Por las vacaciones de la universidad fui a visitar a mis padres a su finca, en ella tienen unos trabajadores que siempre han disfrutado de mis visitas porque me gusta ir por ahí con poca ropa debido al calor, cuando paso por el laso de ellos todos se emocionan y no pueden disimular que me están viendo.

Un día cualquiera yo estaba paseando por la finca y noté que uno de los trabajadores estaba descansando tirado bajo un árbol, decidí acercarme y comenzar a hablar con él, resulta que era muy simpático y divertido; además de eso, no paraba de mirarme las tetas, yo obviamente me comportaba de una forma muy coqueta, no me pude aguantar y le di un beso lleno de ganas.

Entre beso y beso tomé la decisión de ir un poco más lejos y pasar mi mano sobre su pantalón, para sorpresa mía ya lo tenía bien erecto, me quite bajé la camiseta y el brasier para que pudiera tocar mi pecho, baje hasta donde se encontraba su miembro y comencé a chupárselo, me encantaba ver su cara de placer y a él le encantaba verme siendo suya.

Después de estar un rato con su pene en mi boca y como noté que tenía un gusto particular por mis tetas, me lo saque de la boca y comencé a masturbarlo con mis pechos, el chico no se lo podía creer jajajajajaja cuando llego sobre mi cuerpo quedó pasmado, esparcí su semen en mis tetas, me puse la ropa, le di un beso y me fui.