Por fin la había convencido, no saben cuánto me había costado, a nuestros 43 años por fin estábamos a punto de realizar nuestra eterna fantasía, Adela mi esposa, por fin tendría el placer de probar una segunda pinga en su vida, y yo el placer de verla comiéndose una pinga que no fuera la mía, con el agregado de que esta sería una mejor que la mía.

Como mantener este acontecimiento en privado, sin que nadie jamás pudiera enterarse de tal suceso, solo podía ser de una forma, alguien que garantizará silencio absoluto y eterno, en nuestro pueblo solo había una persona indicada y este era Roger, un muchacho un tanto retardado en su desarrollo mental, hijo de padre de color y madre blanca, lo que de mente tenia retardado lo había ganado en la gran pinga que se manejaba, heredero talvez del padre de color o quizá por la costumbre que había en el desde niño de jugar a su modo con su sexo que todos en el pueblo vimos desarrollar dia dia porque debido a su condición no reparaba en nada cuando se trataba de andar con la pinga al aire por las calles, hoy a sus 18 años se había vuelto popular por los casi 20 cm que se manejaba entre las piernas, casi todos en la población se lo habíamos visto y estaba seguro que mas de una mujer deseaba esa pinga, sabia que Adela no era la excepción, en una oportunidad tuvimos el placer de hacer que nos lo mostrará solo a los dos. Desde años ella no aceptaba un trio porque parecía imposible encontrar alguien que guardara el secreto, ahora esas condiciones se daban con Roger aunque este era desaseado eso podía superarse, de tanto insistir la había convencido habiendo planeado con detenimiento buscar el sitio y momento adecuado esto por fin se dio asi.

Las plantaciones de caña estaban a buena edad para hacer de estas un buen escondrijo y como siempre Roger rondaba cerca de esos lugares, hice la guardia esperando encontrarlo un día sin que nadie me viera llamarlo y meterlo dentro del cañaveral, por fin se dio, eran casi las 5.30 de la tarde, por fin lo tenia a mi disposición lo tome de la mano tratando de hacerle entender que me siguiera, Roger me miraba entre extrañado y asustado, en su idioma casi inentendible algo me iba diciendo hasta que sabiendo que ya estábamos lo bastante alejado en medio del cañaveral me senté casi obligándole a hacer lo mismo.

Sin aun no has probado una concha, hoy lo vas hacer � le dije � hoy vas cacharte a mi mujer .

Cachar, cacharr? � dijo � era la palabra que conocía y casi sabia pronunciar a la perfección.

Si Roger hoy mi mujer va a tener el placer de comerse tu pingon . hablaba muy bajito por precaución aunque de sobre sabia que nadie nos encontraría,

Marque el numero de celular de Adela y la llame

Adela, todo bien, ya tengo a Roger conmigo, sentí su voz insegura cuando me respondió y pregunto por si alguien nos había podido ver, le aseguré que perdiera cuidado que todo había salido bien. Le describí el lugar e indique como llegar, no estaba tan lejos del pueblo, unos diez minutos talvez caminando, ven en falda � le sugerí pues seria mas cómodo para todo. No te demores le dije y corte casi sin darle tiempo a hablar mas por temor a que desistiera a ultima hora

Apenas corte la llamada, me puse de pie levantando a Roger conmigo, era mejor poner a disposición a Roger, le baje el buzo algo sucio que traía, no puso ninguna resistencia aunque parecía preguntarse que ira a pasar o que va a hacer conmigo, dejo al descubierto su ya gorda y flácida pinga que colgó como péndulo, casi se lo admiré pero mas me excité reconociendo la diferencia entre la mia y la de el, no había comparación o si, la diferencia era tremenda o abismal mis trece o en el mejor de los casos 14 cm quedaban ridiculizados ante esos quizá 14 cm en flacidez y esto sin mencionar que era mas gorda así como estaba que cuando la mía esta dura.

