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El incesto en la vida de mi hija Cielo Riveros mi vida
El incesto en la vida de mi hija Cielo Riveros mi vida
De como inicie a mi hija en el incesto, relato de sus propios labios..
Desde hace mucho que leo esta página, y hoy me he animado a contar mi historia de incesto, la cual inició con mi padre desde hace muchos años, y que sé que podrá parecer bastante fantasiosa, pero les aseguro que es totalmente cierta.
Algo de mí; soy mujer, actualmente tengo 24 años, alta y delgada, ojos oscuros, cabello largo castaño claro, de rostro alargado, nariz fileña, labios delgados, y me considero de buen cuerpo.
Como dije, todo comenzó a muy corta edad.
Los primeros relatos los narrare de lo que él me ha contado y de lo poco que pueda recordar.
En el seno de mi familia, de la cual no daré detalles, mi padre siempre acostumbró a acompañarnos por las noches a la hora de dormir, y luego se iba a su alcoba con mi mamá, no negaré que nuestra familia es muy armoniosa, en realidad somos muy felices y unidos, aunque solo él y yo conocemos toda la historia de mi vida incestuosa.
Me cuenta él que todo inició cuando en una ocasión alguien le mostró un video de un hombre con una niña menor de edad, como de unos 11 años, y desde allí se sembró en su mente las ganas de experimentar. Una noche que fue a la alcoba para su rutina diaria de acompañarnos a dormir, se le dio por tocarme, y se le vino a la mente la imagen del video, aprovechando que siempre estaba aseándome, cambiándome de ropa y viéndome siempre desnuda, encontró la oportunidad que estaba buscando. Me dice que con mucho susto y con las manos temblorosas y sudando, me bajó la pijama y me tocó la cosita. Eso era algo que él hacia todos los días para bañarme, pero que esta vez la culpa lo delataba. Pero con la mente puesta en lo que había visto en el video, me comenzó a acariciar la concha, yo no decía nada porque estaba acostumbrada a que me tocara cuando me bañaba, así que por eso él dice que me callada y solo me dormí. Así pasaron los primeros encuentros, y poco a poco iba subiendo de tono, pasó de solo tocarme a lamer, humedecerse los dedos e intentar meterlos dentro de mí.
Una noche que quedamos solos porque mi madre salió de visita para donde mi abuela, me dijo que lo acompañara a dormir en su cama, me invito a darnos un baño, nos desnudamos los dos y allí me dice fue la primera vez que me toco sin temores ya que nadie nos podría ver.
Se sentó en el piso del baño mientras sobaba mi cuerpo desnudo, pasaba su dedo por mi conchita y me lo metía un poquito sintiendo el calor que salía de ella. Yo no recuerdo que sentía, pero él me dice que me reía de cosquillas, luego me volteo de espaldas e hizo lo mismo con mi colita. Después me dijo que me apoyara en la pared y comenzó a pasar su lengua por el huequito de mi culo, mojándolo todo y metiendo su lengua poco a poco dentro de mí, tanto por la cola como por mi concha.
Como es de esperarse se le paro su verga y yo la agarré por curiosidad, él aprovecho, se arrodilló y tomo mis manos en un sube y baja frenético, y sin saberlo le hice su primera paja. Después que voto toda su leche sobre mi cara y pecho, me lavó, se lavó su verga y nos fuimos para la cama, allí me secó y me dijo que dormiríamos así desnudos. Me acostó en el borde de la cama, se agachó, me separa las piernas y siguió chupándome la conchita, me la chupaba despacio por ser mi primera vez.
Me contó que al principio esa noche yo me reía mucho, y lo apartaba porque me hacía mucha cosquilla, pero que después de tanto chupar como que me alcanzó a gustar ya que me quedé quieta solo mirando lo que me hacía.
Cuando se dio gusto con mi concha, se levantó y me mostro su vergón parado, lo tenía bien baboso por la arrechera que estaba teniendo, me pidió que le hiciera lo mismo que me hizo, y me lo acercó y me lo restregó por toda la cara. He de decir que tiene una poya algo grande, de unos 19 cm de largo y 5 cm de grueso, algo que para mí en ese tiempo era bastante enorme. Por lo tanto, solo le podía chupar la puntica de la cabeza, así que me decía que le pasara la lengua por el resto de su verga y que le chupara las bolas. Él siempre ha mantenido su verga rasurada, no tengo recuerdos de habérsela visto con pelos. Cuando le dije que me había cansado de chupar verga, se levantó y busco un aceite que usa con mi mamá para penetrarla, me untó bastante en mi cola y apuntó su verga en mi hueco. Como me tenía con las piernas levantadas, el culito se me abrió un poco, lo que le facilitó a él penetrarme sin mayor esfuerzo, y como la tenía bien llena de aceite, se deslizó muy suave dentro de mí. Me dijo que había preferido metérmela por allí primero ya que ese hueco es mucho más grande que la concha a mi corta edad. Y sí que le funcionó, porque según me dijo esa primera vez alcanzo a meterme un poco más de la mitad de su tranca, me contó que duro algo menos de 5 minutos, ya que eran tantas las ganas que tenia de cogerme y se había estado aguantando durante mucho tiempo desde que comenzó a tocarme.
De esa manera fue que mi papá me inició en el incesto.
Hola a todos, continúo con el relato de mi vida..
Pasados unos 3 añitos, mi papá siguió siendo el macho de mi vida, me cogía cada vez que podía, cada vez que estábamos solos, tengo un leve recuerdo de una vez que estábamos jugando en mi cuarto y se fue la luz, mi madre y los demás estaban en la sala, allí aprovecho y me bajo el pantalón y me metió la verga por el culo. Hasta ese entonces no se había atrevido a metérmela por la concha, pero si me sobaba su tranca y me pedía que me montara en su verga y le restregara la conchita hasta que se derramara. Su leche para mí era un premio, me gusta mucho su sabor y en ese entonces me agradaba sobarla en mi barriga, pecho y en especial en mi cara.
Durante ese tiempo no sólo me cogía, sino que también me enseñaba películas porno, pasábamos horas metidos en internet viendo pornografía de toda clase e imitando poses y actuando como en las películas. Un día apareció muy contento y me dijo que me tenía una sorpresa para mostrarme, pero claro, había que esperar la oportunidad. Un fin de semana mi mamá salió a hacer compras y se llevó a mis hermanos, yo me quede con mi papá y enseguida prendió el computador, sacó una memoria USB donde tenía muchos videos de niñas pequeñas como de mi edad y hasta niñas de 14 o 15 años. Así que nos dedicamos a ver, yo recuerdo que me emocioné mucho al saber que lo que yo hacía con mi papá, también lo hacían otras niñas. Ese día no hubo acción, nos dedicamos fue a ver como a las niñas se las cogían los hombres mayores y le metían la verga por todas partes. Desde ese día él decidió que ya era momento de meterme la verga por la concha ya que en varios videos había niñas pequeñas que les entraba toda la verga por delante, y él me dijo que si ellas aguantaban yo también podía hacerlo.
Fue así como en una ocasión, para un finde, le dijo a mi madre que iba para un pueblo cercano a llevar algo y que me iba a llevar porque yo se lo había pedido, como es lógico mi madre le dijo que se llevara a mis hermanos, pero ellos no quisieron porque estaban jugando en su consola. Así que nos fuimos felices, yo sabía a lo que íbamos y ya para mí eso se había convertido en una necesidad, para ese tiempo cuando nos era difícil estar solos y hacer nuestras cosas, me ponía de mal humor y pasaba peleando con mis hermanos.
Ese día mi papá me llevó a uno de los sitios donde trabajaba, y en el cual por la hora, casi medio día, ya no había nadie, solo un celador en la porteria, así que teníamos toda la confianza de que nadie nos molestaría. Y allí fue donde me metió por primera vez la verga por la conchita.
Él prendió el computador y puso un video nuevo de una niña con alguien que me dijo era su papá, luego que lo vimos me dijo que haríamos eso, así fue como nos desnudamos por completo y comenzamos como siempre con caricias y besos, besos en los que yo ya manejaba muy bien la lengua y no dudaba en jugar con ella dentro de su boca, y él disfrutaba de la mía, chupándola como si se tratara de mi clítoris. Después de unos 5 minutos de estar besándonos comenzó a bajar besando y lamiendo mi cuerpo, primero fue mi cuello, algo que disfrutaba porque me hacía erizar toda, y mientras hacía eso con su boca, sus manos no se quedaban quietas, una bajaba por mi espalda y la otra se detenía en mis pechos, claro está, yo no tenía nada de senos en ese momento pero tanto a él como a mí nos gustaba acariciarnos allí, luego siguió bajando con sus besos y se posó en mis pezones, los chupaba, los lamia y los apretaba de una forma tan erótica que me hacía gemir, yo me aferraba a su cabello sintiendo corrientazos en todo mi cuerpo, sus manos seguían acariciando mi espalda, mi cola y por supuesto mi vientre y vagina. Después de dejar mis teticas bien lamidas, rojitas y sensibles al tacto siguió bajando a mi barriguita, beso y lamio mi ombligo y siguió hasta llegar a mi pelvis. Allí rosaba con sus labios toda mi zona pélvica, pero sin tocar mi conchita, eso me ponía muy ansiosa, ya que solo pasaba y no se detenía a chupar mi vagina, yo le movía la cabeza para que llevarlo donde quería, pero él solo me ignoraba y se dedicaba a basarme por los lados de mi pelvis. Casi le rogaba que me chupara mi vagina, estaba sudando y temblando de ganas, pero su idea era muy clara, me iba a poner bien cachonda para que mis jugos salieran, me mojaran toda la vagina y así poder meter su verga grande y dura.
Acto seguido me volteo y se concentró en mi espalda, acariciándola lo más suave posible mientras tocaba mi vagina, pero sin meter sus dedos, solo lo hacía por encima para mantener despierta mis ganas. Luego beso mi cola me la lleno de saliva y me acaricio mis nalgas de una manera que nunca antes lo había sentido, no sé si era la primera vez que hacía eso de esa manera tan especial, o era porque me tenía muy excitada, luego se levantó un poco y comenzó a rozar su verga durísima, más dura que todas las veces que habíamos cogido, su punta estaba babosa, goteaba líquidos que aprovechaba para sobarlos en mi cola y en la entrada de mi ano, en ese momento pensé que me iba a meter su verga, pero no fue así, solo lo puso en la entrada y me hacia una pequeña presión teniendo cuidado de no meterla. Ya en esos momentos no sabía cómo hacer para que me la metiera, necesitaba sentir su verga dentro de mí, y como la costumbre era por detrás, aproveche un momento que lo rozó por mi cola y me empujé para atrás, alcanzando a entrar un poco la punta, pero él fue muy rápido y también se movió sacando lo que me había alcanzado a entrar, al sentir eso lo miré y con voz muy excitada y casi gimiendo le pregunté ___
Cielo Riveros: Porqué no me la quieres meter.
Papá: Recuerda que hoy va a ser tu primera vez por delante.
Cielo Riveros: Por favor papá, métemela ya! Estoy muy arrecha y quiero sentir tu verga dentro de mí.
Papá: Si mi princesa, eso lo sé, solo quiero que este día sea muy especial.
Dicho esto, me subió a una mesa, apartando todo lo que allí había, me abrió las piernas y comenzó a chupar mi vaginita, yo estaba tan excitada que sentí que me dolía. Un grito salió de mi boca por la sensación de sentir esos labios lamer y chupar mi vagina y clítoris.
Cielo Riveros: Ahhhhhh! Ahhhhhh!, papá chúpame más duro, mete tu lengua bien adentro que estoy muy arrecha.
Esta vez él no me hizo esperar, metió su lengua bien profunda, que hasta sentí una fuerte presión de su barba en mi pelvis. Me chupo la conchita de una forma tan rica, que estuve a punto de orinarme, después de unos minutos que parecieron eternos, se subió y me dijo al oído.
Papá: Prepárate, voy a entrar en ti, voy a tomar tu vagina, al principio vas a sentir algo de molestia, pero es normal, no te asustes. Si en algún momento sientes que no soportas solo me dices y descansamos un poco.
Dicho esto, abrió una de las gavetas del escritorio, saco el frasco de aceite que siempre usa en mí, se lo untó en su verga, me echo una buena cantidad en mi vagina, me miro, me besó, me agarro de la cintura y colocando su verga en mi entrada me halo hacia él muy suavemente con un movimiento de vaivén para que su pene comenzara a entrar. Yo solo cerré mis ojos y me dejé llevar por el momento, me dispuse a disfrutar lo que tanto había estado deseando ese día, al fin se había concentrado en mi conchita, al fin iba a disfrutar de su verga, al fin me iba a sentir como las niñas de los videos, esas niñas que había llegado a envidiar.
No sé qué tanto me metió la verga porque estaba disfrutando del momento con mis ojos cerrados. En un momento sentí una presión dentro de mí, sentí un pequeño dolor y puse mis manos en su barriga indicándole que parara, él entendió y me saco un poco su verga, se quedó un momento quieto y cuando sintió que deje de detenerlo con mi mano, volvió a moverse. De esa forma su verga me fue entrando poco a poco, esa primera vez solo me alcanzó a meter un poco menos de la mitad, ya que su verga era demasiado grande para mí a esa edad. Con movimientos suaves me culio un buen rato, yo estaba muy a gusto, solo gemía cada vez que me la metía, mis gemidos ya no los podía controlar y se escuchaban en toda la oficina, él estaba igual, su respiración era fuerte, sus gemidos sonaban roncos, estaba sudando, se apoyaba en mí, pero siempre con cuidado de no lastimarme. Así estuvimos por unos 10 o 15 minutos, hasta que no pudimos aguantar más, y sentí como se arqueo, empujo un poco más su verga dentro, que aunque me dolió, solo me dispuse a terminar lo que habíamos empezado, sabía que lo que venía lo disfrutaría al máximo, y se llegó el momento, lleno toda mi vagina con su leche, sentía como sus chorros llenaban mi interior, golpeando algo dentro de mí, aumentando la sensación que tenía, y no pudiendo contenerme más, lance un gemido tan fuerte, que se vio obligado a callarlo con su boca por temor a que se escuchara afuera.
Quedé cansada, con las piernas adoloridas, pero con una sensación de haber tenido la mejor culiada de mi vida, mi papá se quedó encima de mí, aun sentía su verga palpitando dentro y sentía como me corría su leche por mis nalgas. Luego sentí como salía su verga y como él se levantó despacio, me dio un largo beso, al que respondí y le pregunté.
Cielo Riveros: Ésta no será la última vez, ¿verdad?
Papá: No hija, esta es la primera de muchas veces que tendremos sexo por delante, la meta es que te entre toda, así que tenemos que hacerlo más seguido.
Después de lo sucedido la primera vez que mi papá me metió la mitad de su verga en una de las oficinas donde trabaja, yo quedé más que nunca necesitada de su verga, aprovechaba cualquier momento, por corto que fuera, que estuviéramos solos para al menos tocarle su tranca por sobre el pantalón y sentirla, me había vuelto adicta a su verga. Mi mamá se enojó un tiempo conmigo, porqué se me volvió “costumbre” ir a dormir con ellos, y me metía en mitad de los dos. Lo que ella nunca supo es que eso lo hacía porque me daban celos el saber que mi papá se la estaba cogiendo mientras yo solo escuchaba sus gemidos de pie en la puerta de su cuarto. Mi padre en una ocasión me dijo.
Papá: Hija, tienes que aceptar que tu madre y yo somos pareja y podemos tener sexo en cualquier momento, así que deja de celarme porque ella puede sospechar algo.
Así que con más celos me aparte un tiempo de él, y eso fue peor porque allí sí que mi madre sospecho y me pregunto tanto a mí como a él, porque ya no estábamos juntos, si últimamente no nos separábamos, ya que yo lo acompañaba siempre a todas partes. No sé qué le dijo él, pero logro manejar la situación. Yo de mi parte le dije que nada, que no me pasaba nada.
Ya después que se me paso la rabia las cosas volvieron a ser como antes, aprovechando cualquier momento para acariciarnos. Recuerdo una vez de las tantas en que él iba a nuestro cuarto a acompañarnos a dormir, que se acostó al borde de la cama donde estaba con uno de mis hermanos, quedando yo en el medio, y nos relató unos cuentos para dormir. Mientras hacía eso nos acobijamos los tres y él y yo quedamos de cucharita, sentí cuando se sacó su verga babosa y enseguida me baje la pijama dejando mi culo al descubierto, con mi mano tome su vega y lo empecé a pajear, tocando su punta llena de baba y pasándola por la entrada de mi culo, haciendo movimientos suaves para que mi hermano no sospechara, mientras él se empujaba hacia adelante para que fuera entrando esa rica verga dentro de mí. Poco a poco su verga lleno mi culo y empezamos los movimientos de vaivén, mi hermano por su parte se iba quedando dormido lo que nos permitía culiar sin miedo a que nos descubriera. Cuando notamos que mi hermano estaba rendido, se levantó y me volteo boca abajo, se abrió de piernas sobre mí y me clavó sus 19 cm de verga, me la metía toda y me la volvía a sacar, así estuvo durante un buen rato hasta que no pude más y me salieron unos chorros de líquido de mi vagina, que parecía que me había orinado. Él por su parte se aguantó y apenas notó que terminó mi orgasmo, me sobo su verga por la concha y sin esperar que me preparara me la ensartó, lancé un grito ahogado de dolor, pero fue un dolor placentero, que casi provoca en mí un segundo orgasmo, una vez me metió su media verga me dijo al oído.
Papá: Hoy vamos a terminar lo que iniciamos en la oficina, hoy te la voy a enterrar toda.
Mientras decía esto, me besaba y chupaba el cuello, ya que conocía que ese era mi punto débil. Sentí que levanto su cuerpo sosteniéndose en sus manos cerradas como puño que quedaron a cada lado de mi almohada, yo me agarré de ellas y sentía la fuerza que hacía para mantenerse así, no sé porque eso me excitaba aún más y por instinto abrí mis piernas para darle entrada a su verga. Me la fue metiendo cada vez más con cada movimiento que hacía, nunca le dije nada, por más que me preguntaba, pero el dolor era intenso, pero no más intenso que el deseo de ser penetrada toda. Aunque para mi poca fortuna no me logró entrar toda su verga ya que mi vagina llegó a su tope, una vez allí sentí como suspiro hondo y comenzó a estremecerse, por lo que supe que me iba a llenar con su leche y me preparé alzando un poco mis caderas para que me la metiera lo más hondo que pudiera. Con sus brazos temblorosos de la excitación se vació dentro de mí. Fue muy placentero sentir como su leche llenada mi vagina por segunda vez, pero a diferencia de la primera, esta vez estaba casi toda dentro de mí, y eso me hizo muy feliz. Cuando termino se sacudir su última gota dejo caer su cuerpo sobre el mío, sintiendo como chorros de su leche se salían por los lados de mi vagina desflorada ya por completo, para agradecer lo que me había hecho sentir me salí de su peso pidiendo que se volteara boca arriba, una vez lo hizo agarre su verga aun dura y se la comencé a mamar, se la chupé con tantas ganas y teniendo el cuidado de limpiar cada punto de su larga tranca, quería que todo su semen fuera para mí, no iba a compartirlo con mi madre, ese día era para mi solita. Me sentí tan amada por mi padre, esa vez me sentí suya por completo, esa vez sí me hizo su mujer y desde ese día las cosas para mí tomaron un tono muy diferente. A partir de ese día ya no sería mas mi padre, se convirtió en el hombre de mi vida, me sentí su mujer, me sentí importante.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, esta vez les contaré cuando fui abusada por un tío..
Mi familia es numerosa, somos 10 primos casi todos de la misma edad. Por lo regular nos reunimos en casa de los abuelos todos los domingos y hacemos juegos divertidos en el quiosco del patio.
Algunos fines de semana me quedo a dormir donde una de mis tías, donde hay dos primas de mi edad y jugamos mucho. Cuando iba a esa casa yo dormía en una cama de su cuarto y ellas se juntaban en la otra.
Mi tía trabaja todo el día y mi tío hace trabajos en su casa y sale muy poco.
En uno de esos fines de semana que me quedé con mis primas, ya de noche siendo más de las 10 estábamos en la habitación las tres hablando y riendo de todo, en una de esas entró mi tío y nos dijo que buscáramos sueño, que ya estaba tarde. Yo me acomode en mi cama, pero mi prima siguió hablando y nos pusimos a reír nuevamente, por lo que mi tío volvió a entrar y nos llamó la atención de nuevo, y para que no siguiéramos molestando se quedó en el cuarto, acostado a mi lado.
Yo le di la espalda y no me incomode ya que él siempre era respetuoso conmigo. Pasado un rato que ya me había dormido, me desperté porque sentí el roce de algo en mi cola, he de decir que para esa época yo tenía 8 años y solo había sido tocada por mi papá, así que cuando sentí el roce de inmediato me di cuenta qué estaba pasando.
Opté por quedarme quieta a ver si él se iba pero no fue así, poco a poco me fue quitando la cobija, quedando en pijamas. Era costumbre en mí dormir sin ropa interior, y mis pijamas cortas para los días de calor son bastante anchas, así que él aprovecho eso y con una mano me comenzó a tocar mi cola, yo sentía su mano temblorosa y su respiración agitada, en un momento retiro su mano y luego sentí que la metió por el lado de la pijama, se había humedecido los dedos con saliva y los estaba pasando por mi culo, me tocaba el hoyito y hacía presión como intentando meter el dedo.
Yo de manera instintiva aprete el ojete del culo, lo que a él le produjo una mayor sensación ya que se lo volvió a mojar y me lo pasaba con mas fuerza, como vio que no podía se bajo un poco poniendo su cara en mi cola y comenzó a darme besito y mordisquitos suaves. Luego me acariciaba las piernas sin parar de besarme y poco a poco me comenzó a bajar la pijama, en ese momento me asuste porque era indudable lo que haría y yo no sabía cómo evitarlo.
La verdad no estaba a gusto, no era lo mismo que cuando lo hacía mi papá, pero no se me ocurría nada y creí que si le mostraba que estaba despierta me abusaría mas rápido. Así que seguí fingiendo estar dormida mientras él me desnudaba de la cintura para abajo.
Cuando me sacó toda la pijama me abrió las nalgas y me comenzó a dar lamidas, primero suave y después que iba entrando más en calor lo hacía mas duro, hasta el punto de meter su lengua lo más que podía dentro de mi culo.
Sentí cuando se levanto un poco de la cama para quitarse su short y comenzar a masturbarse, debía estar bien húmedo, porque me unto su baba en mi culo y así pudo meter la punta de su dedo.
Hasta ese momento solo se había enfocado en mi culo, pero después de un buen rato volvió a meter su lengua y sentí que la corría para mi concha. Eso para él fue el punto de perdición, porque ya no le importó y me movió brusco para levantar mi pierna y meter bien su cabeza y llegar a mi vagina y a mi clítoris, sentía su presión bien fuerte en mi botón, pero no abría los ojos por miedo.
Se sorprendió al ver que mi vagina estaba muy húmeda, y lo escuche decir que así si era rico chupar porque se podía tragar los jugos.
Después de eso y sin importa lo mucho que me movía y que podía despertarme, se arrodillo en la cama, me levanto mas la pierna y puso su verga en la entrada de mi culo, sobándolo desde allí hasta mi clítoris, así estuvo sobando e intentado meter su miembro por mi cola, pero como no me lo había lubricado bien, no le fue fácil hacerlo, así que se dirigió a mi vagina a probar suerte por allí. Y valla que si le fue bien, porque sentí que la cabeza de su verga se me metió lo que me obligó a hacer un movimiento para sacármela, pero el me abrazo por la pierna que tenía elevada y con la otra mano me jalo hacia él por mi cintura, comenzando un mete y saca suave pero firme que hacía enterrar cada vez más su verga dentro de mí. Cuando sintió que su verga se habría campo dentro de mí, lo escuche decir.
Tío: Ufffffffffff y yo perdiendo mi tiempo con tu culo, y esta cuquita ya la tienes abierta, mmmmmmmmmmm ahora sí que voy a gozarte!!!
Llegó un punto en que me toco meter mi mano en su barriga para detener su presión, ya que si bien mi papá me había cogido por mi vagina, aún era una niña de ocho años, y por ende aun era un poco estrecha para una verga adulta, además de que a diferencia de mi padre, que todo lo hacia con suavidad para no lastimarme, mi tío si me la estaba metiendo con fuerza sin importale que me fuera a despertar, o que me lastimara. Yo creo que ya se había dado cuenta que yo estaba despierta, porque no le importaba moverme a su gusto.
Una vez que sintió que su verga no pasaba más, y que yo seguía deteniéndolo con mi mano, se dispuso a culiarme, su bombeo era fuerte y muy seguido, llegaba hasta el fondo de mi vagina haciendo que diera gemidos de dolor en cada estocada que me daba.
Yo no sé qué habría tomado o comido, pero se demoro bastante culiando mi vagina, cosa que en lugar de excitarme me disgusto mucho, ya que no estuvo ni cerca de lo bien que me trataba mi papá.
Cuando al fin llego el momento de derramarse, me volteo boca arriba de un solo tirón, me jaló hacia el borde de la cama, levantó mis piernas hasta sus hombros y me enterró de nuevo su verga que se habría paso dentro de mi sin compasión alguna, en esa posición no duro ni un minuto cuando sentí como derramaba su leche dentro. Confieso que fue lo único agradable de lo que me pasó, no sé si era porque la sensación de sentir la leche adentro era para mi muy placentera, o porque al fin se saldría y me dejaría en paz.
Entreabrí los ojos y vi cómo se limpiaba la verga con la cobija, se puso su pijama y salió del cuarto sin importar dejarme denuda y llena de leche.
Después de asimilar lo que me acababa de suceder, me agache en la cama y dejé que saliera toda su leche de mi interior, luego me puse mi panty y me volví a acostar.
De pronto escucho a mi prima mayor que me dice.
Prima: No te preocupes, ya hoy no regresa más, solo viene una vez en la noche.
Cielo Riveros: Prima, no sabía que estabas despierta…….
Hubo un silencio incómodo, luego me atreví a preguntar.
Cielo Riveros: Cuando dices que ya no viene más, es porque te ha pasado también?
Prima: Si…….casi todas las noche se queda con nosotras para que nos durmamos, y cuando ve que ya estamos dormidas se coge a alguna de las dos.
Cielo Riveros: Qué…. Ósea que a la niña también…..
Es de anotar que la mayor de mis primas me lleva un año, es decir en ese entonces tenía 9 años, y la menor tenía 5 añitos.
Prima: si, prácticamente a ella fue a la primera que se la metió, porque yo no me dejaba, así que me dijo que si no lo hacía yo se cogería a mi hermanita, y así lo hizo. Después para que no siguiera acepte que me cogiera a mi también.
Mi prima mas adelante me contó como había sido su experiencia, pero yo jamás comenté que a mi me pasaba lo mismo. La diferencia entre ella y yo, es que a mi me encanta cuando mi papá me culea, en cambio a ella no le gusta, solo se deja para que su papá no toque mucho a su hermanita.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, hoy les contaré como en una noche de películas con mis primos mi papi me penetra..
Esta historia sucede cuando yo tenía alrededor de 8-9 años.
Era un fin de semana, mi mamá había invitado a mis primos a casa para que estuviéramos todos juntos un una pijamada. Mi padre los fue a buscar desde antes del mediodía, estuvimos divirtiéndonos toda la tarde, con toda clase de juegos y comiendo golosinas que nos habían comprado para la ocasión.
He de recordar que mi familia es numerosa, como les había dicho somos 10 primos. Ya entrada la noche, nos reunimos en la sala y escogimos una película para ver, todos tirados en tres colchones que mi padre dispuso en la sala.
Al rato de estar los 10 primos solos, ya que mis padres se habían ido para su cuarto, mi papá salió y nos preguntó si queríamos que nos hiciera unos sándwich, a lo que todos en coro respondimos que sí.
Acto seguido pasó literalmente por encima de nosotros y fue a la cocina a preparar los sándwich.
Al terminar los trajo acompañados de un chocolate caliente y cominos despacio ya que estábamos muy atentos a la película.
Él espero que termináramos para recoger los platos y vasos e ir a lavarlos.
En lo que había esperado que comiéramos se había sentado en la parte de atrás de la sala en su mecedora favorita, y se interesó por la película a tal punto que al regresar de la cocina se quedó a terminar de verla.
Cuando me di cuenta de que se había quedado allí, me levanté del colchón y me fui para sus piernas, sin intención de hacer nada, solo porque me agradaba mucho estar en su regazo. Él usa una pijama corta, ancha y de tela suave, y no se pone interior. Yo por mi lado, tenía un short igual pero mas ajustado y una camisilla de tiritas que dejaban al descubierto parte de mi torso.
Luego de un rato, con el movimiento normal de estarme acomodando en sus piernas para no cansarme en una sola posición, a él se le comenzó a parar su verga, empecé a sentir como le crecía y como le palpitaba. Ya sintiendo eso, me acomodé para que so miembro se metiera entre mis nalgas y comencé a mover lentamente mi cintura.
Su reacción fue inmediata, me puso las manos en la cintura y me haló fuerte hacía su verga, que ya se le comenzaba a salir por un lado de su pijama, así que sentía en mis piernas su roce y lo baboso que ya estaba. Eso era algo que me excitaba demasiado, pero no me atrevía a continuar ya que estábamos todos allí reunidos.
Sin embargo él no se aguantó, y con una de sus manos me comenzó a acariciar mi vagina, yo cerré las piernas para que no siguiera y le mire haciendo señas que todos estaban allí. Le dio igual y me dio un beso en mis labios, poniendo su otra mano en mis pechitos de niña y empezando a acariciar mis pezoncitos.
Me acomodo aún más en su pene y se comenzó a mover suavemente, sentí muy rico su roce en mi culo y sus caricias en mi vagina y téticas.
Con agilidad corrió mi pijama a un lado, y como ya me conoce y sabe lo abundante que me mojo, metió su dedo grande en mi conchita, acto que me hizo soltar un suspiro, y que hizo reaccionar a mi prima mayor que se giro para preguntar que tenía.
