Eran esos tiempos que hacía el básico de ingeniería en la universidad, tendría uno 20 añitos,  ya que entre tarde a la facultad por problemas de mudanza.

De vez en cuando pasaba a visitar la hija de mi tía, una hermana de mi padre que rondaba más o menos mi edad, quizás con un poco más edad, por meses, digamos 20 añitos bien repartidos en su cuerpo, ella había entrado en la universidad pero por un accidente que tuvo en el  auto abandono, ella  era distraída nada, según yo se hacia la pendeja,  nunca he estado de acuerdo con esa aseveración y más adelante sabrán porque, eran esos tiempo en que solo piensas en sexo o en revistas porno, para ese tiempo la verdad era muy difícil ver películas  porno en casa. Eran los años 80,  Era una cosa de millonarios, y nada más que decir de verlas en la computadora, eso ni existía por decirlo de una manera surrealista

Un día de tantos que ella visito, yo estaría medio birriondo (calentón, con ganas), estaba con unos ejercicios de algebra  que no les entraba con nada, y de paso muy solo, mi padre trabajaba, mis hermanos en la escuela y mi mama, ni idea, lo cierto es que yo estaba en la soledad, lo ideal para hacer las tareas, y llego ella, con su carita de yo no fui.

Conversamos un rato de sus cosas, si entraría a la universidad el siguiente semestre y esas cosas, y pregunte para donde iba, según ella iba a cobrar un dinero de una mercancía que le debían a su mama, y que aparente mente le pagarían esa tarde, seguimos conversando comimos  y bebimos  refrescos y galletas, varias cosas se me vinieron a la mente  y me entro la maldad, y le digo jum—tú vas a esta hora a cobrar, ese don casi nunca está allí a esta hora.  Allí solo están los vagos de los hijos. – Ella dice, –que sí,– que a veces él está en las tardes, la verdad es que yo quede con esa duda, — le digo: no será que tu tiene un romance con uno de esos vagos.  Ella me dice: ¡no vale, esos ni me miran!, las pocas veces que he ido están es jugando cartas, ni se asoman a ver quién toca la puerta.  

Yo seguí, insinuando cosas,  ya medio tramado en mi mente cochambrosa (sucia, morbosa),: — pienso : “ esta se cree que yo soy gafo” , — le comento algo más directo: — “ja en estos días me entero que el viejo te consiguió con el menorcito”, —  ella se  pone roja, y le digo .. ¡huy!  jajaja, porque te pones roja, y se ríe con una sonrisa picarona, .. Y le digo ya no me cabe duda, tú te las traes con el menorcito. 

Ella medio esquiva pero picarona, me comenta que a veces el menor le pone unas miradas lascivas,— claro está tontita tiene un cuerpo nada despreciable, es una chica como de 170cm, se diría cuerpo de miss, va con frecuencia a el gym, tés blanca, unos meloncitos que con ropa no son despreciable, es fin , como dicen aquí está muy rechula.., y me rio .! Lasciva o Sádica! , jajajaj, ella me dice: “si bien sádicas, casi me coge con los ojos” y allí entra mi sadismo.. Huy, y le digo, bueno yo también me atrevo. Con miedo pero me atrevo, le sigo comentando con tono asustado, claro, tu tiene un cuerpo bien lindo y se te ve, ese jean que da mucho que pensar…y hacer volar esta mente. 

 Ella en tono rudo y serio me dice que la respete!,  yo le digo en tono burlón, ”ni que te estuviera agarrando el culo” y me da un golpe suave  un golpe y yo me rio, ella se deja salir una breve sonrisa, — yo rio algo fuerte, – jajaj–, ella se puso media roja y aprovecho y le pregunto “ tú me dejarías ver tus lolas, algo muy atrevido con un nudo en la garganta, con bastante miedo, no pasara que ella me señalara con mi mama y se armara la grande.

