Atendi a una mujer que no llegaba a los treinta años de edad. Me ordeno el lunch y se lo lleve a su mesa. Su falda era corta y sus dos piernas lucian de lo mas deseado. Me aleje despues de que le servi y a veces le daba su mirada a ella y me acercaba para preguntarle si todo estaba bien. Ella me respondia que todo estaba bien. Otro mezonero se acerco a mi para comentar de la mujer que yo atendia y hablabamos de que ella lucia como una mujer de buena propina. Tome el tiempo de lo que un cliente debe de tomar en comer un lunch y volvia acercarme a ella de manera amena y con las mismas preguntas que conciernen al servicio del restaurante. Ella me decia que todo estaba bien, pero esta vez me contestaba diferente. Recogi todos los utensilios de la mesa y deje la cuenta de lo que ella se habia comido. Ella lo tomo para ver cuanto era la cuenta y me volvi alejar de ella. Esperaba a que ella me llamara y note que algo raro pasaba y me acerque y de maner prudente ella me confesaba que se le habia olvidado su dinero y que no sabia que hacer. Le crei que me decia la verdad porque se le notaba su preocupacion. El recibo era de $25.00. Fui al baño y mire mi cartera y yo tenia $50.00. Regrese a su mesa y me imploraba a que la sacara del apuro en que ella se encontraba. Yo que vivo en un pequeño apartamento cerca del restaurante, le expuse de que yo la sacaria del apuro si haciamos el amor. Note que no le gusto mi propuesta, pero finalmente acepto y me la llevaba para mi apartamento a la hora de mi tiempo de lunch. Cuando los dos saliamos del restaurante, ella caminaba adelante de mi y la miraba con esos tacones altos y su falda cortita con tremendo culo y me hacia la ilusiones de lo que me comeria en un par de minutos. Pense que me jugaria una mala pasada, pero no, ella seguia todas las indicasiones mias y llegamos a mi apt. Desde que entramos a mi apt, la tome y la saboreaba tocandole por todo su cuerpo hasta que ella comenzo a reaccionar respondiendome a mis caricias y logre quitarle su falda quedando ella en su panti hilo dental. Las nalgas de ella estaban duras y cuando se las jugaba me decia que no porque tenia temor a que estas se aguadaran y con sus tetas al igual que no queria que se las tocara. Ellse quito el panti y se coloco en la orilla de la cama y abria sus piernas dandome un espacio solo para que yo pudiera meterle la berga en su panocha y me decia ella «Estoy lo sufieciente abierta para que me cojas y asi poderte pagar el favor que hicistes por mi. Por favor no me abraces mucho. Le obedeci y me era incomodo no poderme sujetar de ningun lado y la culeaba hasta metersela toda. Ella con las piernas abiertas la mantenia en el aire y me miraba a los ojos. Me apuraba a que terminara rapido y le dije un poco incomodo que me dejara de estar jodiendo y que no me apresurara en terminar tan luego. A veces sentia que ella esquivaba cuando yo la embestia con la berga y sentia que no la penetraba bien. Me fui enojando y sin que ella lo esprara la tome por sorpesa y la abraze y le empujaba mas adentro de ella un trozo mas de mi berga. Mi ultrajo para contra ella la hizo cambiar y ella se puso mas bellaca de lo inesperado y me decia a un compas de culeo «Oh! con que eres bravito ah!?. Pues ahora veras de lo que soy yo en la cama» La mujer se volvio una mujer de mucho fuego y me decia » solo falta que me suenes, pues si eres asi hazlo machito que quiero ver si tienes valor..que te pasa maricon suename y veras como me corro» Despues de varios insultos me anime y le di unas nalgadas fuertes y se soltaba con tremenda corrida y se clavaba mas en mi berga en lo mas intimo de lo que ella podria tener en su ser. La puse en cuatro patas porque sus nalgas me gustaron desde que se las vi y ahi en su oancoha descargue mi carga de leche en ella. Ella se dio una ducha en mi apt. Y salimos de mi apt. Le pregunte por su nombre y me contesto que se llamaba «Alma». Nos despedimos en la acera como si nada hubiese sucedido nada entre los dos. Al mes regresaba Alma al restaurante, pero acompañada de su esposo y esta vez si traian como pagar el lunch. El esposo me dio buena propina porque ella en presencia mia le deica a su esposo que la ultima vez que ella habia visitado el restaurante yo la habia servido bien. Yo sabia que ella me hablaba en doble sentido y sé lo que ella me queria decir. No volvi a ver a Alma y fue un polvo que jamas he podido olvidar.