Esa era la verdad y me alegré aun mas sabiendo que era el tamaño ideal que quería para Adela, sin ningún miramiento lo tome con mis manos había que auscultarlo, es decir dejárselo lista para Adela, había ido muy bien preparado, de mi pequeño bolso saqué una botella de agua y un jabón, estando Roger sin pantalón procedí rápidamente a lavarle la pinga lo suficiente para dejarlo oloroso y limpio, así pude experimentar por primera vez coger con mis manos otra pinga que no fuera la mía, sentí un no se que, mas cuando aun cuando no era mi intención se le fue poniendo dura, tranquilo Roger aun no, espérate unos minutos que ya viene tu hembra � le dije y entre esa sonrisa forzada que le conocemos algo me dijo o trato de decir, le día una manita de agua a su cara algo sucia y sus manos también y quedo en dos o tres minutos listo para que Adela no pudiera argumentar que estaba demasiado sucio, aunque la verdad es que su ropa si la estaba, total sabíamos que el andaba así, lo pensé un momento y decidí dejarlo solo con le polo que traía puesto, metí la mano a mi bolso y saque la delgada manta que extendí sobre la hierba , se sentó a mi pedido, un par de minutos mas marque y llame otra vez, donde estas . respondió Adela, por donde estas tu le dije, estaba en el camino correcto y conociendo los alrededores de nuestro pueblo ya que en nuestra juventud esos cañaverales habían sido nuestros hoteles naturales, lo guie mejo por lo que en cuatro minutos exactamente entraba al lugar donde lo esperábamos.

Roger la miro apneas la vio llegar, sentado con las piernas juntas y estiradas tenia la pinga flácida descansando en su entrepierna.

Adela se ruborizó ante tal situación, claro que vio a Roger y de seguro aun sin premeditarlo vio también su pinga.

No te preocupes, todo esta bien � le dije � pues mostraba incomodidad. Traía puesta la falda que le había sugerido y eso me dio la seguridad que estaba decidida a consumar nuestra fantasía.

Mira esa pinga le dije mientras tomándole por los hombros y colocándome detrás de ella le señalé a Roger la acerque un poco mas de donde había quedado parada, casi a los pies de Roger la abrace fuerte excitado como ya estaba, mira lo que te vas comer � le dije � una vez mas refiriéndome a la pinga de Roger, quien nos miraba con una sonrisa mesclada con extrañeza, con una mano suelta me quite el short que traía puesto, y con mi pinga completamente tiesa quede pegado a Adela.

Debemos darnos prisa �dije � mientras decidido a empezar le levante la falda alli y asi como estábamos, pareció resistirse � ya te dije que no te preocupes, no tienes de que todo quedara entre nosotros tres, lo sabes asi es que entre mas rápido mejor, suéltate y déjate llevar, de sobra sabemos que esto es lo que tanto habíamos soñado y ya veras que te va gustar. Mira como ya se le paro la pinga � lo ves?

Claro que Roger era humano y hombre, porque fue suficiente ver la semidesnudez de Adela ante sus ojos a poco mas de un metro que sintió lo que cualquiera hubiera sentido.

Adela aceptó y no puso alguna resistencia cuando con la falda levantada en contados segundos le baje el calzoncito que llevaba y enseguida le baje también la falda dejándola sin nada de la cintura para abajo, enseguida le metí mano a su concha mientras mi pinga se fregaba por la abertura de sus nalgas, mira de reojo a Roger quien asombrado solo atinaba a mirar mientras su pinga ya dura apuntaba hacia arriba habiendo alcanzado un tamaño muy superior al mio.

Me retiré a un lado y mostrándole mi pinga le dije � verdad que es grande la diferencia, sonrojada aun nada respondió si me la cogió con su mano y me la apretó demostrando su temprana excitación la volví hacia mi quedando de espaldas a Roger, quería que le mirara el rico culo que Adela tenia, la abrace fuerte y con las manos hacia atrás le estruje y abri las nalgas como mostrándole mas a Roger y tratando de excitarlo mas aun.

