Mi novia y yo
Mi nombre es Daniel, tengo 21 años y más que nada soy un chico normal de universidad, estoy estudiando Economía, y soy un ávido lector de ciencia ficción y de novelas románticas, por lo que se cómo tratar a una chica. Justo eso me hizo conseguir a una novia bellísima que se llama Cristina, tiene una sonrisa encantadora, es un poco tímida, muy conservadora, pero con un cuerpo muy bien definido pues se ejercita mucho, y sobretodo tiene unas nalgas increíbles. Cuando la conocí, todo el mundo se peleaba por salir con ella por su cuerpo tan perfecto, pero afortunadamente terminé siendo el ganador.
Después de poco más de 6 meses de estar haciendo méritos demostrándole que en verdad la quería logré convencerla de tener sexo conmigo, sin embargo como ella es muy conservadora no quiso probar más allá de la posición normal, y aunque ya llevamos más de 2 años y medio saliendo y poco a poco hemos probado diferentes cosas y el sexo ha mejorado, la monotonía se ha ido abriendo camino en nuestra relación.
Un día mientras buscaba un libro en la biblioteca de la universidad, encontré uno que hablaba acerca del método de la hipnosis y cómo esto era muy posible siempre y cuando el hipnotizador y el hipnotizado tuvieran una relación de confianza ya que sólo así la mente del hipnotizado podría relajarse al 100% y no despertaría en medio del trance. Esto me dio una gran idea para reavivar la chispa entre mi novia y yo.
Después de leer una montaña de libros acerca de la hipnosis y de cómo hipnotizar a alguien, decidí probar todo lo que había aprendido en la noche de nuestro tercer aniversario. Tenía todo preparado, la había invitado a cenar y le había comprado un collar de perlas hermoso con el poco dinero que había ahorrado que combinaba a la perfección con su vestido entallado azul, sus tacones y sus medias negras que llevaba puesto ese día y realzaban su trasero que ya de por si imposible de no voltear a ver.
Después de una deliciosa cena, de darle el collar y ya con un poco de vino encima le propuse ir a algún hotel cercano a lo que aceptó gustosamente.
Llegamos al hotel y pedimos la suite VIP que contenía jacuzzi y una cama King size, ya establecidos, abrimos otra botella de vino y le empecé a contar acerca de los libros que había leído y de las ganas que tenía de probar la teoría con ella, pues sentía que podría ayudarnos mucho a relajarnos y perder inhibiciones. Después de mucho insistir, finalmente accedió.
La coloqué encima de la cama y puse música relajante como la que se usa para los masajes.
– Ahora quiero que sólo te concentres en el sonido de mi voz, nada más importa, sólo estamos tú y yo en el mundo. Cierra los ojos y recuéstate sobre la cama.
Ella me miró fijamente a los ojos antes de cerrarlos y se acostó.
– Quiero que pienses en un lugar tranquilo, uno de tus lugares favoritos para pensar. ¿Cuál sería este lugar?
– El bosque donde celebramos nuestro primer aniversario.
Ahora que lo mencionaba, ese bosque si tenía cierto aire de relajación, contenía un lago donde nos metimos a nadar, y cuando vimos que no había nadie cerca la empecé a desnudar y en lo más recóndito del lago hicimos el amor.
– Dentro de ese bosque hay muchos árboles, ¿cierto? Quiero que te sientes debajo de uno de ellos y veas la tranquilidad del lago, escuches el sonido que hace el viento al mover las hojas de los árboles, que sientas los rayos de sol en tu piel y como tu respiración se va haciendo cada vez más lenta, te estás relajando más y más. Poco a poco vas dejando que la paz y la quietud vayan tomando tu cuerpo, te vas sintiendo cada vez más y más cansada, quieres cerrar los ojos y sólo dejarte ir, hacerte una con el bosque.
– Voy a contar hacía atrás a partir del 3, al llegar a 0 vas a quedarte profundamente dormida en tu bosque, ¿de acuerdo?
– 3, confías en mí y sólo harás caso a mi voz
– 2, lo único que quieres es dormir y dejarte ir
– 1, te sientes muy relajada
– 0, duerme
Al llegar a 0 aún no podía creer que realmente hubiera hipnotizado a mi novia, ya que consideraba la posibilidad de que me estuviera haciendo alguna clase de broma, por lo que decidí ponerla a prueba.
– Estás ahora bajo mi control, estás completamente hipnotizada. Al chasquear mis dedos despertarás y serás una gatita que está en celo. Toda tu vida has sido una gatita, sólo sabes ronronear y gatear en 4 patas.
Yo sabía que si me estaba jugando una broma se negaría totalmente a esto, pues el vestido y las medias que traía eran nuevas y jamás las maltrataría arrastrándose por el piso de un hotel. Acto seguido, chasquee mis dedos.
En ese momento, sólo vi como Cris abrió sus ojos y rápidamente se puso en 4 encima de la cama mostrándome todo su delicioso trasero, estirándose para enseñarlo lo más posible por debajo de su vestido que apenas y lo lograba cubrir y sus medias que se estiraban para dejarme ver su ropa interior.
