VIOLADA Y SOMETIDA POR LOS AMIGOS DE SU HIJO II

Rosa se movió inquieta por toda la cocina, Atu la arrinconó contra el frigorífico y la beso en el cuello

– Suéltame… – pidió Rosa – No podemos hacer esto

Atu hizo agachar a Rosa delante de él y le puso la polla en la boca y empezó a follarle la boca y cuando la sacaba le golpeaba con la polla en la cara.

– Mira como me has puesto el rabo – le decía Atu

Rosa agarro la polla de Atu por el tronco y lo miro desafiante y se la llevo a la boca y empezó a chuparla

– Así me gusta – le dijo él humillándola – ¿te gusta chuparle la polla al negro?

Rosa hizo un gesto negativo con la cabeza mientras le seguía haciendo una buena mamada

– ¿Quieres que tu hijo sepa lo marrana que eres? – le pregunto Atu

– Por favor mi hijo no puede saber nada de esto – suplico Rosa – hare lo que me digas.

Atu levanto a Rosa del suelo y la empujo hacia la habitación y en el pasillo la puso contra la pared le abrió las piernas y le metió un dedo en el coño, Rosa soltó un suspiro.

– Ya tienes el chochito mojado otra vez gorda… Estas deseando follar… ¿cuánto hace que no te follan?

Rosa permaneció en silencio y mirándolo morbosamente, no podía decirle que estaba excitada, que llevaba casi un año sin mantener relaciones sexuales y la forma en que la estaba tratando la estaba poniendo cachonda.

Atu la empujo y Rosa camino a trompicones hacía la habitación y una vez allí Atu la empujo encima de la cama, la puso en el borde y le abrió las piernas.

– Ábrete el chocho marrana – le dijo tajantemente Atu mientras le daba golpes con la punta de la polla en el coño y Rosa se lamentaba – ¿No me digas que esto te hace daño?

– Tengo el coño muy sensible – se excusó Rosa intentando cerrar las piernas

Atu le pasaba el glande por la raja del coño y Rosa emitía un gritito de sorpresa y él lo volvía a hacer.

– No le hagas más – le pidió ella – soy muy sensitiva abajo.

– Ábrete el chocho marrana – le dijo él mientras le paso el glande por el agujero del culo y le insinuó una penetración – que suave que tienes el culito marrana… ábrete o te la meto por el culo guarra.

Rosa soltó un grito al notar el glande en su culo y su cuerpo sufrió una convulsión y le hizo un gesto para que parara.

– No me hagas más eso, te lo suplico – susurró Rosa – me abro el coño para ti.

Rosa se abrió el coño con los dedos y Atu le pasó la punta por todo el coño abierto y ella lanzaba un sollozo gratificante y Atu la penetró con la punta del glande, la sacaba y la volvía a penetrar, Rosa lanzaba gritos dolorosos.

– La tienes muy grande ten cuidado – suplicó Rosa que no podía creer que aquellas palabras saliesen de ella – tengo el coño muy estrecho.

– Tienes el chocho muy calentito – le dijo él dulcemente mientras la penetraba profundamente, Rosa soltó un grito de dolor y sus manos golpearon a Atu en el pecho – que chocho más estrecho que tienes marrana… dame tu chocho para que te lo folle.

Atu la penetró otra vez profundamente y su polla empezó a deslizarse suavemente entrando y saliendo de Rosa, que sintiéndose totalmente empalada se agarró al cuello de Atu.

– Te gusta que te la meta así – le susurraba Atu – me gusta el chocho que tienes… te voy a follar toda la noche.

– Despacio por favor – suplico Rosa – no me cabe en el coño.

– Eres una guarra… mírame mientras te follo – le dijo él – quiero ver la cara que pones mientras el negro te folla bien follada.

La polla de Atu cada vez profundizaba más y Rosa hacía gestos de dolor mientras su mirada suplicaba que no le hiciese daño, pero Atu que lo noto le subió las nalgas y la penetraba profundamente, dejaba su polla parada en el fondo del coño de Rosa y la sacaba violentamente para volver a penetrarla, los gritos de dolor de Rosa inundaban toda la habitación.

– Te voy a abrir el chocho marrana – le grito Atu – voy a hacer de ti una buena puta

– Así no por favor – sollozaba Rosa – trátame con suavidad… fóllame despacio

Atu la volvió a penetrar con intensidad y Rosa arqueaba la espalda mientras gritaba placenteramente.

– ¿Te gusta que te folle así? – le decía Atu mientras le pellizcaba los pezones y Rosa le hacia un gesto afirmativo – a la gorda le gusta que venga a follarla el negro.