Alli donde estaba me senté sobre la manta � arrodíllate y chúpame la pinga le dije a Adela � ella obedeció � enseguida que dando en cuatro patas siempre de espaldas a Roger, metió mi pinga en su boca y empezó a mamármelo su trasero quedo con el culito y su concha a visible disposición de Roger que casi con la boca abierta había cogido con su mano su pinga y casi automáticamente se la frotaba de vez en cuando muy lentamente, me puse de rodillas y sin quitar mi pinga de la boca de Adela lleve mis manos a su trasero y las volví a abrir metiendo mis dedos a su concha y abriéndolos mostrándole de seguro en parte el interior de sus labios vaginales que ya a esa alturas estaba completamente húmeda, chupa así mmmmmm mientras Roger te mira la concha � así mmmmm

Adela ya excitada no dejaba de chupar y morderme la pinga mmmmmm � te gusta? Te gusta? Me decía � claro que me gusta � respondí.

En eso, para mi asombro Roger inclinándose un poco alargo su mano alcanzando la concha de Adela, ella no lo noto, vez como te toca la concha � le dije � Adela ni se inmuto y creo que mas excitada sigue chupando � Roger inexperto solo pasaba su dedos por la concha de Adela.

Párate � le dije � entre palabras y gestos � me entendió y se puso de pie y para mi completo asombro inocentemente doblando sus piernas se inclino y acerco su pinga hacia el trasero de Adela que sobrecogiéndose por la impresión se quedo quieta por un segundo.

Roger en sus limitaciones no sabia y no sabia lo que tenia o quería hacer,. No te asustes, tranquila le dije mientras Roger pegado al trasero de Adela con su pinga sin buena dirección se perdió por debajo de su concha. Había que ayudarlo y era el momento de hacerlo.

Lo retire un poco con mis manos, tranquila Adela � dije � yo me encargo de todo. Quería que ya le metiera la pinga asi en esa posición pero Adela reacciono temerosa talvez diciendo � aun no, aun no, diciendo esto se puso de pie, yo hice lo mismo, quedamos parados los tres. mira, compara le dije Adela, mientras me colocaba junto a Roger, ella frente a los dos miro lo que tenia que mirar y claramente constato la gran diferencia, no dijo nada, tomándola por el brazo la jale hacia nosotros, ya teniéndola junto a nosotros toma sus dos manos, una la puse sobre mi pinga y otra sobre la de Roger, agarra sin temor le dije para darle confianza y termino con una pinga en cada mano, en la mía su mano se mostraba suficiente pero en la pinga de Roger parecía tan pequeñita. Que diferencia verdad? Las empezó a frotar suavemente mas mirándome a mi que a Roger, este casi boquiabierto se dejaba hacer sin poner ninguna resistencia, Adela parecía entrar en confianza conforme pasaba los minutos, se puso de rodilla sin que yo se lo pidiera y metió una vez mas su pinga en mi boca, sin soltar la pinga de Roger, la toma por la cabeza y me deleite sintiendo su boca chupando mi pinga, que en su escasa dimensión parecía reventar mientras como la mano de Adela frotaba con mas fuerza la pinga de Roger que parecía gemir mientras entreabría mas la boca, claro que estaba excitado y de seguro estaba disfrutando muy a su modo esta experiencia, mámaselo a Roger le dije, con la boca ocupada respondió negativamente con la cabeza, seria difícil convencerla de hacer algo asi por lo que no insistí mas

No le di tiempo para seguir mamándome, ansiaba demasiado ver lo que quería ver asi es que quite mi pinga de su boca. Diciéndola � te la voy a meter de una vez , ya no aguanto, sin darle tiempo a que se levantara me puse detrás y presionando sobre su espalda le dije que se pusiera en cuatro patas, en segundo ya estaba como quería, sin necesidad de arrodillarme flexionando las rodillas puse mi pinga en la entrada de su concha y de un solo empujón termino enterrado en la profundidad húmeda de su sexo sediento y mas caliente que nunca, se movió como acostumbraba mientras iniciaba su gemido calmado y callado, mmmmmmm assssiiiiiiií, asiiiiiiiiiii, meteme tu pinga, métemelo. � no cabía duda estaba por demás excitada y por otras experiencias vividas nada parecidas a este entendí que no se resistiría a nada que le pidiera o casi nada.

