Me llamo Rosario. Tengo tetas muy grandes y caderas pronunciadas. Separada recientemente.

Mi historia empieza hace muchos años. Tengo tres hijos, el del medio tenía un mejor amigo que se llama Raúl. Lo conozco desde que mi hijo y él tenían 4 y 5 años. Raúl paraba en mi casa jugando con mi hijo. Y a mi me gustaba estar de ropa interior en casa. Y  cuando salía a la sala o la cocina veía que Raúl se me quedaba mirando. 

Pasaron los años y Raúl se hizo un hombre alto, fornido y bien parecido. El tendría 18 años y en mi barrio hubo un campeonato de fútbol que mi hijo participaba y pues fui a mirar el juego. Raúl estaba de arquero y yo sentada con un grupo de vecinas justo detrás del arco. En eso veo que Raúl se va detrás del arco y empieza a orinar sin importarle quién estaba mirando, él estaba atento a la cancha.

Vi su pene grande, grueso, venoso y exquisito. Quedé sorprendida y miré a los lados a mis vecinas y ellas también se les quedaron mirando a Raúl. Me incomodé me retiré y me fui a casa. Estaba muy caliente, no sacaba de mi cabeza la imagen de Raúl sacando ese hermoso pene carnoso y rosadito. Entré a la ducha y me masturbé como una fiera.

Pasaron los días y Raúl al fin fue a la casa a visitar a mi hijo. (Me puse un vestido negro escotado para llamar su atención) Raul estaba de un corto color crema y era algo apretó. No pude asbtenerme de mirar ese bulto y se me ocurrio abrazarlo estrujando mis tetas a su pecho y bajé mi mano rosando su pene.

Él me habló tranquilo pero noté que miraba por ratos mi escote de los pechos… Me exité demasiado y entré a mi habitación y tuve sexo con mi ex marido. Pasaron los días y no dejaba de pensar en él hasta que se me ocurrió un plan aprovechando que nadie estaría en mi casa.

Aquel dia me levanté, acomodé mi casa, me depilé, me bañé,  me puse un vestido olgado, corto y escotado con una tanga rosada y sostén rosado.  Me armé de valor y fui a la casa de Raúl. Tocaba el timbre con miedo de que saliera su madre y rogaba que saliera él. A lo que sale me pongo a un lado  sosteniendome de su pared y le dije que me sentía muy mal que si me podía llevar a mi casa.

Él muy caballero aceptó. Él me puso el brazo en su hombro y me agarró de la cintura y así caminamos unos metros hasta mi casa.  Entramos y me acostó en el sofá de la sala… Le dije q me lleve a mi cuarto. Él me alzó y me llevó a mi cuarto. Abrió la puerta y me tiró a la cama. Yo simulando dolor de estómago levanté mis piernas abriéndolas un poco para que Raúl viera mi tanga.

Le pedí que me masajeara el estómago y tomé su mano girando mi tórax y parte de mis pechos. Noté que estaba nervioso y puse su mano en mi vagina y empecé a refregarme y él me empezó a tocar las tetas con la otra mano. Abrí más mis piernas y le pedí que me chupara el coño el cual estaba mojadisimo. El se acomodó y empezó a lamer mi vagina. Me exité mucho y refregué su cara en mi vagina.

En eso se desviste y me saco el vestido. Me quita el sostén y me chupa los pechos. Busco su pene y le pido que se acueste. Toqué su pene hermoso duro y me lo a la boca! Ese pene tiene la culpa! Raúl gemía de placer y es por que chupo bien. Se me ocurre encimarme y meterme ese penesote…. Ahhhhh… Gemí de placer… Hicimos muchas poses. Me provocó 7 orgasmos y el terminó en mis pechos. El se acostó y empecé a chuparsela. Él estaba algo adolorido y cansado.

Pero su pene se volvió a endurar. Él se levanta y me dice: siempre deseé su hermoso culo! Me pone en 4 patas me acaricia el ano y BUM!!! Entra su  cosota en mi culito. (Muy poco tuve sexo anal pero está vez me dolió más). Raúl enloqueció con mi culito y estuvo mucho tiempo dándome por detrás. Terminó en mi culito. Estaba muy adolorido pero era el precio de disfrutar de ese pene joven y agresivo. Raúl se fue y repetíamos nuestros encuentros muchas veces. Hasta en mi auto lo hicimos. Me envicié con él. 

Pasó el tiempo y él se hizo de novio con una muchacha del barrio y me dolió muchísimo!!! Me busqué otro amiguito de mi hijo pero no era igual!!! Raúl me dejó loca! 

Al tiempo Raúl se distancia de mi hijo y se enamora de esa muchacha. A los años se casaron. Fui a su boda, me invitó. Y me alegra que tenga alguien joven para explotar su virilidad.

Hoy estoy sola… Recientemente separada, pero me masturbó casi todos los días. Volví a vivir, bajé de peso y estoy buscando un nuevo amor.