Ya habían pasado unos 3 meses desde el acontecimiento con mi prima en la casa de mis tíos, lastimosamente no se presentó otra oportunidad para repetir ese excitante encuentro con ella puesto que no pude viajar y ellos no vinieron de visita en este tiempo, pero un dia llego una llamada de mi tía Yessica, ella es una mujer de 40 años, de figura esbelta, de bustos y trasero grandes, de cabello largo, una piel clara, labios carnosos, una voz suave, una carita de ángel, se comunicó conmigo, diciéndome que vendría para hacer unas compras, pero que no quería molestar a mis padres que si se podía quedar en mi departamento, como yo solía estar fuera por trabajo y llegaba de noche, casi ni nos incomodaríamos.

Yo acepté por amabilidad, aunque vino a mi mente los acontecimientos con mi prima, y me pregunte si ella también perdía la memoria cuando estaba tomada, ella me dijo que solo se quedaría 3 días, así que tenía que hacer las cosas lo más rápido posible.

Apenas llegó la instalé en mi dormitorio, yo le dije que dormiría en el mueble, ese día estuvo perdido, puesto que por el cansancio del viaje no podía intentar nada, todo sucedió al día siguiente, salí a trabajar como de costumbre y al regresar a mi departamento, ya por la tarde, mi tía aun no regresaba, así que saque una botella de vino y una sola copa, y me puse hacer cosas al azar en mi laptop. A penas llego mi tía, la vi algo molesta, parece que no le fue bien en sus compras, se sento en el mueble, no llego ha cambiarse directo lo cual me convenia, pq tenia puesta una blusa con botones y una falda larga. Empece hacerle converzacion mientras tomama una copa de vino, me conto que habia tenido unos altercados con unas señoras mientras hacia sus compras y no llego a encontrar las cosas que buscaba:

-Por qué no te sirvo una copa, el vino suele calmar un poco el ánimo.

-Gracias sobrino, pero la verdad es que no soy buena con las bebidas, suelen chocarme mucho.

Este comentario solo estimuló mis ánimos de hacerla tomar, seguimos conversando y busque la forma de hacer que se pusiera un poco de mal humor con lo que le paso en la tarde y después de varios minutos acepto mi propuesta, ella se percató que si se calmó un poco así que esto hizo que le sirviera copa tras copa, le tocaba temas al azar, para que ella no me saliera con el cuento de que ya tomo mucho que está muy mareada; ya tenia todo listo, a penas terminamos la primera botella ya estabamos hablando de temas mas alegras y sacaba otra y otra botella mas de vino, después de tres botellas, ella ya estaba totalmente tomada, solo balbuceaba o decia cosas sin sentidos, me acerque a ella y le puse mi brazo sobre el hombro y suavemente le tocaba con mis dedos el pecho, al ver que no rechazaba mis toqueteos comence a poco a poco a desabrocharle los botones de la blusa, cuando ya tuve una vision de sus senos lentamente comence a introducir mis dedos debajo del sosten, eso ya me habia puesto muy caliente pero sabia que tenia que ser paciente, cuando vi que no hacia algun gesto de desagrado la recosté en el mueble suavemente y me puse encima de ella. Empecé desabrochandole su blusa completamente y por suerte su sosten era de los que se abria por delante, y a penas lo solte, sus grandes pechos se mostraron ante mi, comence lamiendole suavemente los pesones con la punta de mi lengua y poco a poco segui a chuparle suavemente parte del seno, al ver que empezo hacer pequeños gemidos subi hasta su cuello y empeze a besarle y lamerselo mientras que una de mis manos frotaba e iba subiendo poco a poco su falda, llegue al punto de subir mi boca a su boca y besarla, para mi sorpresa era bastante colaboradora y me besaba con cierta suavidad.

Después de varios minutos de besarla y humedecer su boca con mi saliva, me desnude, y mientras ella seguía en el mueble le pase mi pene por su rostro, acercándolo lentamente a sus labios, le eche saliva a mi glade para que ella sintiera algo humedo y mientras se lo frotaba por sus labios ella lentamente abria su boca y en un momento empeze a introducir mi pene lentamente en su boca, la sensación era maravillosa, aunque un poco incomoda porque rozaba con sus dientes. Minutos después decidí llevarla a la cama y una vez allí comencé a desnudarla.

