Era el trabajo de varios fines de semana ya que tanto yo como la persona que me propuso el trabajo teníamos nuestros trabajos aparte. 

Los dos primeros fines de semana todo era de los más normal y el tercer fin de semana el sábado hacía un calor horrible desde principio de la mañana. 

Mi compañero se puso en gallumbos a pintar y yo no me atreví a hacerlo hasta las 12 del mediodía que ya me fui quitando ropa hasta quedarme también con un diminuto slip. 

Mi compañero de faena se tocaba el paquete constantemente y se apreciaba una pequeña mancha en sus gayumbos pero poco más o menos la mañana transcurría entre cachondeo y demás paramos a la hora de comer un bocadillo para continuar la faena. 

A las nueve de la noche terminamos cuando ya la luz empezaba a ser escasa y para mi sorpresa mi compañero de faena se quitó sus gayumbos y se fue a una ducha cuando salió venía con su polla dando sacudidas de lado y mi vista se clavó en su entrepierna cosa que a él no le pasó desapercibida.

Pablo_ no has visto nunca otra polla. 

Yo__ sí claro ya he visto otras pollas. 

Pablo__ esta te ha gustado más de lo habitual. 

Esas palabras las dijo blandiendo su verga y sacudiéndola al aire, yo no le contesté me quedé un tanto clavado en mi sitio. 

Pablo tendría alrededor de veinte años más que yo rondaría los cincuenta cuerpo moreno fibrado sobre un metro setenta y cinco de altura su verga rondaría 17-18 cm con unas buenas venas marcadas y unas pelotas a su altura, digamos que era un hombre arreglado tirando a atractivo. 

Pablo_ aprovecha y date una ducha ahora. 

Yo_ no lo haré cuando llegue a mi casa. 

Pablo_ te da vergüenza que te vean en pelotas. 

Este avanzó hasta donde estaba yo colocándose frente a mí. 

Pablo_ me gustaría ver que es lo que esconde este diminuto slip. 

Pablo cogió mi prenda mientras me miraba a los ojos y comenzó a bajarla saltando mi pequeña picha hacia fuera, este retrocedió un paso para mirar lo que había dejado al descubierto. 

Pablo_ pero que tenemos aquí un metrosexual todo depiladito o alguien que le gustan las vergas. 

Yo no contesté a aquella frase mientras este me agarró mi aún flácida picha con una de sus manos momento en el que sentí como esta comenzaba a hincharse y ponerse dura. 

Pablo_ ya me había parecido a mí que a ti te iba el mariconeo. 

Tiró de mi pene hacia él y empezó a besarme el cuello sin que yo opusiese ningún tipo de resistencia hasta que sus labios tocaron con los míos y su boca se fue abriendo para dar paso a una lengua que sin pedir permiso traspasó el umbral de mi boca llegando a juguetear con mi lengua en aquel momento sentí como un mareo se me iba a la cabeza aquel hombre estaba abusando de mí y me estaba más que gustándome. 

Durante cinco minutos nuestras bocas y nuestras lenguas se retorcieron hasta que abandonando la calidez de su boca este tiro de mis hombros hacia abajo hasta que me encontré con aquella verga dura que palpitaba dando saltitos al aire agarrándome a sus nalgas empecé a pasar la lengua hasta que la introduje totalmente mi boca dándome auténticas arcadas mientras él moviendo sus caderas me iba follando la boca. 

Pablo_ joder nena la chupas muy bien me vas a dar ese culito estrechito que me tiene todo el día caliente de verdad. 

Yo seguía sin tener capacidad para responder a sus palabras y él separado de mí apoyó mi cuerpo contra unos tablones apoyados en unos caballetes y empezó a untarme el culo con saliva, viendo que aquello no conseguiría dilatarme del todo se fue hasta la cocina donde regresó con una botella de aceite, untó su polla y metió un par de dedos en mi ano apoyó la cabeza de su polla a la entrada de mi esfínter y de un solo golpe seguido me la clavo hasta los huevos dando yo un pequeño gritito entre dolor y sorpresa. 

Pablo_ joder putita que culo más estrechito y sabroso tienes te lo voy a preñar entero. 

Poco a poco fue acelerando el ritmo de sus embestidas y la habitación se llenó tanto de sus jadeos y respiración agitada como de mis gemidos que sonaban como si de una niña se tratase. 

Cinco minutos más y empecé a sentir como aquel escozor se transformaba en un puro placer siendo yo el que echaba mi culo para atrás para sentir sus pelotas chocar contra las mías alentado por las palabras de Pablo qué me animaban a culiarme yo mismo. 

Pablo_ maricón me voy a correr dentro de ti te voy a echar toda mi leche en este culo estrecho te lo voy a preñar entero.

Sentí como se paraba y su cuerpo se tensaba completamente y empecé a sentir aquellos chorros calientes y mis entrañas  llenándose de leche caliente. 

Permaneció unos minutos hasta que su verga perdió vigor y se escurrió desde mi ano mientras yo sentía como aquel líquido salía de dentro de mí cayendo hasta el suelo mientras él sin decir palabra se fue a la ducha. 

