
Por
Anónimo
Con un extraño.
Esto hace de un par de años atras y sin temor a equivocarme creo que fue hace seis años tras. Mi esposo estaba de viaje…viaje de negocios. LLegue al trabajo al cual mi esposo y yo somos dueños de una compañia de publicacion. LLame a Margarita y le decia que me iba para la casa de playa para que ella se hiciera cargo del negocio por el resto del dia viernes. Margarita era la empleada de confianza y no habia problema con ella. Tenia que manejar por dor horas para llegar a la casa de playa y Margarita me decia que no habia problema. Revise todo y firmaba los cheques de los empleados de mi pequeña compañia. «Pase bien señora Clara -mi nombre- me decia Margarita una vez me despedia de ella. No me gustaba que me llamara señora Clara cuando ni siquiera llegaba a mis treintaicinco años de edad. Segun las noticias de meteorologia el fin de semana estaria cerca de los cien grados y que mas de pasar ese fin de semana en mi casa de playa. Me puse mis pantaloncitos cortos y una blusa floreada de color negro y por supuesto mis sandaleas de cuero y mi gorra de base-ball con mis lentes negros. Salia para la casa de playa y llame a una amiga para que me acompañara, pero ella no estaba disponible. Llegue al puerto y me detenia para comprar unas cosas para comer. Todavia tenia que guiar un poco mas adentro a donde estaba la casa y comence a entrar al lugar donde estaba mi casa. Aminore la velocidad porque asi son las regulaciones de la comunidad privada. Muchos cocales hacian ver lo hermoso de la comunidad cuando mire a un muchacho pasado de los veinte que caminaba en mi propiedad. Vestia de igual manera que yo y deteuve mi auto y bajaba la ventana de vidrio de mi auto y le pregunte que hacía caminando en mi propiedad. Al parecer no sabia por donde caminaba y qudaba asustado hasta pedirme disculpas… prometiendome que se saldria de inmediato con tal de no llamar a seguridad. El chico me cayo bien y lo invite a mi casa, pero éste me rechazaba mi invitacion y me decia que no queria problemas. Insiti y le decia que yo era la dueña de esa casa que ya le señalaba, pero él me huia y me sentia retada a sus rechazos que volvia a insitir con una mentira que necesita a que me ayudara con algo en la casa. Asi llego a mi y le decia que subiera a mi auto, pero él se fue caminando para mi casa.
La comunidad estaba muy callada y las olas del mar arrullaban el ambiente. Llegue con mi auto a la casa y él llegaba despues. Nos mirabamos como dos personas que no se confiaban el uno con el otro aunque yo sabia que el muchacho era simple, eso me hacía sentir con mas ventaja sobre él. Me divertia verlo a la defensiva y le decia que primero necesitaba ir por una zambullida al mar antes de decirle a él qué tenia que mover en la casa. Me metia a mi cuarto y salia con una tanga y los ojos del muchacho casi se desorbitaban al verme ahi enfrente. Me gusto su mirada picara que me dio ahi en medio de mis piernas. Me lleve dos sillas a la orilla de la playa y una hielera con un par de cervezas y me sente en la silla y él muchacho seguia ahi parado hasta que le tuve que decir que se sentara. Se sento al lado mio, pero no tan al lado mio y con mis lentes me quede mirando el horizonte del mar. Abri la hielera y le invite a una cerveza y me decia que no bebia licor. Me estaba irritando la vida y no era posible que ese fin de semana este muchacho me lo iba tirar por la borda. Yo llevo un tatuado una golondrina en un hombro de mi cuerpo y el muchahco lo quedaba mirando cuando me pregunto mi nombre «Puede llamarme como quieras» respondi yo. Yo tambien curiosa mire a su cremallera de su pantalon corto todo raido y note de su enorme bulto que me sacudio toda mi imaginacion. La mente se iba convirtiendo mas a la idea del sexo al verme sola con él y le pregunte su nombre «Rogelio» de una vez me contestaba él. Le pregunte que hacía por esos lados y me conto su motivo…no habia trabajo en el muelle para descargar barcos y se tomo el dia de ir a un restaurante para comprar comida de mariscos en el restaurante de la comunidad. Yo sabia que era un muchacho pobre y que por dinero quizas haria lo que yo le pidiera a él, pero tenia que se inteligente para llegar a ese punto porque yo me queria divertir.