Rosa se agarró al cuello de Atu mientras le hacía gestos expresivos con la cara y su cuerpo empezó a temblar.

– ¿te vas a correr gorda? – pregunto él y Rosa le hizo un gesto afirmativo – Córrete marrana… enséñame lo puta que eres… cómo te dejas que te folle el negro.

Rosa lanzo un grito y convulsiono en la cama, tuvo un orgasmo salvaje y de su coño mano una gran cantidad de fluido y estuvo un buen rato temblando en la cama.

 – ¿Tu marido te hacía correrte así?… le pregunto él mientras le dio un cachete en las nalgas mientras se sentaba en la cama

– Mi marido me tenía mal follada – contesto Rosa mientras le agarró la polla y se la llevo a la boca – me gusta tu polla dura… quiero que me la vuelvas a meter.

– Chúpame la polla guarra – le dijo él acariciándole sensualmente la cabeza – te voy a follar toda la noche.

Rosa asintió con una sonrisa y empezó a darle lametazos en el glande sensualmente mientras la agarraba por el tronco y lo miraba a los ojos morbosamente y Atu le hizo un gesto para que se acercara y se besaron y se dieron la lengua mientras las manos de Atu le apretaban las tetas y le abofeteaban las nalgas.

– ¿quieres follarme? – le pregunto él mientras le daba la lengua y le pellizcaba los pezones.

Rosa asintió con la cabeza y lo beso en los labios, se puso encima de él y se sentó en su polla mientras se ayudaba con las manos a metérsela en el coño y sus brazos cruzaron el cuello de Atu.

– Me vas a volver loca – le susurro ella al oído – tu polla me va derretir el coño.

Atu le agarro las tetas y empezó a morderle los pezones y Rosa se movía cada vez más fluidamente encima de su polla y observaba la cara placentera de él.

– ¿Te gusta que mueva así? – susurraba Rosa – Quiero que me hagas tu puta… y que vengas a follarme.

– Me gusta cómo me la chupas – contesto él – y lo caliente que tienes el chocho… eres una mama muy marrana y muy puta…. muévete gorda vamos a disfrutar follando.

Rosa se agarro al cuello de Atu y empezó a moverse más rápido y cabalgarlo con fuerza, Atu la abofeteo las nalgas y Rosa lo miraba morbosamente mientras jadeaba y suspiraba placenteramente mientras las manos de Atu le abrían las nalgas y su dedo busco el culo de Rosa.

– Eso no cariño – le suplicó ella – por ahí no

Atu la miro desafiante mientras su dedo penetraba el culo de Rosa que soltó un grito y le hizo un gesto de desaprobación

– Voy a follarte por donde tu marido no te follaba – le advirtió él – me vas a dar tu culito gorda

Rosa no le respondió pero dejo las cosas claras, se dejo penetrar por el dedo de Atu y se volvió a correr agarrándose al cuello de él, Rosa se bajo de encima de él y se llevo la polla a la boca y empezó a chuparla.

– ¿Te vas a correr para mí? – le dijo Rosa mientras le daba lengüetazos en la polla

– Quiero correrme en tu boca marrana – le dijo él

– No puede ser – le contestó ella – no se lo dejaba hacer a mi marido.

Atu empezó a bufar y a agitarse encima de la cama y agarró a Rosa fuertemente por la cabeza y el cuello y le descargó todo su semen dentro de la boca y encima de la cara. Rosa le dio una bofetada en la cara furiosa y se fue al lavabo sin decir nada mientras Atu la seguía con la mirada sonriendo.

Atu se levanto de la cama y fue hacía el lavabo y Rosa estaba dentro de la espaciosa ducha, Atu entro en la ducha y Rosa le hizo un gesto para que no entrara enojada y él la agarro violentamente y la hizo agachar y empezó a darle golpes en la cara con su polla.

– Vas a hacer lo que yo te diga – le grito él furioso – no has entendido que vas a ser mi putita… o quieres que tu hijo sepa lo guarra que es la gorda de su madre y cómo chilla mientras me la follo.

– No… hare lo que tú me digas – contesto Rosa que sabía que estaba en manos del amigo de su hijo.

– Hazme una paja gorda – le dijo él metiéndole la polla entre las tetas y Rosa estrujo la polla con sus tetas y empezó a moverlas de arriba abajo.

Rosa estuvo un rato haciéndole una paja con las tetas, después le chupo la polla y Atu la follo debajo de la ducha, luego la volvió a llevar a la habitación y la estuvo violando toda la noche.