Ese día que mi prima me dijo que hiciéramos la pijamada el próximo fin, yo estaba muy exitado y emocionado, no les ha pasado que se les calienta la cabeza y quieren que llegue ese día, así estaba yo.

Habíamos planeado todo, la película que veríamos, lo que cenaríamos, etc. Yo cada vez quería más pues a mi edad era la primera vez que experimentaba algo así con una mujer, recuerden que tenía 14 años y ella 21.

Antes de que hiciéramos la pijamada recuerdo que toda la semana veía pornografia, antes no era fácil acceder a ese contenido, pues los teléfonos de la época funcionaban con Bluetooth y el internet era algo costoso, pero entre amigos nos prestábamos DVDs de pornografia e intercambiábamos, los veía no porque quería jalármela, si no para ver cómo estaba compuesta una Vagina y entender mejor aquello que había tocado.

Llegó el esperado día de nuestra pijamada, nos divertimos, jugamos, reímos, vimos la película, cenamos y terminámos cansadísimos, así que ella me dijo, me voy a meter a bañar, tú ponte tu pijama, y le dije si prima ahorita me la pongo, cuando ella se metió al baño yo inmediatamente fui a husmear en su ropa sucia y ahí estaban sus calzones recién quitados, los olí, me la jale, me vine, los dejé embarrados y los volví a meter a su ropa sucia…. Ella todavía tardó en salir así que yo ya estaba tapado y más tranquilo de haber hecho lo mío con su ropa.

•Ella se fue a cambiar y poner su pijama en otra habitación y cuando salió estuvimos hablando hasta quedarnos dormidos. Como el inicio de mi ritual me levanté a la 1:45 am, mismo ejercicio, empezar a tocarla, ver si estaba dormida e irla manoseando, ella estaba en posición de cucharita, así que desde esa posición me era fácil tocarla, mi calentura no podía más pero sabía que no pasaría de ahí hasta que ocurrió algo que a la fecha pienso que soy muy afortunados. Empecé a tocar su conchita y ya estaba caliente y húmeda, recuerdan cuando ella solita se abrió de piernas? Al principio pensé que estaba apunto de levantarse pero ahora todo empezó a tener sentido.

Yo la estaba tocando pero de cucharita no podía meterle bien mi mano, así que ella se puso boca abajo con su cara volteando hacia la pared, me quedé inmóvil pues pensé que se iba a despertar, pero seguía durmiendo, en esa posición tenía sus nalgas a mi disposición y así empecé a tocarla hasta sentir esa humedad de nuevo, la seguía tocando como había visto en esos videos pornograficos hasta que ella abrió un poco más sus piernas y pude tocarla mejor. Por instinto empecé a dedearla con un dedo pero era como si solitos mis dedos resbalaran, hasta que oí claramente un gemido de mi prima. Me espanté pero cuando volte a verla tenía sus manos apretándolas y haciendo fuerza y ahí me di cuenta que la segunda vez que la toqué y ella abrió sus piernas, era porque quería más y ya estaba despierta…. Mi corazón empezó a latir mucho y yo seguí dedeandola, esto que hacíamos ya era complicidad, yo seguía metiendo mis dedos y ella lanzaba pequeños gemidos.

En ese momento éramos dos personas que no se veían como primos, si no como una hembra dándole entrada a su macho, su vagina se estaba preparando para recibir una verga, yo seguía jugando con mis dedos y ella sin moverse pero lanzando gemidos y haciendo fuerza con sus manos. Una de sus manos se movió y empezó a buscar donde estaba situado mi pene, hasta que lo encontró y metió su mano dentro de mi pijama, “ella seguía aparentando dormir” pero ambos sabiamos lo que hacíamos. Ella siguió jalándomela hasta que me vine por tercera vez y manche su mano con mi corrida, algo que me éxito es que ella se llevó su mano a su boca y la lamió para dejarla limpia.

Esa noche ella quedó muy húmeda y yo no creía lo que había pasado, no me la cogi pues recuerden que yo tenía 14 años, pero empezamos a hacer pijamadas más seguido, jamás hablamos de ese tema directamente pero era un juego interno que teníamos los dos, talvez ella aparentando estar dormida sin saber qué pasaba y yo marcando mi territorio con su ropa interior usada, hasta que en una ocasión cuando me disponía a usar sus calzones para jalármela, dentro de su ropa alle una nota, no sé cuánto tiempo estaba ahí pero estaba dentro de su calzón que recién había usado el día anterior… “Cuando entres al baño, deje un frasco de gerber vacio (un pequeño frasco de vidrio), ahí deposítalos y regrésalo en mi cesta de ropa sucia”

Así es, mi prima me hacía venirme dentro de ese frasco para después hacer algo con eso… usen su imaginación.

Espero les haya gustado esta pequeña anécdota que me pasó a mí y clarooo. Después de eso seguimos teniendo ese tipo de contacto, por si quieren una tercera anécdota díganme.

Si llegaron hasta aquí comenten con la palabra “dinamo”, así me daré cuenta que les agradó y podría seguir contando mis anécdotas. 👋🏻