Hola, mi nombre es Marcos, soy de una ciudad del sur Argentino y actualmente tengo 28 años…por primera vez me animo a contar este episodio vivido a los 19…si bien a los 10 años conocí el sabor del pene, en una situación muy lúdica, en la cual un amigo del barrio de mi misma edad y yo recibimos lecciones de sexo de su tío (un morocho peludo de 35 años que también se garchaba a la madre de Rubén…) que una tarde jugando y jugando terminó teniéndonos a los dos juntos lamiéndo su entrepierna como si fuese una golosina muy codiciada, después de eso creció en mi interior una hembra insaciable pero nunca me animé a dejarla expresar…ya no aguantaba mas y a los 19 años viajé a Buenos Aires con una excusa muy rebuscada (averiguar sobre las universidades para decidir que carrera seguir)pero con el objetivo de encontrar un hombre en una ciudad desconocida que me coja como a una perra en celo…

Me alojé en un hotel muy barato de la calle Lavalle y me dediqué solamente a salir a pasear mirando hombres…elprimer día dí con algunas miradas dispuestas pero bajé la vista…no me atreví…y el segundo (harto de masturbarme con mis fantasías y meterme dedos encremados) salí decidido a encontrar un papi…

Me crucé con un robusto señor de mas de 60 años que caminaba como buscando por la calle Florida y me gustó mucho…muchísimo!!!

Cuando nos miramos quedó todo muy claro…él buscaba un jovencito dispuesto y yo moría por un hombre así…(aproximadamente 1,78 90 kilos…canoso, barba candado bien cuidada y grisácea)…me guiñó un ojo y le sonreí sintiendo mi cara de puto fácil y relamiéndome los labios lenta y femeninamente…

entré en un hall de una casa de ropa para invitarlo a acercarse y resultó…se acercó muy seguro y relajado y me dijo: «Hola…buscás algo o me pareció?…», yo me puse colorado y tardé en mirarlo a los ojos pero decidido contesté: «si,pero nunca lo había hecho antes y estoy algo avergonzado…» se rió y me dijo: «comprendo, solo debes confiar…si querés vamos a un café y charlamos como abuelo y nieto…(se rió)»…su modo me dió cierta seguridad y le dije «bueno…lléveme donde guste»…»si es por gusto mi departamento está a solo 4 cuadras de acá…te animás?»…me dí cuenta que ya me tenía…»si» dije con cara de sumisa…

Caminamos esas cuatro cuadras conversando desordenadamente de muchas cosas pero él dejando en claro que quería cogerme y yo que quería que me coja… cuando llegamos al edificio y tomamos el ascensor me dijo:»tranquila nena…soy muy cariñoso y te voy a tratar con mucho cariño…sos muy linda…» decididamente entregado lo abracé y nos besamos suave y profundamente…entramos a su departamento y él supo llevar el clima de nuestro encuentro con mucha experiencia…no me presionó jamás… sirvió unos tragos, puso música oruestal melódoca…nos sentamos en un sillón muy cómodo y tomé la iniciativa de besarlo…abrí mi boca y busqué su lengua casi con desesperación…el suspiraba cada vez que un beso terminaba y me acariciaba suavemente las tetitas…me acomodé para que su mano pudiese llegar ente mi pantalón y mi piel hasta mi cola…la abrí para dejarlo hacer y empezó a frotar mi esfinter con su dedo…fué muy despacito…y entre beso y beso cuando quise acordar ya tenía sus dedos índice y medio jugando circularmente dentro de mi ano…empecé a soltar quejiditos y gemidos cada vez mas femeninos y me deslicé hasta su bragueta…bajé el cierre y me metí su hermoso glande morado, húmedo y gordo en la boquita…chupé, chupé…chupé…acariciando mi cabeza con mucha dulzura me dijo mas afirmando que preguntando «te gusta !!!…» lo miré a los ojos sin soltar su pene y con mi carita de puta golosa le di a entender que era toda suya…me preguntó si quería que fuésemos a su cama y le dije «siiii…por favoooor…» nos levantamos del sillón y me tomó con un brazo de la cintura…yo rodeé su cuello con ambos brazos y lo besé agradecida…esa hermosa noche derramó su semen dos vecesen mi culito y nos dormimos abrazaditos…besándonos y acariciándonos como enamorados (creo que lo estábamos)…me convenció que demorara mi regreso, cambié mi pasaje de avión y me quedé una semana en su casa (deje el hotel)en la que me enseñó a ser su mujercita…alaño siguiente me mudé a Buenos Aires para estudiar y le dije a mis padres que me alojaba en una pensión…pero en realidad me fuí a vivir con mi hombre y me malcrió comprándome ropitas y perfumes de nena…y dándome su deliciosa poronga hasta 3 veces al día…yo aprendí a cocinar sus platos favoritos…veíamos películas y todas las noches se me ocurrían distintas formas de seducirlo…en el verano hasta me ha cogido en el balcón…yo en bikini y el en slip…yo empinándo mi culo y él haciéndose rogar…le gustaba que le suplique que me coja, pero siempre me lo hacía y me dejaba la cola dilatada y derramando leche…yo me ponía la bombacha y me gustaba dormir sin ducharme..el metía sus dedos en mi culo y cuando estaban bien untados en semenme los metía en la boca para que los sabore hasta quedarme dormida…lo amé mucho….