El aire acondicionado del gym no bastaba para secar el sudor que me corría por la espalda pero anoche la causa no fue el ejercicio fue él estaba ahí otra vez mi crush de las pesas el tipo que tiene un culo que pide a gritos ser mordido y unos brazos que parecen esculpidos para sujetar a una mujer mientras la folla contra la pared siempre vamos a la misma hora es una danza silenciosa miradas que se cruzan entre serie y serie de press de banca yo sudando la gota gorda en la caminadora y él impoluto como si acabara de salir de una revista

Anoche fue distinto terminé mi sesión de glúteos y me dirigí a la zona de mancuernas a estirar un poco él estaba justo ahí bebiendo agua de una botella negra me miró y sonrió una sonrisa que me derritió las bragas al instante se acercó y dijo oye siempre te veo aquí entrenando bien duro qué motivación tienes su voz era grave como un susurro directo al clítoris pero fue su olor lo que casi me hace acabar allí mismo una mezcla de sudor limpio un perfume amaderado con algo cítrico que se me metió en la nariz y me recorrió todo el cuerpo hasta empapar mi tanga nombreee dios mío como puede un hombre oler tan bien tan macho tan… comestible

Le contesté algo tonto no recuerdo qué solo sé que me temblaba la voz y que mis piernas estaban hechas de gelatina se rió y sus dientes perfectos me hipnotizaron hablamos un par de minutos de rutinas de dietas una tontería pero yo no podía dejar de imaginar cómo sería que esos labios recorrieran mi cuello cómo sería que esas manos que sostienen pesas de veinte kilos me agarraran de las caderas para penetrarme hasta el fondo el rumor siempre ha estado ahí en el vestuario susurrado entre las chicas que se lo han tirado que está buenísimo pero que lo tiene corto y que además no aguanta nada se corre en un dos por tres

Esa idea me persiguió toda la noche en mi cama sola en la oscuridad no pude evitar meterme la mano dentro del short de dormir y tocarme pensando en él en su olor en su sonrisa en sus brazos mi dedo encontró mi clítoris hinchado y sensible apenas un roce y sentí un escalofrío cerré los ojos y me lo imaginé frente a mí en el gym después de cerrar solo nosotros dos en el estacionamiento subterráneo vacío

En mi fantasía yo me acercaba a él y sin decir una palabra le desabrochaba el short del training se lo bajaba por los muslos fuertes y ahí estaba no era grande no pero estaba grueso y recto como un dedo enfadado le sacaba la verga y la olía ese mismo olor que me había vuelto loca pero concentrado puro macho puro deseo la lamía de base a punta saboreando su piel salada él gemía y apoyaba las manos en el capó de un coche yo me la metía entera en la boca aunque no era larga podía tragar sin ahogarme y lo hacía con ganas chupándola como si fuera el último helado del verano

Él empujaba mis caderas para que me pusiera a cuatro patas sobre el capó del coche el metal estaba frío contra mis muslos calientes yo gemía pidiéndole por favor que me cogiera que necesitaba sentirle dentro no me contestaba solo escuché el ruido del condón al abrirse y luego la punta de su verga buscando mi entrada la encontró y de un solo empujón me llenó completamente grité no era grande pero dios mío cómo llenaba cada centímetro de mi vagina cómo golpeaba justo en ese punto que me vuelve loca

Empezó a moverse lento al principio luego más rápido sus manos agarraban mis caderas con fuerza sus dedos se hundían en mi carne yo sentía el sudor correr por su pecho y pegarlo a mi espalda cada embestida era un golpe seco y húmedo a la vez el sonido de nuestros cuerpos chocando eco en el estacionamiento vacío él jadeaba en mi oído eso es eso es así nena apriétame la verga con ese coñito tan rico y yo apretaba con todo gimiendo como una perra cada vez más cerca del borde

Pero entonces en mi fantasía llegaba el rumor a mi cabeza lo tiene corto y no aguanta nada y justo en ese momento él gemía más agudo y sus movimientos se volvían descoordinados y frenéticos yo sabía lo que venía no no todavía por favor gritaba en mi mente pero era inútil él enterraba su verga hasta el fondo y un grito ronco le salía del pecho sentía cómo palpitaba dentro de mí cómo se vaciaba en el condón en tres embestidas finales y luego… silencio solo su respiración agitada contra mi nuca

Se desplomaba sobre mí por un momento pesado y sudoroso y luego se separaba sin decir nada se subía el short y se iba con una palmadita en mi culo un gracias nena y se perdía en la oscuridad del parking dejándome a mí allí tirada sobre el capó del coche con las piernas temblorosas el coño palpitando y un vacío enorme dentro porque había sido rápido demasiado rápido y yo me había quedado con las ganas en la garganta y el clítoris latiendo como un loco

Fue en ese momento de la fantasía con la frustración hirviéndome en la sangre cuando mi mano en la cama real se volvió más urgente dos dedos metidos deep frotando ese punto g con rabia el pulgar masajeando mi clítoris a toda velocidad ya no era él en quien pensaba eran ellos los de la construcción los rudos con sus vergas morenas y velludas que sí sabían lo que era darle a una mujer hasta dejarla sin aire imaginé que Carlos llegaba al parking y me veía ahí tirada y me daba la vuelta y sin preguntar me abría las piernas y se comía mi concha sensible y mojada luego Alfredo con su verga grande me la metía por detrás mientras otro me llenaba la boca y así uno tras otro dándome lo que mi crush del gym no pudo darme dándome la cogida de mi vida hasta que por fin el orgasmo me estalló en pedazos un tsunami que me dejó temblando y jadeando en las sábanas mojadas

Abrí los ojos la habitación estaba oscura y en silencio mi corazón latía a mil por hora y supe entonces que anoche en el gym no solo me habló él también me habló a mí mi naturaleza más profunda la que necesita más la que no se conforma con un gracias nena y una palmadita en el culo la que busca la canción épica aunque para eso tenga que caminar cuatro cuadras sola en la noche buscando en bodegas oscuras y constructions sites la próxima aventura que de verdad me deje exhausta.