Por

Anónimo

noviembre 23, 2023

771 Vistas

noviembre 23, 2023

771 Vistas

Macho alfa bisexual

0
(0)

Había buen ambiente por esa zona las mujeres cada cual más arreglada pero a su vez bastante perjudicadas por el alcohol, me fijaban unas y en otras pensando si alguna podría caer y imaginándome las que pudiesen estar solas. 

Sin darme cuenta una mujer de unos cuarenta y cinco años bastante entrada en carnes con un buen escote y un culo que era digno de ver me pega un empujón tirándome la bebida encima. 

Mujer_ lo siento de verdad lo siento no te he visto perdóname que estás bebiendo te saco tu trago. 

Yo_ no pasa nada estamos todos de diversión. 

Mujer_ insisto tómate algo conmigo es lo menos que puedo hacer te he puesto perdido. 

Yo_ bueno concretamente tomo ron cola. 

Mujer_ uff eres de los míos aunque yo ya he bebido bastante quieres compartir el mío. 

Yo_ se empieza por algo. 

Mujer_ eh tranquilo que soy una mujer casada. 

Yo_ no soy celoso no me importaría compartirte con tu marido. 

Mujer_ eres muy lanzado, tendrías que preguntarle a mi marido si quiere compartirme. 

Yo_ bueno no tiene por qué saberlo. 

Mujer_ dejemos el tema. 

Yo_ no quería ofenderte lo siento. 

Mujer_ no me has ofendido me siento halagada, pero igual serías tú el sorprendido si tuvieses que compartirme con él. 

Yo_ soy una persona del mundo además mayor que tú y no tengo muchos tabús. Nooo

Mujer_ venga dejemos el tema y bailemos. 

La mujer estaba claro que tenía un trago de más y estaba roja como un tomate por las cuatro palabras que vayamos hablado, a mí me ponía todavía más porque me daba la sensación de que algo podía ver e incluso que su marido estuviese de acuerdo, la mujer no paraba de sonreír y se dejaba querer de alguna manera no apartaba mis manos cuando con disimulo acariciaba a su cuerpo sobando más de una ocasión sus grandes nalgas, le pregunté cómo se llamaba contestándome ella Susana. 

Los pezones de la mujer se marcaban claramente en aquel vestido que a duras penas contenía su gusto y a mí me empezaba sudores. 

Susana_ como sigas tocándome de esa manera voy a mojar las bragas.

Yo_ pensé que no las llevabas jajaja. 

Susana_ por eso tus manos recorrido mi cintura y mi trasero. 

Yo_ ya sabes soy de explorador y fetichista.

Susana se rió a carcajadas entregándome el vaso desapareció para la zona de los baños. 

Por un momento pensé que después de aquello la perdería de vista, hasta que se volvió a acercar hacia mí. Susurrándome al oído

Susana_ ten ahora sí que estoy sin bragas espero que sea de tu agrado. 

Mi picha dio un salto a pesar de su pequeño tamaño y me arrimé a su trasero pajerotase lo duro que estaba. 

Susana_ para quieto que siempre va a haber alguien que me pueda conocer y no quiero dar el espectáculo, mira si quisiera acostarme contigo mi marido participaría y desde luego seguro que no te gustaría. 

Yo_ no sé a qué te refieres no me tiene que gustar tu marido ya me gustas tú. ……. y bueno como no te lo he dicho yo también tengo secretos y uno de ellos es que soy bisexual 100% con amplia experiencia pero eso sí limpio y educado lo voy a insistir en el tema no quiero comprometerte y que alguien piense que estás engañando a tu marido públicamente. 

Susana_ muy interesante lo que me cuentas pásame tu número, nunca se sabe, tengo que buscar a mi marido ya nos veremos. 

Me quedé va solo que la luna con el vaso y sus bragas que por cierto tenían un buen aroma. 

Cerca de una hora después noté como me vibraba el teléfono, no era un número conocido y por un momento supuse que podría ser Susana así que descolgué y salí fuera del bar en el que estaba.

Evidentemente era la mujer me preguntó por dónde andaba, contestándole yo me dijo que se acercaría hasta donde estaba yo. 

