En ese entonces yo estaba saliendo de una relación de 2 años con una chica del colegio, ya estaba algo arto de las relaciones y quería disfrutar mi juventud con bastante desmadre. Así que me propuse a coger con cuantas chicas pudiera y a beber todo el alcohol que me pusieran en frente, fue una época con bastante desorden y problemas en mi vida y fue ahí cuando conocí a Evelyn.

Rubia, ojos verdes, labios carnosos, buen culo, buenísimas tetas, un poco menor que yo, pero sobre todo caliente y con las mismas ganas de solo divertirse y echar desmadre. Evelyn y yo íbamos en el mismo colegio, y casi de inmediato que terminé mi relación con mi ex, ella comenzó a acercarse a mi y a mis amigos. Al principio solo eran juegos y conversaciones algo cachondas lo que teníamos con ella y otra amiga suya, yo y mis amigos como buitres habíamos puesto los ojos en esa rubia desinhibida, pero yo era al único que quería, así que no pasó mucho para que Evelyn y yo comenzaramos a tener una «amistad» más sexosa, nos hacíamos cumplidos de nuestro físico, yo le hacía comentarios bastante cochinos y no perdía la oportunidad para decirle entre albures lo mucho que quería follar con ella y a ella todo le daba risa, de esa risa que te pide a gritos que actúes y hagas todo lo que dices que harías. Después comenzamos a llevar nuestro juego a lugares del colegio en dónde nadie pudiera vernos para ahí comernos a besos y darnos tremendos fajes, mientras nos besábamos yo siempre la tomaba por el culo y lo apretaba fuerte con mis manos, al mismo tiempo que acercaba su pelvis a mi pene que se ponía duro a penas comenzabamos a besarnos. A veces levantaba su falda para sentir su piel y si estaba de suerte me dejaba meter mis manos bajo su calzón, para sentir su culo y su vagina, a veces ella mientras yo la manoseaba llevaba su mano a mi pene y lo apretaba para sentir lo duro que lo tenía. Pero a pesar de eso, nunca llegábamos a tener sexo.

Así pasamos un par de semanas, besos y fajes, besos y fajes. Y me dí cuenta que ella se estaba enamorando de mí, yo no quería nada serio, solo me la quería tirar y listo, pero cada que me miraba, me detenía y me ponía a pensar «y si le doy una oportunidad?», aunque no estaba del todo convencido, se corría el rumor de que le había sido infiel a su ex y yo no quería eso.

Un día mientras teníamos un chat caliente por mensajes de texto, le propuse no asistir a clases al siguiente día y la invité a «ver una película en mi casa», tendría la casa para mí solo toda la tarde, mi madre trabajaba todo el día, al igual que mi padrastro y mi hermanastra iba al mismo colegio que nosotros y me solapaba todo, así que todo era perfecto. Ella aceptó inmediatamente, le gustó la idea, ella sabía cuál eran mis verdaderas intensiones pero aún así me siguió la corriente y me preguntó que película queria ver, yo le dije que quizá algo romántico y así quedó pactada nuestra cita. Al día siguiente antes de la hora para entrar al colegio paré a la farmacia y compré una caja de condones. Yo me quedé esperándola fuera de la escuela, ni siquiera lleve uniforme, pero ella tenía que despistar a su hermana que iba también en nuestro colegio, así que entró y después de que todos entrarán a los salones, ella fue a una parte de la escuela en dónde yo y mis amigos nos brincabamos la barda para saltar clases. Cuando la ví detrás de las rejas del colegio le pregunté que haría, le dije que yo podía brincar para adentro para ayudarla a escalar, a ella solo le dió risa, dió unos pasos para atrás, corrió hacía la barda, dió un brinco y comenzó a trepar los barrotes y una vez arriba la altura me permitió ver su ropa interior blanca debajo de su falda. Me sorprendió su agilidad, comenzó a bajar y la ayudé a dar el último brinco, una vez la tuve de frente la besé y salimos corriendo antes de que alguien se diera cuenta.

Al fin llegamos a mi casa, no había nadie como me lo esperaba. La tomé de la mano y la invité a pasar, de camino habíamos pasado a rentar una película «El Perfume», ella la eligió y después pasamos a la tienda y compré algunas cervezas. Destapé una lata y se la dí, destapé otra para mí y me dirigí al dvd en la sala, ella estaba sentada en el sillón y al ver qué iba a poner la película soltó una carcajada y me preguntó «enserio vamos a ver película?», Me dió mucha risa su pregunta, pero fue risa de alivio, no me iba a hacer pasar por todo el trámite de fingir ver película y ver si caía rendida.

