Lo conocia en un centro comercial cuando mi esposo platicaba con él y por mas que mi esposo evitaba a presentarlo… por educacion, mi esposo terminaba presentadome a su famoso amigo. Mi esposo estaba un poco nervioso de saber que me estaba presentando al hombre que lo impresionaba cuando le contaba sus histroias intimas de sus aventuras. El tipo muy formal, no muy parecido, pero tenia presencia que cualquiera que platicara con él hacía que uno se detuviera a seguir platicando mucho con él. En su apreton de mano sentia su vibra positiva que me corria por todo mi cuerpo y solo dije entre si misma «Oh! es él del que tanto me habla mi marido» Le observe de cabeza a pie y sin poder evitarlo miraba de corrido tres veces el tamaño de su cremallera de su pantalon. La conversacion terminaba entre ellos dos y no sé que paso, pero se me salia de mi boca en decir que lo invitaba a la casa «Por favor y sin pena, dese una vuelta por la casa» fueron mis palabras hacia él.

             «Un dia menos pensado caigo por ahi» respondia el amigo de mi esposo. Cuando dijo «Caigo por ahi» solo me imagine que me cayeria en medio de mis dos piernas, pero eso solo esta ocurriendo solo por mi mente y nada mas. Nos despedimos y cada quien por su lado. Veinte minutos de silencio paso cuando mi esposo por primera vez me confesaba algo y es que mi esposo me decia que la ultima vez me habia preñado habia sido basado en una de las historias de su amigo y recorde que mi marido queria nombrar el mismo nombre que el de su amigo que recien habia conocido «Alexander» Fue tan rapido el encuentro de mi esposo con su amigo que no pude retener su nombre. Una vez que habia conocido al amigo de mi esposo mi mente comenzo a trabjar mucho en mi y cuando mi esposo me cogia él lo noto y me pregunto que me pasaba. No le conteste lo que habia comenzado a suceder en mi… de que habia comenzado a pensar que lo estaba haciendo con su amigo y que mi mente solo miraba a su amigo encima de mi. Mi esposo no sospechaba de mi comportamiento intimo hacia él, pero me dijo algo nuevo que nunca habia escuchado de él «Estas cogiendo como nunca y me gustas mas que antes, continua moviendote asi» La verdad que ni yo misma sabia si me movia bien o mal, pero si me exitaba ver en mi mente estarhaciendolo con su amigo mientras mi marido me lo hacía.

            LLego el momento de mi confesion hacia mi esposo y me decia que a él no le importaba siempre y cuando él fuese el buen beneficiado de todo lo que estaba ocurriendo por mi mente, pero cuando le decia que no era de solo mente y le decia que lo queria hacer de verdad con su amigo, ése fue otro chiste y me decia «Con tal que yo no sepa…queda a opcion tuya» Me tenia hasta los huevos y tome su cara para verla a sus ojos y le preguntaba si sabia de lo que acababa de decir y me decia que sabia lo que habia dicho y le conteste que iba estar segura de que él nunca lo supiera «Me voy a asesorar a que eso no ocurra, pero me das permiso a descubrir si es verdad lo que me has dicho de tu amigo» Él me decia que no me daba permiso para nada, pero sí en mi estaba en descubrir lo que yo queria descubrir en su amigo seria opcion mia. Le decia que solo estaba bromeando con él, pero si le decia que me ponia caliente con las aventuras contadas de su amigo. Ese ambiente solo sucedia en la intimidad de nuestro dormitorio y me ponia super caliente cuando mi espos me comenzaba a contar cosas de su amigo que una noche le preguntaba «Verdad que tu quieres que tu amigo lo haga conmigo» Me respondian «Es que me gustaria ver que harias tu al hacerlo con éL» No dije nada al respecto.

           No tuve prisa en hacer lo que habia pensado hacer y si iba a suceder todo tenia que ser de manera natural. Trado un año y en aquella misma sucursal de tiendas donde me habian presentado a Alexander, ahi mismo me lo encontraba cuando yo caminaba sola y ahi mismo le hablaba de mi esposo de que yo era muy activa y que queria llegar a casa para hacerlo con él. Alexander me miro de cabeza a pie y me decia de la suerte de mi marido. Lo tome de su mano y lo aorillaba a una pared de una tienda y le decia que él tenia una cara de un hombre muy interesante y que tambien sabia mucho de él. Yo miraba para todos lados y ahi fue donde le decia «Por una de tus historias me preñaron» Alexander estaba con mucho colores en su cara y le preguntaba si era verdad todo lo que mi esposo me contaba de él y me pregunto «Quieres saberlo?» le respondia asi «Por supuesto que si» me dio una direccion y me decia que nos vieramos ahi en una hora. Mas tarde Alexander me hacía pujar y me convencia de que todo lo que mi marido me decia era verdad y esa vez pr primera vez me daban unas embestidas que sentia que me reventaban la panocha. Sus manos estaban agarradas por encima de mis dos hombros sintiendo unos pistonazos lentos, pero buenos. Nunca me imagine verme desnuda con mis piernas abierta dandole servicio al amigo de mi marido…puedo decir que fue un polvo perfecto gracias a mi marido que conto como era su amigo en sus aventuras amorosas y todavia la amistad perdura sin problema alguno.