
Por
Confieso
Quedamos con 3 amigas en hacer una pijamada de chicas, habíamos coordinado todo: la comida, la película que veríamos y lo que haríamos. Llegó el día y empezamos tomandonos fotitos para no olvidar ese momento de chicas que tendríamos, empezó todo muy sano, jugamos un juego de mesa, comimos pizza, nos hicimos pedicure, y otras cosas más.
La noche avanzaba y decidimos tomar unos tragos, vinito para ser precisa, no sé si lo saben ustedes, pero las mujeres cuando tomamos alcohol se nos sube rápido generalmente y una se empieza a calentar y a soltar más. En algún punto la conversación empezó a ser sobre nuestros hombres y experiencias sexuales que habíamos tenido. Todo fue muy rápido y muy lento a la vez, hasta que una propuso la idea de ver porno, y las otras como riéndonos aceptamos.
Buscamos un vídeo, lo pusimos, estábamos ya algo tomadas y todas muy calientes (o eso quiero suponer), hasta que una dijo: «en serio tengo ganas de tocarme», y otra amiga le contestó: jajaja no te creo capaz, te reto a hacerlo (en ese punto todo era muy en joda). Pero, para sorpresa de todas… mi amiga aceptó y lo hizo, en frente a nosotras.
Así que esta era la situación en ese momento: los tragos que se nos subieron a la cabeza, hablar de nuestras cosas sexuales, ver porno y una amiga masturbándose. ¿Resultado? Todas terminamos dedeandonos. Recuerdo mucho los sonidos que hacían las vagin*s de mis amigas al estar tan mojadas, y como se terminó viniendo una y lo mucho que se corrió.
Ninguna tocó a ninguna, pero sí hicimos eso en grupo y es nuestro secreto que siempre nos unirá a las 4.
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.