septiembre 25, 2020

847 Vistas

septiembre 25, 2020

847 Vistas

Carolina: infidelidades en Londres 2

0
(0)

Pasaron varios días desde que Carolina fue infiel por primera vez. Su cabeza estaba llena de contradicciones puesto que sentía mucho amor hacia su novio y a la vez había tenido sexo con otro. Ella, siempre muy tímida en su intimidad, había sido capaz de mamársela a un casi desconocido en un vagón de tren. Estaba llena de contradicciones. No quería que su novio se enterase mientras que en los últimos días no había dejado de masturbarse pensando en aquello. No sabia si seria capaz de ocultarlo a su novio, amigas o familiares, pero era consciente que allí nadie la conocía.

De repente vibró su móvil. Ella se acercó a ver de quien era el mensaje. Se mordió el labio ante la pequeña pantalla. Era Diego, el chico de la noche en el tren, y tenía muchas ganas de terminar lo que comenzaron. Carolina, indecisa, no sabia que hacer. Tras mucho pensar, mientras se acariciaba su escote, respondió. Durante un buen rato los mensajes fueron y vinieron y Carolina ya tenía la mano bajo el pantalón. Finalmente, tras hacerse de rogar, accedió a quedar. Su último mensaje fue breve y dejaba ver sus ganas de volver a utilizar su boca bajo su cintura.

Quedaron aquella misma tarde. Carolina iría al pueblo de Diego. Tenía tantas ganas del encuentro que se duchó masajeando de forma sensual sus pechos, su cintura y su vagina. Se puede decir que calentó sola. Salió de la ducha y se vistió. Esta vez se vistió con una camisa ligeramente desabrochada y una falda muy suelta. Se maquilló como si fuese de fiesta con un pintalabios rojo intenso y salió hacia la estación de tren.

En poco menos de 15 minutos ya estuvo en el pueblo de Diego. Carolina se percató que antes de la cita, muchos hombres en aquel vagón que ya se desahogaron mentalmente con ella. En sus miradas se pudo ver de todo, desde hombres que la desnudaron con la mirada, otros practicándole sexo oral bajo la falda, incluso grupos de amigos jugando con su boca, vagina, culo, pechos y terminando por todo su cuerpo. Nunca antes Carolina se sintió tan deseada, incluidas mujeres.

Se bajó del tren. Allí la esperaba Diego junto a su coche. Se saludaron con dos confusos besos y entraron en el coche. Diego condujo sin rumbo buscando donde tomar algo. Carolina aprovechó el momento para conocer más sobre él. Mientras él iba dejando de ser un desconocido, Diego comenzó a acariciar la rodilla de Carolina mientras le hacia saber lo muy provocativa que estaba. Su mirada, al mismo tiempo que su mano, se perdió bajo la falda. Se acercó a besarla. Ella lo rechazó y él disimulo llevando sus labios a su escote. Carolina se puso muy nerviosa con una mano bajo su falda y una nueva infidelidad en camino. Estuvo indecisa unos segundos mientras él trataba de besarla. Finalmente, él la agarró del cuello e hizo que le besase. Ella dejó ver que no quería ser besada pero no dijo nada. Diego ya estaba rozando su ropa interior y Carolina seguía tratando de detener aquel beso. Se sintió confusa entre el querer y no querer.

Tras unos minutos, él dejó de besarla y le dijo que le encantaba como besaba, aunque también le dijo que la otra noche utilizó su boca mucho mejor. Pregunto a Carolina, mientras jugaba con su tanga, si aun quería ir a tomar algo o prefería que fuesen a su casa. Ella, en silencio, pensó que si iba a un bar terminarían en el baño, por lo que mejor ir a su casa. De modo que acepto ir a su casa, no sin antes ir a comprar algo de beber. Tras comprar las bebidas fueron a casa de Diego. Abrió la puerta y le cedió el paso a Carolina. En ese momento la cogió por detrás y, apretando su miembro erecto contra sus nalgas, comenzó a besar su cuello. Ella estaba incomoda y le fue arrastrando hasta dentro. Diego la soltó para cerrar la puerta y Carolina aprovechó para abrir las botellas. Él solo pensaba en repetir lo de la primera noche y ella en beber un poco. Carolina comenzó a beber en el sofá mientras Diego besaba su cuello. Después continuó bajando hasta su pecho y desabrochó su camisa. Carolina dejó su copa sobre la mesa y quitó la camiseta a Diego. Acarició su vientre hasta comenzar a apretarle su abultado tejano. Diego, encantado, dejó al descubierto el sujetador sin tirantes de Carolina. No tardó en apártaselo y comenzar a acariciar su pecho perfecto, ni grande ni pequeño, con pezones grandes y duros. Ella preguntó si le gustaba lo que veía, y él respondió besando sus pechos. Los masajeaba mientras ella trataba de quitarse el sujetador. Diego la ayudó. Después ella le ayudaría a desabrochar su pantalón, y él aprovecho para sacar su erecto miembro. Se reclinó sobre ella y comenzó a frotar su miembro contra sus pechos. Después comenzó a masturbarse con sus pechos y cuando empujaba introducía un poco de la punta en su boca.