Sin darle importancia a su pregunta le dije que nada y ella continúo mirando la película mientras mi papi y yo nos divertíamos a sus espaldas.
Luego de un rato de caricias abrí mis piernas y pasé mi mano derecha para acariciar esa verga dura y jugosa que siempre me ha vuelto loca. La tenía durísima ya que mi peso la presionaba hacia abajo, sentía como le latía y como le salía cada vez mas babita. Pasé mis dedos por el huequito de su verga, tomé mucha babita y los llevé a mi boca. Esa babita es la sensación mas grande y placentera que he podido sentir. Me encanta su sabor entre salado y ácido, y me gusta mucho su textura babosa.
En esa situación estuvimos un rato muy largo. Por lo que nos calentamos tanto, que sincronizamos nuestras mentes, y cuando sentí que él elevó un poco su cintura y metió una mano a su pijama, entendí que me la iba a meter, e inmediatamente abrí aun mas mis piernas y corrí a un lado mi pijama con una mano, mientras que con la otra dirigía su cabeza a la entrada de mi vagina.
El suspiro no se hizo esperar, y esta vez fue mas fuerte, a lo que nuevamente mi prima pregunto ya en voz mas alta, que qué me ocurría, por suerte los demás la mandaron a callar en coro y ella se volvió a voltear a ver para la tele.
Ese vez, la sensación de la verga de mi padre entrando en mi vagina fue indescriptible, creo que el estar en la posición de sentada y no poder acomodarme libremente por miedo a ser descubierta, hizo que el roce de su verga con mi concha fuera mas estrecha, podía sentir centímetro a centímetro su miembro, pude sentir cuando su cabeza pasó por la estrada haciendo un toque en mi interior parecido al tronar de un dedo. Los suspiros no se hicieron esperar, pero esta vez los pude controlar sin que nadie se diera cuenta.
Luego de que la mitad de su verga se depositara en mí, me recline hacia adelante para permitir el movimiento de culeo y gozar de lo que tanto nos gusta.
Él por su parte, se entretenía besando mi cuello, acariciando mis téticas y estimulando mi botoncito, que para ese momento lo tenía bien rígido por la cogida que me estaba dando.
Esa vez tuvimos el mayor de los orgasmos, tanto así que a partir de esa noche se convirtió en la posición favorita de los dos, y aprovechábamos cualquier momento para disfrutar de la que ahora también era mi silla favorita.
Les diré que esa vez fue tanta su leche, que él se vio obligado a quitarse la camisilla simulando calor para limpiar mi conchita, su verga, la silla y el piso.
Una vez acabada la película, nos dispusimos a dormir allí mismo en la sala, mi padre se despidió de todos y se regresó a su cuarto.
Pasado un poco tiempo, veo que mi prima, de las que les hablé en el relato anterior, se acercó a mi y me dijo al oído
Prima: Son ideas mías, o estabas haciendo algo con mi tío?
Cielo Riveros: Ayyyyyy, deja de pensar estupideces…. Mi padre es incapaz de hacerme algo así. No es tan enfermo como el tuyo. Duerme y no preguntes bobadas.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, les contaré como mis hermanos empezaron a hacer parte de mi vida sexual..
En mi familia somos tres hermanos, dos varones y yo. El mayor me lleva 3 años y 9 meses, y al menor yo le llevo 2 años y 9 meses. Como lo había dicho en un relato anterior, tenemos una relación armoniosa en familia, con mis hermanos somos muy unidos, y de niños pequeños compartíamos le misma habitación pese a que había una destinada para mí.
Mi padre siempre acostumbró a hacernos compañía antes de dormir, nos relataba algún cuento inventado, esperaba que nos durmiéramos y se iba para su cuarto.
El cuarto de mis hermanos tiene una cama litera, mi hermano mayor dormía en el puesto de arriba y mi hermanito menor quedaba en el puesto de abajo, y allí me acomodaba yo, junto a él.
Mi padre cuando ya teníamos tiempo de nuestros encuentros se acostaba a mi lado y mientras nos dormía me acariciaba, me tocaba mis teticas en crecimiento y me metía el dedo en mi conchita.
Con el tiempo a mi hermano mayor se le fue despertando la curiosidad por el sexo, y entre risas y juegos se fue acercando a mi y me tocaba de más. Como yo ya sabía que querían decir esas caricias lo dejaba, ya que al final también me agradaba que me tocaran.
Fue así como entre juegos mi hermano un día me dijo que si quería que hiciéramos como hacen nuestros padres-
Hermano mayor: Oye Cielo Riveros, no te gustaría saber que se siente cuando mis padres se ponen a casarse?
Cielo Riveros: Casarse, y eso qué es? – aunque yo ya sabía que era eso –
Hermano mayor: Es cuando el hombre se monta en la mujer y le pone el pipi en la cuquita y se mueven.
De esa manera iniciamos nuestras aventuras, y así era que después que mi padre se iba del cuarto, mi hermano se bajaba y nos a acariciábamos.
Como yo ya tenía experiencia le decía como tenia que hacerlo, y lo ponía a que me chupara mi vagina, que ha sido lo que mas me agrada del sexo. Y después yo le chupaba su verga, que aunque era mas chica que la de mi papá, también la sentía sabrosa.
Con el tiempo ya acostumbrados a coger, por las noches veíamos videos porno y hacíamos todo lo que saliera. Y fue así como en uno de esos videos que salieron dos hombres con una chica, y se nos ocurrió incluir a mi hermanito menor.
De esa forma terminé siendo la puta de mi casa, ya no solo me dejaba coger por mi papá, sino que también me cogían mis hermanos. Llegue a un punto donde solo descansaba cuando estaba en la escuela o en el baño, porque el resto del día tenia la verga de alguno de ellos adentro.
Mis hermanos se turnaban para vigilar que no viniera mi mamá mientras el otro me estaba cogiendo, ya sea por la conchita, el culo o nos estábamos dando una mamada.
Los días en que mi madre nos dejaba solos en la casa por salir a hacer alguna diligencia eran toda una delicia, apenas ella tomaba el taxi, de inmediato nos quitábamos toda la ropa, prendíamos el computador, buscábamos las películas porno y comenzábamos a hacer todo lo que allí salía.
No voy a negar que fue una época muy linda para mí. Y no me arrepiento de vivirla de ese modo. El sexo para mí siempre ha sido la mejor terapia para todo.
Me acostumbre tanto a tener sexo que si no había con quien hacerlo, buscaba mi cepillo del cabello y lo ponía entre mis piernas, lo apretaba y movía las piernas para poder sentir su roce en mi vagina. La mesa al momento de hacer las tareas se convirtió en un sitio deseado para masturbarme.
El portacepillos dental fue el reemplazo de las vergas de los hombre de mi familia cuando me metía a bañarme. Sin dudas mi vida de niña fue un mar de sexo y placer, a mis cortos 10 años ya había sido penetrada por la verga de mi papá, la verga de mi tío y las vergas de mis hermanos. Si, en definitiva era una puta en crecimiento.
Recuerdo que en una ocasión cuando mi padre salió del cuarto dejándonos “dormidos”, mi hermano mayor me pregunto.
Hermano mayor: Cielo Riveros, mi papá también te toca?
Cielo Riveros: Nooooo, como crees. Porque lo dices?
Hermano mayor: Es que yo veo que él se mueve mucho cuando está contigo mientras te duermes y parece que te estuviera casando.
Cielo Riveros: Ay si, el se mueve mucho, una ves le dije que no se moviera tanto para poderme dormir.
Y así me toco hacer en realidad, decirle a mi papá que mi hermano estaba sospechando, que mejor no se moviera cuando estuviera conmigo. Entonces para poder hacer algo en esos ratos de la noche, nos dedicábamos a masturbarnos.
En otra ocasión mi hermano me preguntó que si sería capaz de dejarme coger por otros niños.
Yo le dije que no sabía si seria capaz, pero que si me gustaría probar otras vergas. A lo que me dijo que les diría a mis primos, esa fue una idea que me gustó y esperé ansiosa a que algún día les dijera.
Hoy día mis hermanos no me tocan, ya ni hablamos del tema, así que solo me quedan los recuerdos de todas las noches de sexo que tuvimos. Fue sexo inocente pero muy lindo, sin daños, sin lastimarnos. El sexo entre hermanos es muy distinto al sexo entre novios, es un sexo que alcanza un nivel muy alto de respeto mutuo. Un nivel muy alto de comprensión, un nivel muy alto de cariño. Hola de nuevo, continuo con mis relatos, hoy les confesaré como fui abusada por el padre de una amiga de infancia.
Tendría yo unos 10 años, y en mi barrio hice amistad con una niña de mí edad (Melissa), ella tenía dos hermanas más, una menor que ella (Mayito) que tendría unos 7 años y la otra mayor que tendría unos 15 años, no tenían hermanos varones. Eran ellas tres y sus padres.
Su padres son profesores, el papá es un hombre joven y muy sociable que alternaba su profesión con la de animador, aunque nunca supe si también era locutor. Lo cierto era que lo buscaban mucho para animar grados, fiesta, presentaciones en colegios y cantar bingos.
Mi amiga y yo estábamos en el mismo grado, en el mismo colegio. Por lo tanto era muy común reunirnos para hacer las tareas, y aprovechando que su padre era profesor, el sitio más adecuado era en su casa.
Recuerdo que cuando yo iba a hacer las tareas, el padre de mi amiga se acercaba mucho a mí, con el pretexto de explicarme mejor, y me rosaba su cuerpo y su pene que siempre lo llevaba parado. Recuerden que mi experiencia de incesto inicio muy temprano y a esa edad ya sabía muy bien que era ese bulto y porqué se ponía así. Pero era algo que no me incomodaba, ya que si bien me gustan las vergas bien paradas, con mi amiga al lado me sentía segura de que nunca pasaría nada, al menos eso era lo que yo me imaginaba.
Un cierto día, fin de semana, pedí permiso en mi casa para ir donde mi amiga a jugar un rato. Ese día no estaba la madre de mi amiga ni su hermana mayor. Yo toqué varias veces el timbre y no salía nadie, cuando estaba ya decidida a regresarme para mi casa, escuché voces y los pasos de alguien, que resultó ser la hermanita menor.
Luego de abrir la puerta, me dijo que ahora venia su hermana y salió corriendo para uno de los cuartos. Me percaté sin malicia alguna que la niña llevaba el elástico del pantalón recogido, como cuando uno se viste de prisa, pero como dije, no le di importancia, al final es una niña.
Mi amiga se demoró un poco en salir y note que se venía peinando y con la ropa un poco desarreglada, eso sí que era raro en ella, ya que le fascinaba siempre estar bien presentable. Me saludo, y nos sentamos en la sala a conversar. Le sentí un olor a saliva seca, ustedes saben bien a que huele eso jajajajajajaja, y me imagine que estaría dormida cuando yo llegué.
A los pocos minutos de estar allí salió su papá, con un bóxer y una camisilla blanca. A través del bóxer se podía ver que había tenido una erección, ya que su verga estaba a medio dormir. Me saludos de beso, me acaricio la cabeza y mi barba y se fue a la cocina por un vaso de agua.
Su olor a sudor y sexo fue inconfundible, de inmediato me di cuenta del porqué habían demorado en abrir, mi experiencia me lo decía y sabía que no me equivocaba.
Conversé un poco más con mi amiga y le dije que regresaría más tarde, ya que vi que se acababa de levantar.
Cielo Riveros: Meli, si quieres regreso más luego mientras te arreglas, ya que veo que estas recién levantada.
Meli: No Cielo Riveros, yo no estaba dormida – palabras que confirmaron lo que ya sabía – solo que estábamos jugando con mi papá y no te habíamos escuchado.
Cielo Riveros: Mmmmmmmm -He hice la pregunta indiscreta – Y a qué estaban jugando?
Meli: A la lucha, por eso estoy así.
Mayito: Siiiii Cielo Riveros, y mi papá siempre nos gana
Profe: Jajajajajaja deberíamos invitar un día de estos a Cielo Riveros a jugar, jajajajajajajaaj
Mayito: Vamos Cielo Riveros que entre las tres vencemos a mi papá.
Cielo Riveros: Pero otro día, ya hoy me bañé y si mi mamá me ve muy sudada me regaña.
Profe: Si Cielo Riveros tiene razón, heyyyy pero vamos al cuarto y nos vemos alguna película, yo compro la pizza.
Mayito: Siiiiiiiiiii.
Sin mucho ánimo los acompañe, la cabeza me daba vueltas tratando de entender que mi amiga y su hermanita de seguro estaban viviendo igual situación que la mía, necesitaba averiguar si lo disfrutaban tanto como yo, o si las estaban obligando.
No dejé de sentirme feliz, ya que tendría a alguien muy cercano que vivía mi situación, y aunque me prometí que nunca revelaría el secreto entre mi padre y yo, cosa que hoy día sigue siendo secreto, si me daba la oportunidad de saber que experiencias vivían otras niñas.
Me llevaron a la habitación del papá, allí había un televisor muy grande que cubría casi toda la pared, y la cama era mucho mas grande que la de mis padres, como dijo el profesor cuando entró, aquí cabemos todos y estaremos muy cómodos.
Nos acomodamos en la cama, el profe se hizo al centro y sus hijas una a cada lado, yo quedé al lado de Meli. El profesor estiro el brazo y me halo por la cabeza hacia ellos.
Profe: Ven Cielo Riveros, acércate a nosotros para que estes más cómoda.
Cielo Riveros: Gracias profe, aquí estoy bien.
Mayito: No Cielo Riveros, vente más para acá, y ahora que mi papá se descuide lo atacamos.
El profesor buscó una película que no era infantil, algo que no había visto, pero que me imaginé cual sería el contenido.
Meli: Papi, cambia esa película, a Cielo Riverosra no le va a gustar.
Profe: No hija, ya ella esta grandecita y la puede ver, ya verás como le va a encartar, cierto Cielo Riverosra?
Me encogí de hombros en señal de no saber que responder.
La película empezó muy entretenida, y de reojo alcance a ver que Mayito se sobaba mucho con su papá, y a él se le empezó a parar la verga, que por llevar solo bóxer se le notaba demasiado.
Melissa que también se dio cuenta de la situación le pasó una cobija al papá y le tapó las piernas.
Profe: No Meli, aquí hace mucha calor para estar arropados, cierto Cielo Riveros?
Yo solo sonreí sin hacer ningún gesto. Estaba comprobado, el profe se cogía a sus hijas.
Mayito: Cielo Riveros quieres sentarte aquí al lado de mi papá. Acá se siente más el aire.
Mayito se fue subiendo a las piernas de su papá y sin importar que yo estuviera allí, acomodó su conchita sobre sobre su verga y empezó a moverse muy suave. Si, al menos ya no dudaba que Mayito lo disfrutaba.
Cuando ya iban algunos minutos de la película, mostraron una escena de sexo, sin mostrar las partes, dos amigos que estaban estudiando en una alcoba se comenzaron a besar, se calentaron y se desnudaron para luego ponerse a culiar.
Mayito: Mira Mela, así es que le gusta a mi papá que le hagamos.
Refiriéndose a la escena donde la chica le estaba mamando la verga al chico.
Melissa se puso roja y no sabía que decir, y yo me incomode algo pero hice como si no hubiera escuchado.
Profe: Cielo Riveros, tu has visto ya estas películas, verdad?
Quise no responder pero el profesor me volteo la cara por mi barbilla y me repitió la pregunta
Profe: Dime Cielo Riveros, si la has visto?, si has visto este tipo de películas?
Cielo Riveros: La verdad no profe, mis padres no dejan que yo vea eso – Dije con la intención de terminar la conversación.
Profe: Mmmmm, entiendo. Eso quiere decir que nunca has visto algo como esto.
Para mi sorpresa y para la sorpresa de Melissa que no sabía para donde mirar ni que decir, el papá se sacó la verga. Tenía una verga negra, venuda y muy brillante por la baba que estaba botando con la sobadera de Mayito.
Mayito: Cielo Riveros, tu papá la tiene así como la de mi papá.
Meli: Hay Mayito cállate!!! No digas bobadas.
Profe: No, déjala, yo también quiero saber.
Y nuevamente me giró la cara cogiendo mi barba, su mano tenía ese olor a verga que tantas veces he sentido.
Profe: Vamos Cielo Riveros respóndele a Mayito, tú papá lo tiene así como el mío?
Cielo Riveros: Mire profesor – dije en un tono queriendo sonar molesta – Mi papá jamás haría esto que esta haciendo usted con sus hijas. Él me quiere muchísimo.
Profe: ósea que entonces jamás has hecho esto tampoco
Alli fue cuando el profesor le dijo a Mayito que le chupara la verga, y Mayito sin necesidad de que se lo repitieran se arrodillo en la cama, quedando de lado al profesor y le comenzó a dar una mamada, me di cuenta que lo estaba haciendo ya hace mucho, porque su forma de mamar era muy similar a la mía.
No voy a negar que sentí algo de envidia, una buena verga en la boca es algo que nunca desaprovecharía.
Profe: Ven Meli, muéstrale a Cielo Riverosra como es que estábamos jugando a la lucha cuando ella llegó.
A Melissa no le toco de otra más que obedecer a su papá, allí me di cuenta de que ella no disfrutaba tanto como su hermana, o al menos no en ese preciso momento. Entendí que era que se sentía incómoda por mi presencia, su secreto estaba siendo descubierto.
El profesor se quitó el bóxer quedando completamente desnudo y con sus hijas a ambos lados de su cadera. Sus manos iniciaron un recorrido por los cuerpos de sus niñas, sobando desde la cabeza, pasando por su espalda y llegando a sus culos y conchas. Les tocaba sus partes e intentaba meter sus dedos dentro de su ropa interior.
Mayito al sentir la intención de su papá, se quitó el interior, abrió sus piernas, ladeo su cola en dirección a la cara de su padre y dejó que éste le metiera los dedos. Se escuchaba como sus dedos sonaban encharcados en las vagina de Mayito, era indudable, mayito estaba lubricada y deseosa de que le metieran los dedos.
Por otro lado Melissa solo lamia la verga de su papá, creo que se abstenía de sentirse libre por mi presencia.
Profe: Vamos Meli, tu no eres así, a ti también te encanta chuparme la verga, muéstrale a Cielo Riverosra clo bien que lo haces.
Melissa aumento sus movimientos, pero creo que no logro alcanzar su verdadero ritmo.
Profe: Cielo Riveros ayúdame a quitarle la panti a Meli, con una sola mano me queda difícil, mira que la otra está dentro de la conchita de Mayito.
Mire al profesor a los ojos como diciéndole, en verdad quieres que haga eso?, y él entendió el mensaje.
Profe: Vamos, ayúdame, veras que es muy sencillo y podrás aprender cosas que tus padres no te enseñan.
En esos momentos no me había percatado, pero mi ropa interior estaba bastante húmeda, me había excitado con lo que veía pese a querer aparentar incomodidad.
Sin analizar lo que podía provocar le baje la panty a mi amiga, ella se giró y me miro sorprendida, y sin sacar la verga de su boca, me mando un gesto de intriga.
Profe: Cielo Riveros, te atreverías a hacer lo que hacen mis hijas?
Me quedé callada sin mover un solo músculo. El profesor levantó a Mayito por la cintura y la llevo hasta su verga.
Ver como Mayito se Acomodaba en la verga de su papá, y se iba deslizando poco a poco hasta meterse mas de la mitad, fue algo que me hizo sentir un pequeño orgasmo, un orgasmo muy similar al que siento cuando me masturbo con el cepillo de peinarme sentada en el comedor de mi casa.
Mayito: Ayyyyyyyyy papi, ya me entra más tu pipi. Ya casi seré igual que Meli.
Profe: si cariño, sigue así y pronto podrás tenerlo todo adentro como tu hermana.
Qué acabo de escuchar….Melissa se mete toda la verga de su papá…..yo aun no he podido hacer eso…..mi rostro dio signos de intriga que fueron bien entendidos por el profesor
Profe: Quieres ver si es cierto?
Preguntó el profesor mirándome directamente a los ojos. No respindí pero mis ojos dijeron todo lo que él quería saber
Profe: Ven Meli, muéstrale a Cielo Riveros hasta donde te metes la verga.
Nuevamente Melissa obedeció sumisa y poniéndose de pie se quitó toda su ropa, se agacho y dirigiendo la verga de su papa hacia su vagina, se sentó en ella.
Fue sorprendente ver como poco a poco, toda la longitud de su verga desapareció dentro de ella. Sí, Melissa se había metido toda la verga de su papá y ahora estaba cabalgando.
El profesor, que supo jugar su juego, me pidió otro cosa más.
Profe: ven Cielo Riveros, si aún no crees que Meli tiene toda la verga dentro, mete tu mano aquí.
Y sin dejarme pensar, tomo mi mano y la dirigió a su verga. De manera instintiva se la agarre, sentí una sensación de repudio y gusto al mismo tiempo. No entendía como el profesor podía cogerse a sus hijas delante de otra persona sin importarle lo que pudiera pasar. Su verga se sentía muy diferente a la de mi padre, sus venas se sentían a todo lo largo de su miembro, y tenia una curvatura muy pronunciada, cosa que la verga de mi papá no tenía.
El profesor mantuvo mi mano agarrada a su verga durante mucho rato. Luego me dijo.
Profe: Crees que serias capaz de sentarte aquí?
Cielo Riveros: No sé – alcance a decir, para darme cuenta tarde que había abierto una puerta difícil de cerrar.
Profe: Ven inténtalo.
Cielo Riveros: No, no creo que pueda.
Profe: No lo sabremos si no lo haces.
Sin perder tiempo, quito a Melissa de encima de él, y me halo por las manos, haciendo que me ponga de pie. Metió sus manos dentro de mi vestido y comenzó a acariciarme.
Mayito y Melissa no se perdían un solo movimiento, la intriga de qué pasaría conmigo estaba ya en el ambiente.
Mayito, quien se veía mas diestra, se levanto y ayudo a su padre a desnudarme por completo. El profesor al ver mi cuerpo desnudo se le iluminó el rostro y se lanzó contra mí a chuparme la vagina. No demoró en darse cuenta de lo húmeda que me encontraba.
Profe: Te estabas aguantando las ganas, cierto? – dijo con una sonrisa de triunfo en su rostro.
Cielo Riveros: Por favor, profesor, no me valla a lastimar.
Profe: No te preocupes, sé como tratar a niñas de tu edad, no eres la primera ni serás la última.
Sin querer, el profesor me acababa de confesar que había abusado de varias niñas. En ese momento me nació otra intriga, ya no solo quería saber cómo lo sienten mis amiguitas, sino que también quería saber a cuantas niñas más había abusado el profesor.
Luego de saciarse con los jugos de mi vagina, el profesor cayó en cuenta que yo no era virgen. Su rostro volvió a tomar ese aire de triunfo, deseo y perversión.
Sin dudarlo más, hizo que me arrodillara dirigiendo su verga a la entrada de mi vagina.
Su verga se deslizo dentro de mí, ensanchando las paredes de mi concha y llegando hasta su tope, cuando mire había abajo, puse la misma cara de mis amiguitas, quedé sorprendida, la verga del profesor había entrado totalmente en mí.
Melissa levanto la vista hacia mis ojos y con cara de intriga me hizo una pregunta sin necesidad de decir una palabra. En tanto que Mayito fue más directa.
Mayito: Mira Meli!!!! a Cielo Riveros también le entra todo el pipi de mi papá. Cielo Riveros, eso quiere decir que tú papá también te lo mete a ti.
Se sintió un silencio incomodo, y el profesor, diestro en esa situación, intyervino para quitar la tensión.
Profe: No hija, hay niñas que tienen la conchita grande, y al parecer Cielo Riverosra es una de ellas. Por eso se la pude meter toda.
Mayito: Ahhhh – dijo Mayito en tono de entendimiento.
El profesor no perdió tiempo, me tomo de las caderas y comenzó a moverse dentro de mí. No pude contener mi excitación y en silencio llegué al orgasmo. El profesor derramo dentro de mi toda la leche que tenia acumulada, me dejo llena de su semen, de mi vagina salía una gran cantidad lo que demostraba que su excitación fue máxima.
Melissa, quien no quedo contenta con la respuesta que su padre le dio a Mayito cuando me pregunto si mi papá me cogía, me lanzo otra pregunta sin decir palabra, no fui capaz de sostenerle la mirada, y con eso le respondí todas sus preguntas. Aunque más adelante ella me hizo la pregunta de manera directa y yo me negué, se que ella quedó convencida de que yo también estaba siendo abusada.
El profesor finalmente pidió la pizza que nos prometió, nos hizo lavarnos, se aseo él también y nos fuimos para la sala a seguir como si nada hubiera pasado.
Cuando me despedí él me tomo del brazo diciendo.
Profe: Sobra decir que de esto que acaba de pasar aquí no se puede decir ni una palabra.
Cielo Riveros: Si, lo sé.
Profe: Si lo deseas lo podemos repetir, solo tienes que pedirlo.
Y sí, se repitió un par de veces más, pero lo hice para poder tener la oportunidad de preguntarle a cuantas más había abusado, y cómo había pasado todo.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, una semana a solas con mi papá, un evento muy esperado.
En mi casa las cosas se veían normales, mi madre dedicada a su hogar y a su familia, con su amor que nunca ha faltado. Mi padre haciendo su roll de sustento del hogar, dando a mor a su familia y claro, mucho más amor a mí, a escondidas, sobra decir. Mis hermanos unidos como siempre y haciendo de nuestros encuentros nocturnos una costumbre.
Para una ocasión mi madre decidió ir a visitar a su abuela, ya tenía bastante tiempo que no la veía, así que armo maletas y se fue en compañía de mi hermano mayor. Para ese entonces yo tendría unos 9 a 10 años. Como era de esperarse tanto a mi padre como a mí nos dio mucha alegría ese evento, ya que nos quedaríamos los tres solos, y como mi hermanito menor estaba muy chico era fácil manipularlo. Lo que nos esperaba sería fenomenal.
Recuerdo también que para esa ocasión llegó a la ciudad Kiko, el del Chavo del 8 y mi papá nos llevó a ver el espectáculo, fue muy divertido ya que es un personaje de la infancia, y verlo frente a frente nos llenó de emoción.
Terminada la función, fuimos a comer helados, a jugar en el centro comercial y finalmente a cenar. Ya entrada las 8 de la noche nos dirigimos a casa para descansar del día, ya que estuvimos fuera de casa desde antes del mediodía.
Así fue que llegamos a casa, nos desnudamos quedando los tres en ropa interior y mientras nosotros veíamos televisión, mi padre se encargo de darle de comer a nuestras mascotas, ordenar la casa y prepararnos una merienda para comer más tarde.
Papá: Mis amores, ahora que terminen de ver televisión nos damos un baño para poder dormir bien frescos.
Hermanito: Si Pa porque ya tengo sueño.
Papá: Jajaja estas cansado hijo.
Cielo Riveros: Y yo también papi, yo también estoy cansada. Pa, donde vamos a dormir hoy que mi mami no está.
Papá: pues en mi cama, allí cabemos los tres.
Cielo Riveros: Bueno Pa, dormiremos todos juntitos – Era la respuesta que él necesitaba oír y que yo quería decir.
Al poco tiempo se acabó la película que veíamos, así que nos terminamos de desnudar y dos dirigimos al baño los tres.
Mi padre como siempre se encargaba de llevar todas las cosas, toallas, sandalias, cepillos, y era quien nos bañaba. Una vez en el baño, nos metió bajo la regadera e inicio el baño, tomó a mi hermanito y le aplico el shampo y le enjabono su cuerpecito, luego le dijo que regresara a la regare y me llamó para mi turno. Se sentó en la taza del sanitario, me haló hacia él y me comenzó a poner el shampo, mientras lo hacia yo le cogía su verga que ya empezaba a pararse y se la acariciaba. Para mí siempre ha sido muy satisfactorio acariciar su verga, y porque no decir, acariciar una buena verga de quien sea como lo aprendí en mis otras oportunidades.
Cuando ya tenía su verga completamente perada me di vuelta y la dirigí a la boca de mi culo, y con su babita me la comencé a sobar para que me humedeciera y pudiera entrar sin dolor. Una vez sentí que mi culo estaba lo suficiente húmedo me empujé haca atrás e inmediatamente se fue metiendo su deliciosa verga en mi pequeño y apretado culito.
Quien han recibido un anal saben que esa sensación de empezar a entrar una verga en el culo es lo mas deliciosa que hay, se siente como el culo chupa la verga para no soltarla, y ésta se mete sin que nada la detenga.
Así me clavé todos sus 19 cm de verga, y me comencé a mover para sentir esa sensación inexplicable que da el sexo. A mi corta edad era insaciable, por donde me metieran una verga por allí disfrutaba, y si no tenía alguna cerca cuando me calentaba, y he de decir que me calentaba a diario, tenía que buscar algo duro para meter entre mis piernas y sentir el roce con mi clítoris.
Mi hermanito nos veía pero como mi padre no dejaba de aplicarme el jabón, suponía que todo estaba bien. Y valla que si los estaba, estaba yo con su deliciosa verga metida en el culo, recibiendo sus embestidas cada vez más fuerte.
Así estuvimos unos 10 minutos hasta que sentí sus chorros de leche dentro de mí, cosa que me produjo un enorme placer.
Poco a poco me saqué su verga, él se hecho agua y yo se la restregaba para lavársela para al final irme a la ducha a botar toda su leche al piso y terminar de bañarme.
Mi padre envolvió a mi hermanito en la toalla, lo llevo a la cama, le colocó su pijama y le dijo que ahora regresaba de que iría a buscarme a mí.
Al regresar por mí, y ver que ya me había lavado mi culito, me alzó, me sentó en el lavamanos, me separó las pierna y me comenzó a mamar mi cuca.
Como ya estaba iniciada por la clavada que me acababa de dar por el culo, no duré mucho en venirme, apretando su cabeza con mis piernas y atrayendo su boca cada vez más hacia mi vagina. Quedé rendida con esa mamada.