Quince minutos después Susana venía agarrada a un hombre algo mayor que ella tanto en altura como en edad bastante fuerte y robusto y de cada bastante agradable evidentemente el traje le daba un aire de sello y venían ambos dando traspiés ya que el marido parecía estar algo más bebido que la mujer.

Susana_ este es Roberto mi marido le he comentado que podías acercarnos a casa si puedes conducir. 

El hombre me tendió la mano dándome un buen apretón y comentándome que se lo estaba pasando muy bien pero que Susana creía que era el momento para una buena retirada.

Tomé un buen trago de agua y fuimos a buscar mi coche ellos vivían a 30 km de donde estábamos, la mujer se colocó alante mientras el marido se quedó tumbado con la cabeza detrás del copiloto. 

Susana subió su vestido y me estuvo enseñando a la entrepierna mientras sus manos acariciaban la zona, yo también llevé mi mano para notar su humedad y acaricié sus grandes pechos sacando uno incluso del vestido, en algún semáforo incluso llegamos a besar, habitó aquello me parecía muy morboso ya que el marido aparentemente dormido o por lo menos tumbado no podía ver nada de lo que ocurría en la parte de delante del coche. 

Cuando llegamos a casa, es válido se dirigió a orinar momento en el que pregunté a Susana si estaba corriente de algo el marido. 

Susana_ bueno leer contado como te he conocido y que no me importaría que tuviésemos algo él evidentemente no está para muchas. Y está claro que la última palabra la tiene siempre él. 

Roberto_ oye he pensado mientras estaba echando una meada que podías quedarte a dormir y quitarte volver a hacer esos kilómetros. 

Yo_ bien no hay problema. 

Susana_ pégate una ducha si quieres. 

Cosa que hice en el acto cuando salí con una toalla enrollada a la cintura Roberto estaba roncando en el sofá y Susana medio adormilada. 

Yo_ creo que esta noche todos a dormir. 

Susana despertó a Roberto comentándole que por qué no se pegaba una buena ducha a ver si se despejaba en la medida de lo posible. 

Roberto se fijó en mí viéndome envuelto en la toalla y como un resorte se levantó del sofá quitándose parte de la ropa por el camino para introducirse en el baño, susana me dio un buen morreo diciéndome que posiblemente podríamos jugar un rato los tres pero que siempre su marido sería el que tomase la rienda. 

Susana desapareció quedándome yo solo en aquel salón como un cuarto de hora quedándome con los ojos cerrados imaginandome que posiblemente era momento de dormir. 

Susana apareció embutida en un tanga de color blanco que marcaba su coño completamente, mi pequeña picha enseguida reaccionó pero antes de que pudiese decir nada Roberto también entró en el salón, venía completamente desnudo y con una polla que el estado de semiere erección era más grande que la mía la zona completamente depilada y no tenía más que algo de pelo en el pecho en brazos y piernas dos apreciaba bello alguno.

Roberto_ qué tímido todavía tapado con la toalla, o prefieres ponerte unas braguitas. 

Yo_ no tengo ningún problema ni soy tímido ni me importa ponerme lencería femenina.

Le quite la toalla y pudo ver mi polla de dieciséis centímetros completamente recta y la zona completamente depilada al igual que mi cuerpo íntegramente. 

Roberto se acercó hacia mí que estaba sentado y poniendo su polla a escasos centímetros de mi cara me invitó a tragármela, Susana se puso al lado mío para ver el espectáculo. 

Este hombre era más o menos de mi altura pensando yo ochenta y cinco kilos él debía pesar cerca de los 100 siendo corpulento, sin tocar su polla con mis manos empecé a pasar la lengua desde sus gordos huevos hasta la cabeza de aquel follón reaccionando esta enseguida y adquiriendo un tamaño cercano a los veinte centímetros gruesa y con gordas venas empecé a meterme sus huevos como podían la boca el salivandolos a tope. 

Tanto Susana como Roberto se estaban besando y comentando que no hacía nada mal, empecé a engullirme aquella polla lo que podía hasta mi garganta ayudándome en ese momento Susana pudiendo mezclar mi saliva y mi lengua con la suya, Roberto echaba su saliva sobre su verga para que nosotros la recogiesemos.