Me acerqué y me senté junto a ella en el sillón, «que quieres ver entonces?» le pregunté entre risas, «a ti» me respondió. Me acerqué a besarla, nos comenzamos a besar con bastante pasión y mi verga se puso erecta al instante, así que la tomé de la cintura y la acerqué más a mí. Ella me recostó en el sillón y se montó sobre mí para seguirnos besando, la tomé de la cintura y después baje mis manos a su culo, apretaba su culo y arrugaba su falda hasta que no resistí y alcé su falda para sentir sus glúteos suaves, me dí cuenta que ella se comenzó a calentar, así que apreté sus nalgas con mis manos y la pegaba para que sintiera mie verga erecta. Ya teníamos como 5 minutos en puros besos, me dí cuenta que si yo no daba el paso seguiríamos así toda la tarde, así que despacio me fuí abriendo espacio con mi mano derecha hasta su pelvis, metí mi mano bajo su calzón hasta que sentí su bello púbico y después su vagina que ya estaba algo mojada, me prendió mucho sentirla y la comencé a tocar con suavidad, ella soltó un suspiro y después de unos segundos de mover mi mano se le salió un gemido mientras me besaba, la toqué un par de minutos y después la tomé de la cintura, me senté, ella seguía sobre mí y me observa sonriente. Levanté su blusa, traía un bra rosa que apretaba sus grandes pechos, le dí un beso entre los pechos y le desabroché el brassier. Ella inmediatamente se puso roja como un gitomate, apretó con sus brazos los tirantes del brassier y después de soltar una carcajada aflojó sus brazos y el brassier cayó dejando ver por fin sus pechos blancos con un par de pezones rosados algo pequeños y erectos, bastante hermosos. La besé un poco más mientras tocaba y apretaba sus pechos, despues besé su cuello y la fuí girando hasta que ella quedó abajo y yo arriba, ahí aproveché a besar más sus tetas rosas y su cuello. Aunque mi pene estaba que reventaba y Evelyn ya estaba bastante excitada, yo me quería tomar mi tiempo y disfrutar su cuerpo, así que fui bajando besando todo su cuerpo hasta que llegué a su pelvis, ella tenía sus brazos extendidos hacia arriba, le dí un par de besos entre las piernas y me decidí a bajar su ropa interior, recuerdo que mientras lo hacía ella me veía mordiendo sus labios. Le dí un vistazo a esa vagina que tanto deseaba, blanca, bellos púbicos castaño claros con un poco de dorado como el rubio de su cabello, una vagina rosa con los labios un poco de fuera como si quisieran un beso, y eso hice, me fui directo a su vagina y comencé a darle sexo oral, se lo comencé a chupar como lo hacía con mi ex y sus gemidos me indicaban que lo hacía bien, bastante bien diría yo porque tomó mi cabeza para que me quedara ahí un rato y con otra mano se comenzó a tocar los pechos.

Después de algunos minutos de disfrutar del sabor de su vagina, ya estaba bastante mojada y me dí cuenta que ella estaba demasiado excitada ya, yo igual estaba que mi pene reventaba el pantalón, así que me levanté y me comencé a desvestir, ella se quitó lo último de ropa que le quedaba, su falda. Me puse condón y me subí a ella, la besé, introduje mi pene en su vagina y comenzamos a coger de misionero en el sillón, mientras la follaba le tocaba los pechos y admiraba cómo se movían al ritmo del sexo. Después de unos minutos ella me pidió que me acostara, así que lo hice, ella se montó en mi pene y lo comenzó a cabalgar. Para que entiendan lo rico que cabalagaba mi pene, a Evelyn le encanta montar a caballo y cuando la conocí ya tenía un año siendo barrilera y compitiendo en palenques locales, así que sabía muy bien como montar y cada que movía sus caderas sentía que el alma salía de mi pecho, pero mientras el ver cómo sus tetas rebotaban cada que daba un brinco era un tremendo espectáculo. Después de unos minutos, no pude más y tuve un orgasmo llenando el condón de mi semen, ella lo sintió pero no se quitó, mi pene aún estaba bastante erecto y las palpitaciones que daba mi pene la ayudaron a seguir hasta que se movió más rápido, se inclinó para acostarse en mi pecho mientras seguía moviendo sus caderas arriba y abajo, por fin tuvo su orgasmo acompañado de un gemido. Mi pene después de la quietud se puso flácido y salió de su vagina, ella estaba recostada en mi pecho, seguíamos desnudos en el sillón, acariciaba su cuerpo ella me dijo «me encanta estar contigo», después de esas palabras le pedí que fuera mi novia, creí que era lo justo y que podía salir algo bueno. Ella feliz aceptó y me besó.

Tuvimos 4 meses de relación bastante buenos, nos divertíamos mucho, nos besábamos en el colegio, teníamos montones de sexo, de vez en cuando me chupaba la verga en el colegio en dónde no nos pudieran ver, andábamos a caballo por el pueblo e incluso me presentó con sus padres. Una relación bastante normal, hasta que un día estaba con mi amigo Oscar y me contó la verdad de Evelyn.