Así que mi papi me levantó, me llevó a la cama, me secó y me coloco una pijama de vestido pero no me coloco ropa interior, lo que para mí solo significaba una cosa, esto apenas comenzaba.
Fue una noche hermosa, tuvimos sexo unas tres veces más, Claro he de decir que él solo se derramo dentro de mí en dos ocasiones.
Ya cuando nos dispusimos a dormir, me metió toda su verga dentro en mi vagina y allí la dejó hasta el siguiente día.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, hoy les contaré como fui abusada en mi escuela por 4 profesores..
En mi país a los estudiantes nos hacen unas pruebas durante todo el tiempo de estudio, las llaman pruebas saber. Esas pruebas son obligatorias y las dictan en la misma escuela pero con profesores diferentes, y lo hacen los sábados durante todo el día.
Para cuando yo estaba haciendo 6to grado, tendría unos 11 años, y ya mis senos se empezaban a marcar en mis blusas, como yo soy bastante alta para mi edad, herencia de mis dos padres, los chicos de cursos más avanzados, que tenían 14 años o más, se fijaban en mí y me decían cosas, lo que generaba risas entre mis amigas y me decían que ya podía tener novio.
Lo mismo pasaba con algunos profesores, para nadie es un secreto que hay profesores que se fijan en sus estudiantes, y la niñas de mi edad y con mi condición de altura y buen cuerpo somos apetecidas y nos dicen muchas cosas para alagarnos.
Bueno, para ese año el profesor que nos dictó el curso de las pruebas saber era un hombre aun joven, tenía según me dijo 27 años, y ya llevaba trabajando con la entidad que dicta los cursos algo más de tres años.
No diré que desde el primer día, pero si una vez que me vine con ropa de salir al curso, ya que de allí saldríamos para donde una amiga a festejar su cumple, el profesor me comenzó a mirar con otros ojos. día mi madre me vistió con un pantalón bastante ajustado, que marcaba muy bien mis largas piernas, y mostraba mucho mi cola, una blusa sin mangas que dejaba ver mi ombligo y una chaqueta de jean. Como era época de calor, me quité la chaqueta y me quede con la blusa, eso atrayó no solo las miradas de mis compañeros, sino la atención del profesor quien desde ese día me trató de manera diferente, mostrando interés en mí, y hasta regalándome dulces cada sábado para acercarse más.
No sé si era necesario, pero el profesor se ideo un puesto de monitora y me escogió a mi para que le ayudara con el comportamiento de mis compañeros, así que a mí me tocaba quedarme un poco mas luego de las clases para ayudarle a llenar unos informes. Yo lo hacía encantada porque sentía que estaba haciendo algo mas allá que solo el curso, así que nunca lo reproché y con gusto me quedaba con el profesor.
En los momentos en que quedábamos solos, el profesor cerraba el libro y me decía
Profe: Bueno Cielo Riveros, porque no me hablas algo de ti, dejemos el trabajo por hoy y cuéntame.
Cielo Riveros: Y que quiere que le cuente profe.
Profe: por ejemplo mmmmmm no sé, viendo que ya eres una niña muy grande además de muy hermosa, dime al menos si ya tienes novio.
Cielo Riveros: Ay profe gracias, pero no, no tengo novio todavía.
Profe: Pero me imagino que si debes tener muchos enamorados, cierto?Cielo Riveros: No sé si muchos, pero si algunos me dicen cosas bonitas.
Profe: Bueno, me puedes contar como uno de esos enamorados, porque la verdad tu eres muy linda.
Cielo Riveros: No profe como cree, usted es una persona adulta y yo soy apenas una niña
Profe: Ay Cielo Riveros, me estas despreciando. Yo todo ilusionado diciéndote lo mucho que me gustas y me rechazas así.
Cielo Riveros: No es que lo rechace profe, es que se vería mal si usted y yo nos hiciéramos novios.
Profe: Si te entiendo. Pero y si lo mantenemos en secreto, te atreverías.
Cielo Riveros: No sé profe, la verdad no sé qué decir.
De esa manera el profesor invirtió su tiempo en mí, y tras muchas pláticas como la de ese día se acercaba más a mi hasta el punto de ya poner sus manos en mis piernas cuando me iba a decir algo de la supuesta monitoria. Incluso ya me saludaba de besitos y se despedía igual de besitos. Y cada vez sus besos se acercaban mas a mis labios. Hasta que un día se atrevió y me beso en los labios, cosa que rechacé y él entendió que no tendría chance conmigo.
En una ocasión lo vi conversando con tres de sus amigos que también daban clases y noté que miraban mucho para donde yo estaba.
Cuando el curso ya estaba por terminar, y solo faltaba una clase, el profesor nos dijo que si queríamos no fuéramos a esa última clase ya que él nos había dado todo el material y no sería necesario, pero que yo como monitora si debía ir para hacer el informe final.
Así fue que yo llegué ese ultimo día con una licra blanca y una blusa a cuadros y mis amados tenis que me acompañaban a todas partes.
El profesor lo encontré con sus tres amigos, cuando yo entré se despidieron, le desearon suerte y le dijeron, vamos uno por uno, nos avisas.
Yo no entendí nada de esa conversación y le resté toda la importancia posible, algo que más tarde me daría cuenta de que no debí hacer.
Cuando quedamos solos en el aula de profesores, él me dijo, acompáñame allá atrás, a los salones de audiovisuales, a buscar una cartulina para hacer una cartelera.
Yo de inocente fui con él, me dijo que caminara adelante y me iba diciendo que me veía muy hermosa, que era una lástima para él no haber podido ser mi novio.
Cuando llegamos al salón de audiovisuales, él cerro la puerta y me dijo que buscara la cartulina en una mesa que estaba detrás, sin darme cuenta de donde salió, me ofreció una gaseosa y él se estaba tomando otra, yo la acepté ya que como les dije el me regalaba muchos dulces, al poco de tomarme la gaseosa me empecé a sentir un poco mareada, él se dio cuenta y me agarro, me pregunto que sentía y me acostó sobre la mesa.
Yo me sentía mareada, no me podía mover pero estaba conciente de todo lo que estaba a mi alrededor.
Él, luego de subirme a la mesa, me desnudo toda y me dijo que hoy sería de él.
Acto seguido y sin perder tiempo comenzó a besarme los labios, a meter su lengua y moverla muy adentro buscando la mía. Luego bajó hasta mis senos acariciando, pellizcando, lamiendo y chupándolos con unas ganas que parecía que nunca había estado con una mujer.
Su nivel de excitación era muy alta, se sacó la verga bajándose el pantalón por debajo de la rodilla y tomando mi mano se empezó a hacer una paja.
Yo no podía hacer nada, pero sentía todo lo que el me hacía, su verga se sentía muy húmeda y palpitante, sus huevos estaban rasurados por completo, mientras se masturbaba con mi mano, bajo su boca y buscó mi sexo. Ma abrió de piernas y como un loco empezó a chupar mi vagina, como yo no sentía no supe como estaba, pero el dijo que estaba muy húmeda, algo que no era raro en mí, ya que siempre estaba dispuesta al sexo o a una buena masturbada.
Pasaron como 10 minutos mientras el me daba dedo, lengua y se pajeaba conmigo, luego dijo que ya no aguantaba mas y se pasó para mi vagina, restregando su verga en mi concha. Hasta el momento no había visto su miembro, y he de decir que era un poco mas grande que el de mi padre por lo que supe que me dolería algo, y que no me entraría del todo.
Él sin pensarlo y con un alto nivel de excitación, me introdujo su verga hasta dar tope y hacerme sentir una leve molestia. Cuando vio que ya no me entraba más comenzó sus movimientos de culeo, fueron mas de 20 minutos de puro sexo, en los que el profesor no dejó de culiarme, chuparme, besarme y acariciar todo mi cuerpo.
Cuando al final deposito todo su leche dentro de mí, cayo rendido en mi cuerpo y note su nivel de agitación.
Pasados unos dos minutos, tomó su celular e hizo una llamada.
Profe: Te toca.
Le dijo a la otra persona detrás del esa llamada.
Casi al instante escuché que abrieron la puerta y vi llegar a uno de sus amigos, aquellos tres con los que lo había encontrado conversando ese día.
Profe2: Se nota que lo disfrutaste mi amigo
Profe1: es toda tuya, esta rota, se la puedes meter toda con confianza.
Y así fue, su amigo se ensaño conmigo, primero con caricia y besos, luego con chupadas y mordiscos y al final con otra culiada más. Y yo aún no podía moverme, pero ya empezaba a sentir un poco más.
De esa misma forma pasaron sus optros dos amigos, cada vez que uno terminaba, llamaban al tercero y finalmente al cuarto.
Fueron mas de dos horas que me tuvieron desnuda sobre la mesa dándome verga.
Y como les he dicho en muchas ocasiones, nunca rechazo una buena verga.
Ya cuando el cuarto profesor terminó, se me había pasado el efecto de la bebida y podía moverme, y era algo que ya todos habían notado.
Mi profesor, luego de terminar les dijo a los demás que se fueran mientras él me limpiaba.
Profe1: Cielo Riveros, definitivamente eres una niña muy deliciosa, por suerte para nosotros ya estabas rota y te pudimos meter la verga sin ningún problema. Quiero que me digas como te sientes.
Cielo Riveros: Violada, como cree que me puedo sentir, usted profesor me violo con sus otros amigos.
Profe1: Si nena eso lo sé, pero es tu culpa por no querer ser mi novia. Si me hubieras aceptado hubiera sido solo yo quien te hubiese cogido.
Cielo Riveros: no me diga mentiras profesor, ya eso lo estaban planeando ustedes hace mucho. Siempre los veía hablando y me miraban demasiado. Pero nunca sospeche que me fueran a violar.
Profe1: Pero no puedes decir nada, al final ninguno de nosotros fue el primero en cogerte. Me gustaría saber quién fue y hace cuanto lo estás haciendo.
Cielo Riveros: pues siga queriendo, eso es algo que nunca sabrá.
Profe1: Y tu culo también estará roto, o por allí si eres virgen.
Cielo Riveros: eso no te importa.
Profe1: si es cierto, no me importa, pero no me iré de aquí sin saberlo.
Así fue que sin decir más, el profesor me volvió a abrir las piernas y con su verga ya parada se dispuso a cogerme por el culo. Forcejee un poco, pero me sentía muy cansada después de todo el sexo que había tenido. Él al no sentir resistencia, subió mis piernas a sus hombros, me chupó el culo, lo escupió y escupió su verga, y sin importa como me sintiera me la metió poco a poco, su verga que es un poco mas grande que la de mi padre, me lastimó algo, pero me aguanté para no darle el gusto de verme gemir.
Y así finalizó ese día, fueron 5 culiadas que me dieron ese día, llenando mi concha y mi culo con abundante leche.
Luego, me ayudo a vestir, no sin antes limpiarme con una toalla húmeda que tenía preparada en el cuarto, me pudo una toalla sanitaria para que absorbiera la leche que aún tenía dentro y se despidió. Fue la ultima vez que lo vi.
Hola de nuevo, continuo con mis relatos, les diré de como me entere que otra de mis primitas también era abusada por su papá.
Recuerdan el tío que me abuso en mi relato número 4, que también les dije que abusaba de mis dos primas. Bueno, este individuo al que desde ese día le cogí asco y me alejé de su casa y por ende de mis primas, no sé que hizo pero logró que otro tío se uniera en incesto con su niña y aprovechándose así de la menor de la familia.
Para esa época tendría yo unos 12 o 13 años, ya mis senos estaban crecidos aunque no de manera exagerada. Y eso, ligado a mi estatura y mi cuerpo voluminoso, de piernas gruesas llamaba mucho la atención.
Fue así como mi segundo tío en este relato comenzó a mirarme de otro manera y de pronto se le dio por invitarme a su casa para que jugara con su niña, mi prima Loli quien era la menor de todos los 10 primos. Loli tenía como 3 añitos y yo después de hacer las tareas me iba directo a su casa, ya que vivíamos cerca unas tres cuadras.
Ya conocedora de las miradas, los gestos, las palabras, supe que mi tío se había interesado en mí, y la verdad no me molestaba mucho, él es hermano de mi papá, son muy parecidos pero mi tío es mucho más joven, razón por la cual si algo llegara a pasar sabía que no me incomodaría como si me pasó con mi otro tío.
En uno de tantos días mi tío se acercó a mí, se tiro al piso y me empezó a puyar por las costillas y me decía cualquier bobada para sacarme una sonrisa. Yo seguía jugando con mi prima y le respondía con manotones y palabras de “no me molestes” para mantenerlo a raya, pero era demasiado obvio lo que quería, y sabía que no se iba a detener.
En ese juego bobo, cuando le lance un manotón, el me agarro la mano y se puso a “forcejear” conmigo, me tiró al piso y se me montó encima a hacerme cosquillas. Se sentó sobre mi barriga y por más que me movía no lograba bajarlo de mí. Luego se acomodó un poco, bajándose hasta el punto de que su verga rosaba mi conchita.
Así forcejeamos un poco hasta que él se alzo me quedo mirando fijamente y note que se pecho respiraba ya con excitación. De inmediato supe lo que seguía.
Sin importarle que estaba allí mi primita, dirigió su boca hacia la mía y me planto un beso en los labios, y al ver que no puse resistencia continuo pero ya usando su lengua y jugando con la mía. Al mismo tiempo sus caderas se comenzaron a mover y su verga se tallaba sobre mi vagina haciéndome sentir las primeras cosquillas con su roce, lo que sin duda alguna me llevaría a uno de mis orgasmos.
Titi: Cielo Riveros, hace mucho que deseaba besarte
Respondí a su comentario con otro beso, y él entendió que estaba dispuesta. Y como si lo hubiéramos hablado, él se quitó su ropa quedando desnudo por completo he hizo lo mismo conmigo. Ya estando los dos desnudos, se retiró un poco y vi esa mirada obsesiva que ya conocía de mis otros abusadores, sin perder tiempo me sente en el piso y le comencé a sobar la verga.
Esa si era diferente a la de mi papá, su verga es de cabeza pequeña y su cuerpo se va anchando, en tanto que la de mi padre es de cabeza grande y su cuerpo es grueso por parejo.
Sus fluidos mojaban mis manos cada vez que le acariciaba su verga, y como era mi costumbre me la llevaba a la boca y lamía la palma de mi mano, ese sabor siempre me a gustado, es algo que me excita aún más, él se excito aún mas con ese gesto y tomó mi cabeza para dirigirla hacia su verga.
Sin dudarlo meti la mitad de su verga en mi boca, y comencé a chupar de una manera que ni yo misma entendía, era como si tuviera mucho tiempo sin mamar, algo incierto ya que mi padre todas las noches me daba mi ración de sexo, bien sea anal, vaginal u oral. Y luego mi hermano mayor, se bajaba a mi cama y terminaba lo que mi padre empezaba.
Pero ese día no se porque reaccione de esa manera, lo cierto es que mi tio quedo tan desconcertado cono feliz por mi actuar.
Después de mamar durante unos minutos, me recosté sobre el piso, abrí las piernas y le ofrecí mi vagina a mi tío.
Él de forma inmediata bajo a mi pozo y comenzó a chupar, lo hacía de forma brusca pero atinaba en el punto exacto de mi clítoris, que es algo que no todos los hombres saben hacer.
Así estuvo él, mamando mi vagina, metiendo su lengua y usando sus dedos para darme placer, en ocasiones recorría con su lengua toda mi nies, llegando a mi ano y lamiendo e introduciendo allí también sus dedos.
De un momento a otro me di cuenta de que mi primita estaba embobada viéndonos, se lo dije al oído y él la miro, le sonrío, me tomó en sus brazos y me llevó a su cama, dejando a la niña sentada en la sala.
Una vez me acostó en el borde de la cama, tomo su verga y la dirigió a mi concha, comenzó a sobarla desde mi clítoris hasta mi ano, soltando suspiros cada vez mas fuertes con esos movimientos.
Titi: Por dónde quieres que te lo meta – me preguntó-
Cielo Riveros: la verdad?
Titi: Si, porfa dime
Cielo Riveros: Hoy quiero por los dos huecos
Titi: Waoooooo! Ni mi mujer me ha pedido eso
Su felicidad fue notable, y mí satisfacción también lo fue cuando sentí que me comenzó a meter su verga por la vagina, fue un solo movimiento, algo brusco pero me encantó. De hecho en ocasiones le había dicho a mi padre que me violara, que quería saber cómo se sentía cuando a una la trataban así duro.
Su verga llegó a lo mas profundo de mí, sentía con cada empujón que me reventaría por dentro, pero en lugar de incomodarme me hizo sacar gemidos de satisfacción. Sus movimientos eran muy rápidos, me vi obligada a decirle que se calmara porque quería su leche en el culo, pero también quería gozar un poco más en mi vagina.
Luego de unos 10 minutos de culeo, él se levantó y me pidió que me pusiera en cuatro, lo hice elevando mi jopo, arqueando mi espalda y girando mi cabeza para mirarlo fijamente, él se volvía loco cada vez que yo hacia algo que no se esperaba, sin perder tiempo paso su lengua por mi culo llenándolo de abundante saliva, luego se sobo su verga y me la metió sin compasión. Allí si que me hizo gritar, me dolió mucho, creí que me había roto el jopo y le pregunté si me salía sangre, lo negó con la cabeza y empezó a mover sus caderas nuevamente, estaba muy arrecho, no daba crédito a que tuviera a su sobrina ensartada por sus dos huecos y que la estuviera pasando tan bien.
Se movió mucho hasta que no pudo contenerse y descargó cuatro chorros de leche dentro de mi culo. Sentí su leche abundante y muy caliente, y sin esperarlo tuve un gran orgasmo.
Se quedó encima de mi un par de minutos, y luego cuando su verga se aplacó se volcó a un lado de la cama.
Y fue allí fue que nos dimos cuenta de que Loli estaba parada en la puerta viendo el espectáculo.
Titi: Ven mi amor, acércate
Loli: Papi, yo también quería jugar con ustedes
Titi: Si mi amor, yo lo sé, pero es que es la primera vez que viene Cielo Riveros y tenía que atenderla a ella, te prometo que otro día jugamos los tres, cierto Cielo Riveros?
Cielo Riveros: Si Loli, otro día que venga y jugaremos los tres.
Titi: Te puedo preguntar con quien aprendiste todo eso?
Cielo Riveros: Te puedo preguntar por qué te cogiste a tu hija?
Titi: Es algo que por ahora me gustaría no responder.
Cielo Riveros: Pensamos igual, guardemos los dos nuestros secretos.
Hola de nuevo, continuo con mi descubrimiento de cómo me entere que otra de mis primitas también era abusada por su papá..
Y fue allí fue que nos dimos cuenta de que Loli estaba parada en la puerta viendo el espectáculo.
Titi: Ven mi amor, acércate
Loli: Papi, yo también quería jugar con ustedes
Titi: Si mi amor, yo lo sé, pero es que es la primera vez que viene Cielo Riveros y tenía que atenderla a ella, te prometo que otro día jugamos los tres, cierto Cielo Riveros?
Cielo Riveros: Si Loli, otro día que venga y jugaremos los tres.
Titi: Te puedo preguntar con quien aprendiste todo eso?
Cielo Riveros: Te puedo preguntar por qué te cogiste a tu hija?
Titi: Es algo que por ahora me gustaría no responder.
Cielo Riveros: Pensamos igual, guardemos los dos nuestros secretos.
Días después de esta conversación mi tio me volvió a invitar a jugar con mi primita, obvio la intención era otra, yo lo sabía y de verdad no me importaba mucho, estaba preparada y porque no decir, ansiosa de ver como mi tio se cogería a mi prima frente a mí.
Así que una vez me invito, sin dudarlo acepté, pero esta vez fui preparada, me puse una falda corta, una blusa de tirantes, una panti bien pequeñita que ya no usaba por lo chica que me quedaba y una licra por obligación porque sabía que mi madre no me iba a dejar salir sin licra.
Me subí en su moto, arrancamos y tan pronto nos alejamos de la casa pase mis manos por su cintura y le agarre la verga. En lo corto del viaje se la iba sobando y cuando llegamos ya la tenía bien parada. Les cuento que me decepcioné un poco ya que al llegar encontré a mi tía en la terraza sentada.
Con desgano y resignada me bajé y salude, ella me dio un beso y se despidió diciéndome que nos veríamos después.
Titi: Bueno niñas ya vengo, se portan bien, cierren la puerta que no demoro, no le vallan a abrir a nadie.
Loli: Bueno papi
Mi tío me guiño el ojo y me sonrió de manera picara, me volvió el alma al cuerpo y nuevamente renacieron mis esperanzas, seria la primera vez que vería a otra niña siendo penetrada.
Inmediatamente cerramos la puerta antes de que ellos se fueran, le pusimos seguro y le dije a mi prima que nos fuéramos para su el cuarto, tenía que aprovecha ese momento, tenía que averiguar como había empezado todo.
Cielo Riveros: Oye Loli, te acuerdas de lo que me hizo tu papá la última vez que estuve aquí.
Loli: Cuando te hizo como a mi mamá?
Cielo Riveros: Si, si así mismo. A ti te ha hecho lo mismo?
Loli: si, él siempre que quedamos solos me hace lo mismo pero no le digas que te dije porque me regaña
Cielo Riveros: Bueno. Loli y desde cuando están haciendo eso?
Loli: No me acuerdo pero eso siempre lo hacemos
Cielo Riveros: Y tu mamá lo sabe?
Loli: Nooooo, me mata si lo sabe, me mata a mi y a mi papá.
Cielo Riveros: Cuando fue la primera vez que tu papá te culio?
Loli: Yo no me acuerdo Cielo Riveros, pero siempre se ha metido en mi cama y nos arropamos para dormir y él se pone detrás de mí, se saca su pipi y me lo soba en mi cola y así nos quedamos un buen rato.
Cielo Riveros: Y ya te lo metió.
Loli: Si ya me entra, por atrás me lo mete todo, y por adelante ya me meta la cabeza y un poquito más. Es que por adelante duele mucho.
Cielo Riveros: Y tu mamá nunca los ha encontrado haciendo eso.
Loli: Una vez que vino y yo la tenía adentro, ya llevábamos bastante rato haciéndolo, entonces nos hicimos los dormidos jajajaja, ella nos miró, ni dijo nada y se fue a su cuarto.
Cielo Riveros: Huyyyyyy casi los ven.
Loli: Si, mi papá se quedó hasta tarde conmigo, me dijo que para que mi mamá no sospechara. Esa noche fue la primera vez que me lo metió por adelante, pero solo fue un poquito porque me dolía mucho.
Cielo Riveros: y a ti te gusta que tu papá te case?
Loli, siiiii, es muy rico cuando el me lo mete y cuando me hecha la leche adentro.
Cielo Riveros: Y se los chupas?
Loli: Si, y también me tomo la leche para crecer bonita como tú. Cielo Riveros y tu papá también te lo hace a ti?
Cielo Riveros: No, mi papá no hace eso.
Llevábamos un rato hablando cuando escuchamos que estaban abriendo la puerta
Titi: Ya llegué niñas, dónde están?
Loli: Acá papi, en mi cuarto.
Titi: Y que hacen este par de niñas hermosas, ah?
Cielo Riveros: Hablando de cuando te cogiste la primera vez a Loli.
Titi: Ah si, y que te ha dicho tu prima?
Cielo Riveros: Que siempre se lo has hecho y que ya se la metes toda por el culo.
Titi: Si es cierto, me la cojo desde que es muy pequeña. Pero bueno menos charla y mas acción, a ver, a quitarnos la ropa.
Inmediatamente dijo eso se quito toda su ropa y cuando se bajó el pantalón su verga saltó de lo parada que la traía.
Titi: Estaba que me volvía loco, tu mamá no me dejaba venir, estaba comprando unas cosas.
Nosotras hicimos lo mismo, nos desnudamos. Yo por mi parte lo hice lentamente y mirándolo fijamente a los ojos para ver que reacción tenía cuando me viera quitarme la ropa. Y no fue menos de lo que esperaba, cuando baje mi falda y la lycra, quedándome en panty, inmediatamente se llevo la mano a su pinga y se la sobó haciendo un gesto de satisfacción.
De manera directa, me giré dándole la espalda, me apoye con una mano en la cama y con la otra me comencé a bajar la panty. Ese cuadro de una niña de 11 con una tanga metida en la cola lo volvió loco, al punto de lanzarse hacia mí y abrazarme por la espalda para besarme el cuello, sobarme la cola y meterme un dedo en la concha, que ya para ese momento, con los relatos de mi oprima y las ganas que llevaba, la tenía bien babosa.
Mi primita por su parte ya estaba desnuda y nos miraba con ganas de entrar en el juego de caricias.
Cielo Riveros: Quiero ver como haces cuando te cojes a tu hija, quiero ver hasta donde se la metes por ambos lados.
Dicho esto, él la tomo del brazo la atrajo hacia su cuerpo y comenzó a besarla en los labios y a acariciarle su cuerpo. Mi prima como toda una experta, se pegó a él y le tomaba la cara para hacer mas cercano el beso, yo me acerque a mi prima y le comencé a acariciar la cola, mojando mis dedos con la humedad de mi concha y metiéndolos en su culo, quería que mi tío se la metiera ya, quería ver como la penetraba.
El entendió, así que la hizo ponerse en cuatro en el borde de la cama, y sin más, se escupió la mano, le paso los dedos por el culo y apuntando su verga en la entrada se la metió de un solo jalón, lento pero sin parar, tal como lo hizo conmigo.
Mi prima, que no estaba del todo lubricada, lanzó un quejido de dolor y le pidió a mi tio que no se la metiera tan duro.
Palabras que no fueron escuchadas, ya que mi tío solo estaba concentrado en mí, y me estaba complaciendo, al yo oír a mi prima quejarse, le agarre su verga, me la llevé a mi boca dándole una mamada y le eche saliva en el culo a mi prima, para luego volver a poner esa enorme verga en donde la había sacado.
Con eso ya mi primita dejó de quejarse y empezó a gemir indicando que le estaba gustando.
Cielo Riveros: Ahora por el otro lado – le dije.
Sin decir una palabra, le sacó la verga a mi primita, la volteo boca arriba, le abrió las piernas y con su mirada me dijo que le chupara la chucha a la niña para prepararla. Enseguida me agache, tome su v erga le di un beso y me dirigí a la chucha de m i primita para chupar su cosita y pellizcar su clítoris, algo que sabia como hacer por la experiencia que tenía ya de mi padre.
Me separe de ella, le di una mamada a su verga y se la dirigí a la entrada de esa vaginita pequeña y estrecha, que hasta el momento me parecía imposible que una verga le fuera a entrar.
Si bien a mi me cogían desde pequeña, la diferencia entre mi prima y yo es que a su edad yo era mucho más grande y eso me ayudó a soportar las primeras embestidas de mi padre cuando comenzó a usar mi vagina.
Esa verga fue entrando con un poco de dificultad, allí no le fue posible meterla de un tirón, sino que le tocaba hacer un movimiento de vaivén para que fuera entrando poco a poco, hasta que llegó al limite que tenía su conchita.
Mi tío me miro a los ojos como esperando aprobación, yo voltee a ver a mi prima, quería saber por su rostro qué estaba sintiendo, si lo estaría disfrutando tanto como yo viendo como la culiaban. Ella solo miraba al techo y cerraba los puños cada vez que mi tío la embestía.
Devolviendo la mirada a mi tío, le dije sin hablar que quería que se la metiera mucho más, quería ver toda esa verga dentro de mi prima.
Titi: Hija, voy a empujar más, así que tienes que soportar, porque hoy serás igual que tu prima, hoy te la meteré toda.
Loli: Bueno papi
Pero no fue así, la niña llegó un momento que no pudo soportar y se fue en llanto, hubo que calmarla, mi tío se la saco y la abrazo mientras ella se calmaba.
Loli: Papi, yo nunca voy a poder?
Titi: Si hija, claro que si podrás.
En vista de lo que estaba pasando le dije a mi primita que no se preocupara, que ya le entraría toda algún día, y diciendo esto, me apoye en el pecho de mi tío haciendo que se recostara en la cama, Loli quedó sobre su pecho, yo le separe las piernas que quedaron a cada lado de su barriga, y tomando su verga la conduje hasta mi vagina. Me senté de una sola vez, sintiendo como su verga se estrelló dentro de mí, sacándome un quejido de dolor y placer. No me pude aguantar e inicie mis movimientos para meterme su verga lo mas profundo que soportaba, mi tío que se calentó a mil con mi embestida, besaba a su niña y le chupaba las téticas, que aunque no tenía, él se las hacia crecer de lo duro que las subsionaba.
Eh de aceptar que fue uno de los mejores orgasmos de mi vida, incluyendo los que he tenido en mi edad adulta.
En la próxima parte les contaré la sorpresa que me tenía mi tío en otra de las ocasiones en que me llevó a su casa.
Hola de nuevo, y aún hay más de mi descubrimiento de cómo me entere que otra de mis primitas también era abusada por su papá, me dieron una doble sorpresa..
Así fueron mis días desde que mi tío descubrió mi afición por el sexo, ya no se aguantaba las ganas de cogerme, y todos los días me iba a buscar para pasar un rato delicioso, en algunas ocasiones estaba mi tía en casa, para esas veces solo podía darle una que otra chupada a su verga a escondidas mientras mi prima la distraía de alguna forma. Fueron muchas semanas en donde me convertí en la puta de mi tío por las tardes, y de mi padre y mis hermanos por la noche. Mi vida transcurría en torno al estudio y al sexo.
Yo estaba totalmente equivocada pensando que mi tío había descubierto mi deseo por el sexo él solo, que había sido una casualidad nuestro primer encuentro de aquel día que forcejeando entre juegos me roso su verga en mi conchita empezando así esta historia, pero no fue así, alguien que lo estuvo alimentando y que quedó con ganas de mí fue quien le contó mi secreto. Alguien que al poder tenerme a su disposición armó todo un plan en mi contra para lograr al final su objetivo, volver a penetrarme.