Ella algo tímida me dice que sí, pero pregunta con qué fin?, y digo mira corazón el fin más noble para un hombrecito de mi edad, tocarlas, acariciarlas, y  más que besarlas mamarlas como todo un caballero,   y en ese momento se me pone duro el pene, me empalmo, y más asustado  aun le digo:– me los dejas ver?, Yo la verdad  nunca había imaginado que esta chica cediera, esto pasó así como por pura casualidad.

Entonces ella  responde de manera muy rápida y sin miedo; nada en comparación a lo que yo sentía- –Le digo que los quiero ver! Pero más ¡cagao!, jaja, ya era  por el miedo de no saber si mi madre llegaba, pero insisto y logro que ella acepte, pero me pide que no diga nada, a lo que yo sin titubear le digo –“tas loca, yo para que voy a decir eso”. En eso ella se sienta en la banqueta de la cocina en donde estaba haciendo mis tareas, Se levanta la su blusa –No tan Corta, pero si manejable, ideal para esta ocasión!! – respinga las nalguitas hacia delante y se aparta el sosten. Y hay mi Dios entonces se me puso a reventar el “guevo”, una lolas hermosa, rosaditas delicadita, se veían esas dos senos medio carnosos, y se asomada un bultico entre ellos, un pezón Grandecito,  entonces le pregunto con miedo que si puedo tocar, y ella no responde, se queda callada a lo que tampoco espere mucho y empecé a tocarle muy  suave ese bultico que sobre salía, ella ya estaba excitada ese punto. Se sentía un olor a almizcle en el ambiente,  se sentía demasiada humedad, yo metía mis deditos  y ella cerraba los ojos, de una manera que se sentía un éxtasis a nivel superior. Se veía que lo disfrutaba, así estuve varios minutos  hasta que ella empezó a contraer sus músculos del abdomen, yo la verdad estaba atontado, — yo no era ningún singon , pero si ya lo había hecho varias veces,   estaba  lelo de lo que estaba haciendo como si fuera la primera vez, claro con ella era la primera vez, no la última, jajaja,  ella tuvo su orgasmo, sin duda alguna, estaba  sobre excitada porque eso fue rápido,  saque mis dedos y ella me pido agua, yo más empalmado imposible, fui a la nevera.

Cuando vengo con el agua ella se ha quitado el blusa, sostén  en pocas palabras estaba en pelotas como dicen en argentina,  y me dice que quiere que le dé besitos allí, cuando ella dice allí es en su vagina, esta chica tenía un hilito, que hacía que se le parara el huevo a cualquier muerto, eso la pone a  mil. (Ven porque digo que no tenía ningún toque, ya alguien más le había dado besitos, si no como ella iba a saber que eso la excitaba), igual yo excitado acepte pero le dije que yo también quería mis besitos como ella decía, a lo que ella acepto sin titubear, así empecé a darle besitos y a pasar mi lengua de forma circular en su clítoris y de arriba abajo por la orilla de sus labios hasta que empezó de nuevo a contraerse y eso hacía que yo me pusiera más duro entonces ella me dijo que me sentara que me lo iba a mamar. “un gran beso”—DIJO!, yo me baje el pantalón a media rodilla y me senté en la banqueta, ella me dice con una sonrisa picarona, no es tan pequeño como lo imaginaba, — en mi mente pienso, “puta la niña”, jjajaj me rio –y ella se agacha y empieza su labores, que a decir verdad no lo hacía nada mal, lo que denotaba que ya sabía hacerlo tenia harta experiencia, y más adelante en otro escrito les contare, –yo le digo que lo hacía rico, que hacía que mis bolitas se electrificaran, —ella me comenta que no le valla a llegar en la boca que ella me va a decir donde se lo voy a echar y que me gustara, que en su momento me dirá… así  estuvo , Me lamio las piernas, muy suave. La propia puta, cual actriz porno de la actualidad, chupaba mis bolitas y se acariciaba las tetas , ella me mira y  dice que se las mame,  se levanta y se siente algo respingada veo dos lindos meloncitos con unas bella aureolas, de esas que no dan grima, del mismo color de su piel, uno senos como de una copa b, seria, como digo yo ahora, ¡bien manejable!. Nada de exagerar, y empiezo a lamer muy delicadamente y ella abre un poquito sus piernas y hace que mi pene roce de poco con su vagina lo que nos hacía excitar más.

