Bueno está historia es bastante breve pero con un buen contexto y muy caliente. A principios de año yo me enfrentaba a una nueva soltería, nada de dramas, la verdad me sentó bastante bien. Pero a raíz de eso, yo me encontraba con la intención de conocer nuevas personas y explorar mis habilidades para ligar e interactuar con mujeres. Fue entonces que decidí descargar una app de citas, bumble para ser precisos, no tenía mucho éxito la verdad, llegué a tener un par de chats intentando conectar y entre ellos conocí a Sandra (nombre alterado para ser discretos).

En un inicio Sandra y yo parecíamos no progresar mucho, sinceramente era una plática más sobre lo que nos gustaba hacer y cosas por el estilo, entre esos temas, yo manejo moto y en mi perfil solía tener fotos mías conduciendola. (Este detalle es importante) Total, la conversación murió y dejé de tener interés sobre Sandra, pero de buenas a primeras, una noche me envió un mensaje que capto mi atención, algo como «hola, necesito que me ayudes con algo». Al leer eso primeramente pensé que la mujer necesitaba un favor monetario o algo por el estilo, pero no, decidí preguntar cordialmente de que se trataba y ella respondió «te lo digo pero prométeme que no me vas a juzgar» y ahí fue que mi intuición me dijo que sería algo de la índole sexual, y así fue. «Tengo una fantasía/fetiche y creo que tú me puedes ayudar a cumplirlo».

Continuamos la plática, hay que recalcar que yo nunca había tenido interacción con Sandra más allá de la plática corta por mensajes, así que estaba escéptico sobre la veracidad y facilidad con la que esto se estaba gestando. Pues bueno, la fantasía que Sandra tenía era que quería coger con alguien que tuviera un casco de moto puesto durante el acto, sinceramente se me hizo algo extraño pero nada que pasara mis límites así que seguimos la conversación para saber lo que nos gustaba a ambos y congeniamos bastante en ese ámbito. A Sandra le encantaba hacer sexo oral y decía que era bastante buena en eso (spoiler, si lo es) que le encantaba que le dieran de perrito, la ahorcaran y que también se la nalguearan sabroso, pero su top era que se la montaran y ella también montar verga bien rico.

De tanto hablar escalo al punto en que decidimos hacer sexting y la chica la verdad es que tenía un culito bastante rico y unos senos que me pusieron durísimo, en las nudes que me mandó usaba una lencería roja que le quedaba excelente. El sexting llegó al punto en que me pidió que le modelara mi casco de moto, a lo cual accedí y ella estaba fascinada con mis fotos ya que no solo me limitaba a hacer dickpicks (hago bastante ejercicio así que hacía varias poses sujestivas y denotando mi musculatura) incluso me la ingenie de hacerle un POV de como me vería ella si me la chupara y yo con mi casco puesto lo cual le encantó. Ella me mando fotos en cuatro, un par de videos de sus deliciosas tetas rebotando como si ella me estuviera montando (me encanta que las mujeres se monten en mi verga).

Nos pusimos de acuerdo para vernos un día y hacernos lo que nos dijimos que ibamos a hacer y así fue. Nos vimos en por una plaza comercial, acordando en ir ambos en mi moto, claro, parte de la fantasía era primero dar un buen paseo en moto, comprar algunas bebidas en un mini super y de ahí. En lo que esperaba a que Sandra llegase, sinceramente pensé que algo malo podría pasar pues, la inseguridad en mi país es bastante severa y estaba bien al pendiente de que nadie sospechoso se acercara a mi y estaba listo para huir en caso de cualquier señal de peligro. Para mí buena fortuna no fue así, Sandra llegó conmigo, me saludo de forma amistosa y se subió a la moto sin peros ni contratiempos, hicimos todo el plan previo al motel y de camino ella iba bastante a gusto, se notaba que le gustaba mucho el paseo. Llegamos al motel y sinceramente ambos estábamos incómodos y nerviosos porque no sabíamos cómo empezar, habíamos acordado que todo era con meros fines sexuales, sin sentimientos ni nada de dramas, puro placer y deseo carnal como debia ser.

Comencé con algo simple luego de un par de minutos platicando y también bebiendo para agarrar calor, bese su rostro y su cuello de forma bastante suave pero con la firmeza de tomar su cintura para empezar con el tacto. Nos empezamos a besar en forma, Sandra besaba bastante bien y, modestia aparte yo también beso excelente.