Ya deben imaginarse quien fue, si así es, mi otro tío, aquel que me abuso en su casa una noche que me quede y del cual me aleje por asco, ese que se coje a mi prima obligada para proteger a su hermanita pequeña. No es que me de asco que se la coja, al contrario, eso me agrada porque tengo a alguien bastante cercano con quien conversar del tema, es la forma en como lo hace. No me gusta que abusen, el sexo entre familiares o no debe ser aceptado por los dos. Pero ese hijo de su putisima madre violaba a su hija mayor amenazándola con seguir cogiéndose a la más pequeña.
Una de tantas tardes que me fue a buscar mi tío Titi, al otro por asco ni lo mencionaré solo le diré tío, noté que estaba ansioso cosa que se me hizo raro ya que con el tiempo que llevábamos cogiendo esa ansiedad se le había pasado, así que me imaginé que algo había en especial ese día. Y valla que no me equivoqué, pero tampoco me lo esperaba.
Llegamos a su casa, Loli estaba en la ventana esperándonos, y mi tía se había ido para donde su mamá, no sé si les conté que la mamá de ella sufría de Alzheimer y a ella le tocaba cuidarla por las tardes.
En tramos a la casa, mi tío cerró la puerta y sin perder tiempo me abrazó por la cintura, levantándome hasta llevar mi cola a la altura de su cara, y así me llevó hasta la habitación donde siempre teníamos sexo. Cuando llegamos ya Loli estaba desnuda y su cuquita se le notaba húmeda en cantidad, a lo que me supuse que estaban culiando desde antes de que me fueran a buscar y la ansiedad que note en mi tío no era mas que excitación.
Titi: Este día va a ser especial, va a ser inolvidable.
Loli: Lo vamos a hacer todos papi? Nos vamos a divertir juntos como me dijiste
Titi: Así es mi niña, vamos a estar TODOS juntos.
Ese TODOS sonó muy acentuado, pero no le di mucha importancia ya que es algo que hacemos siempre, así que para mí era un día normal. No teniendo idea de lo que me esperaba.
Comenzaron las caricias, los besos, las tocadas de tetas y metidas de dedos, me desnudó con unas ansias como si nunca lo hubiese hecho antes, me chupo la chucha y el culo durante unos 10 minutos penetrándome ambos huecos con dos dedos en cada uno. Me sentía en el cielo, y aprovechando que estaba en posición de cuatro, le dije a mi primita que se pusiera delante de mí y le comencé a mamar su cuca, esa cuquita limpiecita, sin rastro de bellos, apretadita, bien rosada por las cogidas que su papá le daba, esa cuquita con sabor a inocencia pero con movimientos de mujer experta.
Titi: Ven, levántate, quiero que te subas en mi verga – me dijo mi tío.
Sin dudarle le hice caso, me quite de mi oprima, él se acostó a su lado, me abrí de piernas dejando su cuerpo en medio de mis piernas y su verga en dirección a mi vagina que pedía a gritos ser penetrada, y sin hacer pausa alguna me senté en esa verga que tantas veces me había hecho gemir de locura. Inicie de inmediato mis movimientos de penetración, con mis manos en su pecho me ensartaba toda en su verga y me restregaba para sentirla aun mas dentro de mí, con locura me estaba dando un gusto extremo. Sin darme cuenta del momento, mi tío me tapó los ojos con un pañuelo.
Cielo Riveros: Para qué haces eso?
Titi: Quiero que disfrutes de una sorpresa que tengo para ti.
Loli: Siiiiiiiii, también quiero ver la sorpresa – dijo mi primita
Acto seguido me atrajo hacia su pecho quedando yo acostada totalmente sobre él, con las piernas recogidas a cada lado de su cuerpo y con el culo apuntando hacia afuera de la cama, sentí como mi culo se abrió por la posición en que quedé. Con una mano él me sostenía de la espalda y con la otra me empezó a masajear la entrada de mi culito, que como dije ya estaba un poco abierto.
Titi: Hija, pásame la vaselina.
Loli: Toma Pa.
Entendí que sui intención era hacerme sentir una doble penetración, bien sea con sus dedos o con algún objeto, ya que muchas veces le dije que cuando me masturbaba me metía cualquier objeto redondo por mi culo.
Loli: Tío – Gritó Loli.
Titi: Shiiiiiiii –La calló su papá
Traté de levantarme como una reacción automática al grito de mi prima, mientras mi tío Titi me sostenía fuerte con la mano que tenía en mi espalda y con la otra me seguía untando vaselina en toda la entrada de mi culo y hasta mas adentro.
En un momento sentí otro mano más en mi espalda, pero no podía saber de quien era ya que tenía los ojos vendados. Yo solo tenía otro tío más, y es aquel a quien repudié por violar a mis primas, pero mi prima Loli si tenía vario tíos, así que en ese momento estaba totalmente intrigada de quien podría ser, lo que si no dudaba era de lo que iba a suceder, así que me relajé, me volví a recostar donde mi tío Titi y preparé mi culo para recibir lo indudable.
Escuché como escupían y de inmediato sentí que sobaban mi culo, seguido de la cabeza de una verga que empezó su recorrido hacia adentro, sin parar en ningún momento, pero de forma suave. Eso me gustó, fue una sensación reconfortante, aunque si lo hubiesen hecho de manera brusca también lo hubiese aceptado, ya que soy de las que le gusta que la traten de las dos formas.
Sentir dos vergas adentro después de tanto tiempo, desde que mi profesor y sus amigos me cogieron en la escuela, fue algo maravilloso, sentir dos vergas de verdad entrando por mis agujeros y con un ritmo que parecía coreografiado me lleno tanto de satisfacción que tuve un orgasmo inmediato y por primera vez en mi vida tuve mi primer squirt.
Grité tan fuerte que mi tío Titi se vio obligado a besarme para ahogar mi gemido, no faltaron las risas de ambos sujetos y la de mi primita que rio a carcajadas.
Pero la función siguió, y mis amantes no paraban de culiar, sus movimientos eran cada vez más rápidos pero no perdían su sincronización, lo que hacía disfrutar más de mi gran momento. Amé la forma en que me estaban dando por el culo, a pesar de estar acostumbrada a sentir la verga de mi papá y la de mi hermano mayor, ese día no se si por la situación de doble penetración, mi culo disfrutaba muchísimo más del momento.
Heche una mano hacia atrás y agarre por las nalgas al hombre que estaba detrás mío, para hacerle entender que quería que se pegara mas a mí, quería que su verga me estrujara más por dentro, quería sentir dolor, que era algo que me satisfacía mucho cuando se acercaba el orgasmo.
Titi: Listo? – Preguntó mi tío.
Tio2: Listo –Respondió el otro.
De inmediato descubrí que quien me estaba haciendo gozar de esa manera tan estupenda era el mismo tío por quien sentía asco al violar a mis primas.
Pero más pudo el momento que mis sentimientos, y como impulsada por algún motor, restregué mi vagina lo más fuerte que pude en la verga de mi tío Titi, el halé con mucha fuerza a mi otro tío para que su verga se metiera todo lo que pudiera dentro de mi.
Cielo Riveros: Quédense así, empujen toda su verga adentro, rómpanme todaaaaaaa!!!!!!
Fue lo que alcancé a exclamar cuando sentí como llegaba mi segundo orgasmo de la tarde. Mis piernas temblaron, mis rodillas cedieron y mis dientes cada vez se apretaban más. Hundí mis uñas en la piel de ambos y como mandado por los dioses sentí fuertes chorros de leche en mis agujeros, leche caliente que me hizo erizar la piel y desear que nunca acabara.
Así pegados como perros nos quedamos no menos de un minuto, hasta que la ultima gota de leche salió de sus vergas. Y hasta que mis fuerzas no dieron para mas y aflojé todo mi cuerpo respirando aún con dificultad.
Titi: Te gustó?
Cielo Riveros: Es el mejor sexo que he tenido en mi vida
Tan pronto nos pudimos recuperar, me quitaron la venda y pude ver a la cara a mi otro tío.
Cielo Riveros: Desde cuando han estado planeando todo esto. Ah?
Titi: hace mucho tiempo sobrina, mucho tiempo.
Tio2: Cielo Riveros, porqué no quisiste volver más a mi casa?
Cielo Riveros: Esa conversación la vamos a tener tú y yo pero no será ahora, no me heches a perder éste momento.
Titi: Uffffffff compa, no sé que haya hecho, pero mejor déjelo así, no le vallan a cortar los servicios, recuerde que la idea es que éste día se repita durante muchas veces más. O no te gustaría Cielo Riveros?
Cielo Riveros: Por mí encantada.
Loli: Y a mí cuando me va a trocar
Reímos todos.
Titi: Aún tienes que esperar hija, recuerda que mi verga no ha terminado de entrarte toda.
Loli: Entonces métemela, que estas esperando, ya quiero gritar como Cielo Riveros.
Mas risas……….
Hola de nuevo, al fin mi prima Loli se salió con la suya, y yo pude disfrutar de un espectáculo esperado..
Mis días transcurrieron normales, bueno normales para mí era coger dos o tres veces al día, no dejar descansar mi chucha, tener mi mente entre el estudio y las vergas que me tragaría cuando saliera de la escuela, por suerte como estudiante soy muy buena y me queda fácil entender los temas y digerirlos, así como digiero la leche que todos los días me dan mis amantes.
Cuando llegaron las vacaciones de escuela obviamente mi ritmo sexual con mis hermanos aumento mucho, ya que estando todos los días en casa nos quedaba super fácil coger. Mi mamá no era ningún problema, ella se metía tanto en los que haceres de la casa, que para que no le entorpeciéramos nos decía que nos encerráramos en nuestra alcoba a jugar, y solo nos llamaba a la hora de comer.
A mis hermanos los adiestré para que me hicieran doble penetración, al mayor siempre le pedía que me la metiera por el culo, ya que la tenía más grande y el menor se comía mi concha. A veces buscaba los portacepillos de dientes, por si no los conocen son unos tubos con una punta redondeada que se asemeja mucho a un dildo, y le decían a mi hermanito menor que se lo pusiera sobre su penecito para sentir algo mas acorde a lo que mi vagina estaba ya acostumbrada.
Las tardes con mi tío si fueron decayendo, ya que a mi primita se la llevaba su mamá para donde la abuela y por ende ya no había excusa para venir a buscarme.
Pero como las necesidades hay que satisfacerlas, y más cuando se vuelven costumbre, mi tío se metió la mano al bolsillo y chantajea a mi primita, diciéndole que se quedara un día y que le regalaría una muñeca barbie que le había estado pidiendo. Además de que iba a poder tener dos vergas dentro de ella. Mi prima con luz en su rostro aceptó de manera encantada.
Titi: Cielo Riveros, alístate para mañana, te voy a buscar a la hora de costumbre para que nos ayudes con Loli, le vamos a hacer doble penetración y quiero que estes allí para que la calmes porque le va a doler.
Cielo Riveros: Claro tío, cuenta conmigo.
Me alisté desde bien temprano, lavando mi chucha y mi culo, me metía agua a presión para sacar todo tipo de sucio que tuviera allí acumulado y aunque la intención era penetrar a Loli, sabía que tendría oportunidad de algún poquito de verga, ya que mi otro tío siempre me llevaba ganas.
Llegada la hora encontré a Loli ya desnuda y a mi otro tío dándole lengua en su cosita, ya la tenía rojita lo que me hiso entender que estaban hace rato en eso, también le estaban metiendo los dedos por el culo, ya llevaba dos adentro y le iban a meter el tercero para ver si en realidad podría resistir sus embestidas.
Cielo Riveros: Hola tío, hola Loli, veo que ya iniciaron sin mí. – Todos rieron – Te ves nerviosa, no me digas que estas arrepentida.
Loli: Me va a doler, verdad?
Cielo Riveros: Si éste tipo lo sabe hacer, no, no te dolerá – refiriéndome al otro tío.
Mi tío Titi se acerco a su hija y le recostó la verga en su boca, mientras le sobaba sus téticas y con la otra mano acariciaba su cabeza. Enseguida mi tio2 se levantó con su verga bien parada y botando baba.
Tio2: Aún estas vestida, que esperas para unirte a la fiesta.
Cielo Riveros: Es que la fiesta no es para mí, la iniciada va a ser otra – lo dije mirtando a mi prima.
Tio2: Y acaso crees que voy a perderme la oportunidad de cogerte así sea un momento. Nooooooooo, ven para acá, que te la quiero meter por ese culo de nuevo.
Y como si no necesitara una segunda orden, de inmediato me quité toda la ropa, me acosta boca arriba en la cama al lado de mi prima, levanté mis piernas, escupí abundante en mi mano y la pase por mi culo.
Cielo Riveros: Todo tuyo, a ver qué sabes hacer solo.
Titi: Jajajajajaja, nojoda tú que hiciste que te la tiene montada.
Y con sonrisa en sus labios pero con su hombría herida, se acercó con la verga apuntando mi culo, se escupió su cabeza, se la restregó y sin mediar palabra me la metió tan fuerte que me hizo retroceder. Pero como también se jugar rudo, le puse las piernas en sus hombros, me agarre mis nalgas y abrí mucho mas mi culo y mirándole fijamente le dije
Cielo Riveros: Ahora sí, reviéntame el culo como me gusta.
Sus movimientos fuero feroces, sus embestidas profundas y mis ganas de culiar enormes, cada empujón suyo era seguido por un movimiento de mi rostro, mordiendo mi labio inferior, cerrando mis ojos y echando la cabeza haca atrás, demostrando gusto y satisfacción pero no dolor.
Titi: Epa compa, cójala suave, mire que la víctima hoy es otra, no se valla a deslechar y quede el plan por el suelo.
Dicho esto mi tío Tito monto a Loli en su verga haciéndole movimientos para que entrara lo mas que pudiera. Ella con cada empujón se miraba y tocaba para ver como iba el avance, el otro tío sacó su verga de mí no sin antes dar el último empujón y yo soltar una carcajada fuerte.
Tío2: Esa me las cobro.
Reí nuevamente, asentí con la cabeza y le dije.
Cielo Riveros: Ve a hacer lo que está planeado, ya tendremos tiempo de demostrar quién es quién.
De esa manera se dirigió al culo de mi primita, quien ya lo esperaba bastante ansiosa, su papá hizo lo mismo que me hicieron a mí, le untó bastante vaselina en el culo y con el dedo le echaron dentro, mi tío se puso una buena cantidad en su verga, y ya con la niña recostada en el pecho de su papi, y con la cola bien abierta y clavada por la vagina, procedieron a hacerle la doble penetración.
Lentamente le fueron enterrando la verga por el culo, mientras tenía la de su papá enterrada hasta poquito mas de la mitad por su vagina. Loli apretaba los labios y no dejaba de mirar para atrás.
Cielo Riveros: No te estreses, relájate y deja que entre suave, cuando sienta demasiado dolor avisa, pero si estas pendiente a cada momento no te va a entrar fácil ya que estas apretando el culo.
Titi: Escucha a tu prima hija, ella tiene bastante experiencia en esto.
Loli: Pero es que me duele Papi, me duele.
Titi: No te duele, es solo que estas asustada, ven mírame a mí, vamos a besarnos y olvídate de tu tío, solo disfruta este momento que tanto pedias.
Yo por mi parte comencé a acariciar a mi prima en su espalda, le decía cosas como “tranquila Loli, que una vez que entre solo será disfrute”, y su papá la besaba de manera apasionada, dándole lengua hasta lo mas profundo, lengua y verga porque noté que cada vez le entraba más en su chucha.
El otro tío seguía haciendo su trabajo, él por tener la verga más delgada le tocó hacer el trabajo sucio, fue el encargado de romper ese culito virgen, bueno o medio virgen, ya que su papá lo había intentado sin éxito.
Durante más de 15 minutos estuvieron así, metían, sacaban, avanzaban un poco y dejaban descansar a la niña. La tarea se completo ya que la idea era hacerle su primera doble penetración. Pero no lograron enterrarle las vergas hasta el fondo.
Cuando vieron que la niña no soportaba más, decidieron que no la forzarían sino que disfrutarían de ella y ella disfrutaría de dos vergas al tiempo. Iniciaron el mete y saca con el mismo ritmo que lo hicieron conmigo, primero muy suave y después apretaron el ritmo, claro, sin clavarla toda porque sería el fin de todo.
No puedo negar que goce mucho ese día al ver cómo se cogían a otro niña delante de mis ojos, no resistí y me llevé los dedos a mis orificios masturbándome al ritmo de los movimientos de mis tíos y llegando a dos orgasmos antes que ellos lograran terminar.
Loli por su parte disfrutaba del momento, claro, no al 100% ya que era su iniciación y eso siempre es doloroso, pero si logro sentir un poco de satisfacción y orgullo porque al fin pudo tener dos vergas adentro.
Todo terminó con abundante leche saliendo de los agujeros de mi prima, mis tíos satisfechos sudando y chocando sus manos y yo, tendida en la cama con dos orgasmos, toda sudada y pasando la lengua por los vergas de mis tíos para no desperdiciar lo mas anhelado del sexo, el semen.
Titi: Te gustó mami?
Loli: Siiiiii, pero………
Tio2: Pero qué?, no hice un buen trabajo?
Loli: No grité como Cielo Riveros – carita triste –
Y todos reímos a carcajadas
De nuevo yo, mi conversación con mi tio2 y el disfrute de una noche de orgia con él y mis dos primas, inolvidable..
Mi desarrollo cuerpo empezó a mostrar un desarrollo abrupto que para mi madre y mis tías causo no solo alegría sino un poco de desconcierto, pase de ser la chica alta, delgada, de poco seno y cola, a la chica alta, gruesa mas no gorda, de cintura pequeña, piernas macizas y cola levantada, nada extravagante pero muy vistosa a los demás, todo debido a mi constante sexo. Mi madre en una ocasión le comentó a mi padre que si había notado ese cambio en mí. Su conversación fue algo así.
Mamá: Has notado que Cielo Riveros se ha pegado una engruesada de la noche a la mañana, tiene las piernas super gruesas, le salió bastante cola y tiene las caderas anchas. Que dios me perdone, perece mujer que ya estuviera teniendo sexo, porque así me pasó a mí.
Papá: Cómo así, asea que cuando nos juntamos ya tu estabas culiada, porque yo te conocí así como lo dices, gruesa y bastante formada.
Mamá: Oye hablo en serio, cuando tu me conociste yo tenia 17 años, ella apenas va a cumplir 12 y mira como está.
Papá: Te salvaste tienes razón tu eras mayor. Si he visto como se a formado, pero eso es normal o no? – Si supiera ella que tenía toda la razón y estaba hablando con el causante de ese desarrollo –
Mamá: Pero a su edad es muy raro ese cambio tan repentino. Hasta tus hermanas se dieron cuenta de eso.
Papá: Bueno, tendrías que averiguarlo tú, yo no puedo desnudarla y abrirle las piernas para averiguar eso.
Mamá: Hay no seas estúpido, que tampoco haré eso.
Ese comentario de mi papá fue muy arriesgado, por suerte las últimas palabras de mi mamá me dieron alivio. Si tan solo mi padre supiera que no solo él disfruta de éste cuerpo, es más, él ya está bastante alejado del primer puesto que por tanto tiempo tenía, ya que por su trabajo le ha tocado viajar mucho ausentándose de casa por semanas y hasta meses completos. Pero ese es un secreto que pienso llevarme con migo.
Pasado el tiempo y el disfrute del sexo todas las tardes con mis tíos y primita, al fin mi tío2 se arriesgó a invitarme de nuevo a su casa, quería que hiciéramos una orgía con sus dos niñas. Quería que ellas aprendieran las cosas que yo sabía, y que las convenciera de dejarse hacer doble penetración, ya que él se los había propuesto pero ellas no querían porque le daba pena con su tío Titi.
Cielo Riveros: Nojoda, eso si esta difícil, a mí también me dará pena decirles a ellas que tu y mi tío me lo meten al mismo tiempo, pero bueno, también quiero verlas llevar verga así que ya se nos ocurrirá algo.
Tio2: Sabía que podía contar contigo. Entonces qué, te espero este fin de semana?
Cielo Riveros: Nojoda, al menos ven a buscarme, jueputa mi tío Titi no se pone a esperar que valla, él si demuestra interés por culiar.
Tío2: Bueno, le diré a Pau para que te llame y le digas a tu mamá, así no habrá sospechas, ya que sería la primera vez que te valla a buscar.
Cielo Riveros: En eso tienes razón, pero mejor yo le escribo, oíste.
Tío2: Ok, ok así quedamos entonces.
Llegado el fin de semana le dije a mi mamá que quería irme para donde mi prima Pau.
Mamá: Esta bien, pero tienes que esperar que tu papá llegue.
Cielo Riveros: Deja y le pregunto a Pau si su papá me puede venir a buscar.
Mamá: mmmmmm también, también.
Y como ya todo estaba hablado, le escribí a mi prima diciéndole que iba para su casa y que su papá me venía a buscar, y enseguida le escribí a mi tio2 que estaba esperando desde bien temprano que le avisara.
No pasaron 10 minutos y ya estaba en la puerta de mi casa pitando.
Mamá: Hola, estabas bien cerquita, la niña apenas se está bañando.
Tio2: Ah bueno, me da tiempo de hacer otra visita y regreso, es que me toco esta ruta hoy.
Cuando salí del baño encontré un mensaje de mi tio2.
Tio2: Estoy que me deslecho, apúrate que las pelas están solas, tu tía se fue para un retiro.
Cielo Riveros: Tú pareces idiota, la arrechera te pone bruto, no me vuelvas a escribir y menos diciéndome eso, si mi mamá lee este mensaje me jode, y de paso mi papá te mata. – y procedí a borrar los mensajes.
Pasados unos 35 minutos regreso, salí me monte en la moto y arrancamos.
Al llegar a la casa mis primas estaban jugando en el cuarto de él, estaban con la sola panty, mas tarde me confesaron que su papá las había llamado para decirles que yo iba para allá y que íbamos a culiar con migo como lo hacían todas las noches.
Pau: Cielo Riveros ya me hacías falta, por qué no habías vuelto?
Cielo Riveros: Ajá, flojera quizás. – Y enseguida se me prendió el bombillo y tiré la primera pedrada – Lo que pasa Pau es que mi tío Titi me va a buscar todas las tardes para que juegue con Loli, y entonces aja, me quedo allá.
Mi tio2 me lanzo una mirada de alegría y aprobación, sus ojos se iluminaron.
Tío2: Bueno, vamos a jugar que estoy que me reviento. – Luego se acerca a mi oído y me dice – Buena jugada.
Pau: Papi, pero vamos a jugar de verdad, o a jugar así – y le hizo la señal de penetración con los dedos a su papá –
Tío2: Si hija, venimos es a culiar.
Mi prima puso cara de susto por su atrevimiento en decir tal cosa delante de mí. A lo que yo le di un beso en los labios, la tomé de la mano y nos dirigimos a la habitación principal con la firme intención de comenzar la orgía.
Mi tio2 alzo en brazos a la niña mas pequeña y le iba quitando su panty y besando sus labios y chupando las téticas, téticas inexistentes pero téticas al fin y al cabo.
Yo por mi parte me iba desnudando como en las películas, me sentí imponente con esa actitud mía, tomé a mi prima Pau le quite su panty, la acosté en el borde de la cama, le abrí su vagina que ya se veía tan usada como la mía, y comencé a darle una lamida desde el inicio de si vagina por encima del clítoris, hasta la entrada de su ano, haciendo presión en cada punto de su vagina y culo cada vez que pasaba por allí para meter poco a poco mi lengua.
Por su parte mi tio2 hacía lo propia con la nenita, quien aparte de estar recibiendo su buena lengüeteada, le acariciaba la verga a su papá. Ella se veía mas experimentada que Pau, después me enteré de que era la más usada por mi tio2 ya que nunca le decía que no al momento de una buena culiada.
Mientras chupaba a mi prima Pau, me metía los dedos en mu chucha, luego se los mostraba a ella como los tenía lleno de mis jugos y se los daba a probar, con tanta calentura no me tocó mas que levantarme y hacer un hermoso 69 con ella. En eso si que me ganaba, mi experiencia con vaginas era reciente, ella ya llevaba años chupando a su hermanita y recibiendo chupones de ella también. Con sus manos en mi cabeza, me indicaba en dónde tenía que chupar para sentir el máximo placer, en tanto que a ella yo no necesitaba decirle nada, siempre daba en el punto exacto.
Así nos mantuvimos un buen rato hasta que siento las manos de mi tío2 en mis nalgas, e inmediatamente hago como gata en celos, levantando mi cola a la espera de recibir su premio, él se rueda hacia donde esta mi culo y con la niña pegada a su verga me empieza a sobar, a meter sus dedos en mi cola y a besar a Pau y a mi vagina y cola al tiempo.
Estuve a punto de tener un orgasmo pero no quería ser la única, así que con esfuerzo me aguante hasta que sentí que él se levantó poniéndose de rodillas, se dirigió a mi y luego de escupir en mi culo me mandó su verga sedienta. La sentí entrar hasta mi estómago, lancé un gemido de dolor y placer que le provocó a mi prima pequeña unas risas y a mi prima Pau un orgasmo.
Mi tío2 se dio a la tarea de hacerme gemir con sus fuertes embestidas.
Tío2: Ahora sí vamos a ver quién es quién como dijiste aquella vez.
Cielo Riveros: Tú culea y no alardees tanto, que esto apenas empieza, y yo soy de aguante.
Mi prima Pau estaba en primera fila viendo como la verga de su padre entraba en mi culo y recibiendo todos los jugos que salían de esa clavada tan rica. Mi primita se fue para donde estaba mi cara y como toda una experta, se arrodillo delante de la cama, entre las piernas de su hermana y comenzó a meterle lengua en el culo, me miraba de manera inocente pero lujuriosa y se me acercaba para besar y chupar mi lengua.
Esta niña tan chica ya era toda una experta en el arte del lesbianismo, y me agradó mucho la forma como se comportaba.
Luego de mucho tiempo de sexo, luego de recibir la descarga de leche en mi culo y de qué mis primas se ensañaran con mi cola para chupar y sacar esa leche que les pertenecía por derecho propio, nos dimos a un descanso merecido, había pasado cerca de una hora y quedamos todos exhaustos.
Cuando al fin pude hablar, lance la segunda piedra.
Cielo Riveros: Ustedes son todas unas expertas, parece que hacen esto muy seguido.
Pau: La verdad que sí, ya es costumbre en nosotros culiar antes de dormir.
Cielo Riveros: Ah sí, entonces lo único que les falta es tener otra verga, díganle a su papá que le compre un de esas de plástico.
Tio2: O mejor aún, buscar a alguien que quiera culiarselas también.
Cielo Riveros: Waoooooo eso sería genial, si lo consiguen me invitan, no me vallan a dejar por fuera.
Pau: Tú eres capaz de dejarte culiar por dos hombres al mismo tiempo.
Prima menor: Yo sí Pau, yao también quiero.
Cielo Riveros: Pues sí, eso debe ser muy rico. Yo sí me dejaría.
Pau: Mmmm, y quien podría ser?
Cielo Riveros: No sé, que tu papá busque, igual él es el hombre, que solucione.
Tío2: Ah ok, ok me vana dejar a mí la responsabilidad. Listo asumo esa responsabilidad, pero eso sí, cuando lo consiga no quiero que vallan a salir corriendo o a decir que no les gusta o que tienen pena.
Cielo Riveros: Ah tío, entonces busca a alguien que nosotras ya conozcamos.
Tío2: No se diga más, voy a empezar a ver candidatos.
El resto de la tarde nos la pasmos jugando desnudas en la alcoba, cuando alguno tenía ganas de algo solo se le acercaba a otro y le empezaba a chupar mientras los demás seguían con lo que estuvieran haciendo.
Mi tío2 so cogió a la niña pequeña y a mi prima Pau solo le alcanzó a dar dedo, ya la verga no le dio para más.
Cielo Riveros: Si ven, necesitamos otro, este viejito no nos aguanta a todas juntas.
Pau: Hay si papi, tienes que buscar quien te ayude.
Continuo con mis vivencias, una tarde de orgia con mis primos..
Era costumbre de mis tías dejar a todos mis primos en casa de mis abuelos mientras sus padres trabajaban, como recordaran les conté que somos 10 nietos, 5 mujeres y 5 hombres. En una cierta ocasión para un fin de semana la mamá de Pau le pidió a mi abuela que mandara a mis primos a su casa para que acompañaran a sus hijas, ya que la menor había tenido fiebre la noche anterior. Cuando yo llego donde mis abuelos me entero de la situación, y como aun estaba otra prima en la casa de los abuelos, acordamos irnos para donde estaban los demás, es así como nos reunimos Pau, su hermanita, y mis otros tres primos, Andre, Jan y Jes, éstos últimos son hermanos hijos de mi otra tía. Yo tenía unos 10 años al igual que Pau, la hermanita de Pau tendría unos 5, en tanto que Jes, Jan y Andre tenían 14, 13 y 12 respectivamente.
Cuando Andre y yo llegamos la casa estaba cerrada de puertas y ventanas, pero se podía ver hacia adentro si uno se pegaba al vidrio y hacia sombra con las manos. Mi prima tocó el timbre y vi que abrieron la puerta del cuarto de mi tía alcanzando a ver a mi primita menor desnuda poniéndose su panty, Pau estaba en ropa interior al igual que Jes y Jan.
Quien se acercó para abrir la puerta fue Jan que venía poniéndose su pantaloneta, y al ver quienes éramos grito.
Jan: Tranquilos son Andre y Cielo Riveros. Qué hacen por acá?
Andre: Nos aburrimos en la casa y quisimos venirnos a jugar acá.
Jan: Mmmmmmm, ósea que se acabó el juego – Lo dijo en tono de mal gusto –
Pau: No Jan tranquilo, Cielo Riveros también sabe jugar.
Andre: Cómo así? Y porque no nos habías dicho nada.
Pau: Aja, se me había olvidado.
Jan: Pela de mierda, con las ganas que le tengo a Cielo Riveros y tu lo sabes y te vas a quedar callada.
Cielo Riveros: Bueno y de que juego es que están hablando.
Andre: Seguro que sabe?