Empecé hacerle sexo oral saboreando cada parte de su cavidad vaginal mientras masajeaba sus senos, lo cual era muy exitante puesto que sentia como su vagina comenzaba a lubricar más y más. A los pocos minutos empezó a gemir con mas intensidad mientras movía sus caderas suavemente, eso solo me excitaba más porque sentía que me pedía que continuara, habiendo pasado ya un rato empecé a subir lamiendo en el camino su pubis pasando por su ombligo, subiendo a sus senos los cuales lami ambos deposes y los chupe con suavidad, llegue hasta su boca dandole un beso y sosteniendo mi pene erecto empece a introducirlo lentamente dentro de su vagina; empece metiendo y sacando mi pene lentamente, aunque mi tia estaba tan mojada que sentia como mi pene resbalaba practicamente, pero aun asi no queria meterlo de golpe asi que fui siguiendo de a pocos hasta que pude meterlo completamente, una vez la penetre los gemidos se hicieron más seguidos, empece agarrar ritmo y movia mis caderas sin detenerme, se sentia muy rico lo humeda que estaba mi tía, ella en su borrachera me abrazo y empezamos a besarnos con mucha pasión, ella puso sus piernas alrededor de mi cintura lo cual me excitaba muchísimo y solo me incitaba a embestirla con un poco más fuerza. De un momento a otro empezó a balbucear y decia de manera torpe el nombre de mi tío, seguramente soñaba que era él quien la penetraba, así que decidí seguir el juego:

-Jorge, así así.

-¿Te gusta mi vida?

-Si, sigue no te detengas

Esto solo me exitaba más y empece a darle con mas rudeza pero que dijera el nombre de mi tío me hacia sentir incomodo, asi que decidi cambiar eso, me acerque a su oido y mientras se lo lamia empece a decirle:

-Te encanta amor?

-Si, me exita mucho, sigue.

-Solo que hay algo que tengo que decirte, no soy Jorge, soy Francisco.

-Francisco? No, no, detente Francisco.

Ella intento alejarme en su sorpresa, pero no tenia fuerzas para eso.

-Que pasa? no dijiste que te gustaba tía?

-Pero, esto esta mal soy tu tía

-Tranquila, esto solo quedará entre nosotros, o es que no lo disfrutas tanto como yo?

Y cuando le dije eso empece a embestirla con mas rudeza, lo cual hizo que diera un gemido mas intenso y rico de escuchar. Ella se tapo la boca y no contesto, y mientras le seguia embistiendo, me acerque a su oreja y le susurre.

-No te preocupes Yessica, disfruta este momento, hoy te hare mi mujer.

-Ella solo atino a mover la cabeza de arriba hacia abajo, dando su aceptación.

Dicho esto, empezamos a hacerlo con más pasión, me abrazaba, me besaba, le sujetaba el pelo hacia atras lo cual hacia que su cuello estuviera más visible y se lo lamia, en cada beso cruzabamos nuestras lenguas y en ese arrebato de pasión comenzó a decir mi nombre, lo cual me excitaba mucho más. La puse boca abajo y la penetraba con más fuerza, ella levantaba sus caderas para tener una mejor posicion y jalando unas almohadas puso su cara encima, su vagina no hacia más que lubricar y apretar mi pene, demostrándome que quería más y más a lo cual yo la penetraba con más fuerza, susurrándole al oído:

-Yessica eres tan sexy, me encanta hacerte mi mujer.

-Si… Francisco… soy tuya… no pares

-Quien es mejor Yessica, ¿mi tío o yo?

-No digas eso… Es tu tío

-Solo estamos los dos aqui amor

-… … … tú… tú eres mejor que él.

Esto solo me excitó mucho más, saber que aceptaba que era mejor que su propio marido, me hacia tener una sensacion de pertenencia sobre ella.

-Yessica, ya me vengo

-Yo tambien voy acabar, vente dentro

Ni siqueira lo pense, mientras sujetaba su cabello y lo ponia sobre la almohada, empece a moverle mas rapido, empece a sentir que ya iba a eyacular y cuando ya iba hacerlo, meti mi pene hasta lo mas profundo que llegara y me vine dentro; senti claramente como mi semen se exparcia y parte de el rodeaba mi glande, habia soltado una gran carga y en ese momento a pesar de tener la cara en las almohadas se escuchaba su gemido intenso y una vez termino de gemir la solté; ella respiraba agitadamente pero no decia palabra alguna, parece que se habia cansado mucho en ese ultimo momento y callo rendida sobre la cama. sentí a los pocos segundos como mi pene iba bajando la excitación lentamente y comencé a sacarlo poco a poco. Me quedé mirándola un rato y ella estaba profundamente dormida, me sentía tan satisfecho y cansado, pero sabía que aún faltaban cosas que hacer, así que empecé a cambiar todas las sabanas de la cama, la comencé a secar con una toalla, le puse su ropa y luego de dejar todo en orden solo quedaba esperar, esperar al amanecer a ver si se acordaba de algo.

Por la mañana ella empezó a portarse rara, no me miraba como antes, me esquivaba, pero no me decía ni me pregunto nada, yo me comportaba como siempre, como si nada hubiera pasado, supongo que esto la desconcertaba, pues no sabía si lo que paso anoche fue real o solo un sueño, y mientras las horas pasaban, sucedió algo que no esperaba…