Oscar y yo estábamos dando vueltas en su auto, compramos unas cervezas y estábamos tomando.

• Te voy a contar algo porque la neta no está chido lo que te quieren hacer – me confesó

• Que pasa?

• La neta Evelyn me ha estado enviando mensajes, te quiere poner el cuerno conmigo – me molesté bastante pero no lo expresé, me mostré sereno, después de todo mi amigo me estaba contando la verdad y había que escuchar.

• Y has salido con ella?

• No, le he estado diciendo que yo no haría esas mamadas y menos con ella que es tu novia, ya le dije que se olvide de eso, pero me ha insistido y mejor que lo escuches de mi a qué sospeches algo que al chile ni es.

Me alegró bastante saber que él era un verdadero amigo y que decidió contarme para saber que tenía como novia. Realmente yo nunca he sido un hombre celoso, yo soy de la idea de que si una persona está contigo es porque de verdad te quiere y si no pues que le vaya bien, pero la lealtad si es algo que valoro demasiado. Evelyn había desidido engañarme a ser honesta conmigo y Óscar fue leal como amigo y me contó la verdad.

• Y tú qué quieres? Te gustaría cogertela? – le pregunté bastante serio pero no en forma de agresión.

• No pues es tu novia wey, por más que quiera tú eres mi amigo y ella solo un culo.

• Pues si no es contigo va a ponerme el cuerno con alguien más.

• Ya mandala a la verga mejor entonces.

• Nah, si quieres cogertela, date, ya me vale verga. Mejor que sea contigo y que yo esté enterado – le estaba dando permiso de estar con mi novia, se la estaba compartiendo y la idea me excitaba.

• Seguro? Si esto va a hacer que tengamos pedos mejor ahí muere con esa morra

• No no, date, cogetela yo no tengo broncas. Si la quería eso ya valió verga ahorita. Pero que ella no se enteré, esto nada más lo sabemos tu y yo, nadie más.

Y así fue, mi amigo comenzó a salir con Evelyn y ella cada vez me ponía más escusas para no vernos pero seguía diciendo que me quería. El clásico comportamiento de alguien que te es infiel, te miente pero aún así quiere estar contigo. Oscar y yo incluso nos poníamos de acuerdo para repartirnos los días para estar con ella, ya era como un juego para nosotros y a mí me ponía caliente la idea de saber que se la iba a coger, a veces le pedía que me dijera detalles, si se la había cogido, cómo, en dónde, si le había chupado la verga, cosas así y el me contaba algunos detalles. Incluso había días que de estar conmigo Evelyn ponía algún pretexto para irse antes y se iba con Óscar o a veces al revés, decía que llegaria tardes pero era porque venía de estar con él y yo me la volvía a coger sin problemas.

Así estuvimos Evelyn, Oscar y yo por casi dos meses, hasta que de repente pasaba menos tiempo conmigo y cuando le preguntaba a Óscar si estaría con ella el me decía que no. Llegó el punto que me dijo Oscar que Evelyn le dijo que ya no quería seguir con eso, él pensó que ella se comenzaba a sentir mal por serme infiel, pero no, porque yo seguía notando que me mentía, así que sospeché que me ponía el cuerno con alguien más. Ya estaba pensando en terminar con ella, pero antes de eso Oscar de nueva cuenta se sincero conmigo y me advirtió de la nueva verdad. Resultó que otro amigo nuestro le platicó a Óscar que se estaba cogiendo a mi novia y que no sabía que hacer, Oscar le dijo que pues no siguiera porque se suponía que era mi amigo, pero ni dejó de verla ni me confesó nada. Así que Oscar decidió contarme para que yo decidiera que hacer, pero si me aconsejó que mejor terminara con Evelyn ya. Y así fue, pero antes de eso tenía que hacer algo con César, mi amigo que cobardemente decidió follar con mi novia y no decirme nada, eso era traicionar nuestra amistad y eso si me había echo enojar bastante, así que un día llegué al colegio, entré al salón, ví a César parado platicando, me vió y como si no pasara nada me iba a saludar como todos los días. Yo en vez de eso le trone un golpe en la cara y le golpeé hasta que algunos compañeros me jalaron para que lo dejara de golpear. Le reventé el labio y el párpado del ojo izquierdo, después de eso no tuve que terminar con Evelyn, ella supo bien porque le había dado tal golpiza y sin más nos dejamos de ver.

Evelyn y César a los días se hicieron novios, confírmando la infodelidad, y hasta la fecha siguen juntos, tienen 3 años que se casaron, pero incluso cuando eran novios me enteré que ella le era infiel, así que se podría decir que paga karma jaja.