Siemprre he visitados lugares de masajes para relajarme del estres. De la nada comenze a contarle a Gina de tambien que me caian los masajes, pero que tenia que dejarlos porque eran muy caros. Le mencione lo que cobraban las mujeres que hacian los masajes y ella quedo sorprendida «¿asi de caro?» pregunto Gina y le conteste que si. Me miro y me decia » mejor te los hago yo y por menos». Me sorprendio y me causo risa de haber ecuchado lo que ella me decia, pero a la manera a como

ella lo dijo, me gusto y senti que me desperto el huevo. La dejamos ahi y continue trabajando, pero con auqello metido en mi cabeza sobre lo que Gina habia dicho. La mire de lejos y para decir no estaba tan mal la Gina. Gina, estaba casada y yo conocia a su esposo, pero no teniamos una relacion amplea con él. Nos mirabamos en las calles y yo no salia de aquello que me habia dicho Gina. El esposo de Gina es caminonero, y él sale de viaje hasta de cuatro dias fuera de su casa. Una noche recordamos los masajes y ella me lo volvia a repetir que me lo haria por menos de lo que pagaba yo. Le pregunte si tenia experiencia y me contesto que no, pero que trataria de hacerlo lo mejor posible. Acorde de que ella me lo hiciera y me invito a su casa. Le pregunte por su esposo y ella me decia que no regresaria a casa hasta despues de cuatro dias. LLegamos a su casa y despues de una ducha los dos, nos recostamos en el suelo y con la luz bajita (tenue). Ella se habia puesto su pijama y tenia un pomo de aceite para niño en sus manos para entrar en accion. Yo me habia quedado en calzoncillos. Me echo aceite en mi pecho y despacio ella comenzaba a masajearme, pero no tenia la menor idea de como hacerlo, pero el contacto de su mano en mi pecho me hacia sentir bien. La berga se me templo y ella lo noto , pero no comentaba nada al respecto. Luego paso a mis piernas y cuando pasba sus manos hacia mi pierna, sus ojos miraban el bulto en mi calzoncillo. Me masajeaba mis piernas y la berga llego a su maxima ereccion y le calzoncillo bien levantado. Me metio su mano por bajo de mi calzoncillo de manera rapida y me abrazaba el tronco de mi berga con su mano » ¿ Y ésta no necesita masajes tambien?. Me desubique con su movimiento rapido y salte, pero ella me masajeaba todo el palo con su mano haciendole para arriba y para abajo. » ¡Hummm! te la tienes bien calladita verdad?» Gina, lucia muy sensual y concentrada en lo que ella hacia. Pense y decia para mi «¡hum! Aqui ya cogi a esta». La cintura de ella la tenia a la altura de mi hombro y pense que un 69 venia al caso de hacerlo. Con duda tome la orilla de su pijama y le mande un mensaje al intentar de bajarselo. Le alcanze a ver su piel blanca y muy saludable. En eso estaba y sentia como Gina descubria quitando el calzoncillo para ella mirarla y me miro mientras ella acercaba su boca a mi pito bien erguido hasta que con gentileza se lo metio en su boca y comenzo a mamarlo. Yo comenze a bajarle su pijama y ella no decia nada. Gina quedo desnuda y me la eche encima de mi boca para hacer el 69. Sentia los tronquitos de los pelos pubicos que recien le salian y le puse mi lengua en su hermoso y fresco clitoris que se extremecio. Mas luego ella estaba bajo de mi cuerpo y yo la penetraba por su hermoso y rico bollo. Cogimos toda la noche y parte de la madrugada. Al dis siguiente en privado ella me decia que no comentara nada de lo sucedido entre los dos…lo prometi. Tres mese mas tarde ellos se mudaban apara otra ciudad y perdi contacto con ellos. No he podido olvidar a Gina.