Susana se puso tras el hombre y este echando su cuerpo para adelante abrió sus piernas para ofrecerle su gran culo, este estaba disfrutando con la comida de culo de su mujer y la mamada que yo le estaba dando en su polla. 

Roberto_ sí maricón cómeme la polla como me gusta como me la comes maricón y tú Susanita cómete el ojete. 

El hombre me mandó parar varias veces ya que estuvo a punto de correrse y me invitó a ocupar el lugar de Susana. 

Roberto_ tu mamón porque no me comes tú también el culo un poco me pone mucho que me lo coma un tío luego ya te daré tu premio. 

Nos dirigimos a una habitación donde Roberto se tumbó boca abajo abriendo sus piernas y mostrando su ano un agujero oscuro pero que  no tenía pelo alguno incruste mi boca en aquella suculenta raja profunda y humedad por la saliva de Susana y explore su hoyuelo dándome cuenta de que por allí alguna cosa ya habría entrado. 

El hombre bufaba como un loco y cada vez su respiración estaba más agitada, girándose y poniéndose boca arriba me preguntó. 

Roberto bueno marica mi mujer me ha dicho que eres bisexual 100% y yo estoy aquí para complacerte tus instintos de puta. 

Me hizo una señal con su dedo señalando sus labios momento en que me acerqué hasta su cara para degustar su boca cinco minutos besándolos y salivando los uno al otro mientras oía Susana sí sí como me pone ver a dos maricones dándose la boca. 

En aquella posición ya notaba como Susana había estado jugueteando con mi esfínter y lubricante estando dilatando esta aquella zona mientras habíamos estado besándonos. 

Prácticamente sin darme cuenta me coloco boca arriba levantando mis piernas y apoyado la sobre su cuerpo apoyó su verga a la entrada de mi ano notando como poco a poco iba ejerciendo más presión y pidiéndole yo que al principio lo hiciese con cuidado ya que su verga era de un tamaño más que considerable. 

Diez minutos duró la maniobra para tener sus huevos pegados a mi culo y su tranca clavada hasta el fondo. 

Roberto_ bueno Susanita creo que la puta ya se ha ganado el comerte el culo. 

La mujer se puso sentada prácticamente sobre mi cara dando la espalda al hombre y mi lengua empezó a hurgar en aquel oscuro agujero traspasando el umbral de su esfínter con gran facilidad y notando como su coño iba mojando mi cara. 

Roberto había comenzado a moverse poco a poco sintiendo como aquel pollón tocaba mi próstata y poco a poco iba acelerando los movimientos sobre todo tirando de mí hacia él mientras mi boca ahora ya degustaba el mojado coño de Susana. 

Durante un buen rato las en vestidas de Roberto machacaron mi pobre culo hasta que este con su voz y respiración más agitada nos anunciaba su eminente corrida. 

Saliendo de mis entrañas sentí que se ponía sobre mi pecho y empecé a recoger el reguero de su leche que caía por la raja del culo de su mujer llegando hasta su coño una gran cantidad de leche que yo fui buscando a medida que caía así durante un buen rato hasta que dejé aquella zona limpia para luego como recompensa exprimir aquella verga dentro de mi boca. 

Susana se unió a mí para degustar sus últimas gotas y dejar aquella polla bien dura otra vez, instantes después Roberto los besó a los dos en la boca haciendo el comentario de que sabía a leche de macho. 

Diez minutos de conversación para hacer comentarios sobre lo puta que era y que pocos tíos eran capaz de tragar toda la leche y su polla por el culo. 

Yo le comenté que me encantaba el cuerpo de su mujer redondo y que él para nada me desagradaba y que no me importaría repetir una y mil veces. 

Este a su vez me dijo que siendo tan putita seguro que habría más ocasiones. 

¿Que te ha parecido este relato?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este relato.

Una respuesta

  1. helenx

    Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt

Deja un comentario

También te puede interesar

Lunes de Carnaval caliente

anonimo

22/02/2023

Lunes de Carnaval caliente

Todo empezo con un trio

anonimo

09/02/2014

Todo empezo con un trio

Nudistas por casa

anonimo

13/12/2020

Nudistas por casa
Scroll al inicio