Pau: Si, ella sabe. Cielo Riveros hablan del juego que hacemos las tres cuando te quedas a dormir acá.
Cielo Riveros: Ahhh, eso, y ustedes todos juegan?
Jan: a que si sabes, bueno vamos a culiar que ya le iba a echar la leche a Nat (la hermanita de Pau).
Y así Jan me tomó del brazo y prácticamente me arrastro hacia el cuarto mientras atrás quedaban Andre y Pau cerrando la puerta. Cuando entramos al cuarto encontré a Nat chupándole la verga a Jes, ambos totalmente desnudos.
Jan: Malparido me quitaste a la niña.
Jes: Por sapo, nadie te mando a que te fueras.
Cielo Riveros: Caramba Nat tu no pierdes el tiempo, quieres acabar con la familia.
En ese momento Pau me jala del brazo y me dice al oído
Pau: Ellos no saben lo de mi papá
Jes: Y cuál es la secreteadera que tienen allí, vamos a quitarse la ropa todos.
En ese momento me di cuenta de que tanto Jan como Jes son poseedores de tremendas vergas para su edad. Y ellos que bien lo dijeron se quedaron encantados con mi cuerpo. Jan no perdió el tiempo y se vino hacía mí a besarme y a chuparme las tetas y la chucha, Jes continuaba con la niña aferrada a su polla y Andre y Pau estaban en un 69 lésbico. La habitación estaba plagada de sexo.
Jan no paraba de chuparme la chucha y con un dedo me puyaba el culo buscando la forma de metérmelo.
Andre: Pau, y Cielo Riveros que tanto sabe hacer.
Pau: Chupar chucha, culo, tetas y meter el dedo.
Andre: Osea que aún no está rota?
Cielo Riveros: Si, porque me meto el portacepillos de diente o el cepillo de peinarme, no creas, que bastante he aprendido viendo porno.
Jan: Osea que ya se la puedo meter y no va a llorar. Jueputa y yo aquí perdiendo el tiempo chupándosela.
Y dicho esto, me levantó las pierna de manera brusca que hizo que cayera de espaldas a la cama, se sobó su verga y me la metió hasta el fondo haciéndome pegar un pequeño grito ya que no había alcanzado a lubricar por adentro.
Jes: Suave marica que la vas a matar.
Jan: Que se aguante, así como se aguanta los cepillos.
Cielo Riveros: Déjalo que a mi me gusta que me lo metan rico.
Andre: Te lo metan?, cómo así, quién?
Cielo Riveros: Osea, yo también me meto el cepillo así.
En ese momento por poco y cometo una imprudencia.
Cielo Riveros: Y ustedes desde cuando están haciendo esto?
Andre: Uffff ya llevamos como tres meses.
Cielo Riveros: que mala familia tengo, me han dejado por fuera todo éste tiempo.
Jes tomó a Nat y le dijo que se sentará en su polla, a lo que la niña obedeció de inmediato metiéndose la verga con una suavidad como lo hace una puta experimentada. Inició un sube y baja que a todos nos dejaba boquiabierto por la forma tan normal como movía sus caderas y se enterraba cada ves más la polla del primo.
Cielo Riveros: Caramba Nat, se ve que has aprendido muy bien. Eso como que lo hacen todos los días.
Nat: Si yo lo hago todos los días.
Andre: Cómo? con quién?
Pau: Es que nosotras al igual que Cielo Riveros también usamos cosas para meternos en la chucha.
Y Pau miró a Nat diciéndole “CALLATE” con la mirada. Y no era para menos, casi les dice a todos que su papá se las culiaba por las noches.
Viendo la escena, y acordándome de lo que había hablado con mi Tio2 de incitar a las niñas a una doble penetración, aproveché el momento.
Cielo Riveros: Oye Jan, desde aquí se le ve el culito bien abierto a Nat, porqué no aprovechas y se la metes por el culo.
Pau: Qué te pasa, ella es una niña aún.
Cielo Riveros: Pero si no lo intentan no sabremos si aguanta. Quien de ustedes lo ha hecho. Yo mientras me baño me meto el portacepillos mío y de mi papá al mismo tiempo por los dos huecos.
Jes: Andre ya aguanta, nosotros si lo hacemos casi todas las noches.
Cielo Riveros: Bueno solo faltan Pau y Nat, pero si quieren yo voy primero.
Nat: No yo quiero primero, yo primero porfis.
Y así fue como Jan me sacó la verga y se fue para donde estaban Jes y Nat, le chupo y escupió el culo a Nat, se escupió su verga y se la comenzó a meter suavecito. Todos nos concentramos en lo que estaba pasando, Pau y Andre dejaron a un lado el 69 y se vinieron a ver de cerca la doble penetración de la prima menor.
Y Nat nos volvió a sorprender, soportando las dos vergas al mismo tiempo, y hasta el fondo, sin hacer un solo gemido, solo apretaba los ojos y hacia muecas con los labios pero nunca dijo nada para que la dejaran de penetrar. Tan pronto los dos estuvieron dentro de ella comenzaron a culiar y ella mostró una cara de felicidad por lo que había logrado. Se escuchaban golpes de chacara contra la pelvis y las nalgas de la prima menor, y algunos suspiros de los tres amantes en acción.
Cielo Riveros: Bueno pau, que decías. Ahora vas tú. No te puedes dejar ganar de la niña.
Andre: Si Pau no vallas a ser cobarde.
Pau: Nojoda, rico si se ve.
Cielo Riveros: Y lo es, si o no Andre.
Andre: Uffffff es mas delicioso que comerse una carne al carbon.
Y así continuamos la tarde, las pollas de nuestros primos saltaban de huecos en huecos de sus tres primas en un goce infinito de sexo.
Cuando ya no pudieron aguantar mas la leche, nos pusieron en el piso arrodilladas cuales putas de películas porno y nos lanzaron sus chorros de leche caliente en nuestros rostros.
Como locas nos lamiamos las caras unas a otras para no perder ese néctar tan delicioso y luego nos turnamos para limpiar la verga de los chicos.
Pau: Mierda, ya es tarde, no demora mi mamá.
Y todos nos paramos y fuimos al mismo tiempo a bañarnos.
Cielo Riveros: Oye Pau, le voy a contar a tu papá lo que hicimos, no te gustaría que él consiga un amigo con una gran verga que nos culeen así como lo hicieron los pelaos, pero con un par de vergas grades.
Pau: No Cielo Riveros, ni se te ocurra, que tal que nos regañe.
Cielo Riveros: que va, lo mucho que puede pasar es que también se quiera culiar a Andre.
Y así fue, por la noche me puse a chatear con mi Tío2.
Cielo Riveros: Tio2, si supieras que pasó esta mañana mientras ustedes estaban trabajando.
Tío2: Cuenta, cuenta.
Cielo Riveros: Te vas a privar de la dicha.
Tío2: Ajá cuenta que me tienes desesperado.
Cielo Riveros: Prívate!, tus hijas, las dos, hoy probaron dos vergas al mismo tiempo.
Tio2: Qué? Cómo fue eso? Explícame porfa.
Cielo Riveros: Hoy tuvimos una mañana de sexo en tu casa, con mis primos de allá arriba, los seis, y se me ocurrió pedirles que nos culiaran por los dos huecos. Adivina quien pidió ser la primera.
Tio2: Nat, eso no es difícil. Pero no lo puedo creer, nojodaaaaaaaa, y desde cuando están culiando esos, yo no sabía nada.
Cielo Riveros: Siii nat fue la primera y bien que aguantó, Pau estaba más tímida pero al final aceptó y gozo de lo lindo. Ni yo sabía, me enteré apenas hoy que llegué y encontré semejante espectáculo.
Tio2: Jueputaaaaaaaa, me hubiera gustado ver eso. Tú sabes cuanto deseo ver a mis hijas atravesadas por dos vergas.
Cielo Riveros: Bueno, allí le dejé la inquietud a Pau, le dije que te iba a comentar, pero me dijo que no porque después te fueras a enojar, le dije que estuviera tranquila que de seguro te iba a gustar, y hasta te ibas a querer culiar a Andre.
Tio2: Nojoda sí, ese culote que se manda Andre si que provoca romperlo a vergazos.
Cielo Riveros: Jajajajaja, bueno ya roto está, pero habla con Pau, ya hice mi parte, solo no me vallas a dejar por fuera cuando lo vallan a hacer.
Tio2: Cómo crees, si tu eres la estrella principal. Sabes que ese culo tuyo me tiene loco.
Cielo Riveros: Bueno, así quedamos, ve que me avises. Me voy a dormir, chao.
Tio2: Chao precisa, y gracias. Ahora que les valla a dar su ración de leche les meto conversa para comenzar a cuadrar esa culiada.
Continuo con mis vivencias, una noche con una amiga pude ver como su padrastro se la cogía y su madre lo sabía..
En mi época de niñez el barrio donde crecí estaba plagado de niños, éramos más de 20 niños en la misma cuadra, como que los padres se pusieron de acuerdo para procrear, había niños desde los dos o tres añitos, hasta los 15 que eran las niñas más grande de la cuadra.
Frente a mi casa vivía Mary una niña de mi edad, recuerdo que para ese entonces teníamos 8 añitos y en ocasiones mis padres me dejaban ir a quedarme a dormir en su casa. Pasábamos gran parte de la noche jugando y viendo videos, TIKTOK apenas estaba surgiendo como red social, y Mary ya tenía su cuenta abierta y hablaba con muchos “niños” de su edad quienes les mostraban fotos de las vergas de sus padres o hermanos, más tarde nos dimos cuenta de que eran cuentas falsas, como dije apenas estaba surgiendo la App y por ende no se conocía el nivel de depravación que se maneja por ese medio.
Los supuestos niños le decían que sacaban del celular de sus padres videos de ellos cogiendo y se los mostraban a mi amiga, para luego decirle que si querían ver más que ella tenía que mandar fotos desnuda, ella me mostraba esos videos y nos reíamos viendo como cogían, y fue así como en una de tantas conversaciones alguien le propuso a Mary que buscara a otra amiga para que hicieran un video lésbico. Como se imaginaran me dijo y entre chistes decidimos hacerlo.
Mary: Bueno Cielo Riveros, pídele permiso a tú mamá y esta noche nos besamos y les mostramos la chuchita y el culo jajajajajajajaj que ellos quieren ver.
Cielo Riveros: Si si, ahora más tarde le digo y lo hacemos jajajajajjaajajja.
Así fue como ya por la noche, cuando sus padres se fueron a acostar y nos mandaron a dormir, Mary comenzó a responder los chats que tenía en la bandeja, no recuerdo la cantidad, pero si eran muchos, y cada vez le llegaban chats nuevos de “niños” con fotos o video haciéndose la paja y botando leche. Al final ella buscó el contacto que le había dicho que quería verla con otra niña y empezaron a charlar, el “niño” le mandaba fotos y le suplicaba que le mandara algo de ella, fue así como nos tomamos una foto besándonos en la boca y se la envió. Se quiso morir de la emoción el supuesto niño, nos respondió la foto mostrando como tenía la verga parada, y nosotras no nos dimos cuenta de que no era la verga de ningún niño, sino que seguimos riendo y mandando fotos de las téticas, de la parte de la vagina pero con la panty puesta, igual que de la parte de atrás. El tipo cada vez quería ver más y nosotras disfrutábamos de lo que estábamos haciendo.
De esa manera estuvimos un buen rato, hasta que escuchamos que la mamá nos habló desde su cuarto, mandándonos a dormir. Así que yo me acomode en la cama donde dormía cuando me iba para su casa, y Mary se quedó hablando con los tipos que le escribían, y le seguía enviando fotos de ella pero esta vez lo hacia mostrando su chucha desnuda y se abría de piernas para que a vieran mejor. Yo la veía, me reía pero no me movía de mi cama. Luego de un rato en que el sueño me estaba venciendo, siento que abren la puerta del cuarto y de reojo veo que era el padrastro (Pedro). Se acerco a ella y le dijo que le mostrará el celular. Yo me asusté porque me imaginé que la iba a regañar porque sin duda vería las fotos y los chats que seguían sonado cada que entraba uno nuevo.
Pedro: Mary, te he dicho muchas veces que no estes mandando tantas fotos tuyas, vas a terminar en esas páginas porno, mira que te lo he advertido mucho.
Mary: Si papi pero es que me las piden y es la única forma de que me manden los videos de ellos culiando.
Pedro: Ah, así que quieres ver verga, pero si eso es lo que quieres aquí tienes la mía, sabes que está a tu alcance en cualquier momento.
Su conversación era en voz baja, pero se entendía todo lo que decían.
Pedro: Ven, déjame entrar en la cama y verás una verga de cerquita, y podrás hacer lo que quieras con ella.
Mary: Pero arropados porque Cielo Riveros esta dormida.
Pedro: Lástima que esté dormida. Oh Mary, será que Cielo Riveros se deja culiar?
Mary: No sé, tendría que preguntarle.
Pedro: Hazlo, pero con cuidado, no le valla a decir algo a sus papas.
Mientras tenían esa conversación él se metía debajo de las cobijas y se quitaba su pijama dejándola en el piso al lado de la cama, y Mary se sacaba su pijama también quedando totalmente desnuda. Con los reflejos de la luna al meterse por la ventana, pude ver como Mary, metida en las sábanas, comenzaba una mamada de verga que la delatada por el movimiento de su cabeza, el padrastro en ocasiones miraba hacia donde yo estaba para confirmar si estaba dormida, y al no ver seña alguna de que estuviera despierta, regresaba a acariciar la cabeza de su niña acompañándola en ese movimiento inconfundible de la mamada. Luego de un rato se convenció de que yo estaba dormida, así que quitó la sabana de encima de su hija y allí pude ver como Mary se metía toda su verga dentro de su boquita. Pedro no era un tipo alto, así que su verga no era la gran cosa en tamaño, pero si que tenia un grosor de respeto, hasta el momento era la verga mas gruesa que había podido ver, lastima que no la podía tocar, en ese momento no me sentía segura así que decidí hacerme la dormida y dejar pasar esa oportunidad hasta sentirme segura.
Por su parte Mary, quien al sentirse al descubierto trató de cobijarse de nuevo, se veía que su experiencia en mamar semejante verga era bastante, lo sacaba y volvía a meter hasta su fondo. Al tener tiempo en esa posición ya Pedro había llevado una de sus manos al culo de Mary y le tenía ya un dedo dentro.
Sin tanto preámbulo, Mary se levantó, me miró, se convenció que estaba dormida y se sentó sobre la verga de su padrastro, la cual fue desapareciendo dentro de ella de manera rápida. Ella solo hizo una mueca en lo que esa verga se apoderaba de su interior, para después cuando ya estaba clavada del todo, iniciar el típico movimiento de sube y baja. Por mi parte sentía una gran humedad en mi ropa interior, pero no me atrevía a hacer ningún movimiento brusco que me delatará, esa noche decidí solo mirar.
Así estuvieron unos pocos minutos, luego él la toma del brazo y le indica que se gire, a lo que ella obedece, y sin sacarse la verga, da un giro sobre si chucha, quedando con la cara hacia los pies de su padrastro y su culo hacia su cara. Él le apoya su mano en la espalda y le hace presión para que ella se acueste sobre sus pies dejando su culo bien abierto, él aprovecha el momento y empieza a meter dos de sus dedos en el culo de mi amiga, y ella los recibe sin poner ningún tipo de resistencia.
Pasado mucho tiempo, en los que ellos solo gemían de manera leve, sentí que abrieron la puerta y de inmediato supe quien era. Y esperando se formara el mierdero apreté los labios preparándome para escuchar el primer grito. Pero no fue así.
Mamá: Oigan, que creen que están haciendo? No ven quien está aquí?
Pedro: Ni se ha movido en todo el rato, así que no te preocupes.
Y como si fuera la escena mas normal, entró, se sentó al lado de los pieceros de la cama de su hija, y comenzó a arreglarle el cabello y a sonreírle.
Mamá: De verdad que ustedes no pierden el tiempo.
Mary: Culpa de mi papá, yo estaba bien con mis chats de TIKTOK y él me comenzó a tocar.
Mamá: No te demores mucho, y no se te valla a ocurrir siquiera tocar a Cielo Riveros.
Le dijo a su esposo y abandonó la habitación. Ellos siguieron su tarea de culiar hasta que por fin llegó el momento de los temblores, los gemidos altos y los chorros de leche que estaba recibiendo mi amiga, lo que deduje por su forma de arquearse con cada bombeada final que su padrastro le daba.
Terminado el acto, ella se salió de la verga y vi cómo le corría leche en abundancia por su pierna, leche que el recogía con su dedo y se lo restregaba en cualquier parte del cuerpo a su hija.
Cuando se levantó, se despidió de ella, le dijo que se durmiera enseguida, y como en son de broma me paso su dedo lleno de leche por la boca, algo que yo no me esperaba, provocando que reaccionara y sacudiendo un poco la cabeza. Mary le dijo que se quedara quieto y que se fuera enseguida. Lo que él obedeció no sin antes repetir la acción y soltar una sonrisa.
Mary: Ay Cielo Riveros, ojala y estuvieras despierta para que vieras como me divierto con mi papá.
Mas de mis vivencias, mi tio2 consiguió que mis primas aceptaran tener su doble penetración..
Al fin se le cumplió el deseo a mi tio2, al fin pudo convencer a mis primas de que su tío Titi fuera el otro hombre que lo ayudaría para que ellas disfrutaran de una doble penetración.
Pau: Oye Cielo Riveros, si supieras lo que mi papá me acaba de decir.
Cielo Riveros: Qué pasó ahora?
Pau: Prívate!, me acaba de decir que si queremos que él y mi tío Titi nos metan las vergas al mismo tiempo.
Cielo Riveros: Qué!, y de dónde mierda salió esa idea – le dije haciéndome la inocente jajajajaaj-
Pau: Hay yo no sé, pero no se que decirle, me dijo que lo pensara.
Cielo Riveros: Con mi tío Titi…..nojoda, será???. No sé qué decirte Pau. Aunque si tu papá me coge mí, no veo porque no me dejaría coger también de mi tío Titi.
Pau: Ósea, tú te dejarías?
Cielo Riveros: Te repito, si me lo hace tu papá, que mas da que también me lo hiciera mi tío Titi.
Pau: Hay Cielo Riveros, no puedo creer que tú me éstes diciendo esto.
Cielo Riveros: Pero qué, si fuiste tú quien me llamo a decirme esto. No veo porqué tengas que alarmarte.
Pau: Dime la verdad. Tu has cogido con mi tío?
Cielo Riveros: Mmmmmmm
Pau: Hay por Dios Cielo Riveros. Has cogido con mi tío y no me habías dicho.
Cielo Riveros: Yo no he dicho que lo haya hecho.
Pau: Pero ese silencio lo dice todo. Si has cogido. Y me imagino que también has cogido al mismo tiempo con él y con mi papá.
Cielo Riveros: Repito, yo no he dicho nada.
Pau: Tienes que contarme malparida. Tienes que decirme que se siente. Ahora en la tarde voy para tu casa. Así que espérame.
Cielo Riveros: Jajajajaajaja, ok ven cuando quieras, pero te repito, no he dicho nada.
Pau: Eres una zorra jajajajajajajaj, con razón a mi papá le gusta tanto que vengas acá.
Cielo Riveros: Ok como digas.
Así conversamos un rato y efectivamente por la tarde se apareció en mi casa, hablamos un poco en la sala y luego sacamos la excusa para irnos al cuarto, en donde le confesé que sí lo había hecho con los dos, cómo lo habíamos hecho y dónde lo habíamos hecho.
Inmediatamente le dije que le escribiera a su papá para que se pusieran de acuerdo, a ver qué día hacíamos el trio con mi tío. Aunque terminó siendo toda una orgía.
La semana pasó sin mayores cambios, mis culiadas con mi papá cesaron bastante, ya que como les había comentado él estaba trabajando por fuera de la ciudad y cuando regresaba la leche se la dedicaba a mi madre, y a mí me hacia la visita de las noche pero solo se limitaba a chuparme y besarme. Así que me tocaba satisfacerme con mis hermanos quienes al igual que mi papá bajaron su ritmo, creo que la monotonía nos estaba aburriendo.
Con mis tíos la cosa si estaba que ardía. Ya que un día nos reunimos en casa de mi tío Titi como siempre, y conversamos de la orgía que se avecinaba, y allí mismo acordamos el día para la acción, y cómo era de esperarse me dieron mi verguera para celebrar jajajajajaja.
El día acordado al fin llegó, me puse mi pinta de puta, una licra bien pegada al cuerpo que se me tragaba entre las rajas de mi culo y mi concha y una blusa bien cortica, que prácticamente parecía un top, aunque para no levantar sospechas ante mi madre me coloque una falda semicorta encima de la licra, la cual salió volando tan pronto entré a la casa de mi tío Titi.
Pau, su hermanita y mi tio2 ya venían en camino, así que mi tío Titi y yo nos dispusimos a preparar la cama y poner agua y dulces en la mesita de noche, ya que la idea era no pararnos de esa cama hasta que todas quedáramos con los huecos llenos de leche.
Cuando mis primas llegan ya encuentran todo listo, claro que para ellas, y en especial para Pau quien es la mayor la cosa es misteriosa, la niña si toma las cosas mas a juego y nada la sorprende.
Tío2: Bueno mis amores, a los que vinimos.
No obstante la cara de Pau era de miedo y pena a la vez. Así que como buena anfitriona empecé a desvestirme para darles confianza.
Cielo Riveros: Vamos prima, sin miedo que aquí todos sabemos lo que va a pasar.
Titi: Así es sobrina, ya se lo que hacen entre ustedes y ustedes también saben lo que hacemos aquí en casa, así que sin pena empecemos que no tenemos todo el día.
Y de esa forma mi tío Titi se abalanza sobre mí y empieza a chuparme por todas partes, metiendo manos, dedos, lengua y todo lo que más puede. Mi tio2 como buen padre toma a Pau entre sus brazos, le da un beso largo y la invita a unirse a la fiesta, en tanto que la niña ya estaba desnudándose por sí misma.
Sin mucho preámbulo, ya que la idea era hacer doble penetración a ellas, mis tíos me ponen en posición quedando yo ensartada por la vagina en la verga de mi tío Titi y con le verga de mi tio2 metida hasta el fondo por el culo, y con un ritmo de gemidos, sacudidas, jaladas de pelo y chupadas por todas partes, les indicamos a las niñas que la orgía había empezado y que su turno se aproximaba. En esa primera ocasión no me dieron mi ración de leche, porque como dije la idea era iniciarlas a ellas en la doble penetración.
Luego de unos 4 o 5 minutos, ambos me dejan a un lado y mirando a mis primas les indican de se vallan acercando donde estábamos nosotros ya sudados y oliendo a sexo.
Titi se apodera de la más chica, abrazándola y lamiendo sus téticas inexistentes, mientras que sus dedos se apoderan de la rajita de su vagina que ya empezaba a humedecerse por lo que acababa de ver. La niña siempre propuesta sin reparos abrió sus piernecitas dando paso al dedo grande de su tío para que entrara en su rajita, mientras que buscaba afanosa su verga para tocarla, y lo hacía de una manera ansiosa, como si nunca hubiera hecho eso antes, me imagino que fue porque entre otras cosas, él es su tío favorito y estaba encantada de que la tuviera así desnuda entre sus brazos. Luego de un juego de caricias y besos, mi tío Tito comienza a penetrar por la conchita a su pequeña sobrina con delicadeza ya que su verga es mucho mas gruesa que la de su padre, y ella como toda una experta empieza a echar la cabeza hacia atrás, mordiendo su labio inferior en señal de excitación por la verga que estaba llenado su pequeña vagina. Durante toda la penetración no noté una sola señal de dolor en mi primita, cosa que me sorprendió mucho ya que hasta ese momento solo su padre le había enterrado la verga, y como ya dije, era mucho más pequeña.
Mi tío Titi, extasiado con el actuar de mi primita, se dedico a tratarla como si a una mujer mayor fuese la que tuviera en sus brazos. Caricias, besos y deseos era lo que transmitían esos dos, tanto que no pude aguantar y comencé a tocar mi clítoris ya parado de la excitación por la escena.
Luego de unos minutos mi tío la pone encima de él, y la niña como experta se clava en toda su verga y empieza un movimientos suaves de vaivén sobando su conchita en toda la longitud de su tranca, lanzando gemidos suaves de placer que despiertan deseos en su propio padre, el cual, se olvida por completo de mi otra prima que la tenía también clavada, y se dirige donde los dos amantes. Comienza a comerle el culo a su hijita metiendo su lengua lo más que podía dentro de ese rico culito que tiene, escupiendo para lubricar al máximo, y sobándose su verga para no perder la dura erección que tenía. Yo por mi parte al darme cuenta que ya se aproximaba la tan esperada escena, me incline hacia su verga, le di una buena mamada y le escupí toda la saliva que pude, dejándosela empapada para facilitarle la penetración a ese culito. La escena no se hizo esperar, y yo en primera fila me postre detrás de ello para tener a mi vista esa doble penetración que quería ver.
Su verga se comenzó a meter con un poco de dificultad en ese bello culito, mi primita con apenas 5 añitos apretaba sus ojitos en señal de dolor pero no articulaba ninguna palabra de súplica, solo gemía dando su consentimiento para que su padre entrara en ese hueco.
La culiada fue muy deliciosa, su ritmo fue muy suave y sus gemidos tan intensos que sin darme cuenta en qué momento atraje a mi prima Pau y empecé a chuparle su vagina, y como si estuviera consciente, comencé a meterle un dedo por su concha y otro por su culo como preparándola para su turno. Mi prima Pau sobaba mi cabeza pero no apartaba sus ojos de su hermanita, consciente de que después sería ella quien estaría en esa posición.
Fueron poco mas de 40 minutos que duró el coito entre mis tíos y mi pequeña prima, 40 minutos de entero placer que llenaron no solo la alcoba, sino también la vista de quienes estábamos observando tan hermoso espectáculo. Y como para cerra el show los gemidos de placer de mis tíos, y los gritos sofocados de mi primita al momento de llegar juntos al orgasmo, hicieron eco en nosotras que los acompañamos con un gran suspiro y chorros de inmenso squirt, que un director de cine porno hubiese envidiado.
Quedamos todos tendidos en nuestra posiciones por mas de 5 minutos antes de poder recuperar nuestras fuerzas.
Quien primero se movió fue mi tio2 que se desplomo hacia un lado quitándose de encima de mi primita que aun estaba jadeante y chorreando leche por sus dos agujeritos, luego mi tío Titi con su característica suavidad la bajo de encima de él para poder ponerse en pie, lanzar un suspiro de entera satisfacción y decirnos a todo el grupo.
Titi: Jueputaaaaaa!!! Aquí huele a puro culo.
Las risas no faltaron por todos los presente, festejando su comentario y tomando fuerzas para a fin poder movernos todos.
Titi: Bueno, creo que es hora de una buena merienda, así que cada uno que se sirva lo que le apetezca de la mesa y si quieren pueden darse un baño. Necesitamos recuperarnos bien, que aún faltan los huecos de Pau por estrenar.
Dicho esto nos dispusimos a recuperarnos, y charlamos un rato antes de iniciar el segundo round.
Mas de mis vivencias, ahora le tocó el turno a Pau, al fin tendrá dos vergas en sus huecos..
Transcurrido un tiempo prudente de descanso y recuperadas las fuerzas, nos dispusimos a continuar con la faena programada. Y el turno era de Pau, se le veía muy ansiosa, algo nerviosa y dudando de poder resistir la doble penetración.
Pau: Cielo Riveros, tengo miedo, yo sí seré capaz de aguantar dos vergas al tiempo.
Cielo Riveros: Claro!!!, acaso no viste como la niña gozó de lo lindo. Imposible que no seas capaz. Dale sin miedo no te arrepentirás, te lo dice una experta.
Pau: Jummmmm, eso no lo dudo, vi cómo te entró con una facilidad ese par de vergas.
Cielo Riveros: Si, y para mi desgracia hoy no habrá leche en mis huecos, porque el día está planeado para ustedes, así que disponte a gozar.
Dicho esto nos dirigimos a la cama y haciendo una señal de aprobación hacia mis tios ellos se encaminaron hacia Pau ya con sus vergas a medio parar.
El primero que llegó fue Titi, quien estaba deseando poder probar a su sobrina querida, hasta celos sentí cuando se le acercó yu le dijo que había estado esperando ese momento con ansias.
Sin más preámbulos empezó a besar los labios de mi prima, acariciando du carita y jugando con su lengua. Su papá, o sea mi tio2 se le acercó por detrás directo a su culito para acariciarlo, morderlo y chuparle su huequito, llenándolo de inmediato de saliva.
Mi tío Titi guio las manos de Pau hasta su verga para que ella empezara a hacerle una paja mientras él se entretenía con su boca y sus tetas. Luego bajando su mano derecha buscó el botón de su vagina y comenzó a masturbarlo suavemente, produciendo la esperaba lluvia de flujos en mi prima, la cual ya estaba jadeante ante la invasión de tantas manos encima.
Los dedos de mis tíos ya hurgaban dentro de su vagina y su culo, el tio2 ya le tenía enterrado dos dedos en ese culo ya bastante conocido por él, en tanto que mi tio Titi estaba encantado por poder meter sus dedos dentro de la concha de su sobrinita.
Luego de unos 10 minutos de toqueteo, salivas y dedeadas profundas, mi tio2 se acostó con la verga bien parada e invito a su hija a que se montara de espaldas sobre él, quería ver clavada la verga en su culo. Mi prima hizo lo propio y llenando de saliva su mano se la pasó por la entrada del culo y guiando la verga de su padre se dejó caer quedando clavada hasta las propias huevas, en tanto que mi tio Titi estaba delante de ella con su verga como un troco, y dirigiéndola hacia mi prima se la puso en su boca.
Así empezó una escena de clavada anal y chupada de verga, mi prima no se lo podía creer, me buscaba con la mirada y se le veía un destello de felicidad en sus ojos. Estaba dichosa de lo que estaba viviendo hasta ese momento. Por mi parte me estaba dando una masturbada bien profunda deseando ser yo la que estuviera en esa posición.
