La cosa es que recientemente había empezado a salir con este compañero increíblemente guapo, le pregunté si quería ayudarme a estudiar junto con otros conocidos mios y él acepto.

El tema es que luego de unas buenas horas en la escuela estudiando con mi grupo de amigos y él, comienza a llover a cantaros y con razón muchos chicos comenzaron a irse, incluyendo a un buen par de mis amigos los cuales salieron corriendo viendo si podían ganarle al agua o no se y otros se quedaron un rato a ver si paraba un poco. Cuando el agua se detuvo por un leve instante los chicos que quedaban se marcharon al toque.

Dada esta situación, él y yo quedamos solos en un aula y la tensión se sentía bastante porque no habíamos concretado nuestra relación aún pero… Bueno las miradas juguetonas que nos tirabamos, los rozes de piel y los suspiros eran notables. Charlamos un poco pero… Yo lo veía sentado con las piernas abiertas y la cara seria y me daban ganas de comerlo entero. El buzo que traía puesto marcaba su figura simetrica, sus hombros anchos, sus antebrazos marcados y el pantalón realzaba sus piernas largas y tonificadas.

Mande todo a la mierda y a pesar de que sabía que si nos atrapaban seguramente iba a pasar el resto de mis días en un convento, no me importó y solo me exitó más. Me senté encima de él de forma juguetona y le sonreí, me miró expectante algo sorprendido por como actue. Pero la duda en su mirada se desvaneció cuando note que su miembro duro y listo para mi.

Me le acerque a la cara y comencé a devorarle la boca, mientras mi entrepierna estaba empapada sintiendo su pene crecer. Me agarra de la cabeza y no me deja separarme ningún momento, cuando le suplico por aire se aleja bruscamente solo para agarrar mi culo regordete y apretarme más contra él. Yo completamente mojada no podía aguantar más y comienzo a desnudar mi parte de arriba. Mis senos quedan casi al descubierto, él corre mi sostén y comienza a comerlos como si fueran su ultima cena. Mis pezones duros y erectos sufrían sus chupones y mordidas. El esfuerzo inhumano que estaba haciendo para no gemir no era normal.

Mi cabeza no podía dejar de pensar en su pene duro, me levante la falda que tenía puesta como uniforme, desabroche su cinturon y le dije que se saque todo. Él obedeció y yo aproveche para arrimarle mi culo con mi tanguita rosada empapada. Me agarra y me estampa contra el escritorio que estabamos usando y comienza a jugar con mi entrada, solté un gemido en forma de ruego y lo tenté moviendo mis nalgas de arriba abajo.

Comenzo a nalguearme y a decirme entre dientes que me quedara quieta, no le hice caso hasta que se hartó y me agarro bien fuerte el culote para meter su erecto pene en mi. Le estampó las bolas a mi entrada y comenzo a darme bien durito, como cajón que no cierra, me agarro del pelo y me tapo la boca metiendo un par de dedos para jugar con mi lengua.

Mi cabeza daba vueltas y lo unico que salía de mi boca eran frases obsenas como que se sentía re rico y que era su perra, que me use como quiera. Y así hizo. Me saco la verga y empezó a apuntar a mi culito, al sentirlo cerca le rogue que fuera despacio porque era mi primera vez pero me metio dos dedos de golpe y ni dolor sentí, los sacó de forma rápida para meter su miembro duro y lubricado por mis jugos. Me contuve para no gritar pero estaba tan exitada que solo le estaba diciendo cochinadas, le dije que me llenara el culito de leche y que ahora ese hoyo era de él, me embistió bien rico mientras me metia los dedos en mi vagina.

Acabó mucho dentro de mi culito hasta el punto que chorree por un día entero. El caso es que no nos pillaron porque lit todos de habían ido de la escuela, solo quedaba un ordenanza y el portero, ambos estaban demasiado lejos como para escucharnos. Dejamos bien sucio todo y tuvimos q limpiar con servilletas que por suerte él tenía. Cabe aclarar que ahora pagamos un telo casi todos los días solo para que me coja durante una hora entera sin necesidad de ocultarnos, pero si lo volvería a hacer, demasiado rico coger en un banco de la escuela.