Por

Anónimo

agosto 29, 2013

6379 Vistas

agosto 29, 2013

6379 Vistas

Alumnas perversas

0
(0)

Como iba diciendo, fui destinada

a un instituto privado y me asignaron unas clases de alumnos con una media de

diecinueve años. al principio me costo hacerme con la clase, eran muy rebeldes

y prestaban poca atención. En una de las clases particularmente me costaba

mucho dar la lección pues había un grupito de tres amigas que eran

muy inquietas y siempre montaban mucho follon con el tema de los moviles y la

cháchara.

Las tres amigas eran Mónica, Sonia y Olga, Mónica

era rubia, muy bien formada para su edad y de complexión fuerte, era la

que mandaba sobre el grupo claramente, lo que ella decía hacían

las demás. Sonia era morena y con unos ojos preciosos, de color verdes,

era mas bien tímida pero se dejaba llevar y resultaba tan trasto como las

otras y Olga era muy guapa, también morena con unos pechos increíbles

para su edad y con un aire un poco varonil, siempre con pantalones y camisa.

Un día, mientras daba la lección, las tres no paraban de molestar

al resto de sus compañeros, ya les había llamado la atención

varias veces y las había amenazado con enviarlas a dirección para

que las amonestaran y eso es lo que paso. Las mande salir al pasillo y salí

con ellas y les dije que su aptitud había acabado con mi paciencia así

que las enviaba a dirección para que las echaran unos días, entonces

de repente Mónica se acerco a mi casi juntando su nariz con la mía

y me dijo con un tono susurrante y amenazador:

-profe, se arrepentirá

de esto…..

Estuve a punto de contestarle a su osadía pero el tono

de voz que utilizo y su mirada me intimidaron, así que entre a clase y

seguí con mi trabajo.

El resultado es que fueron expulsadas durante

una semana por su falta de respeto hacia la clase y no las vi hasta el viernes

siguiente.

Salí del instituto y me fui hacia mi apartamento que había

alquilado y en el cual vivía sola. Eran ya las diez o así de la

noche del viernes cuando sonó el timbre, fui a ver quien era y me encontré

que era Sonia, estaba llorando y quería hablar conmigo, yo me quede extrañada,

la hice pasar y sentarse en el sofá, le ofrecí un refresco y le

dije que me explicara.

Me dijo que ella estaba harta de sus amigas, que la

llevaban por mal camino, y que ella no era mala. que quería que yo la ayudara

a portarse bien en clase. le dije que no había problema, que yo estaba

dispuesta a ayudarla a cambiar si ella ponía de su parte. lo que mas me

extrañaba es que no paraba de mirarse el reloj. de repente me dijo que

si podía traerle una aspirina pues le dolía un poco la cabeza, me

levante y fui al baño a buscarla, al salir del baño note una presión

en mi boca con un fuerte olor que atravesó mi nariz y que me mareo, era

cloroformo y note como se me nublaba la vista y me desmaye.

Cuando desperté

me costo un poco visualizar, pero reconocí mi lámpara en el techo

de la habitación, así que estaba en mi cama, en seguida note que

tenia cinta aislante ancha en la boca por lo que no podía hablar ni gritar,

mis manos estaban atadas a ambos lados del cabecero con unos cinturones míos

y mis piernas igual, mire hacia mi y me di cuenta que solo tenia puesta las braguitas

¡estaba atada, amordazada y semidesnuda en mi cama! Mire en la habitación,

vi que el reloj marcaba las doce y cuarto de la noche, no había nadie pero

oía jaleo en el comedor. estaba asustada…¿qué estaba pasando?.

A los pocos minutos se abrió la puerta de la habitación y ¡entro

Olga!,¡así que enseguida entendí que me habían tendido

una trampa!.

-¡eh chicas, la profe ha despertado! grito.

Acto seguido

entro Mónica y Sonia, tenían botellas de ginebra y de whisky que

habrían cogido de mi mueble bar,

Mónica se acerco a mi, yo intente

gritar pero no salía mas que gruñidos, me miro de arriba a abajo

con una sonrisa maliciosa y lasciva a la vez me dijo:

Bueno, profe, le dije

que se acordaría de nosotras, así que aquí estamos y ¿sabe

lo que vamos a hacer?.

Le intente decir que me soltara pero solo salían

gruñidos, conteste que no con la cabeza y entonces de repente agarro uno

de mis pechos y apretándolo con fuerza me dijo:

¡te vamos a hacer

pasar una noche que nunca olvidaras, putita!

Y pasando sus dedos por unos de

mis pezones y con voz suave, se acerco a mi oído y me dijo:-te vamos a

follar, profe…veras que bien lo vas a pasar.

