Al día siguiente me desperté sobre las 10. Me desnudé y salí al pasillo desnudo completamente. Controlaba mi erección para que el aparato estuviese medio plantado.

Llamé a mi hermana � Silvia déjame una toalla que voy a ducharme. Silvia se quedó sorprendida de mi naturalidad y comentó � que atractivo estás. Se nota que te cuidas. Caminé hasta su habitación desnudo donde me dio una toalla de baño. Al girarme me dio un manotazo en el culo. Joder que culo más apañao tienes me dijo.

Me duché y salí desnudo del baño. Silvia estaba en la cocina, me dirigí allí y le dije, te importa si voy desnudo. Hace mucha calor. Me dijo tienes razón yo voy a ponerme cómoda también. Entro a su cuarto y salió con un tanga blanco trasparente. Tuve que hacer esfuerzos para que no se me empalmara del todo.

Vamos a ir a la playa me dijo. Por qué no contesté. Desayunamos en la cocina desnudos. La situación era muy erótica. Yo empezaba a encontrarme cómodo cuando me preguntó que cómo la veía como mujer. Le dije que tenía unas magníficas tetas y un buen culo. Se le trasparentaba el vello del pubis.

Por qué no te depilas le dije. – Buena idea, podrías ayudarme. Se quitó el tanga y desnuda espectacular fue a por los utensilios. Empecé a recortarle el vello y ni que decir tiene que aproveché para sobarla bien. Estaba seguro que la puse cachonda.

Finalizado el trabajo fuimos a la playa donde nos bañamos desnudos y jugueteamos en el agua dejando que nuestros cuerpos se rozaran como el que no quiere la cosa.

Ya saliendo se me empalmó y Silvia se quedó mirando � joder que aparatito tienes. Nos pusimos crema mutuamente por la espalda. Solo faltaba �

Continuará �.