Por

Anónimo

octubre 17, 2024

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Fantasía con una milf

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Un día caminando por los pasillos mientras hacía mis compras, coincidí varias veces con una mujer madurita, como se les conoce milfs, cabe mencionar que siempre me han gustado las mujeres más grandes que yo, pues esta dama rondaba los 40 pero muy guapa, usaba una blusa blanca un poco transparente marcando su brasier, un pantalón azul claro y unos tacones negros que me volvieron loco, se veía elegante, pero muy sexy.

La primera vez que coincidimos le sonreí por cortesía al cederle el paso, pero al coincidir tres veces mi mente empezó a fantasear con ella y ahora sí, provoqué volver a toparla de frente, al vernos, sonrío, porque ya fue algo gracioso encontrarla tantas veces y ya buscando hacerle la plática le dije en tono de broma “ ya deberíamos hacer el súper juntos” y sorprendentemente me dijo si verdad, pero ya casi termino, y ya con cierto morbo en mi mente le contesté, ayudarle a terminar, sería lo mejor del mundo obvio entendió el doble sentido y se río, me ofrecí a pagar su cuenta yo quería impresionarla, ponerme a sus pies a su disposición, el poco tiempo que estuve cerca de ella, sólo buscaba hacerla reír me decía que podía ser su hijo, porque era mucho más chico que ella, y yo halagaba su belleza y su elegancia, y eso le gustaba, yo por dentro ya estaba ardiendo y no sé por qué me dio tanto morbo, ofrecerle dinero por dejarme acompañarla a su carro, se rio y me dijo que no necesitaba dinero pero que si fuera así cuánto le ofrecía, para mi suerte, en mi tarjeta de débito, traía buena cantidad que obviamente no siempre tengo, se sorprendió y me dijo que si poco se veía muy interesada?

Y yo, para enaltecerla le dije que para nada, pero que tal vez era la única forma en la que podría caminar junto a semejante belleza, y reaccionó tal como lo esperaba, me dijo que tenía buena plática y la hacía reír y que lo del dinero no era necesario, me sorprendió y me puso a volar la mente, para mi sorpresa, se escuchó un carro pitar y sólo me dijo luego nos vemos, vengo cada semana.

Supongo que era su esposo que había ido a recogerla pero no supe desde que momento su esposo estaba ahí viendo yo pensé que ella venía en su carro, Tristemente nunca la volví a ver aunque cada semana la busque como por dos meses, pero despertó en mí la fantasía de ofrecerle dinero a mujeres mayores que yo simplemente por ir conmigo a un motel, que no me hagan nada ellas si no quieren, solo decirles que quiero practicarles sexo oral porque no sé y quiero sorprender a mi novia o algo así y ofrecerles dinero, llevarla a comer a un buen lugar y regresarlas al punto donde la encontré, podrían decir que contraté a una chica, pero lo que me prendé es que sea una mujer normal como cualquiera que no se dedique a eso, es mi fantasía obvio tienen que estar de acuerdo pero en estos tiempos creo que ya es muy difícil que la pueda cumplir.

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