Pablo_ bueno putita ahora ya te puedes ir a la ducha y mañana más y mejor si quieres, como andas necesitada de pasta te podré dar un plus por estos ratos. Y tranquilo tu secreto de putita estará a salvo conmigo. 

Joder encima de follarme tengo que preocuparme de que si este va a guardar el secreto yo seré la putita pero él es el que me han vestido con su polla o sea que pensé yo. 

Me duché y la ve mi escocido culo posteriormente me hice una lavativa con el flexo de la ducha para vaciar los restos de aquella lechada. 

Como hacía bastante calor me fui a tomar una cerveza  y no podía haber sido de otra forma Pablo se encontraba allí haciéndome una señal me acerqué hasta él. 

Pablo_ que qué tal te encuentras. Nada le dejé al chaval que se pegase una ducha refrescante porque el día había sido duro. Este es Pello el dueño del piso que estamos pintando ya le he dicho que te vendría bien hacer trabajitos ya que andas con dificultades económicas . 

Nos saludamos Pello y yo y tomamos varias cervezas sacando alguna cosa para picar serían cerca de las 11 cuando Pablo dijo que retirarlos y salimos los tres del bar. 

Pello_ acompáñame hasta casa y te doy unas cervezas para que metáis al enfriar para mañana. 

Pablo_ buena idea llévate al chaval. 

Por mi mente no pasaba otra cosa que irme a la cama a dormir y mucho menos pensar que yo supiese nada de lo que había ocurrido en su piso. 

Pello tendría también la edad de Pablo delgado y sobre la misma altura se le veía pinta de señorito y con un semblante ruiseño. 

Cuando subimos al piso me hizo pasar hasta la cocina donde una vez allí. 

Pello_ ya me ha contado tú compañero que tu situación económica es un tanto jodida yo podría ayudarte si quieres. 

Yo_ no no te preocupes trabajando supongo que conseguiré salir del bache además posiblemente luego no podría devolverte el dinero. 

Pello_ nadie ha dicho que luego me tuviese que devolver el dinero mira no me voy a andar por las ramas. …… me ha contado Pablo lo que ha pasado hace un rato y a mí me gustaría mantener también algún encuentro contigo llevándote una buena propina. 

Joder el hijoputa este encima de follarme va contándolo por ahí y ofreciéndome como una auténtica puta. 

Me quedé en silencio con aquel pensamiento en mi cabeza sin saber que decir, aquello me superaba el silencio era Tronador hasta que sentí como aquel hombre desabrochaba los botones de mi camisa para luego sentir sus manos sobre mi torso acariciándome, me quitó la camisa dejándola apoyada sobre una silla para luego empezar a desabrocharme el pantalón todo aquello ante mi impasibilidad. 

Mis pantalones cayeron al suelo y él se agachó a sacarlos por mis tobillos quedándome con el slip y zapatillas. 

Pello_ tienes un bonito cuerpo me encanta que no tengas bello y seas tan suave. 

Sus palabras las escuché pero no las supe contestar ya que estaba en un grado entre excitación y una sensación de querer salir corriendo.

Pello_ mira corazón estás muy bueno como chico y me gustaría gozar de este cuerpo pero realmente no quiero abusar de ti. 

Yo_ no sé lo que quiero….    abusar no……….. y si necesito ayuda económica. 

Ellos se acercó y empezó a besarme suavemente mi mejilla mi cara la comisura de mis labios a pasar su lengua por mi oreja todo cariñosamente encendiéndome poco a poco, fui yo el que busqué su boca para fundirme en un apasionado beso mientras él se desabrochaba el pantalón y se empezaba a desnudar mi boca atrapaba su lengua en un momento de lujuria haciéndome perder los papeles. 

Peio_ así cariño así te quiero ver entregada que no sea yo el que lleve todo el peso de la relación te voy a hacer feliz si eres mi putita y te puedo cuidar. 

Mi excitación iba en aumento sentía mi pequeño pene que era salir de su encierro mientras las manos del hombre recorrían mi cuerpo acariciándome y haciéndome sentir amado querido y deseado. 

Los dos ya desnudos completamente nos dirigimos a la ducha para quitarlos el sudor de nuestros cuerpos ya bajo el agua fui yo quien agachándome empecé a comer su verga sería de mi tamaño más o menos pero bastante más gruesa entre 16 y 17 centímetros y con un grosor casi el doble que el mío me comí aquella polla durante un buen rato mientras sentía como el agua caía sobre mi cabeza hasta que este me mandó detener y fue él el que se agachó no atrapó mi polla en su boca sino que me giró y haciéndome y criar mi cuerpo hacia delante empezó a pasar su lengua por mí dolorido esfínter aliviando la sensación y dando lugar a placer.

Pello_ me gusta este coñito que tienes me lo voy a comer y me lo voy a follar muchas veces si tú quieres ser de tu macho y tú mi pequeña putita. 

Yo_ sí claro que podrás follarme cuando quieras y yo seré tu putita sigue me gusta lo que me haces quiero sentirte dentro de mí. 

Se me había ido la cabeza estaba claro el placer era muy agradable pero de ahí a entregarme a un tío que me sacaba veinte años y ser su puta ya se me había ido la pinza. 

