Ya todos me conocen por mi relato anterior,  ya había pasado más de un mes que lo había echo con Carlos, y la verdad no podía de dejar de pensar en esa verga, con mi esposo lo hacía, pero no tenía el mismo orgasmo que con Carlos, y eso hacía que en varias ocasiones me masturbara.
Carlos me escribía, diciéndome que cuando me volvería a ver, que recordaba mucho lo que habíamos echo, yo haciéndome la difícil le decía,  que recordara que le había dicho que solo era una vez,  y que lo hicimos dos veces, que ya con eso era suficiente, el me decía que no perdía las esperanzas de volverlo hacer, yo en mis pensamientos  decía lo mismo, que quería sentir esa verga tan grande dentro de mi, sentirme completamente llena.
Cierto día, el me escribe diciéndome que iba a estar cerca de donde vivo yo, que si podía por lo menos vernos,  que así sea solo para hablar,  yo le dije, que tenía que pensarlo, ya que no sabia si podía ir, porque mi esposo se podía dar cuenta, esa noche,  no dejaba de pensar en lo rico que lo había pasado con Carlos, y que ya era hora de volverlo hacer,  quería sentir nuevamente esos orgasmos que su verga me daba, así que le escribí, que si podía, pero que no me podía demorar,  ya que mi esposo salía del trabajo, y tenía que estar antes,  el me dice que no importaba,  que solo con verme era suficiente,  y yo le dije,  si, solo hablaremos y ya.
Así que al siguiente día, me fui para donde el estaba, apenas me vio, se sonrió y me dijo lo bonita que me veía, yo tenia puesta una blusa sin escote,  un jean, que mi trasero lo hacía ver más grande aún, fuimos a una cafetería,  estuvimos hablando un tiempo,  yo en mi mente pensaba en lo rica de su verga, el me dice,  que me trajo un regalo pequeño,  pero que lo dejo olvidado en el cuarto del hotel, que si lo acompañaba o me esperaba en la cafetería,  yo le dije que lo podía acompañar,  que igual no iba a pasar nada, pero en mis pensamientos era esta la oportunidad que estaba esperando , para que el me dijera, así que nos fuimos a el hotel, como estaba hospedado en el segundo piso,  nos fuimos por las escaleras, yo me puse adelante de el,  mientras subía las escaleras,  yo miraba hacia atrás, y el no paraba de mirarme el trasero,  llegamos al cuarto , y el saco el regalo,  era una manilla, me la regalo, y yo le agradecí, el me dice, por lo menos regalame un beso, yo le decía que no, que recordara que solo veníamos para hablar,  el me dice, aquí solo estamos tu y yo, nadie nos va a ver, yo haciéndome la difícil le dije que si, pero que un beso pequeño, el acepta, se me acerca a darme el beso, y empezamos a besarnos, y mi cuerpo se fue pegando hacia el,  siento que su verga se pone dura y mi mente quedo en blanco,  sentí mi cuerpo una calentura, que el beso se prólogo aun más, el me agarraba  el trasero,  yo solo respondía el beso, en esas mientras nos besabamos me acostó en la cama, sin darme cuenta, abrí mis piernas  y el me seguía besando, mientras frotaba su verga, como si me estuviera penetrando, ambos teníamos puesta la ropa, yo estaba demasiado caliente y le dije, que el beso ya había terminado,  el me dice, pero mira como me la pusiste,  el agarra mi mano, y me la pone es su verga, yo la sentí tan dura que la apreté, yo le dije que no podía hacerlo,  ya que no quería serle infiel a mi esposo nuevamente,  el me dice que como le ayudaría,  yo le dije que lo que podía hacer, era hacerle sexo oral, pero nada de penetracion,  el me dice que estaba bien, el se quita toda la ropa y se acuesta en en la cama, me dice que por lo menos le deje chupar los senos mientras, yo me quite la blusa,  me acerque a él, el me empezó a chupar los senos, mientras yo con mi mano lo masturbaba, estuvimos así un rato y yo baje hasta su enorme verga , la miraba tan grande y negra, que solo quería tenerla dentro de mi, pero no quería hacerme ver tan fácil de el, así que empecé a chuparsela, se me dificultaba un poco por lo grande, mientras se la chupaba, le acariciaba los testículos, el gemia, y me decía que lo hacía muy bien, yo sentía que mis pantys se humedecian, estuvimos así un tiempo y el me dice que me dejara hacerme sexo oral, por lo menos , me quedé pensado un momento  y le dije que si, el se levanta, yo me acuesto , el me quita el jean y mi panty, y me voltea boca abajo,  empezó a besarme el trasero, y me decía,  este trasero tuyo tan grande aun recuerdo la vez que lo penetre, es tan grande y suave que no dejo de pensarlo,  mi exitacion crecía aún más, después me volteo y me empezó a besar mi cosita, yo estaba demasiado húmeda, mientras lo hacía me acariciaba los senos, yo ya no podía aguantar más y quería que me la metiera,  el me dice que se la vuelva a chupar, así que el se acuesta nuevamente y se la empiezo a chupar,  mientras se la chupaba el con la mano frotaba mi clitoris, y me decía, no vas a querer que te la meta, yo hacía con mi cabeza que no, así estuvimos un rato y yo no pude aguantar más, ver esa verga tan grande ahí , y solo chuparla no era suficiente.