Comencé por quitarle su blusa y revelar su brasier azul y empecé a manosear sus tetas sobre el mismo mientras ella me sobaba los brazos (por mensaje y en persona me dijo que le encantaba la musculatura de los mismos y también mis manos, que así mero le gustaban para que la ahorcara y la cacheteara) Le quite el brasier y comencé a comerle sus deliciosas tetas, sus pezones eran algo saltones pero me cabían completas sus tetas en la boca, la dejé tan bañada en mi saliva y gemia tan delicioso que hasta me jalaba el cabello fuerte de lo mucho que sentía mi lengua y lo bien que hacía mi trabajo. Ya ella bien caliente y yo bien duro comenzó a tocarme la verga sobre el pantalón y me dijo «que rico se siente esto ¿Te la puedo chupar?» Y eso, específicamente que una mujer me pregunté en tono sumiso «¿Te la puedo chupar?» Cómo requiriendo permiso me prende bastante. Obvio le dije que si, pero antes de comenzar se quitó su pantalón y procedió a hacer lo prometido, me pasó mi casco de moto y mientras me lo ponía se puso de rodillas, me bajo el pantalón y se encontró con mi verga bien parada dispuesta a ser pulida. Me la estuvo chupando un buen rato y yo con el casco puesto veía su rostro lleno de éxtasis y emoción por cumplirle su fantasía.

Sinceramente Sandra me ha dado las mejores mamadas que he recibido en mi vida, la chica se la tragaba completa, jugaba mucho con su lengua y me llenaba todo de su saliva para que resbalara bien, yo le pasaba la verga sobre sus tetas y ella se prendía más y comencé a cachetearla tanto con mis manos como con mi verga, me buscaba la mirada a través del casco y yo flexeaba los bíceps para que se antojara más y más duro me la chupaba.

Ya de un rato de que se estuvo atragantando bien me pidió que ya se la metiera, ella misma me puso el condón y se puso primero de perrito, se le hacia un culote todavía más prominente que en fotos y me la empecé a cojer durísimo, andábamos aplaudiendo sin manos jajajaja Estaba tan mojada que mi verga le resbalaba bien rico, aparte de que me apretaba bien y mientras le daba como cajón que no cierra le jalaba del cabello y hacía sonidos como si la estuviera montando como yegua, la nalgueaba y también le agarraba sus tetas para que se excitara más, incluso ella se metía mano en su clítoris para estimularse más y hasta se doblaba completo para hacer aúnas prominente su rico culito. Mientras todo esto pasaba yo tenía el casco puesto, era medio raro y a veces abría el visor para poder respirar bien jajaja pero la experiencia estaba bastante genial.

Después de eso le dí vuelta y a la orilla de la cama me subió los pies a los hombros y comencé a darle, así, me gritaba cosas como «ay que rico me coges papi» «estás delicioso» «metemela así» hasta que le dije que me gritara que era mi puta, y si me dijo «soy tu puta» o «cogeme como si fuera una puta» La empecé a ahorcar y cachetearla, le quería chupar los pezones mientras se la metía así que quite el casco, me salí de ella y la acomode para darle de misionero, la verdad esa posición me favorece bastante y se noto porque empezó a gritar más mientras besaba su cuello y bajaba también a chupar y morder sus tetas. Por chat me había dicho que ella le encantaba terminar arriba así que me pidió montarse en mi verga y que me pusiera el casco de nuevo, yo gustoso accedí y me acosté sobre la cama. Se sentó sobre mi verga y empezó a rebotar y yo le manoseaba sus tetas y a veces nada más dejaba que rebotaran al aire como me gusta ver, mientras hacía esto me decía cosas como «ay papi estás bien duro» «me encanta montarme en tu verga» «ay ya voy a terminar sobre ti» Y me cumplió, termino bien rico y temblando y después me preguntó «¿Tu terminaste?» A lo que le dije que no, pero por mensajes ya le había dicho que me encantaría venirme en su boca, así que me senté a la orilla de la cama, se arrodilló, tomo un poco de agua y procedió a seguirmela chupando para que pudiera acabar, se atragantaba, me escupía en la verga y me lamía los huevos mientras me miraba a los ojos. Termine bastante rápido porque sinceramente Sandra sabe hacer muy bien su trabajo, me corrí por toda su carita y ella me sonrió porque estaba más que complacida. Nos acostamos sobre la cama para descansar y platicar un rato más en lo que nos íbamos porque, a todo esto, seguía siendo niña de casa y debía llegar temprano a la misma.

¿Una segunda parte?