Talvez un minuto le metí y saque la pinga que rezumaba sus líquidos vaginales,- te la voy a mater ahora por el culo le dije y sin esperar sacándoselo de la concha apenas le unte un poco de saliva en el pequeñito orificio del culo y excitado como estaba se lo metí de una sola vez aunque no con tanta fuerza , aaahhhhhmmmmmm, métemelo todo, métemelo dijo aun sabiendo que ya todo estaba dentro, removí mi pinga dentro de su culo como quien trata de agrandarlo, metí y saque con regular velocidad, Roger mas curioso que excitado talvez se junto a nosotros y como quien no quiere la cosa su mano termino sobre la nalga de Adela que nada sentía pues gozaba de mi pinga en su culo, tome la mano de Roger y sujetándolo le hice que la acariciara las nalgas, digamos que aprendió apenas pues continuo por el mismo sin mucha convicción, su pinga por lo larga que era no apuntaba arriba sino casi enfrente, era tremenda la tranca que se bamboleaba por el mínimo movimiento de su cuerpo al acariciar a Adela.

Quieres comerte ya la pinga de Roger, quieres? Dije lujurioso � solo los gemidos respondían,, el movimiento imparable de su culo trajeándose mi pinga parecía pedir mas y mas. Quieres la pinga de Roger en tu culo, quieres ya? �. Casi susurrando y casi sin querer decirlo dijo � ssiiiii, quieres su pinga verdad? Si, siii, – ahora si ya estaba lista y ya no espere mas.

Entretenido entre culear a Adela y mirar a Roger estaba lejos de finalizar mi primer polvo,

Con Roger casi rozando mi costado había que prepararlo asi es que lleve mis manos hacia la concha me regalo las mieles que servirían como lubricantes y si que había mucho pues esa concha era un lago de placer a esas alturas, con esa mano empapada cogí la pinga de Roger por segunda vez, ahora era diferente, estaba mas tiesa, mas grande y gorda que cuando se la lave, unte su prepucio, y casi me deleite acariciando aquella pinga que tendría el placer de comerse el culo de mi mujer, agradecido lo unte varias veces hasta que creí ya estaba lista para el combate,

