
Por
Anónimo
Despues de la fiesta.
Antes de regresar a la ciudad dejamos las casa de campo en orden cuando encontre bajo la almohada de mi cama un foto de una berga inmensa que me dejo toda confusa. Todos los invitados ya se habian marchado a sus casas y llame a mi esposo para mostrarle lo que habia encontrado bajo la almohada «Papi, te puedes imaginar de lo que son capaces algunos seres» Ni mi esposo podia entederlo cuando miraba esa señora berga en la foto «QUien pudo haber entrado a la recamara nuestra mami» decia mi esposo. Nos miramos a las caras y lo mejor fue reirnos de lo que habiamos encontrado y mi esposo decia «A eso le llamo una señora berga, pero de quien podra ser mami. Me gustaria que me la prestara por un rato para cuando este con vos» le puse un paro a mi esposo y le decia que eso no era de juego.
Dos semanas mas tarde recibia una llamada anonima y me preguntaba un hombre con una vez irreconocible «Te gusto lo que te deje bajo tu almohada?» le pregunte quien era y me colgo. Asi comenzo el vacilon del extraño hombre que mi esposo comenzo a escuchar a llamada anonima y naide respondia a nuestras preguntas. Esa foto fue tomada cuando la berga de quien fuere estaba bien parada y la verdad queria saber a que cuerpo de hombre iba esa berga pegada a él. Me iba a bañar y la foto estaba encima del tanque del agua del inodoro cuando la mire. Me pregunte quien la pudo llevar hasta ahi y habia sido mi esposo que todavia buscaba respuestas de una broma que nos ahbian jugado. Se le olvido llevarla a la gaveta del escritorio y la dejaba olvidada ahi encima del tanque de agua del inodoro. LLegue yo y la encontraba para quedarla mirando y me quitaba la bata poco a poco hasta que mire como los pezones de mis tetas se erectaban. Mire el pasador de la peurta del baño y me aseguraba poner llave a la puerta … me sentaba en la tapa del inodoro mirando a esa señora berga y le preguntaba «Berga, a qué hombre perteneces que la quiero conocer en vivo si fuese posible. Me tienes con la cabeza toda alborotada» hinoptizada mi mano iba buscando la panocha y mis ojos ahi mirando la foto de la señora verga y termine dandome una de mis mejores masturbadas de mi vida con un derrame de leche.
Llegue a mi cama bien vacia, liviana y le confese a mi esposo lo que habia hecho. Mi esposo como buen entendedor me decia que era obvio, pero que nunca mas mirara a esa foto porque iba suceder lo mismo. Ahi mismo me cogia mi marido y me decia mientras me cogia lo que esa foto estaba causando en el seno de nuestra intimidad. A los dis me llamaban de nuevo y le decia la tipo del otro lado del telefono que me habia masturbado con esa foto y me respondian que si la probara de verdad que me iria mejor, pero que eso no iba a suceder y que me siguiera pajeando. Le pregunte si me conocia y me respondia que a los dos, mi esposo y yo y, agregaba que nosotros lo conociamso bien a él. Su voz no era reconocible porque se ponia algo en la boca para dsimular su voz. Despues de un silencio me pregunto si yo queria probarla de verdad y le contestaba que me gustaria si se pudiera, pero sin tener problema alguno. El tipo colgaba la llamada y me dejaba encendida con unas ganas de coger y al final me iba a buscar la foto y no la encontraba… me ponia muy histerica porque me queria masturbar mirando esa señora berga y llame a mi esposa para preguntarle a donde habia puesto la foto. No sé como me escucho, pero me decia donde la habia escondido y al solo econtrarla me desnudaba para jugar con mis dedos sobre mi panocha y me daba la gran corrida.
Los mismos empleados que habian asistido a mi casa de campo eramos invitados a una cena de la compañia y ahi una vez reunidos mi esposo y yo tratabamos de adivinar quien nos habia jugado tal broma. Miraba a cada uno de los invitados y juzgaba, pero despues decia «No, este no puede ser» Bailamos y al regresar a la mesa ahi estaba una nota bajo mi cartera que decia «Si la quieres probar, escapate por un rato y sal del salon que al lado de éste complejo hay un callejon oscuro y ahi me econtraras si llegas a solas». Le decia a mi esposo que iria al baño y la vida me volvia en saber que iba a probar esa señora berga de la foto. Asi como decia la nota y me entraba al callejon oscuro cuando a unos treinta pasos de caminar en la oscuridad del callejon me tomaron de la espalda «Hey! no te vayas a pasar…me encontrastes. Todavia sigues con las ganas de probarla? me pregunto él y le dije que si «Vamos hacerlo rapido y haremos lo posible de satisfacernos los dos» me dijo el tipo que no podia verle su cara.
Me subio el vestido por atras y miraba al final del callejon como las gentes y autos pasaban y sentia como mis calzones me los bajaban. Me puse como un quarter back de futbol y me tomaron de mi cintura para buscarme el roto de la panocha y me prensaban con esa berga que habia venido buscando en tres meses. Me la metian con ganas y mi cuerpo me decia que era una berga perfecta para el tamaño de mi cuerpo. Se trataba de un buen cogedor y me hacía correr y seguido se corria él dentro de mi. Me dijo que regresra por donde habia venido y me iba contenta. Me fui directo a la mesa mientras mi esposo estaba en la cantina del bar. Las piernas me temblaban de tanta tension despues de habe estado cogiendo y mire cuando un tipo se acercaba a mi esposo y despues de un intercambio breve de palabras con el tipo, el tipo se alejo. Mi panocha me escurria por todos lados. Mi esposo llego a la mesa y me quedo mirando que le pregunte «Qué?» mi esposo me repondia «Nada, pense que te habias dormido en el baño». LLegamos a casa y una vez en la cama mi esposo me decia que me miraba muy alegre y le contestaba que él estaba en lo cierto. Mi esposo comenzo a metermela y me decia «Wao! estas bien empapada» y asi de simple le respondia «Esque he estado esperando con ganas a que mi esposo me coja que me moje tanto» Me cogia y escondia mi cara a un lado de su cara pensando en aquella berga de la foto… me la habia comido en el callejon del edificio donde se ofrecio una cena para los empleados de la compañia. Las llamadas continuaron y un dia descubria al tipo que casi ya era dueño de toda mi panocha que poco a poco se la fue quitando a mi esposo. Cuando le conoci no podia imaginar de su intelectuo y me enseñaba su berga que era igal que la de la foto. Mi esposo calzaba numero seis y medio y el de la foto calzaba numero diez
2 respuestas
-
Еstoy cоmpletаmеntе desnudo. ¿Quiеrе ver una imagen? – http://analsex4.fun
-
Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.