Solo bastaron un par de citas para que la pasión sexual se desatara entre los dos, aún recuerdo ese día como si fuera ayer.

Estábamos ahí en mi auto, besándonos poco a poco con más intensidad, nuestras manos acariciaban los rincones más secretos de nuestros cuerpos, pase de besar su boca a sus lindos pechos, mientras su respiración iba cada vez en aumento, en tanto mis manos recorrían sus piernas suavemente, ella vestía una falda muy ligera, así que mis manos no encontraron ninguna dificultad para llegar a su parte íntima, y darme cuenta que ya estaba súper mojada, mientras mi boca se perdía en sus pechos mi mano acariciaba suavemente su vagina inundada con sus líquidos, poco a poco con besos y roces con mi lengua fui bajando hasta llegara su manantial.

Donde mi humedad bocal se mezclaba con sus jugos vaginales, mi lengua acariciaba sus hermosos labios vaginales, de pronto mi lengua se topó con su muy pronunciado clitoris, mi lengua comenzó a jugar con el, pasaba de lamerlo a besarlo con leves succiones, que de momentos intercambiaba con unos pequeños y delicados mordiscos, no tardó mucho tiempo para que su cuerpo se estremeciera, comenzó a temblar mientras soltaba un quejido de puro placer, sus piernas se contraían presionando mi cabeza aún adherida a su manantial de placer.

Mi boca continuaba pegada a su manantial, bajé la intensidad de las caricias mientras ella se recuperaba, de pronto su mano se apoyó en mi cabeza, haciendo presión al mismo tiempo que trataba de guiarla de arriba a bajo, dándome a entender que estaba lista para continuar, mis caricias fueron en aumento, sus gemidos aumentaban, sin apartar mi boca de sus ricos labios, introduje uno de mis dedos en su empapada vagina la cual no ofreció resistencia alguna, mientras mi boca y lengua no dejaban de lamer, besar, succionar y mordisquear, mi dedo se perdía explorando su cavidad, no pasó mucho tiempo para que su cuerpo volviera a contraerse esta vez más violentamente, de pronto un chorro de líquido dorado empapó por completo mi cara,( HONESTAMENTE NINGUNO DE LOS DOS SABÍAMOS QUE HABÍA PASADO)