Me di la vuelta y fui hacia el otro lado de la habitación para ver si me seguía, entonces Cris se bajó de la cama y arrastrándose en 4, sin importarle su vestido, llegó a mis pies y se empezó a restregar contra mis piernas queriendo que le acariciara todo su cuerpo. Al notar que no le hacía mucho caso, se arrodilló frente a mí y como una gatita juguetona empezó a mover con sus manos el cierre de mi pantalón, como si fuera una bola de estambre, pidiéndome con la mirada que lo bajara.
¿Te apetece algo más real? Conoce gente / en vivo.
En ese momento me di cuenta de que no estaba jugando.
– Cris, vuelve a dormir.
Se quedó perdidamente dormida ahí en el piso, echa bolita como una verdadera gata.
– Ahora que sabes que eres una gatita, te has dado cuenta de que traes ropa encima y a las gatitas no les gusta traer nada encima, ¿por qué no te lo quitas?
Lentamente Cris despertó y vio su vestido y sus medias con rareza e intentó arrancarse la ropa de su cuerpo usando sus �garras�, y al ver que era posible que rompiera toda su ropa acudí a ayudarle. Le ordené que se incorporara y se pusiera quieta y mientras bajaba con suavidad el cierre de su vestido pude ver que no traía sujetador. Dejé caer el vestido y liberé los senos de mi novia, sus pezones se alzaban por la excitación y ella ronroneó con timidez.
Después, me dirigí a sus piernas entalladas con las medias negras y vi que detrás de esas medias traía una tanga diminuta que a duras penas se podía ver sobre sus nalgas. Poco a poco le quité sus medias negras y me alejé para ver la belleza de mi novia hipnotizada con su mirada perdida desnuda salvo por una pequeña tanga roja. No podía creer mi suerte.
Una vez ya desnuda y liberada de su ropa, le ordené que se pusiera en 4 y comenzó a gatear hacía mi mientras me miraba lujuriosamente, entonces se me ocurrió agarrar un plato que estaba cerca y verter agua dentro de él. Con cuidado la agarré del cuello, la incliné hacia el agua haciendo que su vagina se mostrara invitante hacia mí y le ordené beber.
Mientras ella bebía, no pude aguantar más y comencé a tocarle todo su cuerpo, sentí sus pezones despiertos, como se alzaban deseosos de que alguien los tocara, su piel suave y tersa con un vello muy fino, casi como terciopelo al tacto y finalmente su vagina. Tenía un pequeño velo de vello que la cubría, pero eso sólo la ocultaba un poco por lo que me hacía desearla más.
Me senté junto a ella y comencé a masturbarla, estaba ya muy mojada por lo que cualquier roce con mi mano hacía que todo su cuerpo se estremeciera, lentamente abrí sus labios y estimulé su clítoris, conforme más la masturbaba a ella se le iba complicando más y más cumplir con la orden que le había dado. Su respiración iba acelerándose y tuvo el orgasmo más fuerte que nunca le había visto tener. Todo su cuerpo se estremeció, lanzó un gemido que estoy seguro escucharon las demás habitación y cayó rendida.
Supe que después de ese orgasmo estaría ya muy cansada, y además por la intensidad de este temía que el trance en el cual estaba se rompiera.
– Cris vuelve a dormir, ahora te vestirás y al terminar despertarás y no recordarás nada de lo que ha pasado. Pensarás que la hipnosis no dio resultado y que todo el tiempo que pasó lo pasamos durmiendo, pero cada vez que escuche que te digo �mi gatita sexy� volverás a entrar en trance.
Cris despertó y aún con los ojos perdidos, en trance, se comenzó a vestir. La detuve un momento cuando se estaba poniendo su tanguita y finalmente la volví a recostar sobre la cama y le ordené despertar.
Abrió los ojos un poco confundida pues no sabía que había pasado, le expliqué que por tanto alcohol se había quedado dormida aún antes de intentar hipnotizarla, pero que habíamos pasado una linda noche juntos, no obstante, me preguntó que por qué le dolían tanto las rodillas y las manos, y le dije que era porque en la borrachera se había caído de bruces y apenas y había logrado amortiguar con eso.
Salimos del hotel, y mientras manejaba me iba contando acerca de lo estresada que estaba por los exámenes que se avecinaban, pues necesitaba obtener una buena nota y mientras ella enumeraba todo lo que aún le faltaba por estudiar, decidí hacer una última prueba de la hipnosis.
– Mi gatita sexy
Al escuchar esto, Cris dejó de hablar, sus ojos quedaron viendo hacia la nada y supe que todo había funcionado.
– A partir de ahora, cada vez que estés en trance te dirigirás a mí como amo, ¿ok?
– Si, respondió Cris con voz monótona
– Si, ¿qué?
– Si amo
– Ahora, quiero que me chupes el pene mientras manejo. No te detendrás hasta que termine dentro de tu boca y no quiero que dejes caer ni una sola gota, ¿de acuerdo?
Aun antes de terminar la frase, Cris se inclinó sobre mí y con manos torpes logró bajar el cierre del pantalón y sin una palabra más se metió mi pene en su boca y empezó a chupar.
Supe que esto no haría más que mejorar.
¿Te gustaría conocer gente real y discreta? Empieza aquí.
2 respuestas
-
Cоmpré lencеría sexу nuevа. ¿Quieres ver? – http://analsex4.fun
-
Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.