Por

Anónimo

enero 12, 2013

9848 Vistas

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De vacaciones

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Tenía 15 años cuando esto sucedió, medía 1.74 y pesaba 63 kg, hacía deporte y estaba enamorado de una compañera muy bonita.

Esas vacaciones fuimos a la playa, en casa de mis padres era aburrido estar y salía a pasear, así fue como conocí a Cruz un pescador de 50 años, negro, muy alto y fuerte. Conversar con el era divertido y noté que me tocaba mucho, pero era su manera de hablar. Después de unos días me invitó a conocer una cascada en las montañas cercanas, y fuí con el. El camino era muy angosto, poco pisado, y muy empinado. Varias veces Cruz puso sus mano en mi trasero para impulsarme en lugares muy empinados y de dificil paso. Después de 1 hora llegamos. El lugar era hermoso, se veía toda la costa, y la cascada de unos 15 metros de altura caía en un pozo de 4 x 4 metros aproximadamente. Cruz se desnudo totalmente y se metió al agua. Lo miré y quedé sorprendido con su cuerpo, era muy fuerte y musculoso. Al verme me dijo que me metiera, le dije que no tenía traje de baño y el rió. Se paró en una roca y me preguntó: ¿Te gusta el mío?. Lo miré y vi su cuerpo desnudo. Reí y me desvestí. El agua era fría y caminé despacio hacia la cascada. Casi llegaba cuando sentí que me tomaba por las caderas y me empujaba hacia la caida. Al llegar quedé bajo el agua, que se sentía deliciosa, y entonces sentí como pegaba su cuerpo al mío. Sentí su grueso pene duro y comprendí que lo tenía erecto.Traté de soltarme, pero era muy fuerte. Allí me tuvo por varios minutos y noté aterrado que se friccionaba conmigo masturbandose. Quise separarme pero el no cedió. Después de un rato me soltó y salió del agua. Estaba asustado y muy molesto, fui por mi ropa y el me tomó a la fuerza y me besó en la boca, tomando una foto con mi teléfono. Me la enseño y me dijo: Si no haces lo que te digo pondré esta foto en tu PIN. Vi la foto y comprendí que estaba atrapado, me veía besandome con él y no se veía ningún signo de forzamiento. Cruz me hizo acostar sobre una piedra plana boca abajo y empezó a lamer mi ano con su lengua. Puso algo baboso en mi ano e introdujo uno de sus dedos. Gemí de dolor y rabia, pero el empezó a moverlo eroticamente, sin importarle nada. Poco a poco me fue dilatando. Yo le rogaba que me dejara y el me decía: Mi amor, luego me rogarás que no pare. Después de una larga agonía se montó sobre mi y empujó su sexo en mi cuerpo. Grité de dolor. No entró sino unos centímetros, pero el empezó a moverse impulsandolo más profundo cada vez. De pronto sentí un dolor agudo, fue como si me hubiera desgarrado por dentro, y grité de dolor, el empezó a moverse con lujuria, cogiendome con deseo y el dolor empezó a ceder. Cruz retardó su orgasmo varias veces, hasta que al fin eyaculó en mis entrañas. Yo lloraba de indignación, me sentía humillado y sucio. De pronto me dijo: mira, y volteé solo para ver que me fotografiaba nuevamente con mi teléfono. Al separarnos me bañe y lave lo mejor que podía por dentro. Al salir Cruz me esperaba y me dijo: Ahora me lo vas a mamar, voy a enseñarte como me gusta que me lo mamen. Me negué y me dijo: Ok, enviare estas dos fotos por PIN. Comprendí que tendría que hacerlo.

Al acabar empezó a besarme con ternura acariciandome y diciendome que estaba enamorado de mi y me quería como mujer. Después de un largo rato me pidió que cabalgara sobre su virilidad. No tuve más remedio y me le entregué mientras me hacía mirarlo a los ojos. Antes de partir volvió a poseerme, pero esta vez pidiendome que cerrara las piernas después de metermelo.

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Las vacaciones terminaban ese fin de semana y me iría. Pensé que eso sería solo un mal recuerdo. Al volver al pueblo Cruz me dió el teléfono y me dijo: Sabes donde encontrarme.

Al llegar a casa todos me miraron inquisidoramente, pregunté que pasaba y mi padre me dijo: lo que pasa es que hay un maricón que le gusta ser cogido por negros. Miré mi teléfono y vi que Cruz había pasado las fotos a todos mis contactos. No dormí esa noche, al llegar a casa mis amigos me rechazaron y en mi casa me hicieron la vida imposible. Estaba preso y nadie me creía. Una noche tomé una gran cantidad de dinero de mis padres y al pararme en la mañana para ir al liceo, donde escapaba porque no soportaba las humillaciones, tomé un bus y me fuí al pueblo. Encontre a Cruz en el malecón. Al verme sonrió y le pregunté por qué había hecho eso. Su respuesta me dejo perplejo: Porque te amo. Me dijo que lo siguiera y fuí con el. Vivía fuera del pueblo y al llegar me beso con pasión y me dijo que mis amigos no lo eran, y mi familia no me creería nunca, pero en cambio yo si te amo, quiero, y deseo. Quiero que seas mi mujer, dijo.

Empecé a vivir con el, al comienzo lo hacía porque no tenía donde ir, pero poco a poco empecé a disfrutar sus besos, sus caricias, y su sexo. En dos semanas era plenamente suyo. Accedí a vestir ropa femenina, a depilarme, tomar hormonas, maquillarme, y feminizar mis movimientos, comportamierntos, y voz. han pasado 3 años desde entonces. Ahora tengo un empleo en el que trabajo desde casa por internet. No vi más a mis amigos ni familia. Ahora tengo nuevas relaciones que me aceptan como soy, y soy la mujer de un hombre maravilloso, que me hace feliz todo el tiempo, pero en especial en la cama.


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2 respuestas

  1. nindery

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