Le daba una tutoría a una chica de primer año de bachillerato, ella estudiaba en una institución de monjas y solo iban señoritas, con unos padres que no le permitían relacionarse con muchos varones, para que no perdiera su concentración en los estudios, era el hombre que mas se acercaba a ella

 

Un dia me explico que sus compañeras hablaron en receso de sus novios y algunas del sexo que tenian con ellos

 

Ella que ni siquiera había besado a nadie, me pidió, que le ayudara con algo sencillo, quería saber que era un beso.

 

sin miramientos, le dije que los besos podían ser de varios tipos, de piquito, solo de labios, con lengua, que habían otros besos que se daban en otras, zonas como el cuello y partes mas intimas, pero que le daría un beso de piquito para que no se sintiera muy nerviosa

 

comenzamos con besos muy suaves, de piquito, pero me pidió que fueran mas largos, y asi llegamos a los de lengua.

 

se sienten ricos dijo, me enseñas los otros me pidió

 

comencé a darle besos en el cuello, pero estaba intentando que ella quisiera aun mas,

 

los besos dieron resultados, su reacción se podía sentir, le dije que usaría mis manos para que sintiera aun mas rico.

 

puse mis manos en su espalda y comencé acariciar su cuerpo hasta llegar a sus pompas, en ese momento se detuvo, y pregunto, eso es necesario, si le dije, para que sientas lo que ellas han sentido, pero sobre todo para que te sientas como una mujer, pero si no te gusta paramos aquí, por mi no hay problema tu me dices cuando parar

 

Ella me explico, que lo que ella tenia era miedo, pues no quiere un embarazo a su edad, pues sus padres la sacarían de su casa y no podría terminar su bachillerato

 

no hay problema, le dije, eso es fácil de hacer, pero solo si estas de acuerdo, se puede hacer con preservativos, una eyaculación externa o hacerlo por atrás, y si es por ahí, no perderas la virginidad, pero sentirás igual que tener sexo sin riesgo.

 

dolerá, ellas dicen que duele,

 

si la primera vez puedes sentir un poco de dolor, pero si te relajas después de un rato te gustara

 

esta bien, sigamos dijo, en ese momento seguimos besándonos y mis manos las introduje bajo su ropa para acariciar su suave piel

 

la senté y le dije que le daría otro tipo de beso, pero que para eso tendría que retirarle sus braguitas, ella levanto las caderas para que yo hiciera el trabajo de retirarlas

 

era la primera vez que su panochita era vista por un hombre, sus bellos cafesosos eran brillosos y suaves, me acerque y pude oler su sexo, estaba un poco húmeda, le dije que pondría mi lengua y mis labios para darle el otro beso, mi lengua se deslizo sobre todo su sexo, sus jugos se derramaron inmediatamente, su cuerpo reacciono, sus piernas me apretaron, yo le explique que su clítoris era una de las zonas que mas le darían placer acto seguido comencé a darle lengüetazos, sus gemidos salieron inmediatamente, segui dándole placer para que ella estuviera relajada y pidiera aun mas, sus jugos manaban sin parar.

 

ella se deleitaba con cada caricia, ella no paraba de gemir, y retorcer su cuerpo del placer, sabia que estaba lista para algo mas,

 

quieres tener sexo, pero no quiero quedar preñada dijo, para eso lo mejor seria por atrás le propuse, de esa manera seguiría siendo virgen, mientras ella tiene el mismo placer que si fuera por adelante.

 

Esta bien, dime que debemos hacer, le pedi que se desvistiera, mientras hacia lo mismo

 

una vez desnuda le dije que se pusiera sobre el escritorio, que yo seguiría dándole placer para que siguiera relajándose

 

una vez sobre el escritorio, seguí lamiendo su sexo por un momento, para mojarla aun mas, cuando volvió a manar sus jugos puse mis manos sobre sus suaves y tiernas nalgas, para abrirlas

 

puse mi lengua sobre su orificio, para relajarlo y que sintiera placer desde ese rosadito ano, después de un tiempo de remojarlo comencé a presionar con mi lengua sobre su esfínter para intentarlo perforarlo, sus piernas temblaron, su cuerpo se estremeció y sus gemidos se dejaban oir, estaba por llegar al punto que deseaba para penetrarla, seguí por un tiempo mas, en eso vi como las paredes de su ano se abrían y cerraban, era el momento de mayor placer, por lo que deje caer una buena cantidad de saliva

 

me puse de pie, acerque mi pene a sus nalgas, lo puse entre sus nalgas y comencé a moverme para que sintiera un pene, ella entre gemidos me dijo que lo sentía bien caliente y duro.

 

ella contorneaba al ritmo de mis movimientos, sus gemidos seguían saliendo de su boca, toque con mis manos su sexo, y me mojo al instante

 

puse mi glande en su ano, y mi mano en su clítoris, no movía mi cuerpo, pero con mis dedos hacia movimientos circulares en su clítoris, estaba permitiéndole saborear lo que le entraría, su trasero se movía a cada lado frente a mi al ritmo de su placer, mi mano seguía bañándose de sus jugos mis dedos podían sentir lo endurecido de su clítoris

 

seguía dándole placer, mientras comenzaba a presionar para introducirle mi glande en ese pequeño agujero, los gemidos se combinaron con pequeños quejidos, me detuve y le pedi que se relajara, pero ella me pidió que no me detuviera y ella levanto lentamente sus caderas para permitir la penetración, hice presión pero suavemente, para que no fuera brusca la introducción, ella comenzo movimientos de cadera hacia mi lentos, poco a poco sentía como mi glande se abria paso, me recosté sobre ella y mi otra mano tomo uno de sus senos, estaban bien duritos, le acariciaba su pezón, sus gemidos no paraban, eran mas frecuentes, y su cadera comenzo a presionar mi pene para dejarla entrar aun mas rápido, sus quejidos eran mas suaves, pero sus gemidos eran conatantes, ella no se detenia, y yo seguía su ritmo, después de unos minutos mi pene se perdia en su orificio, y sus nalgas me golpeaban, una vez adentro ella se movia suavemente, mientras sus gemidos aumentaban su frecuencia y su fuerza, en ese momento me pidió que me moviera mas rápido, sincronizamos nuestros movimientos de placer su gemidos ahogaron sus quejidos, mi mano se cubrían cada vez mas de sus jugos, en eso momento su cuerpo se erectaba de placer, como si fueran calambres en cada parte de su cuerpo, y su sexo expulso sus jugos en un solo instante, eso me excito mucho, y comencé a intruducirle con mayor frecuencia mi pene pero sus espasmo eran tan fuertes que su ano se cerro con fuerza y mis envestidas eran con mayor dificultad, pero mi glande recibia ese placer, a tal grado que le dije que deseaba terminar dentro de ella, ella solo movio su cabeza aceptando la propuesta, y deposite mi semen en sus entrañas.

 

se dejo caer en el escritorio su cansancio de oia con el jadeo que salía de su cuerpo, saque mi pene  abri sus piernas y comencé a limpiar sus jugos,

 

después de un par de minutos se levanto y sento en la silla, estábamos empapados de sudor y jugos, su expresión en la cara era tal que su labios estaban sonriendo,

 

eso si se siente, rico, tenemos que repetirlo, tienes que enseñarme de todo, y le explique que le enseñaría todo tipo de sexo que quisiera, y que ella seria mi alumna por mucho tiempo, por lo menos tres años, nos besamos dejamos que se secara el sudor y nos vestimos mientras seguíamos estudiando, para la sugiente clase te enseñare como se debe hacer una mamada y recibirla tambien