En este Halloween pasó algo que no tenía para nada previsto ni pensando (ya se imaginarán que puede ser) Pues bueno, todo comenzó el día 1 de noviembre, me estaba arreglando para ir a una fiesta con temática de disfraces. Este año decidí vestirme de princesa junto con una amiga jaja. 

Llegamos a la fiesta, todo normal, todo tranquilo de inicio. Empecé a beber y el alcohol hizo lo suyo jaja ya estando pues algo tomadita, pusieron cumbia (amooo bailar). Mi amiga no quiso bailar conmigo y yo creo que me escuchó uno de los chicos de ahí cerca y que me saca a bailar. Obvio accedí.

El chico bailaba bastante bien y bonito, bailamos como por 1 hora hasta que ambos decidimos tomar un respiro. La verdad él fue muy amable y agradable en todo momento. Después pusieron bachata y, para los que no sepan, la bachata es un baile mucho más sensual y pegadito. Terminamos la canción y todos nos gritaban el clásico «beso, beso, beso» y pues pasó jajaja

Después de eso, entre los efectos del alcohol y la química que sentíamos, nos comenzamos a calentar. Nos fuimos al baño, y ahí comenzó lo bueno. Nos besamos, el comenzó a tocarme y yo a él. Ya era mucha mi excitación que baje mi escote para que pudiera tocar mis tetas y levanté mi falda, bajé mi panti y le pedí, prácticamente le rogué para que me la metiera  Y él, ya super duro, solamente lamió si mano, lubrico mi panochita y me penetró sin mucho esfuerzo. Yo no podía contener mis gemidos y el tapaba mi boca para que los que estaban afuera no nos escucharan. Estuvimos así solo 3 minutos aproximadamente, él ya estaba por terminar pero comenzaron a tocar y tuvimos que salir.

No duró mucho, pero fue un rapidin muy muy rico. Yo terminé todos mojadita y el super duro, pero ya no pudimos continuar porque mis padres ya tenían un Uber esperando por mi a cierta hora y mi amiga ya se tenía que ir. Pero si no fuera por eso, seguramente habríamos continuado en algún otro lugar esto que comenzamos en aquella fiesta…

Bueno, espero que les haya gustado este relato jaja Los quiero, besos en donde gusten