octubre 3, 2025

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Me coji a mi mamá

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La verdad es que esto es una de las cosas que me tiene mas loco ultimamente y necesito contarlo en algun lado, porque si no se me sale por la boca. Todo paso hace como dos semanas, un martes por la tarde si no me equivoco. En la casa no habia nadie mas que mi mama y yo, mis hermanos andaban trabajando y el silencio era tan grande que se podria cortar con un cuchillo. Yo estaba aburrido como una ostra, tirado en el sofa viendo cosas en el celular sin poner atencion, y ella andaba limpiando la cocina, moviendose de aqui para alla con ese short cortito que usa para estar en casa y una blusa sin mangas que me volvia loco. No se, hay dias en que la miro y no puedo evitar verla como lo que es, una mujer con un cuerpazo que a cualquiera se le pararia la verga de solo verla.

Empezo como un juego, como siempre. Yo me puse a molestarla, a quitarle los trapos de la mano, a hacerle bromas tontas. Ella se reia, me decia que era un pesado, pero se notaba que le gustaba la atencion. Total, que en un momento ella se sento en el sillón, en ese lugar que es solo suyo, el de la esquina con el cojin mas gastado. Yo, para seguir jodiendo, me sente justo ahi, en el mismo sitio, haciendome el gracioso. Ella me miro con esa cara de fastidio falso que pone y me dijo «Javier, quitate de mi lugar o me siento arriba de ti». La mire a los ojos, retandola, con una sonrisa pícara. «A ver, quiero ver si te atreves», le dije, pensando que se echaba para atras.

Pero no, joder, no lo hizo. Con una mirada que me atravesó, se acercó y, sin mas, se sentó directamente sobre mi regazo, con sus piernas a los lados de mis muslos. Me quede paralizado un segundo, sin saber que carajo hacer. Ella no se movio, se quedo ahi sentada, y yo podia sentir el calor de su culo a traves de mi pantalon, un calor que me quemaba y se me metia directo a la sangre. Al principio no paso nada, los dos nos quedamos quietos, pero luego, casi sin querer, ella empezo a moverse. Fue un movimiento sutil, como haciendo circulos lentos con sus caderas, rozandome justo ahí donde yo ya empezaba a ponerme duro como una roca. Fue una sensacion increible, una tortura y un placer al mismo tiempo.

Mis manos, casi por instinto, se le fueron a sus muslos. Los tenia suaves y firmes, y yo los acariciaba subiendo y bajando, sintiendo la piel bajo mis dedos. Ella no me detuvo, al contrario, se volvio un poco hacia mi, porque antes me estaba dando la espalda, y ahora me miraba de frente. Sus ojos tenian una chispa que nunca le habia visto, una mezcla de verguenza y deseo que me puso aun mas caliente. Viendo que no me paraba, me anime a subir las manos mas arriba, hasta llegar a sus chichis. Las tenia cubiertas por la blusa, pero las senti firmes y redondas. Empece a masajearselas despacio, con cuidado, mirandola a los ojos para ver su reaccion. Ella cerro los ojos un momento y dejo escapar un suspiro, y entonces senti su mano en mi pierna, rozandome la entrepierna, frotando mi verga a traves del pantalon. Fue como una descarga electrica.

No pude aguantarme mas. Me incline y le di un beso en los labios. Fue un beso rapido, casi un robo, pero ella no se echo para atras. Al contrario, me lo devolvio, y esta vez con la lengua. Joder, su boca sabia a cafe y a algo dulce, y su lengua se metio en mi boca con una hambre que me dejo sin aire. Los besos se hicieron mas intensos, mas profundos, mas sucios. Ya no eramos madre e hijo, eramos dos animales necesitados. Mis manos ya no se contenian, le agarraba las tetas por encima de la blusa, las apretaba, y ella gemia en mi boca mientras sus caderas no paraban de moverse, frotandose contra mi verga que ahora estaba dura y palpitando, pidiendo salir a gritos.

En un momento de locura, la levante en brazos. Ella es mas bajita que yo, pero aun asi pesa, pero en ese momento la senti liviana como una pluma. La cargue por el pasillo directo a su cuarto, sin soltarle la boca, tropezando con las puertas. Cuando llegamos a su cama, la tumbe con cuidado y me arrodille frente a ella. Le quite los shorts y sus bragas de un tirón, y alli estaba, completamente mojada, con su puchita rosada y depilada, esperandome. No perdi ni un segundo. Me baje y le clave la lengua, saboreando sus jugos, que tenian un sabor salado y adictivo. Ella empezo a gemir como una autentica puta, agarrandome el pelo, empujando mi cara contra su sexo, gritando «ahi, Javier, ahi, no pares, por favor». Sus gemidos me enloquecian, cada vez mas fuertes, mas descontrolados.

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Cuando senti que estaba a punto de correrse, me levante y me baje el pantalon. Mi verga salio de golpe, dura y empapada de mis propios fluidos. Me puse sobre ella y, sin ningun problema, se la meti de una vez. Entro resbalando, tan mojada estaba, y un gemido largo y profundo salio de su garganta. Empece a moverme, a darle embestidas profundas y lentas, mirandola a los ojos que se ponian en blanco de placer. Con la mano que tenia libre, le pase un dedo por el culo, que estaba tan mojado como el resto, y empece a meterselo suavemente, solo la punta, mientras seguia follandomela. Ella se volvio loca, me jalo hacia ella para besarme con desesperacion, y luego empezo a chuparme los pezones y a morderme el cuello, pidiendome mas, mas fuerte, mas rapido.

La habitacion se lleno del sonido de nuestros cuerpos chocando, de sus gritos ahogados en la almohada y de mis gruñidos. Le daba y le daba, metiendole el dedo en el culo al ritmo de mis embestidas, y ella no paraba de correrse, una y otra vez, hasta que al final yo no pude mas y le eche toda mi leche adentro, con un gruñido que senti que salia de las entrañas. Nos quedamos alli, jadeando, sudados, enredados el uno con el otro, sin saber bien que decir.

Y la cosa es que esto no ha parado. Desde ese dia, cada vez que nos quedamos solos en la casa, terminamos asi, follando como condenados en su cuarto o en el mio, o en el sofa donde empezo todo. Es una adiccion, una necesidad que nos come a los dos por dentro. Y lo peor, o lo mejor, es que no quiero que pare. Tengo mas historias, con mi tia y con mi prima, que si la gente quiere las cuento, porque esto de escribirme lo caliente que estoy me esta poniendo otra vez mas duro que el pan del dia anterior.

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