Coincidencia que llegamos a trabajar en la misma empresa despues que nos convertimos profesionales. Samanta y yo visitabamos a Hernan y Lidia y a veces otros amigos se unian a nosotros para vacilar en los fines de semanas. Teniamos algo peculiar que de ir a las playas solo eran entre Hernan, Lidia, Samanta y yo. Una vez en la playa todos usabamos lentes negros. Cierto dia en la playa Hernan me sorprendio que yo miraba a su Lidia y me senti muy mal. Lidia y Samanta llegaban del mar y estaban mojadas. Las dos train una bulla escandalosa de que el agua estaba fria. Tomaron sus toallas y se sentaban en la arena de la playa. Samanta se habia sentado que sus rodilla pegaban en su barbilla y con sus piernas bien juntitas. Yo mire a Lidia y ella hacía lo mismo pero, dejaba sus piernas un poco mas abierta que las de Samanta y mire que por un lado de su bikini apenas se asomaban pelos pubicos. Me habí asegurado a que Hernan no sospechara que yo le miraba a su mujer. Un vendedor ambulante de cervezas pasa y compramos cervezas y Hernan me decia delante de las dos mujeres refiriendose a Lidia su mujer «Hey Lidia, éste te esta mirando con deseos». Me nege a lo que decia Hernan y hubo un silencio despues del comentario de Hernan. Nos fuimos al mar en grupo y solos Samanta y yo, ella me preguntaba si era verdad lo que Hernan había dicho…»Hernan esta loco» respondi yo. Samanta me contaba algo que no sabia y me decia que Hernan le habia dicho a ella «Samanta si abrieras tus piernas te la dejo ir sin lastima. No sabes el hambre que te he tenido desde el colegio». Quede sin palabras y volvi mi Mirada para donde Hernan y Lidia se encontraban y exprese «Que pendejo es este». Samanta me decia que no habia hecho caso a sus palabras y que lo tomo como una broma de Hernan. Nadamos para donde Hernan y Lidia y Hernan nos gritaba que no nos acercaramos a ellos. Samanta y yo nos deteniamos y saliamos del agua para irnos a sentar bajo la sombrilla. A los minutos llego Hernan y Lidia riendose de algo que no podiamos figurar. Lidia le pedia a Samanta que la acompañara al baño y una vez solos Herna y yo. éste me confesaba diciendome «Te dije que no te acercaras a nosotros porque tenia a Lidia hasta los huevos, me la cogia y ella estaba por correrse y por eso te dije que no te acercaras. Aproveche a preguntarle a Hernan de cuanta posibilidad existia si hicieramos un intercambio de parejas y le decia lo que él le habia dicho a Samanta. Hernan se quedo callado y le decia de Nuevo de un intercambio de parejas y al ver que no me contestaba le decia «Te moririas si me ves encima de Lidia verdad?». Hernan me contestaba que no por el contrario seria muy divertido. Herana me decia que hablara con Samanta y él hablaria con Lidia. Volvimos al agua de manera separada y yo hablaba con Samanta y me decia que yo estaba loco. Tome a Samanta y le metia el dedo en su panocha cuando estabamos dentro del agua y ella lo deleitab y le decia que se imaginara que era Hernan «por favor, no me metas cosas en mi mente» Me respodia Samanta. Mire a Hernan y creo que cogia a Lidia y Comence a cogerme a Samanta. «Hernan te la quiere meter Samanta» le dije a ella y ella me respondia «Ya me lo confeso que desde que estaba en el colegio me la ha querido meter, pero». Le pregunte «Pero qué?». Y ella me preguntaba por Lidia y le conteste que solo se trataba de un pequeño intercambio de parejas. Samanta se coria y todos saliamos del agua. Lidia se miraba muy tensa y le decia a Samanta que fueran al baño. Las vimos caminar hacia nosotros y Lidia se sentaba conmigo y Samanta con Hernan «Esto es lo que quieren» dijeron las dos al unison. En cual casa quieren que pase pregunto Lidia. Tomamos una moneda para rifar a donde se daria el intercambio y se indico en la casa de Lidia y Hernan. Hubieron condiciones de parte de las mujeres que ese intercambio sucediera entre las dos de la mañana y cuatro de la mañana cuando todo mundo duerme. Samanta y yo llegamos a las dos de la madrugada y ellos nos esperaban bajo un silencio de la vecindad. Lidia me llevaba a un cuarto que ella habia preparado y dese la ventana se podia ver todo el Bulevar con poco autos transitar. Nos despojamos de las ropas y quedamos desnudos en la oscuridad del pequeño cuarto. Samanta gemia y al parecer Hernan la estaba matando con una buena clavada «Es tu mujer» me decia Lidia. Lidia me gustaba tanto que gozaba mas acariciarla y le pasaba mi dedo a lo largo de su raja hasat que se mojaba «Me vas a coger o vas a jugar con mi cuerpo?» me pregunto Lidia y le conteste que las dos cosas haria con ella y la ponia en cuatro patas. Samanta se habia corridor despues de haber escuchado unos gritos de placer. Tome a lidia por su cintura y me la afianzaba contra mis dos manos al lado de su cintura y con fuerza le empuje la verga hasta lo mas prfundo de ella. Mis embestidas era pequeñas y le decia a ella que asi la queria tener a ella en cuatro patas…Asi fue el inicio en Lidia y hacia que sus gemidos se escucharn al otro lado del cuarto donde estaba Samanta y Hernan. Le meti dos polvos Lidia y un cuarto para las cuatro saliamos de la casa de Hernan y todavia la vecindad dormia bajo una paz. Hernan y yo solo tenemos veintiseis años y estamos Fuertes para continuar este intercambio en que hoy estamos envueltos. Hace poco conocimos a Iris…tremendo culo y a su esposo Claudio y ya han comenzado a ir a nuestras relaciones fiesteras al cual gustan mucho. Hernan ha comenzado a estudiar a Claudio y Lidia a Iris y Samanta hace mucho ejercicios para estar en forma, pero esta al pendiente de los intercambios. Me gusta escribir erotico, esperando que le guste mucho la historia «Arenas de Mar