Llego la hora Adela ya esta preparada la pinga Roger y tu culo también- retire mi pinga de su culo y una vez fuera le abrí mas las nalgas y metí dos dedos bañados en mi saliva que unte aun mas su culo, jale a Roger justo donde yo había estado, Roger parecía aun mas asustado, parecía entender que se acercaba talvez su primera vez, casi parecía terrado pero sin ningún intento por huir o resistirse, obviamente sabia muy poco o casi nada de lo que le correspondía hacer, y creo que para mi satisfacción tenia que ser yo quien dirigiera el acople final, cogí otra vez la pinga de Roger con cierto temblor dentro de mi y se la puse en la entrada dilatada del culo de Adela, Roger tal vez tratando de imitar lo que yo había hecho talvez mas por impulso de sentir ese caliente culito empujo enterrando de una vez un poquito mas que su glande d entro del culo de Adela, aaaaammm dijo mientras tiro su culo soltándose de la pinga de Roger , tranquila Adela, ten paciencia apenas comienza, tranquila � reitere � mas saliva en mi nano y unte mas la pinga de Roger, era otra cosa lo que por primera vez iba a comerse por el culo, había que entender que no le seria tan fácil de asimilar, aun asi no Adela no hizo el intento de echarse para atrás, casi podía jurar que nada ni nadie la detendría, quería la pinga de Roger si o si, ahora con mas detenimiento lo pegue junto a Adela sin soltar su pinga que en mi mano termino otra vez en la entrada del rico culo, yo controlaría ahora, lo cogí desde su base y desde alli empuje como quien mete de a poco un consolador, uuummmmmm aaaammmm, dijo cuando sintió otra vez pero esta mas suave el glande enterrado en su culo, Adela estab quieta, soporto la presión de esa cabezota ajustado por las paredes de su culito, se lo saque mientras me deleitaba manejando yo la situación, un escupitajo nuevo que termino por untar mas la cabeza de la pinga de Roger, nuevamente se lo empuje hacia adentro, ammmmmmmm�mmmm, te gusta verdad? Mmmmmm respondió mmmmmmm, se meneo un poco agradecida por tener el placer de tener un pedazo de esa pingota empezando r a rellenar su culo, a centímetros de mi vista podía admirar la unión entre mi esposa y Roger, que apretado se veía esa pinga dentro de ese culo, no podía resistir mas y se lo empuje casi todo hasta el fondo, Adela casi grito apenas conteniendo su alarido aaaggmmmm, ya no, ya no, alcanzo a decir, se quedo quieta como quien asimilaba en su interior esa bestia de pinga, que maravillosa era el panorama ante mi, mmmmmmmmm, seguía gimiendo mientras Roger casi insensible mas me miraba a mi que aun con mi mano en su pinga manejaba el enlace, lentamente quité la pinga de su culo, cuando salio se vio casi en su total dimensión, la penetración le habia dado mayor dureza, mi mano no lograba cerrarse sobre esa pinga, el culo de Adela se cerró dejando ver la dilatación que le daba una forma rara a la entrada de ese culito, sin poder contenerme ensalive mi pinga tiesa y se la metí sin miramiento y con gran facilidad se perdió dentro, Adela gimió sintiendo invadida el culo, volvió la cabeza hacia atrás cerciorándose que era yo el que la había penetrado, se siente la diferencia verdad? Dije � ella solo atino a moverse mientras yo le di unas cuantas arremetidas. Quite mi pinga � ahora si � tu culo esta que se muere por esta pingota, mira Adela, mira le dije mientras le daba algunas palmadas en la nalga logrando que volviera la vista hacia donde estábamos los dos, mira que pinga te estas comiendo, si que lo miró y claro que le gusto, lo pude ver claro en sus ojos lujuriosos, te lo voy a mater todo hasta el fondo

Lo quieres todo verdad? Lo quieres

Siiii, pero despacio, mételo despacio

No espere mas, la pinga fue a parar otra vez en la entrada del culo de Adela que ensalive lo mas que pude, lo mismo había hecho con la pinga de Roger,

Empuja le dije, quería que el lo hiciera por cuenta propia, y entendiendo mi pedido dio un empujón y enterró casi lam mitad de su pinga,

Aaaggmmmmmmm, mmmmmmm, mmmmmm gemía placenteramente agradecida

Empuja, empuja � repetí y claro que me obedeció, porque torpemente empujo, una, dos, tres veces sin hacer el intento de querer enterrarle toda esa pinga, aammm, aammmm

Gemía ante las bruscas arremetidas. Ves como te culea solito, te gusta verdad? Te gusta?

Ssiiii, si me gusta respondía Adela ante mis insistentes preguntas.

En eso queriendo darle una ayuda y alcanzar una total penetración empuje todo el cuerpo de Roger sobre Adela logrando por fin que casi casi Ens. Totalidad se perdiera dentro de Adela

Aaagggggggggmmm, ya no, ya no volvió a decir otra vez al tiempo que se quedaba quieta mientras que Roger aun sin entender la real situación empujaba sin convicción.

Aaammmm, aammmmm, ya noo, ya nooo . gemía Adela � sin hacer el menor intento por desprenderse de semejante pinga, claro que no lo quería hacer. Claro que aunque le dolia mas le gustaba y daba placer.

Eso es todo, ya lo tienes todo adentro � dije con voz excitada � tranquilízate y acostúmbrate, date el gusto de comer tremenda pinga y sácale toda la leche, has que te llene el culo, muévete Roger � dije mucho mas excitado, empuja, le decía agradecido por semejante espectáculo y placer, claro que yo también gozaba esto era lo que tanto había soñado y no podía menos que estar feliz y agradecido, asi es que empecé a ayudarle con sus empujones.

Aaammm, ammmmm, gemía Adela conteniéndose para no gritar todo lo que podía, mientras loca de placer movía su trasero degustando la inmensidad de una buena pinga dentro de su culo.