Salimos de la ducha prácticamente sin secarlos y una vez me llevó a su cuarto de tubo boca abajo abrido de piernas continuó purgando con su lengua en mi ano mientras estiraba ya de mi picha para también chuparla sacándola entre mis piernas la sensación era embriagadora es citante a cien por cien el placer sublime. 

Yo mismo me revolví para colocándolo boca arriba colocarme en la posición 69 dándole mi culo y mis genitales a comer mientras yo me tragaba su polla y sus huevos. 

Pello_ cariño porque no pasas tu lengua por mí ano lo tengo limpio y me gustaría mucho sentir tu lengua hay. 

Era una petición pero en mi cabeza solo como si fuese un imperativo y sin siquiera pensarlo mi lengua se clavó en aquel esfínter sacando auténticos gemidos de placer de macho. 

Pello_ si mi putita sí qué rico lo haces quiero follar tu culito te entrará mi verga gorda en ese estrechito ano. 

Mi pensamiento era el mismo aquella verga era más gorda que la que me habían clavado hacía unas horas pero a su vez también era más corta no sabía yo mismo si aquello traspasaría mi esfínter pero desde luego por el calentón que en aquel momento llevaba lo iba a intentar, busqué un preservativo y el lubricante que estaban encima de la mesilla y un tanto miedo introduciendo algún dedo yo mismo hecho un buen chorro por encima de aquel condón y colocándome en cuclillas apunté a la entrada aquella cabezona polla. 

Sentía el calor que despedía y el palpitar de aquel pollón yo mismo fui relajando mi cuerpo para que casi sin darme demasiada cuenta introdujese aquella cabezona sintiendo una pinchada me retiré para volver a introducir el capullo y esta vez parte del tronco retrocediendo avance centímetro centímetro hasta que me quedé sentado encima de él inclinado mi cuerpo busque su boca y le besé apasionadamente mientras le decía cielo la tengo toda hasta los huevos clavada lo hemos conseguido. 

Los dos teníamos una risa nerviosa por la hazaña conseguida. 

Pello_ joder cariño ah no todo el mundo le entra esta polla en el culo creo que me vas a hacer muy feliz. 

Yo empecé a mover mi culo para que aquello me diese placer a mí y a mi macho fui abundando el ritmo haciéndome parar él varias veces a punto de correrse, me cambié de posición colocándome boca arriba y levantando mis piernas para que me la clavase en mismo a pesar de que lo hizo con cuidado reconozco que también sentí un pequeño dolor, tenía mucho aguante entre las dos posiciones ya me había follado no menos de veinte minutos. 

Yo_ ahora fóllame a cuatro patas. 

Me coloque de a cuatro como una auténtica puta esperando aquella verga que nada más apoyar su grande en mi esfínter yo mismo me eché hacia atrás para darle una sola estocada sentí sus huevos chocar contra los míos aquello ya desató a Pello que sin ningún pudor comenzó a alargarme y a vestirme fuertemente. 

Pello_ mi puta te voy a correr enseguida me tienes muy caliente donde quieres mi leche. 

Yo_ no sé mi macho soy tuya tú decides dónde quieres echarla. 

Creo que dijo unas palabras sin siquiera pensarlas sin saber las consecuencias de aquello. 

Claro que había tenido encuentros con hombres pero siempre me había considerado bisexual ya que hasta aquella fecha no había hecho ciertas cosas como tragar la leche de otro macho o comerme un culo de hombre

No sé como ocurrió pero sentí como aquella verga abandonaba mis entrañas y me vi con una auténtico vacío quedé recostado de medio lado y aquel pollón traspasó mi boca empezando a sentir potentes chorros que trae sin apenas ser consciente de ello. 

Mi cara tenía algún rechazo y de mi boca aquel sabor fuerte a leche emanaba sin haber podido tragar toda cuando pillo solidariamente me besó y la vio la cara para saborear su gran corrida. 

Aquellos besos siguieron durante varios minutos haciéndome yo la mimosa ronroneando y musitando. 

Pello comenzó a comerme la polla queriendo conseguir mi orgasmo mientras yo me comía sus pelotas su polla y su estrecho ano. 

Los dos jadeábamos y suspiramos como el ritmo cuando yo sentía que ya estaba próxima a mi corrida me dediqué a su gran verga intentando que aquello fuese mutuo. 

Pello había acelerado su mamada y parecía que quería aspirarme mi pequeña polla mientras jugueteaba con un dedo en mi esfínter aumentando el placer yo supuse que él necesitaba lo mismo introduje dos de mis dedos en aquel agujero y los dos los aproximamos a nuestras corridas. 

Fui yo el que primero descargó en su boca haciéndome estremecer y vibrar como una niña casi llorando por el placer dado mientras yo seguía con mi mamada esperando aquel torrente de leche y boca que no tardó mucho en llegar y que fui tragando y saboreando como antes no lo había hecho después volvimos a juntar nuestras bocas con los restos de nuestras corridas y así casi llorando me quedé dormido contra aquel macho que me había hecho prácticamente mujer