Mi primita menor quien tampoco había perdido un segundo de las escenas se acercó a mí y quitando mis manos comenzó a chuparme la concha, ufffffff se sintió muy rico, ella sí que aprendió bien el arte de mamar vaginas, para su corta edad era toda una experta y eso me ayudo a seguir disfrutando aún más de la rica culiada que estaba teniendo mi prima Pau.
Luego de unos intensos minutos de sexo, mi tío Titi le sacó la verga a mi prima y le dijo que se acostara en la barriga del papá, y así con una verga dentro de su culo y con las piernas abiertas de par en par, le metió su verga por la concha. Lindo, muy lindo fue ver esa verga entrar de esa manera en mi prima, mirar sus ojos abiertos y deseosos de sentir una doble clavada hizo que apretara la cabeza de mi primita en mi concha y moviera con fuerzas mis caderas en una culiada provocada por la excitación del momento. Con suavidad per con determinación, la verga de mi tío desapareció en la vagina de Pau, y la verga de su papá estaba toda clavada en su culo, era un bello momento de éxtasis, mi primita cada vez chupaba más duro mi concha y para agradecerle comencé a meter mis dedos en su vaginita húmeda.
Los movimientos de culeo no se hicieron esperar, los dos hombres mantenían el ritmo en su joven amante, eran estocadas certeras las que Pau estaba recibiendo, y su cara mostraba el gozo que sentía con esas clavadas.
Luego de un momento, Titi alzó a Pau sin sacarle la verga y se acostó con ella encima, de inmediato mi tío2 se puso en pie y abriendo el culo de su hija le clavo la verga nuevamente hasta el fondo.
Solo se escuchaba el sonido de las pelvis chocando al unisonó con la piel de mi prima. Sudor y un olor fuerte a sexo emanaba de la habitación, mi primita no aguantó mas las ganas y se subió en mi para hacer un perfecto 69 para continuar con disfrutando de esa tarde de sexo.
Los gritos fueron profundos, ahogados por el miedo a ser descubiertos, pero sonoros para nuestros oídos, suspiros, lagrimas de placer, sudor y ganas de que el tiempo se detuviera, terminaron por explotar en cantidades enormes de leche y orines de nuestras vaginas.
Pau recibió tanta leche como lo había recibido su hermanita, y yo me llené de todos los jugos que mi primita tenía en su interior.
Cuando al fin pudimos reaccionar, cuando nuestras fuerzas volvieron, nos dimos cuenta del desastre que habíamos armado en casa de mi tío, y que debíamos actuar rápido con la limpieza antes de que su esposa fuese a llegar.
Nos dimos unos besos, nos fuimos los 5 para el baño y uno a uno fuimos sacando los rastros de la tarde de orgía que acabamos de tener.
Luego los hombres se dedicaron a asear la casa, mientras nosotros nos encargamos de pedir pizzas para celebrar y de agendar un nuevo día para repetir esa maravillosa tarde de sexo.
Mas de mis vivencias. La monotonía me hizo ser imprudente y mi tío2 se aprovechó de eso..
Transcurría el año 2012 y ya con 12 años era toda una experta en el arte del sexo, las sesiones de sexo que mantuve con mis tíos me hicieron gustar del sexo en todas sus facetas, individual, grupal, lésbico, doble penetración, masturbación. Todas aprendidas en el seno de la familia.
Pero como nada dura para siempre, la monotonía se apoderó de todos, ya mis hermanos no me buscaban, mi padre aún ausente por su trabajo no me dedicaba mayor tiempo, con la muerte de la suegra de mi tío Titi regreso a la normalidad su casa, por lo que su esposa ya no salía con frecuencia, así que nuestro refugio sexual se vío invadido.
Solo mi tio2 seguía fiel al sexo, con él me saciaba los fines de semana que me quedaba en su casa, con él y con mis primas, teníamos largas jornadas de sexo, pero había algo que a mi me estaba haciendo mucha falta. Como le dije en varias ocasiones, soy una amante de la verga, y después de tener la oportunidad de hacer tríos HMH, la doble penetración era para mí una necesidad, deseaba tener dos vergas dentro de mí de manera constante, me vi obligada a masturbarme con dos cepillos para simular la doble penetración. Y cuando estaba con mi tío2 y mis primas, le decía a Pau que me metiera algo por el hueco que su papá no estuviera usando. Y fue así como una noche dije algo que cambiaria mi vida, o mas bien, agregaría nuevos integrantes a mi vida.
Cielo Riveros: hay no, ya esto de no poder tener la verga de Titi y la tuya dentro me está matando – le dije a mi tio2 –
Pau: Nojoda Cielo Riveros deja la arrechera y confórmate con el cepillo dentro del culo.
Cielo Riveros: Noooo mi amor, eso nunca será igual a dos buenas vergas. Jueputa cuanto quiero tener a otro macho ahora mismo que me estuviera clavando. QUERO VERGAAAAAAAS!!!!!!
Tio2: Va a tocar hacer algo con eso, tú sabes que nosotros en moto no podemos meterte a un motel, hemos estado pensando quien nos presta un carro para ir a culiarte de lo lindo.
Cielo Riveros: Pero no se demoren tanto, que si me hacen seguir esperando se lo doy al primero que se me cruce.
En ese momento mi tio2 me estaba dando verga, y la tenia atravesada en mi concha, y mi prima Pau me tenía metido un pepillo de cabello por el culo. Pero no, ese cepillo nunca se podía comparar a la verga de mis otros machos. La verdad estaba desesperada, estaba necesitada de verga.
Pasados unas semanas, a altas horas de la noche recibí un mensaje de mi tio2
Tio2: Oye flaca, que andas haciendo? Con quién tanto hablas? Ya conseguiste quienes te den verga al mismo tiempo?
Cielo Riveros: Hola tío, nada, los estoy esperando, pilas de verdad que estoy que se lo doy al primero que me lo proponga.
Tío2: Serías capaz Cielo Riveros? Serías capaz de darle esos huecos a otros hombres?
Cielo Riveros: No tienes idea de lo que soy capaz. Pero eso si te advierto, como encuentre a alguien que me dé más rico que ustedes se van a joder, porque los mando a la mierda.
Tío2: Uy no, eso sí que es una amenaza. Nooooo nunca dejare perder la oportunidad de comerme ese culo tan rico que tienes, eso jamás lo permitiré.
Cielo Riveros: Bueno ponte las pilas a ver que se te ocurre. Mira con lo arrecha que estoy acepto lo que sea oíste, lo que sea.
Tío2: Lo que sea? Seguro que aceptas lo que sea?
Cielo Riveros: ya te dije, lo que sea, no me conoces, así que pilas, que ya no aguanto más.
Así fue como a los 12 días mas o menos me volvió a escribir para decirme que me iba a recoger, que me tenía una gran sorpresa.
Quedamos en el día y la hora, y yo me encontraba tan ansiosa, y estaba más que segura que al fin tendría las dos vergas de mis manante dentro nuevamente. Fue tanta la emoción que durante el tiempo de la espera me masturbaba a toda hora pensando cómo sería ese reencuentro. Mis flujos corrían por mis piernas mientras mis dedos entraban sin cesar en mi concha húmeda y deseosa de verga, mi culo se apretaba solo, sin que yo tuviera necesidad de estimularlo, mis senos que ya estaban mas pronunciados se erizaban con el solo roce de la brisa del ventilador. Dormía desnuda, la necesidad de sexo me tenía desesperada. Pero al menos ya tenía una fecha estipulada y sabía que iba a pasar.
Llegado el día anhelado, mi tio2 me recogió a eso de las 9 de la mañana, y se dirigío a las afueras de la ciudad.
Cielo Riveros: Para dónde vamos tío?
Tío2: Recuerdas que me dijiste que viera a ver que se me ocurría? Pues a eso vamos.
Cielo Riveros: y ya mi tío Titi esta allá?
Tío2: Espera a que lleguemos, a ver si te gusta la sorpresa.
Así fue que manejo durante uno 5 minutos por la carretera principal y luego se desvió por un camino destapado y llegamos a una finca, que obviamente no conocía.
Entramos, tomó su teléfono y le dijo a su interlocutor que ya estábamos allí.
De la casa principal de la finca vi salir a un hombre de unos 40 o 45 años, en pantaloneta ajustada y sin camisa. No era un adonis pero si tenía un cuerpo trabajado, no por el gimnasio, pero si por actividades de fuerza, se notaba eso ya que no era voluptuoso, más bien era un tipo con musculatura maciza.
Obviamente no me esperaba esa sorpresa, así que quedé un poco desconcertada, y tomando la mano de mi tío2 le pregunté que hacíamos allí, a lo que él con una gran sonrisa en sus labios me dijo, “a cumplirte tus deseos”.
Tio2: Mira Cielo Riveros, él es William, un amigo de hace mucho tiempo.
Cielo Riveros: Hola sr.
William: Hola preciosa – Y dirigiéndose a mi tío le dijo – Es ella? he de confesarte que la hacía mayor. Cuantos tiene, unos 13?
Tío2: 12 para ser exactos.
William: Válgame Dios, y si aguanta?
Tío2: jajajajajaja, te sorprenderás de lo que es capaz esta nenita.
William: A ver jovencita, te dijo tu tío a qué venías?
Cielo Riveros: La verdad no, pero es muy fácil imaginar.
William: A si, y a qué crees que vienes?
Cielo Riveros: Obviamente y tener sexo contigo, a qué más puede ser, porque no veo globos para decir que habrá una fiesta.
William: Jajajajajajaaja, valla si que es avispada esta nena.
Tío2: Y lo que sabe hacer.
William: Ok, ok. Lo tuyo te lo doy cuando pase la prueba.
Tío2: Eso no me preocupa, sé que te va a gustar.
Esas últimas palabras no las entendí a fondo, pero obviamente era yo la causa de la conversación.
Dicho todo esto, William nos hizo seguir a su casa, que para mis ojos más parecía una mansión, una casa muy grande, con muchos muebles, decoración de todo tipo, me sentí en la casa de una persona muy rica, mas tarde me enteré de que era el dueño de la empresa donde trabaja mi tío2, así que sí, era alguien muy adinerado.
Me ofrecieron una bebida, estuvimos tomando el refresco mientras se hacían preguntas al aire, y entre risas nos dirigimos a la habitación del sr. Algo que me deslumbró aún más por su tamaño y cantidad de muebles. Con decirles que era mas grande que mi casa. La cama era redonda y super enorme, y estaba ubicada al centro de la habitación. Tan pronto entramos William se transformó, sin decir una palabra mas se dirigió hacia mí y tomándome en sus brazos me tiró literalmente en su gran cama, donde rebote gracias a lo acolchado se su colchón. De forma automática se desnudó dejando ver una enorme verga colgando a medio parar. La más grande que jamás hubiese visto, con su prepucio recogido y dejando ver una cabeza morada que ya empezaba a brillar por la cantidad de baba que brotaba del orificio de esa cabezota.
Acto seguido se escupió la mano, se froto su verga que ya comenzaba a ganar tamaño y si dirigió hacía mí con mirada de depravación que me hizo erizar la piel y tener un orgasmo sin haber tenido la necesidad de tocarme. Ver a ese hombre grande, de tez morena, de gran cuerpo y dotado con una verga que solo tendrían los dioses, hicieron que mi sexo se humedeciera tanto que pareció que había tenido un squirt, me tomó de las piernas, me atrajo hacia él haciendo que rodara de espaldas en la cama, me quitó la licra que llevaba puesta, sacándola con todo y ropa interior, abrió mis piernas, se quedó mirando mi sexo húmedo y para si mismo esbozo una sonrisa maquiavélica que acompaño de un gran suspiro, miró a mi tío2 y le preguntó
William: De verdad le entra toda?
Tío2: Hágale sin miedo que yo respondo.
William: Ok Cielo Riveros, ya lo oíste, así que espero si me aguantes la tranca, hace mucho no pruebo una nenita así de tiernecita como tú.
Y sin más hundió su cara en mi sexo lamiendo, chupando, mordisqueando y pasando sus dedos por mi clítoris y mi anito, el cual ya también empezaba a pedir atención. Mis flujos se hicieron intensos, mis piernas se separaban solas para dar paso a ese gran macho que me empezaba a hurgar toda, mis manos se enredaban en su pelo atrayéndolo cada vez mas a mi sexo, indicándole en que punto tenia de trabajar. Mi pelvis se levantaba guiada por la excitación del momento, y con movimientos suaves restregaba mi sexo en su cara. Estaba viviendo un momento estupendo, nunca se me había pasado por la cabeza estar de manera voluntaria con un hombre diferente a los de mi familia, y allí estaba, con alguien a quien había conocido uno minutos antes, ya metido entre mis piernas, como una autómata solté su cabeza y me quité la blusa y el corpiño, dejando mis senos ya crecidos al alcance de todos, tomé uno de sus brazos y lo halé para dirigir sus manos hacia mis pechos, pechos ya erectos que querían ser manoseados, él levantó un poco la cabeza sin despegarse de mi sexo, observo desde su perspectiva mis hermosos senos y con ambas manos los estrujo, los pellizco y los acaricio en señal se aceptación. Mi espalda se arqueó al contacto de sus manos, mi lengua rosó mis labios y salió un leve suspiro de mi boca, estaba excitada, estaba feliz por la sorpresa que mi tio2 había planeado para mí.
William una vez se sació de mi concha, levantó mis piernas hasta sus hombros y dirigió su lengua juguetona hasta mi ano, y haciendo círculos comenzó a jugar con el, introduciendo poco a poco la lengua, pasándola por la zona entre el ano y la vagina y chupando mi culo con fuerza como con ganas de sacar jugo de allí. Fue una sensación encantadora, éste hombre se notaba que tenía mucha experiencia con niñas de mi edad, sabia donde tocar, cuando morder, cómo chupar para complacer y mantener viva la excitación de su hembra de turno.
Luego de tantas caricias, comenzó a subir, pasó de nuevo por mi vagina donde chupó mis jugos y metió la nariz para untarse de mis líquidos. De allí siguió subiendo, besando y mordiendo mis caderas, mi ombligo y hasta hacerse dueño de mis tetas que también pedían ser atendidas. Su lengua se movía inquiete cada vez que se metía una teta entera en su boca, sus labios hacían pequeños apretones en mis pezones que me hacían erizar por completo. Ya en esa posición su verga estaba mas a mi alcance, y mientras él me chupaba las tetas, yo buscaba afanosa su pinga que la tenía como un riel, estaba tan dura que no podía doblarla casi, en sus venas se sentían el latir le la sangre llenando cada vez mas esa hermosa verga. Tuve que juntar ambas manos para poder agarrarla por completo, era la mejor verga que había tenido en mis manos y no pensaba soltarla hasta tenerla dentro de mí por ambos huecos. Deseaba que me la enterrara pronto, pero también deseaba chupar esa enorme cabeza morada que destilaba gotas de su delicioso flujo. Así que de manera decidida, me fui moviendo debajo de él en busca de mi premio, cosa que entendió enseguida, y apoyando todo su peso en sus nudillos, levantó el cuerpo para darme paso por debajo de él.
Bajé de inmediato besando sus labios, chupando su lengua, mordiendo su barba y seguí bajando hasta encontrar sus tetillas, que al contacto con mis labios las sentí saladas, producto de las caricias que llevábamos durante más de 20 minutos.
Pero mi objetivo estaba más allá, así que sin perder tanto tiempo, seguí en búsqueda de su latiente verga oscura, enorme y babeante, y al llegar a ella la pude acariciar bien cerca de mis ojos. La mejor verga que había conocido al fin estaba al alcance de mi boca, mi lengua tomó vida propia y sin darle indicaciones comenzó a pasarse por todo el troco de su verga, sus venas causaban una sensación extraordinaria en mí, y sin poder resistirme metí la cabeza de su tranca en mi boca, el esfuerzo por abrir mis labios para que semejante verga me entrara fue recompensado con suaves movimientos de mi amante, quien con sus manos en mi cabeza ya había comenzado a culiarme mi boca. Su enorme verga no me entraba del todo, pero la mitad que lograba tragarme me producía orgasmos dentro de mi vagina.
Luego de chupar por largo rato, levanté la mirada y con voz suplicante le pedí que me la metiera.
Cielo Riveros: Por favor, entra en mí.
Me miró, aparto los cabellos de mi rostro, me dio una hermosa sonrisa, acomodó su cuerpo, y con su mano derecha tomó su enorme verga y la comenzó a rozar en mi vagina. Fue electrificante sentir ese glande morado rozar todas mis partes, empujar tratando de entrar pero en forma de juego, y finalmente en un momento en que pasó su pene por la entrada de mi vagina, levante mis caderas de manera rápida y sentí como parte de su verga se apoderaba de mí. Y sin dejarlo pensar, rodee su cintura con mis piernas, volví a levantar mi cuerpo del colchón y me ensarté aun mas ese pedazo de verga que tanto estaba deseando. El no se hizo rogar, así que dejo caer todo su cuerpo en mí, sentí como esa verga rajaba todo mi interior, como mi vagina hacia grandes esfuerzos ante semejante monstruo que la invadía. Después de tanto tiempo, volví a sentir dolor, pero como siempre era un dolor placentero, era un dolor que ya conocía y que deseaba sentir todo el tiempo. Su verga se apoderó de toda mi vagina, y cuando pude reaccionar, levante la cabeza y ví como su pelvis se estrellaba con la mía, lograba ver como 21 cm de verga y sus 7 cm de grueso desaparecían dentro de mí, estaba en el cielo, mi amante era un hombre muy amable, y aunque a mi el dolor me encantaba en el sexo, aunque me gustaba sentir los golpes rudos de las pelvis al chocar, ésta vez estaba encantada con su manera de culiar, así que me limité a recibir su verga y gozar de la hermosa vista de cuando desaparecía dentro de mí.
Luego de unos momentos, me pidió que me subiera encima, que quería ver como mi vagina devoraba su verga. Petición que no se hizo esperar, y luego de que él se acostara boca arriba, me subí no sin antes tomar un momento su miembro y llevarlo a mis labios para probar sus líquidos.
Me senté sobre su enorme verga, y despacio pero segura me fui metiendo cada centímetro de su miembro, hasta llenar por completo mi vientre.
La sensación era cada vez mas placentera, y ya en éste punto no me importo el dolor que pudiera sentir, solo quería chocar mi pelvis con la suya de forma salvaje, y así lo hice, y en cada bajada de mis caderas, su verga se clavaba más dentro de mí.
Éste hombre me tenía sorprendida, nunca antes alguien con quien había estado, logró aguantar tanto en llenarme con su leche, pero yo estaba muy feliz, estaba con mis ojos cerrados solo sintiendo a su miembro destrozar mi vagina, y por estar en esta situación no alcance a notar que mi tio2 ya se había quitado su ropa, y con la verga parada, y habiéndose ya untado vaselina, se me acercó por detrás, colocó una mano en mi nalga y apuntando su verga lo fue metiendo lentamente en mí.
Si la gloria existe debe ser algo parecido a esto que estaba sintiendo en ese momento, por fin dos verga estaban nuevamente dentro de mí, por fin podría volver a disfrutar del sexo que tanto me gustaba. En tanto que William se mostró sorprendido con lo que acababa de pasar, y no daba crédito a la capacidad de esa nenita de 12 años de poder tragarse dos vergas al tiempo. Mi tio2 se comenzó amover muy rápido, era notorio que tanto preámbulo por todo lo que había visto lo tenían con la leche en la cabeza de su verga, y fue así como en menos de 10 minutos, descargo chorros de leche dentro de mi culo, leche caliente que me daba una sensación de alivio.
William, al notar que mi tío ya me había llenado el culo de leche, me pidió que me bajara, que quería cogerme de a perrito, porque quería ver su verga entrar desde atrás de mí. Lo que no me imaginé era que literalmente quería entrar por detrás, así que una vez yo en cuatro, él agarrando su verga me la introdujo por el culo. Valla que dolor que pude sentir, esta vez sí que flaquee, y me fui de boca en la cama, quise escapar de esa embestida, pero su fuerza era mucho mayor, y agarrando mi cintura me atrajo nuevamente hacia él metiendo por segunda vez su verga dentro de mi culo, ya haciéndome lanzar un grito de dolor que antes nunca lo había hecho. Pero a km imante no le importó y de manera sorpresiva se transformó en un animal, detrás quedaron los tratos suaves, la caricias y apareció un hombre diferente, un hombre que me estrujo mi culo, apretando tanto mis caderas que casi no podía respirar. Con lagrimas en los ojos y voz entrecortada le suplicaba que me sacara su verga, pero eso no le importó en los más mínimo, su momento estaba por llegar y como un loco me clavaba cada vez mas profundo, sacando mas lágrimas de mis ojos. Mi tio2 quien no perdía un segundo de semejante acta, se puso delante de mí, y con fuerza tomó mi cabeza y metió su verga en mi boca, verga que ya había recuperado un poco de su erección, esto complicó mas mi situación, ya que no podía respirar muy bien y lo necesitaba por el dolor que estaba sintiendo por la cogida de William.
Así pasaron unos pocos minutos mas hasta que sentí como William, aferrado a mi cintura, me atrajo tan duro hacia atrás que me desmaye en la cama por un instante, para luego sentir sus enormes chorros de leche fresca retenida en esos grandes huevos que al fin descansarían, así como al fin descansaría mi culo por tanto culeo que me acababan de dar.
No sé cuanto tiempo pasó luego que mi amante me llenara de leche y se quitara de encima mío, ya que su excitación lo dejó cansado y solo se dejo caer sobro mi cuerpo.
Una vez logré recobrar las fuerzas, me levante de la cama y mire como la sabana del colchón estaba llena de semen de mis amantes y además pude ver hilos de sangre que indudablemente salieron de mi culo roto por semejante ejemplar de hombre.
Ya recuperados todos, William se dirige a mí
William: Perdóname Cielo Riveros, pero de todas las chicas con las que he estado, eres la primera capaz de aguantar dos vergas al tiempo y eso me volvió loco, te prometo que a futuro no volveré a tratarte de esa manera.
Tío2; Y eso que no la conociste antes, ya esto lo llevamos haciendo desde que ella tiene 9 años.
William: En serio? Lástima no haberte conocido antes.
Cielo Riveros; Pues yo no pienso lo mismo, porque si ahora me hiciste gritar, cuando en mi vida sé lo que es recibir vergas. Te imaginas de 9 años, me hubieras partidos en dos.
William: Bueno he de decir que tienes razón, así que recibe nuevamente mis disculpas. Y en verdad que en otra ocasión seré más caballero.
Cielo Riveros: Si es que habrá otra ocasión.
William: Claro que la habrá, y esto lo garantiza
Dicho esto, William sacó un fajo de billetes y se los entregó a mi tio2.
William: Definitivamente pasó la prueba. La quiero aquí todos los fines de semana.
Tio2: No, eso no es así de fácil, recuerda que es mi sobrina, no mi hija, así que tengo que crear una buena coartada para sacarla de la casa. Mas bien yo te aviso cuando haya una oportunidad.
William: No demores, esta nena es increíble.
Y dicho esto me volvió a tomar por las piernas como al principio y metiendo su verga dentro de mi vagina, me culio nuevamente llenando mi otro hueco con su fresca y espesa lecha, y esta vez no desaproveché la oportunidad de tomar un buen trago, así que me salí de debajo de él, y le comencé a chupar la verga sacándole toda la leche que aún le quedaba.
Y entendí que mi tío2 se había aprovechado de mis habilidades para scarle una partida económica. Cosa que no me disgustó, porque sabía muy bien que el premio gordo me lo llevaba yo, ya que era quien recibiría vergas a mas no poder, además de dinero para gastarlo en mí.
Mas de mis vivencias. Una frase a la que no le di importancia se transformó en otra gran aventura..
A días después de la agradable experiencia con William, mi tio2 me volvió a escribir, como siempre a altas horas de la noche.
Tio2: Oye flaca, que andas haciendo, como siempre puteando hasta la madrugada jajajajajajaj.
Cielo Riveros: Ajá y que más voy a hacer, si es lo que mis tíos me han enseñado. Ah y mas ahora que le sacaste plata a mi culo.
Tío2: Jajajajajaajajajaj, nojoda si, tienes razón. Culiar es lo que mejor te queda, y si pagan por ese culito hay que sacarle el jugo.
Cielo Riveros: Y entonces para qué me vienes a decir que ando puteando, si igual a ti te conviene.
Tío2: Mira, precisamente para putear es que te escribo. Qué dices si este sábado vuelves a la casa de William, él quiere volver a romperte el culo.
Cielo Riveros: Por mí encantada, siempre que lo haga suave, y ahora con platica de por medio, mucho mejor.
Tío2: Listo, ya cuadro la hora y te aviso para cuadrar también con Pau la mentira de esta vez.
Así quedé con él, a esperar que entre ellos se pusieran de acuerdo y me dieran la hora de la culiadera. Había visto unos tenis que me encantaron y quería comprarlos. Y desde entonces comencé a pensar que mentira inventar para cuando me los comprara.
Llegado el viernes mi tio2 me confirmó que pasaría por mí a las 9 y que tipo 10 nos iríamos para donde William, ya que Pau tenía que salir donde una amiga a las 9 y esa era la hora de la mentira.
Mi tio2 me recogió puntual a las 9 del sábado.
Cielo Riveros: Nojoda y que vamos a hacer una hora mientras nos vamos para donde William.
Tio2: Marika no sé, se me ocurre que podríamos ir al mirador a pasar el tiempo, y si tenemos suerte de que no haya mucha gente me das una mamada.
Cielo Riveros: Bueno, peor es nada, para estar esperando sin hacer nada me sirve para calentar motores.
Tio2: Jajajajajajajajaja, como si tú necesitaras calentar. Estas todo el tiempo con la chucha húmeda y la arrechera a flor de piel.
Cielo Riveros: Por algo se amañan conmigo.
Dicho esto nos dirigimos a un sitio que se conoce como el mirador. Es un espacio que la gente frecuenta para volar cometas, tomar cervezas, hablar mierda y hasta para culiar mientras esperan ver el atardecer. Como era temprano en la mañana del sábado, día que aún trabajan la mayoría de las personas de mi pueblo, el mirador estaba casi vacío, los pocos que había se dispersaban mucho entre ellos, precisamente para aprovechar la soledad y poder hacer sus cosas sin que los interrumpan.
Fuimos a una parte donde hay arbustos que ofrecen una excelente vista del mirador, y ocultan muy bien de la vista de curiosos, había eso sí, que estar atentos por si alguien se antojaba de ir también hacia allá.
Una vez allí, mi tio2 me sentó en sus piernas y me comenzó a besar y chupar las tetas, y yo como toda buena niña me comencé a mojar de lo rico y a acariciarle la cabeza mientras el me hacia sus cosas. Luego me puso su mano en la cabeza y me empujo hacía abajo, obvio que ya sabía que tenia que hacer, y sin reparos le miré a los ojos, le lance una sonrisa pícara y le comencé a desbotonar su jean. Su verga ya estaba parada y babeando de lo lindo, uffffffff como me fascina encontrar la verga llena de goticas de baba, esa babita deliciosa que se te pega en la lengua y tienes que chuparla para poder saborear y tragarla, esa babita era un desayuno vitaminado para mí. Le estuve chupando la verga como por 30 minutos hasta que me lleno la garganta de su leche. Obvio tampoco la iba a desperdiciar, me la tragué toda. Descansamos un poco y me invito a comernos algo y a tomar algún jugo que me cambiara el sabor a verga para que William no se diera cuenta de que ya iba iniciada.
Salimos casi a las 10 para la casa de mi otro amante, a recibir mi primera culiada del día. Una vez estuvimos cerca mi tio2 paro la moto y le marcó para verificar que todo estuviera en orden y no estuviera alguna novia de él allí presente. Le respondieron que podía llegar que todo estaba tranquilo.
William: Bienvenidos mis amores, Cielo Riveros sí que te vez hermosa el día de hoy.
Cielo Riveros: Gracias William, lo tengo que estar para mi macho.
William: Jajajajajajaajajja, jueputa si esta nena tuviera al menos unos 10 años más, me caso con ella.
Cielo Riveros: Y qué te lo impide?
William: Jajajajajaaj, la cárcel mamita, la cárcel.
Despues del saludo pudimos entrar, yo le pedí prestado el baño con la excusa de mear pero en realidad quería lavarme la chucha ya que la traía mojada de tanto chupar verga, y de paso lavarme la boca con un enjuague bucal que nunca falta en un baño.
Tio2: Bueno compa, yo los dejo, debo seguir produciendo.
William: A qué horas regresas.
Tio2: unas dos horas te parece bien?
William: Si, me parece perfecto.
Mi tío2 se fue, aunque pensé que lo hacía en realidad por trabajo, más tarde me di cuenta de que me llevaría dos grandes sorpresas.
William: Bueno Cielo Riveros, vamos al grano o quieres comer algo o hacer algo antes?, tu mandas.
Cielo Riveros: Lo que tú digas para mi esta bien William. Igual ya comí.
William: Ok, deja y hago una llamada y enseguida nos vamos para la pieza.
Cielo Riveros: Listo, yo voy caminando para quitarme todo esto.
William se quedó hablando al teléfono con alguien, deduje que era un hombre ya que le saludo como “bro”, y le dijo que había dejado la puerta sin llaves para que él pasara. La verdad nunca me imagine que se estaba refiriendo a la casa donde estábamos nosotros, pensé que hablada de otra parte así que solo me desvestí y me acomodé en la gran cama redonda que tiene William.
Cuando él entró a la habitación ya venía desnudo y con su verga bien parada, me señalo la mesa de noche que estaba cerca de la cama y me dijo que me untara un aceite que tenía. En la etiqueta se podía leer “lubricante íntimo de uso anal”, lo miré, le sonreí y me unté un poco en ambos huecos.
Cielo Riveros: Con tu gran verga voy a necesitar en ambos, jajajajajajajaja.
William: Si Cielo Riveros, ya creo que si que lo vas a necesitar.
Mas tarde me di cuenta de que esa simple frase era más una advertencia que un cumplido suelto.
