Pues esta es mi historia el pequeño Bart Simpson de 18 años que aún no puede terminar la primaria viviendo en casa de mis padres, la misma ropa la misma rebeldía que siempre me distinguió, pero bueno este es mi relato.

Era un día como todos, me levante crudo en lunes por la mañana, apenas podía caminar errático y en modo zombi, pues debía ir a la primaria y aguantar a la maestra krabapels un año más hasta que le diera la mierda gana de pasarme de grado, ya ocho años en la misma mierda de escuela, ese día Salí de mi cuarto con una erección descomunal hacia el baño, escuchaba ruidos pero poco me importo pues sentía que la cabeza me explotaría, cuando abrí la puerta del baño con la mirada aun borrosa pude ver lo que parecía ser una alucinación, pues era mi madre Marge Simpson duchándose, mis ojos se abrieron grandes como platos, jamás la había visto desnuda, esta se enjabonaba el cabello y no se percató de mi presencia, pude ver esos pies delicados mi mirada fue subiendo lentamente hasta admirar las piernas delgadas bien formadas la cadera y el culo paradito de mi madre, unas tetas que uff aunque eran pequeñas eran respingonas de pezón picudo, me quede observándola un momento comencé a babear en tan delicado y perfecto cuerpo, hasta que homero salió de su recamara lo cual me empujo a entrar al baño pues este panzón seguro quería mear, al no encontrar escondite me vacié el cesto de la ropa sucia encima ocultándome con las trusas flameadas del viejo homero, no me importo siempre y cuando nadie me descubriera y efectivamente homero entro al baño abrió la puerta se sacó su erga gorda flácida y comenzó a mear como un chorro de manguera de bombero, me dio asco saber que semejante vergota embestía a mi delicada madre todas las noches. Pero bueno mi impresión no fue tanta hasta que homero le dijo –Marge me la chuparías? *acercándose a la ducha con la verga flácida* ya estaba preparado para ver la mamadota que le metería, pero Marge solo vio el pene de toda la vida e hizo un gesto de rechazo ignorándolo y saliendo con la toalla enrollada en su cuerpo, ahí pase un rato hasta que no había peligro, Salí corriendo me vestí y me fui a la escuela.

Ese día después de una prueba que seguramente reprobé, Salí a mi casa, pues no tenía a donde más ir, todo el camino a casa la pase pensando en Marge y su culo respingón, enjabonada y limpia, una excelente madre y ama de casa como ninguna otra, para mi Marge era una santa y siempre lo fue, hasta ese día. Cuando legue a casa, abrí la puerta tire mi mochila y justo al poner el pie en el primer escalón, escuche unos susurros, subí lentamente para ver lo que sucedía, venían de la recamara de mis padres me acerque y abrí la puerta sin hacer ningún ruido lo primero que vi fue la asquerosa panza de homero, y mi madre en cuatro patas en la cama con la verga de homero entre sus nalgas, como si estuviera preparándose para ser penetrada cuando Marge dijo –homero usa mi culo otra vez, no podemos tener más bebes, recuerda nuestro trato, para sexo solo mi culo. Quede impactado al escuchar las palabras de mi propia madre yo que siempre creí que era una santurrona y efectivamente cuando homero se quitó para ir por el lubricante pude ver el culo de mi madre estando en cuatro al borde de la cama, su culo aprecia una dona, un culo amanerado y penetrado, ya acostumbrado a soportar semejante vergota gorda. Ese día preferí cerrar la puerta y quedar de espaldas a la pared mientras escuchaba a Marge gemir como puta mientras era penetrada en el ano, duraron un buen rato hasta que escuche que las embestidas terminaron me metí al cuarto de lisa, para ver a mi padre salir del cuarto corriendo para ir al trabajo antes de que terminara su descanso, me quede quieto sin emitir ningún ruido, Salí hasta que escuche el auto arrancar.

Salí de mi escondite y me asome a la recamara de mis padres, pude ver la más descomunal imagen, Marge apenas sosteniéndose con sus rodillas y su pecho y cabeza recargados en la cama como dormida, estaba como una perra cansada y la leche escurriéndole del culo, sin pensar saque mi celular y le tome unas fotos, mi madre en cuatro patas con el culo abierto como una dona agotada como una puta recién usada apretando su ano de vez en cuando para sacar hasta la última gota de semen.