Yo estaba alucinando, no podía

creer lo que me estaba pasando,¡mis alumnas iban a violarme!,yo nunca había

estado con una mujer y además nunca se me paso por la cabeza. estaba sobreexcitada

pero no sabia si era de miedo o de otra cosa, de alguna manera esta situación

no me estaba disgustando del todo…

Entonces Mónica hizo un ademán

a Olga que se acerco y le dijo ¡comete su teta izquierda y tu Sonia comete

la derecha!,pero primero desnudaos.

Olga y Sonia se quitaron la ropa y se

quedaron en braguitas, las tetas de Olga eran impresionantes y Sonia era un bombón,

las dos tenían cuerpos de modelo, empezaron a comerme las tetas, una cada

una, yo intente resistirme pero cuando empecé a notar las lenguas recorriendo

mis pechos, mi miedo empezó a transformarse en excitación, lo hacían

suave y succionando mis pezones que estaban duros como piedras, sus lenguas jugaban

alrededor de ellos para luego sus dientes morderlos y dejarlos doloridos, empecé

a sentir un calor en mi entrepierna y me sorprendía sentir eso ante tal

acontecimiento.

Mónica se acerco a mi oreja y empezó a chupame

el lobulo mientras me susurraba:

Eres nuestra, mmmmmmmm, te vamos a follar

profe, tooooda la noche, estas muy buena, mmmmm, y te vamos a comer enterita.

El caso es que eso me excitaba aun mas, yo no quería sentir placer pero

no podía evitarlo, Olga y Mónica me acariciaban los muslos a la

vez que me chupaban los pechos con una suavidad que nunca había sentido

con ningún hombre, sentia sus manos subir por las piernas.

Entonces

Mónica me dijo que me iba a quitar la cinta de la boca, pero que si decía

una sola palabra me la volvería a tapar pero después me cortaría

el pelo de la cabeza al cero. me dijo que si la había entendido y le dije

que si. entonces pego un tiro de la cinta adhesiva que me hizo mucho daño,

pero antes que pudiera siquiera gritar de dolor metió su lengua en mi boca

y empezó a besarme como una loca. Sentí sus labios comer los míos

y su saliva entrar en mi boca mientras mis pechos estaban a punto de estallar

de excitación, me contoneaba sin control y note que empezaba a mojar mis

braguitas.¡cielos, me estaba corriendo!.

Mónica se levanto y

le dijo a Olga que se quitara las braguitas, esta hizo lo propio dejando al descubierto

un coñito perfectamente depilado, solo había un poco de pelo en

el monte de venus con forma de pirámide invertida y con unos labios vaginales

prominentes y húmedos.

Mónica cogió las braguitas de

Olga y las hizo una pelota para a continuación metermelas en la boca, yo

sentí un sabor entre algodón y dulce, con un olor que me recordaba

a mi cuando alguna vez me había masturbado, era sabor de hembra.

A

continuación Mónica se desnudo también quedándose

solo con un tanguita negro que dejaba adivinar una rajita abultada, tenia unos

senos muy redonditos y unos pezones muy rosados, era ancha de espaldas y bastante

fuerte, la verdad es que imponía respeto.

Saco de un bolsillo de su

pantalón una pequeña navaja y yo me asuste, la abrió y se

dirigió a mis bragas, primero corto un trozo del lateral derecho y después

del izquierdo.

¡vamos a ver que tenemos aquí! Dijo y acto seguido

tiro fuerte de ellas, yo sentí como la tela se deslizaba sobre mi raja

hasta que me libero de ella, en ese momento sentí tres miradas lascivas

sobre mi, estaba totalmente desnuda a merced de la voluntad de tres adolescentes.

Eso me excitaba y seguía sin entender por que.

Mi monte de venus tenia

bastante bello, así que Mónica dijo:

-vaya, así no va

a ver quien se lo coma así que habrá que depilarlo.

Agarro con

sus manos un poco de vello, el mas cercano a mis labios vaginales y tiro con fuerza

arrancándome media docena de pelos. yo grite de dolor pero las bragas en

mi boca ahogaron mi grito.

-no te preocupes, profe, no te vamos a depilar

así dijo Sonia portando en la mano unas tijeras, jabón de afeitar

y una cuchilla.

Empezaron recortándome con la tijera, después

me echaron jabón y me afeitaron, pero no me hicieron daño y cuando

acabaron sentia un fresquito muy agradable en toda mi entrepierna.

Yo mire

el reloj, marcaba las dos de la mañana, llevaban dos horas aproximadamente

con su castigo y yo estaba mas excitada que nunca en mi vida.