William una vez estuvo al borde de la cama me miro y sin decir palabras me indico que le diera una mamada, me acercó su verga ya re dura, morada y con goticas brotando, pidiendo a gritos ser tragadas. Lo que inmediatamente hice sin esperar que se me repitiera la orden. Su verga de 7 cm de groso quedaba apretada en mi boca, chuparla era difícil, pero era mi tarea y tenía que hacerlo lo mejor que pudiera. Era para mi imposible tragarla toda, pero era una sensación maravillosa meterme todo lo que ocupara mi cavidad bucal, esa verga era para mí un regalo divino que no pensaba desperdiciar. Mi lengua con vida propia se movía de un lado para el otro dentro de mi boca, luchando con la estrechez pero acariciando al máximo esa tranca tan deliciosa que tenia dentro. Mis manos por otro lado se movían acariciando sus huevos, para esa ocasión William me regalo sus genitales recién depilados, se sentían suaves, tenían un olor a perfume muy agradable, muy suave, el cual se fue desvaneciendo por la mamada que le estaba haciendo y fue brotando el típico olor a verga y a chacaras sudadas, que era su olor natural, y que provocaba excitación en mí.
Luego de unos largos minutos, William tomo mi cabeza, levantándola y plasmando un delicado beso en mis labios, y entrelazando nuestras lengua jugamos un poco, me puso de pie sobre la cama, abrazándome por la cintura y llenando de besos todo mi torso. Sus labios frescos por la cantidad de saliva que había quedado de nuestros besos se posaron en mis tetas iniciando una sesión de chupadas que me hacían contraer mi abdomen y me obligaban a aferrarme más a ese hombre.
William se portó muy delicado conmigo, luego de chupar mis tetas comenzó a bajar por mi barriga, besando todo lo que su boca pudiese tropezar, su lengua jugó un poco dentro de mi ombligo y luego siguió bajando hasta encontrar el tesoro que estaba buscando.
Para ese momento mi vagina ya era un charco de fluidos, fluidos que él tomo sin el más mínimo asco, los absorbió como si se tratase del mejor de los vinos. Chupo mi vagina, lamió mi clítoris y metió su lengua lo mas profundo que la posición le permitía. Yo, siendo consiente y con ganas de ser acariciada por su boca, levante mi pierna derecha y la puse sobre su hombro, quedando mi vagina bien abierta y disponible para seguir recibiendo su mamada.
Una vez se sacio de mi vagina me recostó boca arriba en el borde de la cama, escupió fuerte la punta de su verga, y colocando mis piernas en sus hombros procedió a penetrarme. Consciente de lo que me iba a tragar, cerré los ojos y levanté mi pelvis para facilitarle la entrada a su enorme verga. Aunque sabía que podía con ella, siempre estaba el temor latente de que pudiera dolerme si me apoyaba muy fuerte su cuerpo.
William entró en mi muy suavemente, el calor que brotaba de mi vagina lo hizo lanzar suspiros y echar su cabeza hacia atrás. Sus manos apoyadas firmemente a ambos lados de mi cara con sus puños me permitían asirme a ellas dándome seguridad cada vez que él me daba una estocada, ya que por suave que fuera su movimiento, su enorme verga llegaba al final de mi útero y quería pasar más allá.
Un tiempo después se rodó hacia un lado y con una de sus manos puesta en mi espalda me voltio con él, quedando yo encima de su cuerpo sudado y aún ensartada en su tranca. Me tomó por los hombros y me separo de él, luego bajó sus manos hasta mi cintura y comenzó a moverme en círculos sobre su miembro, entendido el mensaje tomé el control de la posición y le seguí el ritmo a sus manos, mis caderas se movían guiadas más por el deseo que por mí, y empujando en cada movimiento le hacía sentir en la cabeza de su verga que mi útero lo estaba recibiendo con deseos.
La culiada fue intensa, los espasmos no se hicieron esperar, los besos, chupadas de tetas, pellizcos en los pezones y chupones en el cuello hicieron parte del rito sexual que se estaba llevando a cabo en ese momento, solo atinaba a cerra mis ojos, echar mi cabeza hacia atrás y gozar del momento.
De repente sentí dos manos mas encima de mis nalgas, me sorprendí un poco y cuando iba a voltear sentí un lengüetazo en la boca de mi culo, sin mirar me dije, “ya llegó mi tio2” y seguí con mis ojos cerrados esperando seguir disfrutando ya que sabía que me iban a enterrar otra verga. Y sí, no me equivoque, porque después de unos minutos de chupada de culo me pasaron un poco de aceite en mi ano y metieron un dedo para iniciar la apertura de mi esfínter. Me seguí moviendo y ya hacia presión no solo en la verga de William, sino en el dedo que tenía metido en el culo. Era delicioso sentir como dos hombres me chupaban por mis cuerpo, cuello, tetas, espalda.
Pasados un par de minutos sentí como una verga rosaba mi culo, y me dispuse a recibirla con la mayor disposición.
Tan pronto empezó a entrar me di cuenta de que no era la verga de mi tio2 la cual conocía a la perfección, que era algo mucho más grueso, así que gire mi rostro para encontrarme con un hombre alto, mucho mas alto que William, completamente desnudo, con un físico increíble, hombros anchos pechos abultados abdomen marcado y de rostro no estaba tan mal. Un amigo de William, jugador de baloncesto, dueño de una tranca que después vi que era enorme, un poco más grande que la de William, pero por suerte menos gruesa.
Andrés, me enteré después de que se llamaba, me lanzo una miraba lasciva un beso en la distancia y comenzó a clavar su miembro dentro de mí. Éste fue entrando sin encontrar resistencia, mi culo estaba esperando esa clavada, y yo al ver lo que me iban a meter y a sabiendas de que me iba a doler un poco, me recosté sobre el pecho de William y elevé un poco la cola para que mi otro macho me la enterrara lo más hondo que pudiera.
Cielo Riveros: Sé gentil por favor.
Fue lo único que pude articular, y giré mi rostro hacia las tetillas de William, cerré mis ojos y dispuse cuerpo y mente a lo que iba a pasar.
Para mi sorpresa, la verga de Andrés se sentía muy suave, y al igual que William me trató de una manera amable, sus movimientos eran calmados y entre ellos se pusieron de acuerdo para que mientras uno empujara el otro sacaba, y así no sintiera tanto el grosor de ambas vergas dentro de mí.
No sé cuanto tiempo pasó desde que Andrés entró en mí culo hasta que sus estocadas se hicieron más veloces, fuertes y profundas, ya que movidos por la excitación y casi que al mismo tiempo se dispusieron a derramar en mi sus chorros y chorros de leche caliente, para ese momento ya mi cuerpo estaba muy adaptado a sus miembros, así que me fue muy fácil soportar sus embestidas que de igual forma se sentían como es apenas obvio para una niña de 12 años.
Llena de sus jugos y con espasmos aún en mis piernas, caímos como pirámide de naipes en la gran cama, mi cuerpo estaba completamente empapado del sudor de ese par de machos, el olor en la habitación reflejaba lo que allí acababa de pasar, aún se escuchaban los largos suspiros espontáneos que emitían nuestros pulmones. La escena era formidable, pero nadie la gravó.
Poco a poco fuimos recobrando fuerzas y logramos movernos hacia la ducha, el primero en ir fue Andrés, quien por a ver llegado de último tenía más energía, luego fue William a darse un baño y finalmente pude ir yo a botar todo los jugos que aún tenía dentro de mí, sentada en la taza del sanitario por más de 10 minutos.
Cuando me disponía a ducharme Andrés entro, sus intenciones eran claras y su verga lisa, larga y bien parada estaba lista para una segunda sesión de sexo. Las presentaciones quedaron para después, sin articular palabra y con mirada depravada acercó su gran miembro a mi boca y comenzó a culiarme, su verga mas delgada que la de William era cómoda para mi engullirla, así que sin mas opción me deje llevar por el momento y empecé a darle una buena mamada, la tercera del día. Su verga emitía un olor diferente a la de los demás hombres con los que había estado, su sudor era menos fuerte pero mas agradable, como si no brotara sudor sino algún tipo de perfume varonil.
Sus casi 20 cm de verga entraban en mi boca produciéndome asfixia al final de su embestida, pero eso no me detenía ya que como les he dicho en muchas ocasiones, el dolor del sexo en mí produce mas placer que miedo. Me estuvo culiando la boca por mas de 10 minutos, y cuando sintió que estaba por estallar me levantó del sanitario, me colocó contra la pared y dirigió su miembro a mi vagina. Ufffffff fue muy rico sentir una verga más dentro de mí, una verga que no solo se veía diferente, sino que además se sentía diferente a todas las que he probado hasta el momento, una verga suave, sin venas pronunciadas, de piel bastante lisa, de tronco bien recto, su cabeza mantenía una proporción agradable al tacto. Definitivamente fue la mejor verga que me he comido, sin demeritar a las demás, pero la sensación dentro de mi vagina y mi culo eran muy agradables. Una vez que entro en mí, no la volvió a sacar, solo se apoyaba contra mi trasero empujando su cuerpo como queriendo traspasar al otro lado, la sensación de su cabeza partiendo en mi interior me agradaba mucho así que hice lo mismo que él, me empujé fuerte haca atrás para sentir mas ese rico dolor en la entrada de mi matriz, ese dolor que causa el squirt, y éste no se hizo esperar, mis piernas comenzaron a temblar, mis rodillas se doblaban dificultando el estar en pie, mis músculos se tensaban como si les fuese a dar un calambre fuerte, y fue allí que me llegué al orgasmo de una manera explosiva, de una forma nunca antes sentida, y cuando pensé que ya había terminado sentí sus chorros de leche en mi útero, tan abundante fue su descarga que se salía por los lados de su miembro.
Dioooooos, sí que tuve un orgasmo diferente, sin gritos, solo con una sensación increíble dentro de mi ser.
Andrés me tuvo que sostener por unos minutos mientras mis piernas recobraban fuerzas, luego me dejó en la taza del sanitario y se fue para la habitación.
Ese día estaba destinado a darme sorpresas, porque una vez pude recuperarme escuche una voz chillone e inconfundible.
Pau: No lo puedo creer, de verdad fuiste capaz de hacer todo eso?
Cielo Riveros: Qué demonios? Tú que haces aquí? Cómo es eso? Entra, entra. Y sierra la maldita puerta.
Allí tomó sentido la frase aquella que le dijo mi tio2 a William en nuestro primer encuentro.
Tio2: No, eso no es así de fácil, recuerda que es mi sobrina, no mi hija, así que tengo que crear una buena coartada para sacarla de la casa. Mas bien yo te aviso cuando haya una oportunidad.
ontinuo con mis vivencias. Mi prima Pau me dio una agradable sorpresa..
Ese día estaba destinado a darme sorpresas, porque una vez pude recuperarme escuche una voz chillone e inconfundible.
Pau: No lo puedo creer, de verdad fuiste capaz de hacer todo eso?
Cielo Riveros: Qué demonios? Tú que haces aquí? Cómo es eso? Entra, entra. Y sierra la maldita puerta.
Allí tomó sentido aquella frase que le dijo mi tio2 a William en nuestro primer encuentro.
Tio2: No, eso no es así de fácil, recuerda que es mi sobrina, no mi hija, así que tengo que crear una buena coartada para sacarla de la casa. Mas bien yo te aviso cuando haya una oportunidad.
Quedé confundida por la presencia de mi prima en esa casa, la verdad no me esperaba que ella fuese a estar allí, con lo penosa y retraída que es.
Cielo Riveros: Qué haces tú aquí?
Pau: Eso mismo te pregunto yo.
Cielo Riveros: Yo estoy culiando. Ahora responde tú.
Pau: Jajajajajaajajajajaaj, si eso es indudable, vi cómo te atravesó Andrés. Jueputa cómo le aguantas semejante verga a ese tipo.
Cielo Riveros: Ahhh, ósea que ya los conoces, hasta ahora sé cómo se llama. Nojoda cuenta el chisme completo.
William: Mis muñecas, pasa algo?
Cielo Riveros: Ahora no William, estamos ocupadas.
Pau: Tranquilo, ahora salimos.
William: Bueno apúrense, porque ya quiero seguir culiando.
Cielo Riveros: Mira William, bien puedes hacerte la paja, yo salgo cuando quiera.
William: Mierda esta pelada se emputó.
Tio2: Vente, déjala, debe estar desconcertada con la presencia de la prima.
William: Jajajajajajaja, mierda, es que no sabía? Marica tú no le dijiste? Tómense su tiempo mis amores. Nosotros vamos a la piscina, las dejémoslas solas, nos avisan.
Tio2: buena idea.
Cielo Riveros: Ajá, te escucho.
Pau: Jajajajajaajajaj cómo así, te culio dos veces y no sabías siquiera como se llamaba? Jajajajajajjaaj. Bueno te resumo, William es el patrón de mi papá, y Andrés es un amigo de ellos.
Cielo Riveros: Que interesante. Ahora dime algo que no sepa.
Pau: Dioooos, sí que estas grosera hoy.
Cielo Riveros: Grosera?, ósea te metes a un baño donde me están dando verga, conociendo a los tipos desde no sé cuándo putas, y la grosera soy yo? No me creas tan pendeja. Así que cuéntame todo.
Pau: Yo fui una de las primeras chicas que éstos tipos probaron, pero eso sí, nunca estuve con los dos al mismo tiempo, siempre venía con uno solo. Y es la hora y no he podido tragarme semejante verga de esos tipos. Me imagino que estas brava porque nunca te lo conté. La verdad me sentía como una puta si te lo contara, por eso mejor me callé.
Cielo Riveros: Desde hace cuánto los conoces? Lo de putas ni que decir, eso es lo que somos, unas putas, o como crees que se les dice a las mujeres que les dan el culo a muchos hombres? Y más ahora que nos están pagando. Pero bueno, de verdad me impresiona que estes aquí porque tú eres muy retraída. Y a ti también te pagan?
Pau: Yo conocí a William hace más de cinco meses, y a Andrés hace como tres meses más o menos. Mi papá me trajo donde William pero la verdad no me pude tragar su verga, es que es muuuuy grande, así que solo me mete un poco menos de la mitad y me llena de su leche, por atrás solo me ha metido la pura cabecita. Mi papá me da la mitad de lo que él le paga por cada vez que me trae y me dice que no le da mucho porque aún no me entra toda su verga.
Cielo Riveros: Mmmmmm ya entiendo porque se puso así de loco el día que vio que me podía tragar dos vergas al mismo tiempo, tú fuiste la culpable de que me detonara el culo de esa manera. Mira y Nat, dime que no está en estas?
Pau: No, mi hermanita no, eso fue lo primero que le dije a mi papá, esa fue la condición cuando me propuso que ganáramos un dinero extra, que a mi hermanita no la podía traer aquí, pero no dudo que algún día lo haga.
Cielo Riveros: Si no es que ya la han traído y no sabemos.
Pau: Estoy segura de que no, Nat me cuenta todo y yo me hubiera dado cuenta de que algo pasaba.
Cielo Riveros: Esperemos que sea así, estos tipos son unos burros y la podrían lastimar, tú sabes que ella no mide sus acciones.
Pau: Y yo no sé cómo tú eres capaz de tragarte semejantes vergas.
Cielo Riveros: Ni te creas, me trago lo que me cabe sin tanto dolor bien que mi chucha es profunda y que decir de mi culo, aunque he de confesarte que la primera vez que William me lo metió por atrás me desmayé.
Pau: Júramelo Cielo Riveros, así de feo se siente?
Cielo Riveros: Pues de que duele, duele, pero el desmayo fue más que todo por lo rudo que me trato. Ese HP burro se arrechó tanto cuando vio que tu papá me ensarto por el culo mientras él me daba verga por la concha, que no se lo podía creer que cuando mi tio2 me la sacó él enseguida me ensarto pero super fuerte hasta derramarse todo dentro de mí. Nooooo marika, me desmaye cuando se me apoyo, tú sabes que su verga es supergruesa, jueputa quede rota, ese día si quedé rota de verdad, hasta sangre me saco el muy hijueputa.
Pau: Uy no, y mi papá quiere que me la deje enterrar, porque le dijo que me pagaría el doble.
Cielo Riveros: Ah bueno, pero eso se puede arreglar hablando, ya te dije que ese día fue porque se emocionó mucho, si él hasta después me lo dijo y se disculpó. Y mira que hoy me trato muy suave.
Pau: Y Andrés que te parece?
Cielo Riveros: Uy ese man tiene una verga divina, super suave, huele deliciosa, bien rectecita, larga pero no maltrata, la sabe manejar muy bien. Me encanta su verga. Y ni qué decir de su leche, es dulcecita, ya le dije que esa si me la quiero seguir tragando.
Pau: Cuantas veces te han cogido esos manes?
Cielo Riveros: William esta es la segunda vez con hoy. Andrés si es primera vez.
Pau: Al mismo tiempo.
Cielo Riveros: Si, y por ambos huecos, y ahora que me viste con Andrés fue porque se me metió al baño y me puso a mamar y cuando se iba a derramar me la enterró por la chucha. Te cuento que con este Andrés si quede enamorada, que tipo para culiar sabroso, nojoda es que en él todo es sabroso, su leche es dulcecita. Con él si voy a hablar directamente, para que me dé verga más seguido. Así que ojo y le dices algo a tu papá que ya eso lo voy a manejar yo.
Pau: Bueno, menos charla y más acción, así que vamos para afuera que ya deben estar ansiosos.
Cuando salimos del baño la habitación estaba desocupada, así que nos dirigimos hacia la piscina, y allí estaban esos tres hombre completamente desnudos, tomando cerveza y dándose un buen chapuzón. Como era sábado y ya eran más del medio día, nos recibieron con risas pícaras y nos invitaron a entrar junto con ellos.
William: Vamos chicas no se hagan rogar, fuera ropa y entren.
Cielo Riveros: Pa joderte y si nos ven tus trabajadores, más bien vístanse ustedes.
William: No mi amor, tranquila, que ya aquí no hay nadie. Les di el día libre a todos para que se fueran. Les dije que tendría fiesta hoy, y ellos saben que necesito privacidad. Vengan que ya pronto llega la comida.
Así fue que nos desnudamos y nos metimos al agua, al poco tiempo llego un deliveri con comida de todo tipo. Pollo asado, broster, arroz chino, ensalada de frutas, una caja de helado, mas cerveza y mecatos. Me quise morir cuando escucho el saludo y veo a un tipo parado al lado de las sombrillas de la piscina, enseguida me metí al agua para que no me viera. Fui la burla de todos, inclusive de Pau.
William: No seas pendeja Cielo Riveros, David ya sabe lo que pasa aquí.
Cielo Riveros: Pendejo tú nojoda, que tal que me conozca o me reconozca por la calle, ahí quedo como la puta del pueblo. Nojoda piensen. Y tú idiota – dirigiéndome a Pau – deja de reírte y analiza, que tú si que tienes amigas de plata y estos tipo si que pasan metidos en sus casas llevando pedidos.
Andrés: Hasta razón tiene la nena. Listo David deja todo eso allí, y gracias.
El tal David no dudó en buscar ver mi rostro, obvio mi reacción le llamó más la atención.
Luego de que el deliveri se fuera, y que todos comiéramos, nos recostamos en las camas a descansar un poco. Y pasados unos 40 minutos se levanta Andrés diciendo.
Andrés: Yo no sé ustedes, pero voy a seguir la fiesta.
Y al ver que se dirigía hacia mí, abrí las piernas para ofrecerle mi vagina nuevamente. Él, acomodándose en el suelo me dice.
Andrés: Ya que no nos han presentado, pues lo hago yo. Mucho gusto, mi nombre es Andrés, amigo de éste par de depravados. De verdad que es un encanto conocerte.
William: Jajajajajajajajajaja, así es, después de la mondaquera que le diste es que te vas a presentar.
Cielo Riveros: No le hagas caso. Yo también estoy encantada – y me incorporé para darle un beso y decirle al oído en susurro muy bajo solo para él – por lejos el mejor amante que he tenido me tienes que dar tu número.
Sus ojos brillaron de emoción, sus labios se aferraron a los míos y nuestras lenguas iniciaron un juego dentro de nuestra bocas, sus manos acariciaron mi cabello y mi espalda, mis manos se apoderaron de sus pectorales, nuestras caricias se hicieron intensas hasta el punto de que los demás entendieron que lo que venía era íntimo, así que se salieron de manera sigilosa y nos dejaron solos en la piscina.
Andrés jugo con su lengua, besó mi rostro acaricio mi espalda y luego fue bajando por el cuello poco a poco llenándome de besos hasta llegara mis senos. Yo estaba perdida de excitación, deseosa de ser poseída por éste macho que me había provocado con su primer encuentro, sensaciones indescriptibles.
Cuando Andrés se apoderó de mis senos, mi cabeza se fue hacia atrás y mis labios soltaron un gran suspiro, sentí como mi vagina reclamaba ser poseída y mis piernas conocedoras de mis emociones se aferraron a la cintura de mi macho atrayéndolo hacia mi para sentir su enorme verga parada, palpitante y llena de jugos. Una de mis manos bajó hasta ella para acariciar su bella cabeza, mis dedos dibujaron círculos en su glande esparciendo su suave líquido que cada vez salía más y más, mi otra mano bajó y se apodero de su tronco, largo recto y suave, sin muestras de venas, era perfecto para ser acariciado, escupí un poco mi mano y lo sabe en su bello miembro, para ese momento solo existíamos él y yo en este mundo, mis oídos no escuchaban nada mas allá de sus suspiros, sus chupones en mis tetas y el sonido característico de la verga mojada siendo acariciada.
Con un suave movimiento, Andrés subió a mis labios me plantó un beso y con voz susurrona me pidió que me recostara en el piso. De inmediato tomó mis piernas y se las puso en sus hombros, agacho un poco su cabeza y se hundió en mi vagina húmeda por tanto preámbulo al sexo.
Sus manos acariciaban mis pezones y una de ellas fue bajando lentamente por mi estómago hasta llegar a mi pelvis, mientras su lengua se tomaba mis jugos, mientras una mano pellizcaba mis tetas, su otra mano empezaba a tocar mi clítoris, con movimientos circulares comenzó a acariciarme con la firme intención de despertar en mi un orgasmo.
No puede más, solté un leve grito, mis caderas subieron, mis piernas se tensionaron, mis manos se aferraron a su cabello y mi vagina soltó un chorro abundante de squirt, algo que muy pocas veces han logrado sacar en mí. Sí otra vez tuve un orgasmos de esos que no se esperan pero se desean con ansias.
Pero allí no terminaba todo, esto apenas estaba comenzando y mis pierna ya flácidas sabían lo que ese hombre era capaz de despertar en mí.
Una vez se sació de mis jugos, una vez sintió que mi cuerpo se relajó, él se incorporó me dio otro beso dándome a probar mi propio sexo y dirigió su verga hacia mi boca, era mi turno de hacerle sentir lo bello que es ser tratado con delicadeza. Así que sin pensar demasiado tomé con mis dos manitas su hermoso miembro, y llevándolo a mi boca lo comencé a acariciar con mis labios, a rosar su glande por toda mi boca, a dibujar líneas sin sentido en mi rostro, a pasar mi lengua por todo su tronco y llegar a su orificio para saborear sus babas, babas de dulce sabor, a introducir ese tronco suave, recto y sin venas que al contacto con mi lengua palpitaba de gusto, las emociones no se hicieron esperar, y mi vagina reclamó lo que por derecho tiene, así que tomé una de sus manos y la dirigí hacia ella para que la calmara mientras mi boca disfrutaba de ese miembro tan apetecido. Sus dedos comenzaron a acariciar mi zona, la palma de su mano cubría toda mi vaginita y algo más, sus dedos que rozaban mi intimidad me sacaban suspiros de placer y erizaban toda mi piel, él entendió y de la manera más gentil comenzó a introducir su dedo medio en mí. Ohhhhh que agradable sensación, esa sensación que solo se siente cuando estas con la persona adecuada, y yo, con sólo un rato de conocerlo, ya sabía que este hombre era el macho de mi sexo.
Pasaron los minutos y mi vagina se humedecía más y más, y su pene reaccionaba con mayor frecuencia a mis caricias. Un enorme suspiro dado por él me indico que su clímax estaba muy cerca, así que me saque su bello miembro de la boca, me recosté sobre el piso, abrí mis piernas, cerré mis ojos, arquee mi espalda y esperé a que él hiciera su parte. La penetración fue tan suave como placentera, nuestro miembros estaban tan húmedos que solo se sintió el placer del calor que brota de dos cuerpos en excitación, sus movimientos circulares llegaban a cada rincón de mi vagina llenándola por completo, sin dejar espacio para nada más que el goce. Y la magia surgió de nuevo, mis piernas empezaron a tensionarse, mi piel se erizó por completo, mis senos se pusieron tan duros y a la vez tan sensible que el roce de su cuerpo me hacia temblar, todo en nosotros fue una bomba de excitación que al estallar lo hizo tan estrepitoso que rompió el silencio de la tarde de ese sábado, mi grito grave pero placentero sumado a sus enormes rugidos de macho en celo retumbaron por toda la casa indicando que algo maravilloso acababa de suceder.
Cayó sobre mi pecho en señal de placer, solo tuve fuerzas para acariciar su cabello y esperar a que regresara mi alma al cuerpo.
Tio2: Que pasó aquí?
Fue la pregunta que nos sacó de ese letargo de sexo en el que habíamos terminado. Abrí los ojos y vi tres cabezas que nos miraban juzgando lo que acababa de pasar. De mis piernas bajaba abundante semen que se perdía en el agua de la piscina, y el sudor, producto de lo allí ocurrido, formaba una sombra sobre el piso donde aún descansaba mi cuerpo y el de él.
Pau: Hay papi, acaso no lo ves, acaban de tener sexo.
Tio2: Eso veo, pero ese grito fue algo más que solo sexo.
Pau: Bueno, si es así entonces estamos sobrando, así que vamos a seguir con lo nuestro, ya mis huecos se estaban acostumbrando a sus vergas.
Dando vuelta, nuestros compañeros se retiraron, como dijo Pau, a seguir con lo que estuvieran haciendo, que después me enteré, se atrevió a que William le metiera la verga por detrás mientras su papá la tenía ensartada por su vagina.
Cielo Riveros: Andrés, quiero que esto que acaba de pasar se repita. Pero eso sí, solos tú y yo. No quiero mirones, ni carreras porque el tiempo se nos valla a acabar. Ahora me das tu numero para poder conversarte. Claro, si es que se puede.
Andrés: Claro que sí Cielo Riveros, tengo que confesarte que, si bien no eres la primera niña con la que he estado, si eres con quien he disfrutado tanto en la primera oportunidad. Y sí, claro que esto tiene que repetirse. Ahora intercambiamos números para estar en contacto, yo tengo mi departamento de soltero, que como te puedes imaginar es para gozar la vida, pero de hoy en adelante serás la invitada especial.
Y así termino un día especial de sexo con alguien que en mi vida se convirtió en una persona muy especial. Al día de hoy, 13 años después, si bien ya él esta casado y con una familia muy hermosa, aún tenemos encuentros casuales, y nuestra experiencia nos hace vivir sensaciones increíbles.
Y siguen mis vivencias. Una muy desagradable experiencia..
Mi vida sexual siguió más viva que nunca. Y desde que conocí a Andrés nos convertimos en amantes. Al final esa relación salió a la luz pública, claro está, dentro de nuestro círculo de amigos pervertidos. Nuestro encuentros se convirtieron en cosa de casi todos los fines de semana. La excusa para salir era los cursos aquellos que les comenté que se hacen en mi país, las pruebas que nos realizan para evaluar conocimientos. Bueno, valiéndome de esas pruebas, salía disque a estudiar con mis amigas, y en realidad era con mi amiga verga de Andrés, aunque también tenía que dedicar tiempo a los demás, William, mis tíos, mis hermanos, mis primos y por supuesto mi padre. Pero el orden era ese, Andrés se ganó un lugar muy especial en mi corazón, y como les comenté, hoy día seguimos disfrutando de encuentros casuales.
Unos meses después de cumplir mis 13 años, me encontraba un día festivo en la casa de mi amiga Meli, les recuerdo, a ella le dedique el relato #7, ese donde les dije que su papá, que era profesor, se la cogía junto a su hermanita Mayito. Bueno, estando con ella y con otra vecina, que si bien vivía en el vecindario hace mucho tiempo, apenas llevábamos pocos meses de hablarle ya que se mantenía encerrada en su casa. Pero más tarde me enteré de que esa amistad no nació por coincidencia, sino que había una mente maestra detrás de eso.
Luego de jugar por largo rato, la nueva amiga que se llama Marcela le dijo a Melissa que fuéramos a su casa, para seguir jugando allá. Pero Melissa estaba sola con su hermanita y tenía prohibido moverse de la casa si no estaban sus padres presentes, así que no pudo ir, pero me dijo que si quería yo podía acompañarla. Por curiosidad me levanté y fui con ella hasta su casa. Cuando llegamos estaba su hermanito jugando en la sala y el Tv estaba encendido en un juego de futbol, por lo que deduje que su papá se encontraba en casa. Entramos y ella se dirigió a su habitación, volteo a verme y me hizo señas de que la siguiera, entramos a su cuarto que se estaba muy limpio y ordenado, jajajaj nada que ver con el mío. Me mostró su colección de muñecas, otros juguetes más y unos libro para colorear que tenía en su escritorio.
Pasado unos minutos sentí que llego su papá, nos saludó desde la puerta, entró a la habitación acercó su boca a su hija y le dio un beso en los labios: pero no fue un beso para saludar, fue un beso con lengua incluida. Le pasó las manos por la espalda y llegó hasta donde nacen sus nalgas, levantó la vista y me saludo con una sonrisa en sus labios, me guiño un ojo y se acercó a besarme de igual manera. De inmediato entendí sus intenciones, aparté la cara y le ofrecí mis majillas, pero él tomo mi barbilla, enderezó mi cara y me besó de igual forma que lo hizo con su hija. Traté de apretar mis labios, pero su lengua fue muy rápida y entró en mi boca y empezó a jugar. Me alejé retirando mi cabeza y lance una mirada de sorpresa.