Aaaaa, aaaaaaammmmm, aaaaaaaaaaa casi se hizo eterno su gemido pues se esta viniendo por fin, mientras no cesaba su movimiento coital, Roger era el que ahora empujaba por cuenta propia mirándome de reojo como esperando mi aprobación a lo que estaba haciendo, sigue, sigue, rómpele el culo, destrózale el culo, decía casi loco por el gran placer que sentía de ver tal espectáculo, lleve mi mano a la concha de Adela, y sentí o palpe lo que esperaba, un charco de placer que chorreaba por sus piernas, estaba terminando de derretirse y mas se estremeció al sentir mi mano hurgando su sensible intimidad, no lo pensé dos veces y tomando la pinga de Roger con el dominio que yo ejercía sobre todo quite del culo la pinga de Roger y se lo empuje dentro de la concha de Adela que con un aaaaaaaammmmmmm, sintió y gozo en su clímax la penetración de una pinga de tal dimensión, aaaaaaaa, aaaaaa, no paraba de gemir ya que un nuevo placer le invadía justo cuando terminaba su venida,.

Empuja, empuja le dije a Roger, obediente hundió una y otra vez su pinga en la profundidad que completamente mojada se encargo de cobijar todo ese paquete de carne que alcanzo de seguro la profundidad que yo nunca había logrado ni lograría jamás.

Aaaaa, aaaaaaa, gemía y gozaba Adela, ya no, ya no, ya no puedo, me va a matar, suplicaba Adela mientras meneaba igual su trasero asi como su cabeza, estaba loca de gusto, era un ya no que parecía decir mas y mas, y claro que Roger seguía empujando indeciso en para o seguir, nunca sabría si entendía o no el pedido de Adela.

No se si era un gemido pero era algo parecido al que Roger empezó a manifestar mientras abría y entreabría la boca sin para de empujar una y otra vez, lo entendí y por precaución quite esta vez su pinga de la concha de Adela y se la dirigí otra vez al culo de Adela quien grito otra vez al sentir como de un empujón se perdió dentro de su dilatada profundidad, parecía que Roger estaba por terminar, pues casi gimió de dolor cuando se lo quite de la concha de Adela, retomo la excitación y siguió a su modo empujando, culeando a su modo peculiar a Adela, mientras esta conteniendo sus gritos se limitaba a gemir de placer y dolor, ya no aguanto mas, me va a matar repetía.

Un poco mas � dije � un poco mas para que sientas como te llena el culo de su leche, un poco mas, Adela me entendió y para acelerar su final talvez con ansias de sentir toda su leche dentro de su culo soportando tremenda pinga en su culo priorizando el placer al dolor, había que darle una ayuda pues la arremetida de Roger era algo brusca y no tan rapida asi es que tomándolo por la cintura maneje la velocidad de su mete y saca,

Aaaaamm, aaammm, aaaa . ahora con mayor claridad gemía Roger,

Adela ya casi no podía contener su nuevo placer había iniciado el camino hacia el segundo placer, hacia su segundo rico polvo, se había olvidado del dolor, su placer era inmensamente superior pues su YA NO YA NO, se convirtió en así, así, cáchame, cachame, rompeme así, ammmmmm, aaaaaa, aaaaaammggg, mas , mas maaassss, aagggggggggggg. Fue un alarido mas que un gemido que casi se confundió con el gemido de Roger que abriendo la boca y desorbitando los ojos había empezado a descargar su leche dentro del culo de Adela,

Aaaaaaaaaa, aaaaaaaaaaaaa, gritaba Adela sintiendo cada uno de los chisguetazos de leche hirviendo que salidos de su pinga quemaban las paredes de toda la profundidad de su culo, Adela sin poder contener su estabilidad doblo sus brazos y casi hundió su cara sobre la manta en el césped, fue maravilloso verla asi con le culo hacia arriba elevándolo mas dándole de seguro mayor penetración a la pinga de Roger, este me miraba mientras su pinga seguía dentro del culo de Adela, ya no empuje mas, solo presione su cuerpo sobre el trasero de Adela, quería que ni una gota de su leche se perdiera, que disfrutara talvez los últimos instantes de esa unión maravillosa, era impresionante ver la pelvis de Roger pegada al trasero de Adela, no había un milímetro del su pinga fuera de su cavidad anal.

