
Por
Fantaseando con mi suegro
Ay, ¡no me van a creer lo que me pasó ayer! Estaba ahí, durmiendo tan tranquila, cuando de repente… ¡PUM! Soñé con mi suegro, sí, ¡con el papá de mi enamorado! Y no cualquier sueño nooo, uno de esos que te dejan las piernas temblando y la tanga mojada. ¡Qué vergüenza pero qué ricooo!
Mi sueño era… ay, ¡deliciosooo! Él me tenía contra la pared de su taller (porque es mecánico, ¡uf esos brazos llenos de grasa!), y me decía al oído: «María, sabés que te quiero dar desde que mi hijo te trajo a casa». ¡Y yo que me derretí como helado al sol!
Pasó todo el día… no podía sacarme esa idea de la cabeza. Cada vez que veía un hombre mayor en la calle, ¡pum! Ahí estaba otra vez la imagen de mi suegro con su overol medio abierto mostrando ese pecho velludo…
Y luego llegó mi chico (11 años menor que yo), todo cariñoso queriendo coger. Pero yo ya estaba… ¡uf! prendida como mototaxi en subida. Mientras él me tocaba, yo cerraba los ojos y… ¡zas! imaginaba que eran las manos grandes y callosas de su papá.
«De seguro tu papá da unos orales que hacen ver las estrellas» pensé, y casi lo digo en voz alta, ¡qué locura! Pero es que… ¡un hombre con experiencia sabe dónde tocar! Mi chico es rico, sí, pero a veces va muy rápido, como todos los jóvenes. ¡Mientras que un señor como mi suegro… ha de tomarse su tiempo para saborear todo!
En un momento de la cogida, me puse a imaginar que era su papá el que… ¡ay, nooo, qué vergüenza! Pero sentí tan real la fantasía que hasta me vine más rápido que de costumbre. Mi chico quedó todo orgulloso, pensando que fue por él, jajaja.
Lo mejor (o peor) fue después… ¡no podía dejar de pensar en eso! Mientras cocinaba: «¿A qué huele mi suegro después del trabajo?». Al lavar la ropa: «¿Usará boxers o calzoncillos?». ¡Hasta en el mercado, viendo a los señores mayores, me imaginaba cómo sería!
Y ahora tengo este problemita… porque el domingo hay almuerzo familiar y tengo que ver a mi suegro a la cara. ¡Ay, Dios mío! Si me mira como en el sueño, ¡no respondo de mis acciones! Pero si actúa normal… ¿será que nota algo distinto en mí? ¡Qué lío más rico!
Una respuesta
-
Tienes una cara de putita…
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.