Yo Javier, de 21 años, vivo con mi mi madre Mary, de 37 años y mi hermana Laura, de 19 años, si así es, mi madre me tuvo a una edad muy temprana, mi padre, que en ese entonces tenía 17 años y ella salieron durante meses cuando mi madre quedó embarazada, los padres de mi madre estaban consternados por la noticia, pero decidieron ayudar a su hija, pero los de mi padre, lo hecharon a la calle y se quedó a vivir con ella, después de que nací, y cumpliera dos años, mi madre quedó embarazada de nuevo, está es de mi hermana, un año después de su nacimiento, mi padre se fue, ya que nunca fue una persona que se preocupara por otros y nos dejó a mi madre, hermana y yo solos, mis abuelos fueron un gran apoyo durante años, hasta que hubo la oportunidad de mudarnos a un lugar propio, ya que mi abuelo tenía una casa en un pueblo tranquilo, con suficiente espacio para todos nosotros, asinquebnos mudamos a la nueva casa y todo era tranquilo y alegre, mi madre se esforzaba en el trabajo para que no nos falte nada, y yo y mi hermana siempre hacíamos lo que podíamos en la casa para ayudar a que ella pueda estar tranquila en la casa después de trabajar, cuando tenía 13 años y mi hermana 11, mi madre consiguió algo de dinero e hizo que construyeran una piscina en la parte de atrás del jardín, ya que había un buen espacio allí, y cuando estuvo listo, todos nos metimos a nadar, para ese entonces, tenía ya las hormonas comenzando a arrancar, y se cierta forma ví a mi madre de una forma diferente, aún no sabía que era, pero comencé a sentir algo la verdad, en una de las veces que todos estábamos en la piscina, mi hermana nos hizo una broma a mi y mi madre, los shorts que usaba en esa época eran algo flojos la verdad y mi madre usaba bikini de amarre siempre que entrabamos, así que ella un día, cuando nadábamos, me quito mis shorts y a mi madre se llevó su tanga, la verdad es que fue algo vergonzoso, aunque aveces todos nos bañabamos juntos, en ese momento sentí un poco de vergüenza y mi madre también, aunque al final solo nos reímos, aunque al ver el trasero desnudo de mi madre, hizo que mi pene se me ponga duro, no lo ví nada raro en ese momento,aunque mi madre al verme, si que quedó algo sorprendida igual que mi hermana, pero después de eso no pasó nada, aunque conforme pasaba el tiempo, seguí viendo a mi madre de una forma más sexual la verdad. A los 18, cuando logré entrar en una universidad, mi madre y mi hermana se alegraron por mi ya para ese entonces mi madre tenía 34 y mi hermana 16, decidieron celebrarlo en un restaurante, que era uno de nuestros favoritos, ese día mi madre llevo un vestido algo escotado y mi hermana llevo uno con la falda algo alzada, la verdad, que también comencé a mirar a mi hermana de otra forma.

Fuimos a comer, nos divertimos, incluso mi madre, que era algo débil al alcohol, tomo algunos tragos, que luego al volver, tuve que conducir, también había tomado, pero aún estaba en condiciones de conducir, mi hermana se sentó junto a mi madre atrás para que ella esté bien, al llegar a casa, tanto mi hermana como yo, ayudamos a mi madre a entrar, en eso ella se medio despierta, pero seguía borracha, que dió una idea loca, ya que ella no tenía trabajo al día siguiente y mi hermana no tenía escuela, ella propuso que siguieramosncon la celebración en la piscina, pero le dijimos que no estaba en condiciones de poder nadar, ella no escuchaba razones, aunque se cierta forma no sonaba como una mala idea, ya que había calor, que incluso yo y mi hermana queríamos refrescarnos, pero no podíamos seguir el juego a mi madre por su condición, en eso ella, se quita toda su ropa, ya que quería nadar desnuda, ella la verdad es de cuerpo delgado, tetas firmes y de tamaño promedio y trasero tonificado, y después comienza a desnudar a mi hermana y luego a mí, y nos arrastra a la piscina y nos metemos todos, la verdad, me excité al ver a mi madre y hermana desnudas en ese momento, que lo tenía duro, mi hermana vio mi erección y se sorprendió mucho, y madre de su parte al ver mi pene erecto, dice algo como que tengo un pene grande, como el de mi padre y que ella envía a las chicas que tendrían suerte de tenerme, ya que ella, desde que mi padre nos abandonó, no ha vuelto a tener un hombre que la atienda, y comienza a jugar con mi pene, y luego agarra la mano de mi hermana y comienza a hacer que lo froto también, estuvieron frotandole durante unos minutos hasta que no me aguante y me vine, después de eso, solo salimos de la piscina, nos duchamos, mi hermana tuvo que ayudar a mi madre en eso y vestirla, y nos fuimos a dormir, después de ese día, las cosas cambiaron para los tres, y una nueva dinámica familiar iba a comenzar. Gracia por leer, espero que les haya gustado , publicaré la siguiente parte cuando pueda, recuerden que todo esto es solo fantasías, no hay nada real en esto, si quieren dar ideas para una historia, dejen en los comentarios sus fantasías y las tomare en cuenta para crear una historia que les guste, nos vemos.