Cómo conocí el sexo (entre otras cosas)
En esta ocasión, quiero contar cómo conocí los genitales de las mujeres, qué es y que pasa con la excitación, y qué pueden hacer dos chicos con una chica.
Esto pasó hace 25 años. No recuerdo mucho de entonces, pero este suceso lo tengo bien guardado en mi memoria. Por aquél entonces vivía en una zona de apartamentos, y entre los edificios había un parque común con área de juegos para los niños, donde pasaba mucho de mi tiempo fuera de hacer mis tareas tras la escuela.
Jugaba seguido con un par de chicos, dos y cuatro años mayores a mi respectivamente: una chica y un chico que eran primos entre sí, y vivían a un par de edificios de donde yo lo hacía, por lo que nos veíamos muy a menudo. Ella era una chica delgada y morena, con pelo negro y peinada siempre de trencitas, y tenía mucha cadera, y una cintura angosta. Haciendo memoria, era guapa y me agradaba. Era apenas un poco más alta que yo. Él era algo relleno, y una frente más alto que su prima, igual moreno y de pelo negro, corto. Yo era «güerito», y no tenía algo en particular de mi cuerpo. A ella le gustaba mucho hacerme reír, abrazarme y darme cosquillas.
Jugábamos a policías y ladrones, a los superhéroes y villanos, y en ocasiones a la chica le gustaba jugar a la familia. De éste juego, le gustaba que yo fuera el papá, ella la mamá, su primo el tío, y sus muñecas los niños. En perspectiva, debí saber que le gustaba, pero entonces era muy ingenuo siquiera para imaginarlo. Aún más curioso, ésto le gustaba hacerlo en algunas áreas escondidas detrás de los edificios, que sólo tenían ventanas al frente.
Lo que hacíamos me parecía normal, y lo sería de ser mayores, y claro, una familia de verdad, pero a la edad que teníamos, era muy precoz, porque le gustaba actuar como una pareja, con cariños, con besos y con caricias que, bien, no deberíamos conocer en esos años. Y jugábamos así muchas veces. Recordando, me gustaría saber de dónde conocía ella aquellas cosas.
Un día, ella me dijo que si quería salir a jugar con ellos al siguiente día, pero que si podía hacerlo más tarde. Según ella, porque sus papás harían algo y sólo podían salir por la noche, bastante más tarde de la hora que jugábamos. Y qué si iba a salir, que no le dijera a mi mamá para que fuera nuestro secreto. Ésta idea en si misma lo hizo muy emocionante para mí, y sin dudarlo, accedí. Así, llegó la siguiente noche, eran pasadas las 10 y mi mamá y mis hermanas ya estaban durmiendo, así era nuestro horario. Con mucho cuidado, salí de casa y logré hacerlo sin que alguien despertara.
Nos reunimos como toda vez detrás de la edificios, y siendo de noche, era totalmente distinto porque estaba obscuro del todo. Jugamos a la familia, pero sus caricias y cariños empezaron a ir más allá, y empezó a meter mano bajo mi ropa, y así mismo lo hacía su primo con ella. Inocente, me dejaba hacer, y quería reír por el contacto, pero como era nuestro secreto, me mantuve callado.
Y llegó un momento en qué empezaron a quitarse la ropa, dejando las prendas en el suelo, entre el pasto y ellos para que no les picara algo. Me sentí nervioso por no saber qué hacer, pero se resolvió cuando ella también me descubrió. Cuando estuvimos los tres desnudos, ella me empezó a besar, pero no piquitos de labios como era costumbre, buscaba más mi boca, y mi lengua, mientras me abrazaba fuerte y se frotaba conmigo. Su primo le besaba la nuca, y se frotaba igual en su espalda.
Estando a obscuras, no veía mucho de cómo estábamos, pero sentía muy bien cómo los pezones de sus pequeños pechos estaban bien parados. Eran muy grandes, y ese fue un gusto que se creó entonces y tengo aún a la fecha. Ya no quería reír, estaba jadeando, y empecé a corresponder al beso de lengua y a las caricias, poniendo mis manos en sus senos para sentir porqué sentía algo suave pero también duro en mi pecho, y porque la hacía gemir y sonreír jugaba con los pezones, apretándolos, acariciándolos, pero siempre con suavidad porque no quería lastimarla.
Supongo que estaba bien porque ella por momentos tomaba mis manos y se tocaba con las mías. Y entre esos cariños, no veía muy bien, pero alcanzaba a notar que el primo también le acariciaba desde atrás, y ella abría sus piernas para hacerle espacio. Escuchaba claro un sonido mojado.
Mientras nos besábamos y tocábamos, él le metía los dedos entre los labios de su vaginita, y no gemía a gritos porque lo ahogaba con mis besos. De pronto, ella cerró sus piernas, y el primo se detuvo. Entonces, ellos se levantaron y cambiaron de posición. Él se arrodilló frente a la cara de ella, y ella me pidió que me quedara a su lado, de lado y de cara a ella.
Entonces ella tomó mi mano y la llevó a su vagina, y me pidió que la acariciara como hacia antes. Mientras, ella tomó mi pene, que estaba duro y ni lo había notado. Era algo pequeño, claro, pero no importaba. Ella me empezó a jalar el prepucio, y empecé a sentir unos extraños escalofríos que nunca había experimentado. En respuesta, le acaricié sus labios, metiendo mis dedos entre ellos, y sintiendo una bolita allí, la froté como hacia con sus pezones antes.
Dejo salir un gemido muy fuerte, que se apagó cuando su primo le metió el pene en la boca, y ella lo empezó a chupar. No sabía qué hacía, o porqué, pero me gustó ver y descubrir que se la estaba mamando, empezando por su glande. Aún con la diferencia de edad, era apenas un poco más grande que el mío. Y así estuvimos un rato más, con ella y yo masturbándonos, y con él dejando que su prima se la chupe, poco a poco metiendo más su pene en la boca de su prima.
Luego, de golpe, ella volvió a cerrar sus piernas, y dejó de tocarnos a ambos para luego jadear y recuperar su aliento. Estando feliz de nuestro encuentro, se pegó a mi y me abrazó fuerte para besarme de nuevo. Pude sentir un sabor raro en su boca, pero no me disgustó. Entonces, nos levantamos y vestimos de nuevo. Contentos y satisfechos, nos despedimos, no sin antes ella darme un beso de nuevo en la boca antes de irse con su primo, y yo volví a mi departamento.
Luego de esa ocasión, seguimos jugando como antes, y repetimos nuestro encuentro, yendo más allá cada vez, pero lo contaré en otra historia.
Gracias por leerme.
Una respuesta
-
Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.