Tengo 32 años, soltera, mido 1.75m pelirroja natural y para toda mi familia y amigos soy virgen. Soy cristiana y crecí en una familia muy religiosa, al punto que el único novio que tuve (Que ellos sepan) jamás me dió siquiera un sólo beso. Mi hermano tenía un amigo con el que venía a casa a jugar con la play. A mí me gustaba mucho ése chico, sólo que había un gran problema, él no era de mí religión y yo sabía que mis padres no lo iban a tolerar. Pero igualmente cada vez que podía le hacía saber que me gustaba. La cosa siguió por unos meses hasta que una tarde saliendo de hockey lo veo esperándome. El me dijo que estuviera tranquila que nadie sabía que había venido a buscarme, tímidamente le sonreí y le di un beso en el cachete, salimos caminando como dos grandes amigos y a mitad de camino me frena diciendo que yo le gustaba. Le comenté que a mi me gustaba él pero que mis padres no iban a estar de acuerdo con una relación entre nosotros. Pero él no se iba a quedar con esa respuesta y haciendo un uso de la biblia que era digno de un pastor me hizo ver que no estaba mal estar juntos aunque sea a escondidas y me beso con mucha pasión. Yo no podía creer lo que estaba haciendo, sentía por un lado que no estaba bien pero por otro lado se sentía muy bien. La relación que teníamos era super secreta pero muy seria. Yo me las arreglaba para salir sola y una tarde mis padres y mi hermano se fueron a visitar familiares lejos de mi ciudad a unos 800km. Yo cómo estaba estudiando para el ingreso a la facultad no fui. Vino mi novio y nos empezamos a besar con locura y sin darme cuenta cómo llegué a ese punto estaba arriba de él sintiendo cómo su pija cada vez más dura rozaba mi concha y no podía parar algo me hacía seguir refregándome contra su cuerpo, sólo me corrí la pollera para sentir mejor todo. Le apoyé mis tetas en la cara y el las lamia y chupaba mientras yo le desprendía el pantalón. Luego bajé y con mucha torpeza lo empecé a pajear, después de un ratito quise probar esa pija en mi boca, cosa que me encantó aunque al principio no me animaba. Yo estaba muy empapada y él me pidió que me sentara de frente en su cara y empezó a jugar con la lengua en mi concha corriendo mi bombachita. Mientras sus manos recorrían todo mi cuerpo, sobre todo mis tetas que no son para nada chicas, y yo no dejaba su pija hasta que me decidí por sentir eso dentro de mi concha. Fue algo doloroso por dos temas una no la tenía chica y otra que era mi primera vez. Pero igualmente no quería parar porque pese a todo me daba mucho placer. Seguimos un buen rato hasta que sentí su leche dentro mío, lejos de parar nos desvestimos y seguimos por horas probando cosas nuevas, ya que era la primera vez de ambos. Puedo decir que lo amé y amo por darme tanto, pero lamentablemente falleció unos días antes de la fecha en la pensábamos decirle a mis padres. Después de él tuve un novio con el que casi tuvimos algo pero por tonta que suene solo voy a amar y desear al chico que me supo esperar y seducir con todo en contra. Ojalá alguna vez conozca algún hombre que sea así conmigo mientras tanto mi amor secreto seguirá siendo aquel que me hizo sentir en el paraíso.