Era una locura sin penetración, lo cual trate pero ella esquivo y me dice que no desespero que hoy no. Que igual lo disfrutaría bastante,  así estuvimos un ratico más hasta que me dijo que ya no aguantaba más que ya quería Sentirlo, y yo digamos inocente,  digo que ok, ella se baja de la banqueta y me dice que corra y busque algo de crema de mano de mi mama, que no demore, que no pregunte,– yo  ¡INOCENTE!, voy y busco la crema y me dice que me la unte en el pene y ella se voltea,  se apoya con las manos en la banqueta, me pone su hermosas, Contorneadas  y suaves nalgas a mis disposición me dice que le unte crema en el ¡culito!, se inclina, se aferra a la banqueta con una mano y con la otra, se agarra una nalga hacia un lado y dice que le meta suave y delicadamente en su ¡hoyito!, yo ya estaba a reventar con semejante petición, jamás esperada y menos de ella que según tenía un ¡toque!,  jajaja “ un toque pero de puta”, me dispongo y le engraso y le acierto a su hoyito, y me dice que no me desespere, que con cautela y lo disfrutare más. – así lo hago le coloco muy delicadamente la cabeza y presiono,  ella empieza a moverse, como a atornillar el rabo en mi pene y este fue entrando de una manera tal que en menos de un minuto ya estaba más de la mitad dentro..

Las cosas pasaron rápido, en un momento pase de estar con la cabeza en la puerta de culito a estar culeándola como dicen en algunos países, ella se movía rico, decía que era mejor que por su vagina que ella lo disfrutaba más, prácticamente ella hacia todo. Yo absorto en esta maravilla que primera vez que me pasaba y de paso lo hacía, me toco con una experta en este arte del sexo anal, así estuvo por más de cinco minutos, y me pide que le bese la espalda y que le dé a ella Bien duro que lo meta y lo saque  mi pene, sin llegar a sacarlo todo,  que la haga sentir, gritar, gemir como una zorra,– pues así lo hice, la tome de la cintura y lo hizo como le hacen los perros a sus parejas de una manera desesperada. Casi al punto de llegar, y ella pedía más, los disfrutaba de una manera indescriptible a mi edad, ella gritaba que iba a llegar y eso hizo que yo me desbocara y ella pidió más  y más hasta que dice que va a llegar, y decía groserías, de todo tipo, y eso hacía que yo le diera más duro hasta que de verdad no aguante más y le explote en el culo y ella llego diría que casi igual,  me dice ¡así ¡, así! dale más así!.. y gemía y me dice que la hice llegar, demasiado bien , que lo caliente de mi semen la hacía sentir una vaina muy ¡arrecha!, se lo deje dentro un momento y me dice que le toque la vagina, y dios estaba bañada como que se hubiera bañado, era algo gelatinoso que le choreaba de su vagina con unos olores a almizcle que no se podían describir. ¡”El olor al buen sexo me dijo!”. Yo la verdad quede extasiado, así se lo saque descanse un momento ella agarro una toalla de sobre mesa de la cocina y se medió limpio. Yo subí mi bermuda y ella se fue al baño a terminar de limpiarse…

     Ella llego a la cocina donde estábamos y me dice que me agradecería que ni comentar, que si quería disfrutar de nuevo tenía que morir callado. Yo le prometí que 

ni  modo. Que sería así, pero que a la próxima quería su vagina y me dijo. Eso se verá, me gusto contigo por el culito y muy seguro será  por allí, seguimos hablando y

ella me comenta sobre mi mama, y que mejor iria a ver si de verdad cobrar el dinero. Que si no demoraba pasaba de regreso y seguíamos conversando. De otras

cosas…