Sonia se despojo

de sus bragas ,se subió a la cama y se coloco de rodillas entre mis piernas.

a continuación con sus dedos abrió mis labios vaginales y empezó

a chuparme el clítoris con una dulzura impresionante, recorriendo con su

lengua todos los rincones de mi sexo chorreante.

Mónica me quito las

bragas de la boca y yo empecé a gemir sin poder evitarlo, Olga se aproximo

a mi y se puso de manera que su coñito quedaba a la altura de mi boca.

o sea de rodillas entre mi cabeza y mirando hacia Sonia, agacho su cuerpo para

que le chupara el coño pero yo me negué girando la cabeza, entonces

Mónica agarro uno de mis pezones con dos dedos fuertemente y lo retorció

a la vez que me decía:

-¡chupaselo hasta que se corra o lo lamentaras!

No tuve mas remedio que obedecer, empecé a comer esos labios para descubrir

un sabor nuevo y excitante, a la vez que sentia como me comían y me succionaban

mis jugos.

No se cuanto duro aquello, pero se me hizo eterno y placentero,

el flujo de Olga chorreaba por mis labios y ella a la vez se manoseaba sus impresionantes

tetas, mi coño estaba hinchado de placer por aquella comida maravillosa

y para colmo Mónica le estaba introduciendo sus dedos a Sonia mientras

esta succionaba mi clítoris.

De repente Olga se echo hacia delante y

le arrebato mi coño a Sonia, yo estaba agotada pero note una nueva fuerza

en la lengua de Olga que me dirigía hacia un nuevo orgasmo, mientras Olga

y yo nos fundíamos en un 69 ,Mónica y Sonia desaparecieron para

volver al rato con algunas cosas en las manos que en principio no reconocí.

¡Olga, bájate de ahí y deja descansar un poco a nuestra zorrita,

que ahora va a venir lo mejor!

Yo intente pedir clemencia pero Mónica

me tapo la boca con la mano y me dijo

-recuerda, ni una palabra o te rapo

al cero, solo puedes gemir como una cerda que eres.

Sabia que hablaba en serio,

así que me calle, eran cerca de las cuatro de la mañana. estaba

cansada pero estas chicas sabían administrar bien el asunto para que no

terminara de agotarme.

Mónica se aproximo a mi coño y empezó

a acariciarlo bastamente mientras Sonia me daba un trago de whisky, entonces distinguí

en la mano de Olga algo familiar. Era un calabacín de mi nevera, era de

aprox. Unos 20 o 25 cm y no muy grueso, le estaba untando una crema que me pareció

vaselina y después se lo dio a Mónica.

No tuve mas remedio que

decir-¡por favor no me metas eso! Entonces Sonia me hizo la señal

de silencio con el dedo y después empezó a besarme.

Note como

la punta del calabacín recorría mis labios vaginales de arriba a

abajo pero no llegaba a introducirse, cosa que de alguna manera me ponía

nerviosa, entonces esa punta empezó a bajar aproximándose a mi culo

y buscando mi agujero. Intuyendo lo que iba a pasar intente decir algo pero la

lengua de Sonia penetro con fuerza en mi boca y me acallo mientras Mónica

me introducía el calabacín por el culo sin piedad. Yo era virgen

por detrás así que aquello empezó con dolor para convertirse

al poco tiempo en un placer que jamás pensaría que me pudiera gustar

tanto. empecé a gemir y a contonear mi culito al ritmo de las penetraciones

de Mónica.

-¡mira a la pija-dijo Olga- si le gusta que la den

por el culo!

Después de un buen rato así note que me corria

otra vez, era increíble pero aquello me gustaba.

Mónica saco

el calabacín de mi culo y yo note un alivio placentero y como mi ano daba

la sensación de ser tres veces mas grande.

Ahora, te vamos a follar

una a una -dijo Mónica-,cada una a su estilo. y para que veas que no somos

tan malas te dejamos escoger el orden.

Yo le pedí que me dejaran ya

por favor, que no podía mas, que jamás volvería a castigarlas

y que no contaría esto a nadie, pero Mónica insistió en que

eligiera el orden en que quería ser follada por ellas. empecé a

pensar, sabia que Mónica era un poco sado por la forma en que me trataba,

Olga era como mas masculina, así que me imaginaba que me follaria como

si fuera un hombre y Sonia era delicada y dulce. Necesitaba un poco de descanso

así que elegí a Sonia, después Olga y deje para el final

a la temible Mónica.