Ese mismo día a la hora de la cena baje con la familia, mientras comíamos un as chuletas ahumadas, no podía dejar de mirar el culito apretado de mi madre enjaulado en ese vestido verde entallado, no podía dejar de pensar que su culo estaba ya amanerado listo para recibir cualquier tipo de pene, no fue hasta que sentí un zape de parte de lisa que logro sacarme de mi transe, esta me miro extrañamente diciendo –que estás viendo asqueroso, acaso le veías el trasero a nuestra madre!. Yo me exalte y replique que no, que solo me gusto el color del vestido pero sin ninguna mala intención, si supiera lo que estaba pensando, seguro me colgaban de las bolas por cerdo. Espere a que todos terminaran de cenar y se retiraran de la mesa, me quede ahí jugando con mi perro espere hasta que no hubiera moros en la costa, esperando el momento exacto cuando Marge comenzó a lavar los platos, ya estaba listo para comenzar mi plan, era mi oportunidad, ahora o nunca, así que me acerque sin dejar de verle las nalgas a Marge, me acerque tanto que repague mi polla entre sus nalgas y la presione contra el lavabo, Marge solo refunfuño pues pensó que era homero, y volteo su cara cuando me miro sintió un temor indescriptible, grito –Bart! Que haces! Trato de zafarse pero tenía su culo aprisionado sin poder quitarse, justo para que se callara saque mi celular y le puse en la cara las fotos cuando estaba como perra tumbada en la cama con leche en su ano. Marge no entendió lo que tenía planeado, le dije – Marge, desde ese día ocupo tu culo, lo necesito, lo deseo. Para después con mi mano libre agarrarle una nalga y apretársela encima de su ropa entallada. Marge me pidió que me detuviera, me lo pidió por favor mientras sentía los agarrones de culo que le daba, guarde mi celular en el bolsillo y usando mis dos manos comencé a levantarle el vestido sintiendo esos muslos firmes, hasta destapar esas nalgas que tanto deseaba y su ropa interior blanca al contorno de sus nalgotas deliciosas. Marge me dijo –detente por favor, no podemos hacer esto, si homero nos ve algo muy malo sucederá! Cuando yo le hice el calzón a un lado y acaricie su ano amanerado, se lo acariciaba en círculos con dos dedos –si no haces ruido nadie se dará cuenta, deseo tu culo de puta, una verga más una menos, seguro la aguantas fácilmente. Para después ensartarle mis dedos en su ano los cuales entraron fácil, apenas apretando solos, se los metí como si de un gancho se tratara, la muy puta solo gimió, comencé a dilatarle el ano y este respondió rápido se aflojo rapidito, jamás imagine tener ese culo tan fácil, seguro Marge ya estaba fastidiada de estar siempre con el mismo gordo oloroso y sentir la misma verga y las mismas embestidas, sentir un cuerpo más joven queriendo cogérsela la calentó, descubrí que Marge estaba deseosa de verga.

Aprovechando que estaba en ese estado de excitación, saque mis dedos de su culo y los acerque a su cara –ten huele tu culo todo sucio putita! Marge los olfateo para después metérselos en su boca –ahora prueba tu culo, que perra eres Marge, se ve que la edad solo te ha convertido en una prostituta!

Así estuve hurgando su culo y lubricándolo con su saliva un par de veces, hasta que saque mi pitote todo vigoroso y lo pase por su vagina entre sus nalgas, cada panzón que le daba margue se inclinaba y paraba más sus nalgas, fue tanta su motivación que en un empujón lo quiso meter en su vagina –no puta, primero quiero tu culo quiero lo que homero te hace cada noche, quiero hacerte gemir como todas las noches, después ya veré si tomo tu vagina o tu tropa chupadora, para convertirte en mi puta come semen personal.

En un rato de calentura absoluta le introduje la verga en el ano, tan fuerte fue la embestida que esta zorra solo apretó sus labios para no gritar, su ano se abría y me succionaba el pene tan delicioso, sentía el largo de su intestino y sus apretones calientes en mi verga –eso puta trágate esta verga por el culo. La comencé a embestir tan duro y vigorosamente que la azotaba al lavabo, tan duro que los platos se movían y hacían ruido, así en pie le subí una pierna para así abrir más sus nalgas y tener más facilidad de penetrarla, le rompía el culo con tanta fuerza, que parecía no tener fin, le entraba toda, tanto que si la tuviera más larga seguro se la lograba tragar entera.

Ya agotando mis fuerzas la tumbe en el suelo para verla como en la imagen con el culo parado y el pecho en el suelo. Ella solo me miraba con ternura y deseo, no la hice esperar pues me monte encima y la seguí penetrando tan duro en el ano, le sacaba mi verga de su amarillento culo, que podía ver su ano abierto como un tubo de desagüe, me la cogí tan rico esa noche que no pude aguantar y eyacule litros dentro de ella, sentía como llegaban hasta el fondo, sacando mi verga ya toda flácida y agotada le dije que se pudiera su ropa interior, pues no quería que se sacara mi semen. Esta con dificultad se incorporó y el semen le manchaba las piernas se le escurría por todas partes.

Esa noche fui a  dormir plácidamente cómodamente y en sueño profundo, cuando desperté a media noche escuchaba los gemidos de mi madre en el cuarto adyacente, pues homero el muy cornudo ni cuenta se dio que tenía mi semen en el ano de Marge y estela volvió a rellenar sin piedad, solo reí y me dormí de nuevo.

La día siguiente, me desperté más descansado y vigoroso de por fin haber cogido un buen culo, cuando baje a desayunar Marge solo me daba miradas morbosas y lindas, de vez en cuando mientras abría el refrigerador y sacaba los víveres, inclinándose un poco, se sobaba el ano por encima de su ropa, seguramente le ardía de tener tanta verga ahí metida y en una mirada cachonda que me dio mientras ponía su mano en entre sus nalgas para sobárselo dijo –Bart, antes de irte a la escuela termina tus deberes *quede con cara de wtf cuales deberes si era un baquetón* me contesto tu putita necesita su verga en el culo. Esta se levantó la falda y se inclinó con las piernas totalmente rectas –estos deberes Bart, mi ano necesita tu lechita. Solo me reí puse mis manos en mi nuca y le dije –si mama eres mi putita y tendrás mi verga todas las veces que quieras.