Cielo Riveros: Pero qué le pasa, porqué es tan atrevido?
Never: Tranquila Cielo Riveros, ya muchos sabemos tu secreto, así que puedes relajarte también con nosotros, cierto Marcela.
Marcela: Si Cielo Riveros, ya Melissa me confirmó lo que eres capaz de hacer.
Never; Si, y el profe me dijo que eres muy ardiente, que sabes bien cómo manejar una verga, así que hoy es mi turno de vecinos del barrio, hoy me toca a mí.
Cielo Riveros: Y ustedes creen que yo soy una puta a la que pueden tomar cuando quieran o qué?
Never: Que tal si esa pregunta se la hacemos a tus padres?
Cielo Riveros: Usted es un maldito.
Never: Sí, eso lo sé, pero ahora lo que quiero es probarte a ver si es verdad todo eso que me dijo el profe de ti.
Y sin más palabra se acercó a mí, halándome de los brazos con manos firmes y fuertes. Never era un tipo alto, no tanto como William y Andrés, pero tenía buena estatura, al igual que su hija, que pese a ser un año menor, era más alta que yo. Sin importar si yo quería o no me empezó a dar besos en toda la cara, a acariciarme el cabello, a decirme que siempre había deseado tenerme así de cerquita, y luego besó mis labios y metió su lengua nuevamente en mí. Yo me quedé quieta dejando que él hiciera todo, sin demostrar miedo pero tampoco sumisión. Mientras él me hacía eso su hija le comenzó a quitar el pantalón, desabrochando la correa, quitando el botón y bajando la cremallera, para luego bajarle el pantalón junto con su ropa interior, dejando a su padre desnudo de la cintura para abajo, no alcance a ver que tal tenía la verga porque ella fue rápida en metérsela en la boca, se tragó su verga por completo y empezó a dar una mamada fuerte, con mucha prisa, lo que me hizo pensar que no tenía tanta experiencia.
Luego de unos minutos Never le indico a su hija que le ayudara conmigo, y ella de inmediato se levantó y me empezó a desnudar, me desvistió por completo y junto con su padre empezaron a acariciar mis senos.
Never: Que te parecen? – preguntó mirando a su hija –
Cielo Riveros: No están nada mal – respondió ella refiriéndose a mis senos –
Ambos se apoderaron de una teta y me las mamaban de una forma brusca que hasta me hacía doler un poco los pezones. Luego Never me recostó en la cama y me abrió de piernas y de inmediato se metió a chuparme, meterme sus dedos y lamerme tanto la chucha como el culo. Pese a ser una chica fácil para el sexo, una chica que como les he dicho en varias ocasiones, nunca desperdicia una buena verga, con ellos no me sentía cómoda, tenía la impresión de que sería una cogida brusca, que de alguna forma saldría lastimada.
No fue mucho lo que demoro chupándome la vagina, de un salto se puso en pie, cogió su verga, y poniéndola en la entrada de mi vagina la empujo con tanta fuerza que me obligo a ladearme un poco para recibir su miembro. Y no porque lo tuviera grande, no, no fue por eso, fue por la manera tan brusca en que me trato, que si bien mi vagina esta todo el tiempo húmeda, en ese momento no había alcanzado un grado tal de humedad ya que sus caricias no habían hecho efecto en mí. Marcela se posó en la parte de mi culo, y como yo tenía las piernas levantadas, le quedó libre para hacer lo que quisiera, así que procedió a meter su cabeza por debajo de las bolas de su papá y me empezó a chupar el culo metiendo al tiempo sus dedos produciéndome dolor ya que no los había lubricado en lo absoluto. Por lo visto a esta familia le encantaba el sexo agresivo, algo que yo no había probado nunca, ya que mis amantes se habían sabido comportar, exceptuando la vez que William enloqueció y me reventó el culo.
Las embestidas de Never eran fuertes, los apretones que daba a mis tetas me lastimaban, en ocasiones apoyaba una mano en mi cuello como queriendo ahorcarme o metía dos de sus dedos en mi boca. Marcela no se quedaba atrás, sus dedos culiaban mi culo de manera frenética, y ese roce provocaba una sensación desagradable dentro de mí.
Así transcurrieron unos 20 a 30 minutos, donde prácticamente estaba siendo violada cuando escuche una voz que dijo.
Profesora: Ah pero empezaron sin mí.
Era la profesora, la mamá de Marcela, quien estaba parada en la entrada de la alcoba con una mano en la cintura y otra en el marco de la puerta.
Never: Perdón amor pero esto no daba para espera
Profesora: Entiendo, siempre te has querido coger a Cielo Riveros, y esta oportunidad no la ibas a desperdiciar. Ya vengo, hecho una meada y enseguida estoy con ustedes.
Quedé aún mas desconcertada. Cómo es posible que en una cuadra de unas 20 casas viviéramos cuatro familias que practicaran el incesto y la pedofilia. Y en dos de esas familias todos sus integrantes participaran como si de algo normal se tratara. Allí entendí por qué en las redes se ven tantas cosa y se leen tantos comentarios morbosos y de doble sentido.
La profesora regresó del baño ya desnuda por completo y en compañía de su hijo Jose, quien tendría unos 6 años aproximadamente, y también lo traía desnudo y con la verguita ya parada.
José: Mira mami, no nos invitaron, y yo que creía que Marce estaba era jugando con Cielo Riveros.
Profesora: Para que veas hijo, que ya no se puede confiar uno ni siquiera en la familia.
Never: Hay por favor dejen de hablar tanta mierda y vengan, que esto ahora es que se va a poner bueno.
La mamá de Marcela acostó a su hijo a mi lado, se le montó en su verguita ya parada y se agacho a chuparle las tetas.
Profesora: Que tetas de ricas tienes Cielo Riveros, si ven yo se los había dicho, que esta niña tenía las mejores tetas de la cuadra, por eso fue por lo que me masturbe aquella noche que estábamos morboseándola en la terraza mientras ella jugaba con Melissa. El profe no nos mintió cuando nos dijo que esta ricura de niña se atrevía a todo.
Al igual que su marido y su hija, la profesora también practicaba el sexo agresivo, al chuparme las tetas me mordió los pezones por lo que di un grito fuerte de dolor.
Never: Ajá, en qué habíamos quedado, con ella no podemos hacer éstas cosas, la vas a espantar.
Profesora: Perdón no me aguanté, es que se ve muy deliciosa, y esas tetas están bien duritas.
Never: Claro, las de Marcela tú eres quien se las tiene aguadas de tanto mordérselas.
Never: Mejor búscate el arnés del pene para penetrarla doble.
Profesora: Enseguida.
Y fue a buscar algo, cuando veo que saca de su closet un cinturón que tenía amarrado un pene enorme, mucho más grande que la verga de William, pero de grueso normal. El papá de Marcela me dio vuelta sin sacarme su verga y quedé ensartada encima de él, la profesora tomó bastante cantidad de lubricante que tenían al lado de la cama, lo untó en el pene de plástico y me lo enterró en el culo sin preguntar ni preparar nada. Definitivamente ésta sería la experiencia más desagradable que viviría, ese pene me lo metió hasta que su barriga topara con mi cola, se me salieron unas lágrimas que cayeron en el pecho del profesor. Pero a ninguno le importó eso, ambos siguieron dándome verga y ahora tenía a Marcela chupándome las tetas mientras se ensartaba en la verguita de su hermanito. No sé qué comería esta gente o como mierdas se prepararía, pero duramos más de una hora haciendo poses pero siempre me metían las dos vergas al tiempo, y siempre de manera brusca provocándome dolor.
Luego de ese tiempo, cuando Never gesto de querer derramarse, Marcela se levanto y tomando mi cara me restregó su vagina húmeda y hedionda a orines, fue muy asqueroso sentir su vagina así. Su mamá al ver que yo no reaccionaba como lo esperaban, me halo por el cabello y me dijo “Chúpasela” empujando mu cara dentro de las piernas de su hija. Consiente de que si quería salir victoriosa y rápido de esto, comencé a chupar la vagina babosa de Marcela, y no solo olía desagradable, su sabor era asqueroso. En esos momentos sentí los chorros de leche de Never, que inundaron mi interior, y su rugido animal les indico a sus mujeres que ya había explotado, con lo cual la profesora me sacó la verga plástica y me dio un empujón de lado cayendo yo de espaldas y con las piernas levantadas. Sin dejar pasar tiempo, tanto hija como mamá metieron sus cabezas en mi entrepierna y comenzaron a pelearse por la leche que de mí salía. Parecían leonas en un festín de comida, devoraron cada gota de semen que brotaba de mi chucha y hasta metieron sus dedos como quien limpia el envase de un yogurt.
Al fin de tanto tiempo, todos quedamos exhaustos, pero yo aproveché que se tiraron boca arriba en la cama, y vistiéndome rápido Sali de la casa sin despedirme.
Esa ha sido hasta el día de hoy la experiencia más desagradable de mi vida, y que nunca mas se volvió a repetir.
Saluditos de nuevo. En esta ocasión les contaré como fui cogida por el sr del taxi que nos transportaba a la escuela..
Como les he comentado en varias ocasiones, mi familia se compone de papá, mamá y los tres hijos, yo que soy la segunda y mis hermanos mayor y menor que yo.
En la época de escuela nuestros padre nos enviaban con un señor que es taxista y que se le recomendaron a mi mamá, él vive en el mismo barrio donde nosotros vivimos. Este señor llamado Tulio transportaba a otros muchachos para la misma escuela en la que nosotros fuimos matriculados, y de allí comenzó esa relación de amistad.
Tulio siempre fue muy respetuoso con nosotros durante todo el tiempo que duro transportándonos. Nunca hubo una queja por una mala cara, una palabra mal dicha, ni siquiera por su forma de conducir, siempre fue muy cariñoso con nosotros, nos hacía reír mucho, nos tenía mucha paciencia a la hora de recogernos, bien fuese en la casa o en la escuela si en algún momento tuviésemos alguna demora.
Con mis 13 años y con mi cuerpo bien formado gracias a mi estatura y contextura gruesa, y porque no aceptar, por la verga que he llevado durante mi corta vida, era la atracción de grandes y chicos, en especial de grandes, y pues Tulio pese a ser muy discreto no fue la excepción. Recuerdan que les dije que en algunos años teníamos un curso para unas pruebas que hacen en mi país? Bueno, un sábado en la que salí de mi clase y mis amigas se fueron casi de inmediato, yo quedé sola esperando a mi hermano mayor a quien aún le faltaba poco más de una hora de curso. Me puse a deambular por la escuela y se me dio por comprarme un mango, y valla sorpresa que encontré a Tulio parqueado en las afueras de la escuela. Así que aproveché y me metí al taxi para no estar sola y que el tiempo pasara más rápido al ponerme a conversar con él. Ese día recuerdo que llevaba puesta una blusa blanca de tirantes, una chaqueta de jean y una falda corta poco más arriba de la mitad del muslo y con la respectiva lycra por debajo.
Entre al taxi sentándome como siempre justo detrás del conductor, que había sido siempre mi preferencia ese sitio, la verdad no sé por qué. Él inicio la conversación preguntando primero cosas triviales de la vida, la escuela, el curso, y luego fue profundizando en los amigos y terminó preguntando por si tenía algún noviecito por allí escondido.
Entre risas le negué pero por dentro me decía “si supieras las vergas que me trago”. Luego de hablar por unos minutos, él miro su reloj.
Tulio: Aún nos queda 1 hora, qué se te ocurre que podamos hacer?
Cielo Riveros: Pues no tengo ni idea. Será que nos dormimos un rato jajajajajaj
Tulio: Noooo, me sentiría muy incómodo durmiendo al lado de tan bonita señorita.
Cielo Riveros: Gracias por lo de bonita, pero no veo porque te incomodarías.
Tulio: es que Cielo Riveros, te has vuelto una señorita muy bella, estas super grande, y con muy buen cuerpo. Fíjate que estaba viendo ahora que venías como esos tipos que están vendiendo allá te querían comer con la mirada.
Cielo Riveros: Si, ese es el precio de la belleza jajajajajajaj
Tulio: Si jjajajajajajajaj, pero fuera de chiste, es muy cierto, te convertiste en una niña muy deseada. Oye y por qué no te pasas para acá adelante, así no tengo que estar volteando la cabeza, ya hasta me duele el cuello jajajjaajaj.
Yo no le vi nada de malo a su invitación, así que sin bajarme del auto, me pasé para el puesto del copiloto, y al pasar cerca de él estiro su mano izquierda para sujetarme del brazo, y una vez pasó mi tronco apoyo su mano derecha en mi muslo, quedando en contacto directo con mi piel y poco a poco fue rodando su mano hasta quedar muy cerca de mi vagina, obviamente separada por la lycra.
Tulio: Que pene, disculpa, no era mi intención tocarte de esa manera, espero no vallas a incomodarte.
Cielo Riveros: Esta bien, no hay problema.
Silencio incómodo
Tulio: Es que si me lo permites, tienes una piel muy suave y fresca, y al tocarte no me pude contener.
Cielo Riveros: Si, es que yo sí me baño todos los días jajajajaaj
dije eso con intenciones de cambiar la conversación.
Tulio: Insinúas que yo no me baño?
Cielo Riveros: Yo no he dicho nada…….
Tulio: Pero mira, como crees que vas a comparar una piel suave, tierna, tersa y sin bellos como la tuya, a una piel llena de pelos, arrugas y áspera como la mía, es apenas lógico que llevo las de perder.
Cielo Riveros: Bueno en eso debo darte toda la razón.
Hubo risas de momento, luego un silencio un tanto incómodo hasta que se atrevió a continuar.
Tulio: Mira esos muslos tuyo – tocando mis piernas – contra esto
Y de manera sorpresiva se desabrocho el botón, bajó la cremallera y se bajó el pantalón hasta la rodilla quedando en bóxer y con una erección que no podía o más bien no quería ocultar. Y tocándose las piernas termino su frase.
Tulio: Es imposible que compares éstas dos pieles
Y tomando mi mano la puso sobre su muslo y la sobó casi hasta tocar su bulto. Todo fue tan rápido que no tuve tiempo de reaccionar, como dije Tulio siempre había sido en extremo respetuoso con todos, así que no sé qué le dio ese día que actuó de tal manera.
Mientras sobaba su pierna con mi mano, su otra mano se dirigió a mi muslo y empezó a acariciarme desde la rodilla hasta la misma vagina, sin meter mano dentro de mi lycra, y con mi mano hacia lo mismo, la pasaba sobre su verga por encima del bóxer y la apretaba contra su cabeza que ya estaba dura, palpitante y húmeda.
Su respiración comenzó a notarse agitada, sus pupilas se empezaron a dilatar y la expresión de excitación en su rostro era inconfundible. Si, Tulio se había aguantado mucho y llegó el día que explotó, la situación fue propicia para él, y no habiendo una reacción negativa de mi parte, dio el siguiente paso.
Sin reparos bajó su bóxer liberando se verga brillante y húmeda, una verga muy normal pero con una curvatura bastante pronunciada hacia el lado izquierdo. Mi mano siguió guiada por la de él sobando su miembro, mojándose con sus fluidos, que más bien parecía que se hubiese orinado por la gran cantidad que brotaba de su cabeza. Como siempre se los he dicho, nunca desaprovecho una verga, y ésta pese a haberme tomado por sorpresa no iba a ser la excepción. Tulio al sentir que mi mano tomaba vida propia, y que ya no necesitaba ser guiada, me soltó y de inmediato se acercó a mi cara para darme el primer beso, un beso sutil pero desesperado, bastante húmedo para mi gusto y con una lengua juguetona. Sus manos hacían lo propio, actuando de manera independiente, una se posaba en mis tetas mientras la otra buscaba mi vagina. Mi reacción era la esperada, abrir las piernas para darle paso a sus caricias.
Este tipo estaba como un loco, se notaba desesperado, no sé si era la primera vez que lograba tener a una niña así en su auto, pero en ese momento no lo pensaba investigar, ya habría tiempo después, el de ahora se limitaba a la salida de mi hermano en cualquier momento, así que no podíamos darnos el lujo de parar a conversar. Mi mano libre ayudó a la de él a bajarme la lycra junto con la ropa interior, de inmediato estuve desnuda de la cintura para abajo, hizo un movimiento rápido y accionó la palanca del asiento reclinándolo a su máximo despliegue y metiendo su cabeza en mi vagina, sin ningún tipo de preámbulo como besos o caricias por los lados, no, él fue directo a mi clítoris, lo apretó con sus labios, lo chupó fuerte y luego empezó a usar su lengua con la misma agilidad que la usó en mi boca, he de confesar que un poco más y me lleva a mis tan acostumbrados squirt. Pero el tiempo era apremiante, así que no podía quedarse allí todo el tiempo, así que se levanto tan rápido como se había agachado, se agarro la verga con su mano izquierda y puso la derecha en mi cabeza, la señal era clara, era mi turno de mamar, y tampoco tenía tiempo que perder, así que hice exactamente como lo hizo él, baje directo a su verga, la metí lo más que pude en mi boca y comencé a mamar tan fuerte que sus gruñidos no se hicieron esperar, en dos minutos estuvo a punto de soltar sus chorros así que agarrándome por el cabello me retiro y halándome del brazo me indico que me subiera encima, petición que obedecí de inmediato y sin perder tiempo me arrodille a cada lado de su cuerpo, y agarrando su verga me la enterré de un solo movimiento. Entro toda, no quedo por fuera nada mas que su pelos, y comencé un sube y baja frenético que no se ni me importó si se notaba en el carro. Lo cierto es que en menos de 5 minutos ya él estaba gruñendo como un león, y yo gritando como una perra, el final fue frenético, así como el creampie que resultó de esa relación, fueron chorros y chorros de leche que salían de mi vagina, se escurrían por mis muslos y llenaban el asiento de Tulio, quedamos empapados de nuestros jugos, el carro quedó con ese olor característico del semen.
Luego de reaccionar, y de ponerme en el asiento de al lado, Tulio se sintió apenado por lo que acababa de pasar.
Tulio: Cielo Riverosra, lo siento, no sé que pasó, te juro que n…….
Cielo Riveros: Shhhhhhhh – le dije poniendo un dedo en su boca – no pasó nada que yo no quisiera, ahora arranca y busquemos algo para limpiarnos y quitarle éste olor a sexo al carro, mi hermano no tarda en salir.
Así fue que nos alejamos a un lavadero, el llamó a un muchacho y le pidió un tanque de agua, nos retiramos nuevamente y bajándose del auto notó que estaba hecho un asco, su pantalón se había chupado los jugos producto del acto, con un trapo húmedo limpio la silla, rocio ambientador en el auto y regresamos a la escuela, a escasos 15 minutos de la salida de mi hermano.
Por mi parte me limpie con la panty, me coloqué la lycra y usé la panty como toalla sanitaria ya que aún quedaban restos de su semen dentro de mí.
Saluditos de nuevo. El sr del taxi le cuenta a un colega suyo..
Los días siguientes a mi experiencia con Tulio siguieron sin ningún tipo de cambios, él como siempre risueño y atento, y yo continue con mi vida, que ya era bastante normal para mí el ser deseada y usada en cualquier momento y por quien menos lo esperara.
Era la forma de vida que se me había presentado y dada a mi corta edad la estaba asimilando como normal.
Solo en dos ocasiones más en las que Tulio tuvo la oportunidad de estar a solas conmigo por poco tiempo, fue que tocamos el tema. La primera vez él se mostró incomodo y me pidió disculpas, pero como le dije que no tenía nada de qué preocuparse, ya para la segunda vez me pidió que le dejara ver mis tetas, a lo que no solo se las dejé ver sino también que me las chupara en lo que mis hermanos llegaban, que no fue más de 2 minutos.
Transcurrido un tiempo bastante prudente, no sé digamos unos 6 o 7 meses, sucedió algo, que cómo les dije anteriormente, ya para mí era normal.
Mi hermano presentó un cuadro viral un viernes por la tarde, a lo que mi mamá decidió no mandarlo el sábado al curso, por lo tanto me fui sola con Tulio.
Cielo Riveros: Buenos días Tulio, vámonos que mi hermano amaneció con fiebre.
Tulio: Anda Cielo Riveros, bueno nos tocó irnos solos. Pero ven, pásate para acá.
Cielo Riveros: Pero solo podrás mirar, está muy temprano para tocar – le dije anticipándome a lo que era inevitable que iba a pasar –
Tulio: Valla, sí que eres astuta.
Cielo Riveros: Todos se aprovechan de eso.
Tulio: Cuantos hombres ha habido en tu vida? Tus padres lo saben?
Cielo Riveros: Primera respuesta, sin números, no pienso confesar eso con nadie. Segunda respuesta, no, no lo saben, así que si no quieres problemas es mejor que guardes el secreto.
Tulio: Mmmmm bueno con eso queda todo claro.
Avanzamos un poco en el auto, pero lo noté incómodo, como queriendo preguntar algo más. Así que girándome hacía él le dije
Cielo Riveros: A ver, pregunta, qué más quieres saber.
Tulio: Es que para mí es increíble esto Cielo Riveros, nunca pensé que fuera cierto. Si me habían dicho de niñas que les gustaba tener relaciones, pero nunca me imaginé que podría sucederme a mí. Y sí que menos, que fuera contigo.
Cielo Riveros: Yo he tenido bastantes amantes, no te lo voy a negar, si quieres un número, mmmmmmm, más de 8, incluyéndote.
Tulio: De verdad Cielo Riveros, waooo eso no me lo esperaba. Bueno, tampoco pienso saber quiénes son, pero……puede ser quien sea?
Cielo Riveros: A quien tienes en mente?
Tulio: No, no, solo pregunto.
Cielo Riveros: Anda dime, sé para donde quieres ir, así que dime.
Tulio: Esta bien, es que hay un amigo a quien le conté, claro sin decirle nombre ni nada, y él me dijo que haría lo que fuera con tal de probar también.
Cielo Riveros: $500.000.
Tulio: Qué???
Cielo Riveros: Sí, dile que esa es mi tarifa, dos horas máximo. Me avisas.
Y me bajé del taxi ya que habíamos llegado a la escuela.
El curso de los sábados termina tipo 1 de la tarde, ese día era víspera del cumpleaños del colegio así que les pidieron a los profesores que soltaran a los alumnos una hora mas temprano para poder arreglar la escuela. Así que tomé mi teléfono y llamé a Tulio para decirle que viniera a buscarme. No pasaron 5 minutos cuando ya me estaba escribiendo que estaba parqueado frente a la escuela.
El profesor terminó la clase, recogimos nuestras cosas, me despedí de mis amigas y salí rumbo al taxi para ir a mi casa.
Tulio: Cuenta – me dijo entregándome un fajo de billetes –
Cielo Riveros: Qué?, no creí que fuera tan rápido
Y tomando la radio llamó a su amigo.
Tulio: Pedro, nos vemos en el mirador.
Y salimos rumbo al mirador. Si recuerdan es el mismo mirador donde le mamé la verga a mi tío2 el día que conocí a William.
Llegamos al sitio reservado para autos en el mirador, había pocos vehículos, y estaba un sr de unos 35 años moreno, chaparrito con algo de barriga, típico de todo taxistas, quien al ver el taxi de Tulio se acercó de inmediato.
Abrió la puerta del copiloto donde yo me encontraba y saludo sin dejar de mirarme de manera lasciva y sorprendido. Tulio hizo las respectivas presentaciones, y le dijo a Pedro que corriera para atrás el asiento donde yo me encontraba. Me hicieron levantar de la silla, Pedro se sentó y comenzó la faena.
La mirada de Pedro se perdió en mi cuerpo cuando yo me empecé a desnudar, con manos temblorosas me tocaba los senos y me miraba la vagina, como cuando uno sabe que lo que hace esta mal, pero tampoco se atreve a detenerse, para darle confianza tomé su cara entre mis manos y lo comencé a besar, él temeroso pero decidido me siguió y comenzamos en juego de lenguas y ojos cerrados que hacen más emocionante el momento,
Sus manos se movían por todo mi cuerpo sin punto fijo donde detenerse, creo que él desearía ser un pulpo en ese momento. Así que lo ayudé tomando su mano derecha y colocándola directamente sobre mi vagina, haciendo presión con uno de sus dedos en el punto donde siento la mayor excitación, luego lo solté y dirigí mi mano a su cremallera para liberar su verga que estaba por estallar. El salto que dio su miembro fue estruendoso, y yo diría que hasta doloroso, porque noté que se hecho un poco para atrás, me imagino que por el roce de pantalón con la cabeza de su verga. No tenía un miembro muy grande que digamos, era mas bien por debajo de lo normal, eso sí un poco gordito. Lo tomé con mi mano, lo empecé a pajear y a sentir su palpitar y sus jugos correr por entre mis dedos. Debo confesar que tenía mucho tiempo de no tener relaciones, ya que por aquellas cosas de la vida me encontraba muy estresada por los estudios y las preocupaciones propias de mi edad, sumándole que se me había presentado un desorden hormonal y había ido al ginecólogo para que me diagnosticara algo. Por suerte para mí, no me hizo examen físico, solo me hizo algunas preguntas y me mandó unos exámenes todos en sangre. Tranquilos, no tenía nada malo, solo fue desorden hormonal.
Para ese momento ya tenía dos dedos de Pedro metidos en mi vagina, su otra mano acariciándome una teta, sus labios en jugando con los míos, y otra mano adicional, obviamente de tulio, tocando mi otra teta. De mi parte mis dos manos se encargaban de hacer una paja al miembro de Pedro, recorriendo desde la cabeza hasta las bola, cada mano por independiente encontrándose en la mitad de su verga. La respiración de Pedro estaba muy agitada, así que no perdí mas tiempo y acomodando su verga en la entrada de mi vagina, me fui deslizando poco a poco encima de ella, se sentía muy suave y se acopló muy bien a las paredes de mi vagina, inicié suavemente los movimientos de sube y baja sobre su miembro, él por su parte no se despagaba de mis tetas, estaba encantado chupándolas, lo hacía de una forma suave pero me encantaba cuando al final apretaba mis pezones con sus labios.
Pedro duró pocos minutos, al cabo de unos 8 ya se sentía rígido y con la respiración a mil.
Pedro: Me voy a venir agggggg no puedo aguantar, salte Cielo Riveros, salteeeeee!!!.
Cielo Riveros: Estas loco, eso no se bota, o me la hechas adentro o me la hechas en la boca.
No había terminado de decir eso cuando sentí tres grandes chorros de leche dentro de mí. Dioooooooosssss que sensación mas placentera, ya me hacía falta sentir todo esto, y de manera automática el orgasmo llegó a mí a través de un grito agudo que estoy segura lo escucharon todos los que estaban en el mirador.
Tulio solo atinada a mirarme de una manera sorprendida.
Tulio: Qué fue eso? Conmigo no pasó así.
Sin poder respirar con normalidad, miré a Tulio, le lance un beso, le guiñé un ojo y me desplomé sobre el pecho de Pedro. Minutos más tarde, cuando pudimos regresar de ese trance de sexo, tomé un limpión que había en el taxi y me lo puse en la vagina para terminar de aparar la leche que aún me quedaba.
Tulio: Me tienen que dar para lavar el carro.
Jajajajjjaja, todos reímos. Y mirando el reloj vi que aún faltaban 10 minutos para la 1.
Cielo Riveros: Pedro, aún te quedan 40 minutos, tú sabrás si los desaprovechas.
Se miraron entre ellos, se hicieron algunas señas y Pedro poniendo sus manos en mi cintura me empujó hacia Tulio, no había nada que preguntar, Pedro le estaba cediendo tiempo a su amigo para que me clavara, y yo no me hice rogar, de inmediato me ensarte en la verga ya parada de Tulio y me incline hacia la verga un poco flácida de pedro para darle su respectiva mamada. Al final es de las cosas que más me gustan, dos vergas para mi solita. Y así la pasamos bien rico durante unos minutos más, yo saltando y chupando verga, Pedro gozando de una mamada y tocando tetas y Tulio culiando mi chucha y metiendo sus dedos en mi culo. Luego de ese momento mire a Pedro y le pregunte.
Cielo Riveros: No te gustaría meter esa verga en mi culo?
Pedro: En serio se puede?
Cielo Riveros: Claro que sí, vamos dale, pero dale con fuerza, que sienta que me vas a partir en dos.
Tulio: Nojoda , y porqué no me dijiste eso a mí también.
Cielo Riveros: Y cual es el problema, acaso esta será la última vez?
Y así fue como Pedro, sin importar que estaba desnudo de la mitad de su cuerpo para abajo, salió del taxi, se dio la vuelta hacia la otra puerta donde yo había girado mi cuerpo sin salirme de la verga de Tulio, esperando a que Pedro me metiera su miembro por detrás. Delicioso volver a sentir, después de tanto tiempo, dos vergas adentro, el deslizarse de manera suave por el culo, sintiendo la presión de esas dos vergas adentro, y que en ocasiones se rozan internamente, es la mayor satisfacción que existe en temas de sexo, quien no lo haya vivido está perdiendo su tiempo.
Solo tres minutos bastaron para sentir los chorros de leche de mis parejas de turno, chorros que inundaron mis entrañas y me produjeron mis ya conocidos squirt seguidos de mis gemidos y el desplome por la tensión que se genera en ese momento.
Reposamos un largo rato, me compraron una bebida refrescante, me consiguieron agua para limpiarme y me llevaron a mi casa. Después de eso tuvimos un par de encuentros más igual de intensos.
Con el tiempo tuve otros encuentros con los mismos personajes que hasta hoy les he comentado. Pero, los intereses van cambiando, las oportunidades también y los gustos aún más.
Poco a poco fui dejando atrás esos encuentros, me fui interesando más por el estudio, mi futuro y uno que otro muchacho ya de mi edad con los cuales maneje mi vida sexual de manera muy distinta.
El único con el cual me seguí viendo pero a muy distantes épocas fue con Andrés, tanto así que a la fecha una o dos veces al año nos encontramos para recordar historias tras un vaso de vino, un helado o porque no, tras una tarde de sexo fuerte.
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