al lugar planeado, ella les dijo que por que la llevaban ahí y fue cuando todo comenzó, la bajaron a jalones y la metieron al lugar, ella forcejeaba, pero la contuvieron, la rodearon y le ordenaron que se quitara la ropa y se pusiera un lingerie color negro, no tardo en hacerlo pues en platicas que tenia con ella siempre le dije que en caso de violación hiciera lo que le ordenaran y seria más fácil que la librara.
Yo le habia comentado que Susana era experta en mamar verga y lo que mas la calentaba, se las quise poner en charola de oro.
Una vez que se puso el lingerie le ordenaron que se arrodillara y se sacaron las vergas, la hicieron mamar la verga a los tres, la pusieron en el caballete, le dieron nalgadas hasta dejarle las nalgas rojas, la obligaron a meterse un anal plug, la hicieron masturbarse con vibradores y mientras tanto yo veía por las cámaras.
Después de buen rato comenzaron a cogérsela, Susana nunca habia cogido con mas de uno a la vez, ahora serian tres, le dieron por todos lados, cuando se la metió el primero por el culo pego un grito de dolor que me hizo chorrearme, sentía placer de ver como se la metía por el culo mientras el otro se la cogía por la panochita y el tercero le acercaba la verga a la boca para que se la mamara.
Así estuvieron por un buen rato, turnándose, hasta que los tres se vinieron, la hicieron que se tragara el semen de los tres.
Cuando terminaron, la subieron a la camioneta y la llevaron a un sitio donde le dije que la dejaran, en neglige y con su celular únicamente, me marco para que fuera por ella y cuando llegue pensé que estaría llorando, pero no, estaba excitada y caliente todavía, no lo pude creer, me platico lo que le hicieron, me la mamo en el camino a casa y fue el principio de mas fantasías con Susana, mi puta esposa caliente.
Nunca supo que yo la puse a mis empleados y a ellos los recompensé, pero los tuve que despedir.


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