Tal como pensé, Sonia fue cariñosa

conmigo, se puso a mi lado tumbada y mientras me masturbaba con sus finos dedos

me besaba tiernamente en la boca, cuello y tetas, cuando sus dedos estaban empapados

en flujo me los daba a lamer a la vez que ella. Fue realmente maravilloso. esto

duro una media hora y me sirvió de relax, ya que sus caricias parecían

masajes. Se despidió con un beso dulce y se fue hacia el comedor.

Era

el turno de Olga, cuando entro vi que llevaba un pene de látex con un cinturón

adosado a su cintura. así que adivine su desviación varonil. Me

desato las piernas y me las abrió bien, para luego introducirme su polla

de látex que era enorme. empezó a follarme introduciendo y sacando

su trasto, a la vez que me comía las tetas y me besaba con ansia. Yo estaba

agotada pero como todavía no me habían introducido nada por mi coño

aquello reavivo mi excitación. Olga se movía realmente bien, mejor

que cualquier hombre con el que hubiera estado jamás, su culito subía

y bajaba a un compás rítmico haciéndose mas penetrante en

la bajada, como si no quisiera que mi coño desperdiciara un solo centímetro

de aquello. Luego empezó a acelerar a la vez que me decía:

-¡correte

pija, vamos, correte!

Y eso fue justamente lo que paso, me corrí como

una loca, jamás me habían follado tan bien, estaba alucinada y asustada

por lo que venia a continuación.

Mónica entro a los pocos minutos

de salir Olga, eran ya las seis de la mañana. Me dolía todo, los

pechos, el culo, el coño, incluso la boca. Mónica seguía

con su tanga negro y traía algo en las manos que escondía detrás

de su cuerpo. Volvió a atarme las piernas a la cama y saco unas esposas

como las de los policías, soltó una de mis manos y me coloco una

de las esposas, la paso por el cabecero y sujeto mi otra mano. Eran unas esposas

con combinación numérica, tenían tres ruedas de números

que ella movió al azar después de cerrármelas.

-que me

vas a hacer Mónica, por favor no me hagas daño. le suplique.

-tranquila, ya nos vamos pero recuerda, el lunes todo volverá a la normalidad,

espero que no se te ocurra volver a regañarnos en clase al menos claro,

que quieras que esto se vuelva a repetir. En tu mano esta…

Después

saco dos consoladores, uno grande y otro mas pequeño.

El grande lo puso

en marcha y la punta hacia un juego circular muy lento, me lo introdujo por el

coño hasta dentro y ahí lo dejo, luego el pequeño tenia como

unas protuberancias que al ponerlo en marcha se movían de arriba a abajo

con rapidez y me lo metió por el ano.

-escucha bien, putita, me dijo.

he puesto pilas nuevas y de larga duración, espero que lo disfrutes. mañana

por la mañana te llamare por teléfono y saltara el contestador,

estate atenta porque te daré la combinación de las esposas para

que te las puedas quitar. El lunes en el instituto nos veremos pero antes quiero

darte algo.

Se quito el tanga y se sentó sobre mi boca y me dijo:

-¡cómeme el culo, puta!.

Aquello era demasiado, la mente de Mónica

era retorcida, mientras aquellos consoladores trabajaban por si solos en mi coño

y mi culo tuve que chuparle el ano que tenia un sabor amargo pero que increíblemente

me gusto.

Después de un rato note como se corria y me restregó

el coño sobre mi boca dejándome esa mezcla de sabores en mi paladar

como recuerdo.

Después se fueron y allí me dejaron, esposada,

desnuda, cansada, follada por delante y por detrás por dos consoladores

que parecían no acabar nunca. creo que me dormí. cuando me desperté

sonaba el teléfono. el consolador grande se había parado pero el

pequeño seguía funcionando y trabajando mi ano. escuche la combinación

y me quite las esposas, después me saque el consolador grande y poniéndome

de costado empecé a sacarme el pequeño, pero increíblemente

volví a introducirlo, y así estuve hasta que se paro.

Fue la

experiencia mas maravillosa de mi vida. No resta decir que a mis alumnas las volví

a castigar y ellas volvieron a castigarme a mi…..solo que esta vez no hizo falta

que me ataran…


¿Que te ha parecido este relato?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este relato.

2 respuestas

  1. nindery

    Estoу cоmplеtamеntе dеsnudo. ¿Quiеrе vеr unа imаgen? – http://analsex4.fun

  2. helenx

    Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt

Deja un comentario

También te puede interesar

A tientas

anonimo

14/05/2020

A tientas

entregandome su mujer 2º parte

amocolmado

24/09/2012

entregandome su mujer 2º parte

Tomando el control.

alexking

27/12/2022

Tomando el control.
Scroll al inicio