Así que pare de chuparla y el me dice,  que paso yo le dije, ya no quiero chuparla más, el me quedo viendo sorprendido  y me dice , no me dejes a medias, por lo menos hasme llegar,  y yo le dije,  tranquilo que no te voy a dejar a medias, así que me levante,  y agarrando su verga, me monte encima de el, puse la punta se su verga en mi vagina,  y poco  a poco me fui sentando en ella, yo gemia de lo grande que era, sentía que me llenaba toda, hasta que sentí que llegue a sus testículos, tenía una sensación  de satisfacción que empeze a moverme,  empecé a cabalgar fuertemente, el me agarraba el trasero y me decía, así es que siempre te quiero tener, yo entre jadeos le decía, y porque siempre me quieres tener así , el me decía, porque me gustas mucho y más ese enorme trasero que siempre le he tenido ganas desde que estudiábamos,  yo seguía cabalgando, subía y bajaba esa rica verga, el me chupaba los senos,  yo gemia y gemia, sentí que me llegaba un gran orgasmo y le apreté más fuerte la verga, sentí ese cosquilleo tan fuerte que mis movimientos eran aún más fuertes, seguí moviéndome y el aún no lo llegaba, así que cambiamos de postura , me levante y dándole le espalda me volví  a sentar nuevamente en su verga, así empecé a moverme y dejarle a su vista mi gran trasero,  el me los agarraba  y me decía tantas cosas que nuevamente estaba caliente, sentir su verga dentro de mi que me llenaba por completo, me seguía moviendo y el me dice que le quiere llegar, que no aguantaba más  yo le dije, que no se aguantara, que yo se la ayudaba a sacar, así que acelere  más mis movimientos, el me agarraba mi trasero y lo nalgueaba, siento que su verga se puso más dura y me dice ya me va a salir , seguí cabalgando y siento como empieza a venirse, sentía cada chorro de leche que le salía, así que apreté más mi trasero y le saque hasta la última gota que tenia, pero yo había quedado nuevamente caliente, así que me levante, y me salio mucha leche , fui al baño, y me limpie, y le traje papel a el, me dice que se la limpie, se la empecé a limpiar, y veo que nuevamente la tiene dura , el me dice que si puede hacerlo nuevamente , yo en mi calentura le dije que si , pero que no podía demorar mucho ya que me tenia que ir , el me dice que me pusiera en cuatro, que así el le llegaría rápido, ya que lo grande y suave de mi trasero lo hacía llegar.
Así lo hice, me puse en cuatro,  poniendo mi pecho en la cama, el me la empieza a meter,  y siento que la metió toda, empezó a darme suave y luego un poco fuerte , yo sentía que su verga era más grande en esa postura, yo solo gemia y gemia de placer, solo quería que me siguiera penetrando,  yo le decía,  así,  así quiero que me sigas dando, dame más, más,  uuuffff me encanta como me la metes, le decía tantas cosas, el decía, me estoy acostumbrado a comerme tu gran trasero , me encanta como lo tienes, yo siento que me quiere llegar un orgasmo y le digo, dame más duro que me llega,  el me agarra de la cintura y me empieza a dar más fuerte , mis gemidos se hicieron más fuertes y sentía el orgasmo , sentía  un gran cosquilleo, el me dice me a llegar a mi, y yo le dije, sígueme dandome, para que termines, yo jadeaba de placer , en esa siento sus movimientos más fuertes y le empieza a llegar, sentía nuevamente como me llenaba  con su leche, cuando le termino de llegar, la saco, fui al baño, me bañe,  me cambie   y nos despedimos , y yo le dije,  no te vuelvo a creer cuando me digas que para hablar, y el me dice, yo te pedí un beso y tu seguiste más de eso, yo le dije, bueno, no creo que se vuelva a repetir , pero en mi mente si quería que siguiera pasando, me fui para mi casa, me volví a bañar y espere a mi esposo.
En otro relato les seguiré contando otros encuentros que he tenido con Carlos, ya que me quedé adicta a su enorme verga