
Por
Anónimo
Me volví una gymrat
Solía ser una chica con sobrepeso, no me gustaba mi apariencia ni usar la ropa que siempre quise. Conocí a un chico y fue muy amable conmigo, pero un día me dijo lo que tal vez debería haber escuchado antes, Me dijo que si realmente no me gustaba como me veía,debía cambiarlo, debía mejorar y ser lo que siempre desee.
Todo ahí, empecé a hacer ejercicio, poco a poco, conocí todo tipo de personas, hasta que llegué a un gimnasio, y conocí a mi entrenador, él me ayudó a mejorar mucho. Con ello descubrí mi potencial y sí, también mis nuevos fetiches.
A medida que avanzaba sentía cada vez más atención hacia mí, atención que antes recibía mal, ahora todos veían mi culo, mis piernas, todo.
Cada vez me encantaba más y eso me hacía seguir y disfrutar yendo al gimnasio., entrando y que el grupo de amigos se congelara porque llegué.
Hacer sentadillas y sentir las miradas fue mi mayor motivación. Aún me queda mucho por avanzar, pero ahora me siento como una diosa
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.