Carolina estaba totalmente desinhibida y su cara daba fe de ello. Disfrutaba sintiendo a Diego entre sus pechos y su boca. Tal era su excitación que se incorporó ante él dejando caer su falda al suelo. Quiso ponerse sobre él pero haciendo presión sobre sus delicados hombros la hizo arrodillarse ante él y aguantando su cabeza le introdujo su miembro entero en su boca. Sostuvo su cabeza mientras saca y metía su miembro ante la inmóvil Carolina. Ella, a veces, hacia un gesto entre el gusto y el asco, incluso babeaba un poco. Seguidamente Diego se desnudó. Después hizo lo mismo con Carolina. La sentó de espaldas sobre él y comenzó a masajear sus pechos. Carolina intentó que la masturbase, pero él no quería aun, así que lo comenzó a hacer ella. Comenzó a introducir sus dedos y cuando tenía tres, él la tumbó a su lado y siguió masturbándola. Primero tres dedos, y en un rato ya introducía sus 5 dedos. Carolina alucinaba al sentir entre sus piernas cinco dedos hasta los nudillos. Gemía muy alto. Después de cinco dedos, Diego la masturbó con su puño. Los gemidos de ella cada vez eran más altos.

Carolina comenzó a pedir que se la follase. Diego le decía que iba a tener que pedírselo más veces y más alto. Ella repetía “fóllame”, “desahógate conmigo”, “estoy muy mojada”, “haz lo que quieras conmigo”. Diego disfrutaba de aquella escena mientras le decía “¿Qué dices?”, “¿Tienes ganas de polla?”, “te voy a follar hasta que no puedas más”, “tan estrecha que parecías y lo zorra que eres”. Carolina, con tanto gemido, no entendía nada.

Diego, tras hacerse de rogar, sacó su puño e introdujo su duro y húmedo miembro dentro de Carolina. Se reclinó sobre ella y le susurró al oído que estaba tan cachondo que iba a correrse en nada. Ella le decía que se corriese, y el le pregunta que donde quería su leche. A Carolina le costaba tanto respirar que no respondió. Entre gemidos, entre cortada, dijo que se iba a correr en nada. Diego le dijo que se corriese. Ella terminó y relajada dejó que él continuase dentro de ella. Diego, después de varios minutos, comenzó a decir que se iba a correr ya. Carolina le dijo que se corriese. Él preguntó si dentro o fuera. Ella le dio a elegir. Él dijo que ya había probado su boquita, así que hoy llenaría de leche su coño. Y poco después, él dejo de gemir. Dio dos empujones más y saco su miembro que comenzaba a perder fuerza.

Se sentó al lado de Carolina mientras le decía lo mucho que había disfrutado de ella, y lo mucho que le gustaría repetirlo. Carolina respondió que era la primera vez que se la follaba así. Él, reafirmado, propuso repetir otro día. Ella respondió que ya se vería mientras se vestía con prisas bajo la atenta mirada de Diego y abandonó el lugar con el pelo alborotado, el maquillaje un poco corrido y mucha vergüenza. No hablaron mucho y ya todo quedó en silencio.

¿Que te ha parecido este relato?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este relato.

2 respuestas

  1. nindery

    Cоmpré lencеríа sеxу nueva. ¿Quieres vеr? – http://analsex4.fun

  2. helenx

    Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt

Deja un comentario

También te puede interesar

Yo, mi esposa y mi amigo de la adolescencia 1

julioepatricia

26/05/2018

Yo, mi esposa y mi amigo de la adolescencia 1

Me folle a la novia de mi hermano

anonimo

04/01/2025

Me folle a la novia de mi hermano

Fiesta de Empresa

anonimo

06/11/2018

Fiesta de Empresa
Scroll al inicio