Le pregunte por su novia y resulto que tenia novia el tal Rogelio y le decia que tenia ganas de algo aunque tuviera que pagar. Rogelio hasta abrio sus ojos cuando escucho dinero y me pregunto que había que hacer «No es mucho Rogelio» Rogelio me pregunto «Pero que es golondrina?» me puse a reir cuando me llamo por golondrina y una vez conseguia mi compostura despues de mis carcajadas le decia que me bailara desnudo al pie de la olas de mar. Me pregunto cuanto y le decia una cantidad que mas o menos a él le podia convenir. Lo penso y me decia que tenia miedo a que yo le tomara fotos una vez estuviera desnudo bailando para mi. Le jure que no iba hacer eso y me decia que mirara para otro lado par quitarse su pantalon corto «Si, pero te quiero todo desnudo Rogelio…todo» Mire a otro lado y luego escuche que me decia «Golondrina, ya estoy bailando» Voltee mi mirada hacia Rogelio y me quitaba los lentes para verlo bailar. Quede impresionada de su cuerpo muy formado y su berga que no era cualquier berga porque la tenia grande que me puso afuera de tono. Rogelio se detuvo de bailar y me pedia que le tirara su pantalon corto «Te doy mas dinero si vienes hasta aqui» le pedi yo a él. Parece que no le gusto «Mas dinero Rogelio» le ofrecia yo y mire como comenzo a caminar hacia mi. Yo no lo miraba a él, pero si a su gruesa berga. Senti que me la queria comer, pero no sabia si coger con él porque habiamos hecho una promesa entre mi marido y yo… el de no volver hacer intercambio de parejas aunque este no era intercambio de parejas, pero si estaba de pormedio el coger. Mi cuerpo se derretia por probar esa berga de Rogelio y no sabia que hacer. Rogelio se disponia a ponerse su pantalon corto y le decia que se quedara desnudo arrecostado en la silla de playa mientras yo pensaba que hacer con Rogelio.
Los dos estabamos arrecostados en las sillas de playa cuando dije de manera espontanea «Que se joda, pero esta berga debe ser mia» asalte a Rogelio con un beso y a la misma vez le agarraba su erecta berga que la tenia bien dura y le decia «Vas a ser mio papito» Rogelio me dejaba estrujarlo a como yo quisiera y me bajaba para meterme su berga en mi pequeña boca que por un instante pense que las orillas de mi boca mas de algun lado se iban a reventar, pero no…no paso y se la mamaba. Volvia ami silla de playa y me echaba encima de mi. Me habia suelto la tamga y mi panocha quedaba al descubierto para Rogelio «Metemela» ordene a Rogelio y su mano tomaba su berga para penetrarme. La senti que no era de mi medida y le pedia que lo hiciera suave. Yo la queria toda para mi y con mi mano tocaba que todavia un pedazo de berga que no me entraba. Mire a Rogelio y le decia que la queria sentir toda dentro de mi. Rogelio levanto el culo y me sorprendia con una embestida fuerte y me la metia toda que grite. Creo sin duda que Rogelio termino de desvirgarme ahi porque mi esposo nunca antes habia penetrado tan profundo como lo acababa de hacer Rogelio. Busque con mi mano si sobraba algun pedazo de berga fuera de mi panocha y sentia que me cabia toda la berga de Rogelio dentro de mi. Si, Rogelio termino de desvirgarme. Rogelio era resistente y me hacía correr en una llenada de berga. Tambien se corria en mi y una vez terminada la accion le pedia a Rogelio que se quedara conmigo hasta el domingo…todo ese fin de semana me dieron berga sin yo imaginar que mi fin de semana estaba llena de sorpresa. Cumpli lo que prometi y no le pague a Rogelio sino que como regalo le di un buen billete y cenamos en el restaurante de la comunidad.
Regrese a la ciudad de lo muy contenta y mi marido me lo decia lo feliz que me miraba. Margarita al igual me preguntaba qué me pasaba y yo solo me ponia a reir. Habian unos comerciales mios en la television sobre mi negocio y asi fue como Rogelio logro a dar conmigo cuando se me presento afuera de mi trabajo «Golondrina» cuando escuche ese nombre senti mucho miedo por el que diran y era Rogelio. Lo mire y me brindo confianza «No he venido a dar problemas» de una ves le pregunte en que hotel estaba hospedado y supe que ese hotel no era tan bueno y le di dinero para que buscara un hotel que yo misma le recomende y que me esperara ahi. LLegue al hotel y de mi salia que lo desnude para que me cogiera. Rogelio me lo daba con todas sus ganas, pero no gritaba, solo gemia del placer. Tres meses la pasamos asi hasta que desaparecio…no volvi a saber de Rogelio, pero muerto no esta porque con esa berga que tiene se puede ganar la vida cogiendo a otras.
2 respuestas
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