Mmmmmmmmmmm, sssiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, mmmmmmmmmmmmmmmmm

No paraba de gemir por el placer que aun experimentaba, de seguro era el mejor polvo de toda su vida, unos segundos pasaron y al ver que Roger mas tranquilo habiendo ya descargado toda su leche me miraba como diciéndome que sigue o que hago, al mismo tiempo escuche la voz de Adela que dijo; ya quítamelo

No espere y jale a Roger muy despacio y pude ver como lentamente su pinga apareció por completo enlodado de leche, ahora parecía mas descomunal, mas grueso y mas largo y con su dureza que aun no perdía, colgó casi en posición recta

Adela se tumbo sobre el suelo, gimiendo de dolor que ahora seguro sentía pues el orificio de su culo había sido exigido al máximo y de seguro las paredes de su culo habían sido desgarrados en parte. Se movió sobre la manta siempre de bruces , me incline hacia ella y la voltee, mira la pinga que te has comido, no se hizo de rogar y con soltura miró y admiró la pinga de Roger en todo su esplendor, di que te ha gustado, dilo,

Si me ha gustado, di que quieres mas, di que quieres mas, si quiero pero ya es tarde

La oí y sabia que era sincera al decir que le había gustado y quería mas y también era cierto que ya era hora de irse.

Jale a Roger quien impulsado quedo de rodillas junto a nosotros, su pinga quedo mas cerca de sus ojos y a mi orden cogió con su mano esa pinga que tanto placer le había dado, sabia que ya había que irse y sabiendo que talvez jamás podríamos repetir una cosa de estas, quise perennizar un poco mas este encuentro, cogí la pierna de Adela y jalándolo hacia la deje en medio de Roger que arrodillado se mostraba a nuestra voluntad, que haces, dijo Adela un poco sorprendida, no te preocupes, solo un instante para que nunca te olvides de este dia, la levante por la cintura y acerque su concha hacia la pinga de Roger que sami erecta apuntaba hacia abajo, Adela entendiendo mi propósito y aceptando mi pedido hizo el esfuerzo y se elevo hasta la distancia precisa, yo tome la pinga de Roger y se la coloque en la entrada de su concha y de un pequeño empujón se perdió en el fondo de su mojada concha, muévete . dije y ella obedeció, yo hice el resto y ayude a Roger a dar sus embestidas finales, fue un par de minutos y sin poder soportar mas la posición Adela se desacoplo y se tendió otra vez sobre la manta mientras su vista no perdía la pinga de Roger, di que es lo mas rico del mundo, si es lo mas rico dijo enseguida, di que vamos a repetirlo otro dia, si lo vamos a repetir.

Me tire sobre ella y la abrace con toda la fuerza que podía, no sabia que feliz y realizado me estaba sintiendo por la realización de mi mas grande fantasía, no sabia como agradecerle tal espectáculo y tanto placer pues su placer casi fue el mío, de solo imaginar que quizás esa misma noche la cacharía recordando todo lo que habíamos vivido me hacia feliz y mas aun saber que lo repetiríamos cada vez que pudiéramos.

Roger se había puesto de pie y se colocaba el pantalón, de seguro sabia que ya había que irse, rápidamente nos levantamos y vistiéndonos nos dispusimos a retirarnos, tome a Roger por la mano y diciéndole a Adela que me esperara lo lleve por medio del cañaveral hasta un lugar opuesto al lugar por donde nosotros tendríamos que salir, a los pocos minutos después de despachar prácticamente a Roger, regrese con mucha precaución hasta donde Adela me esperaba y abrazándola salimos cautos por otro lugar y felices los dos de modo distinto regresamos juntos a casa seguros de que este encuentro estaba destinado a repetirse en cualquier momento.