Alfonso estaba en shock de lo que me decia de mi vecina cuando él, de regreso a casa, escucho algo en el sotano del edificio que le llamo la atencion «No importa que hubiera sido otro, pero con ése vago mal parido me deja en claro que la vecina del lado si estaba con necesidad de coger» Alfonso estaba muy dramatico al haber encontrado a Rita cogiendo con un vago del barrio. Le pregunte a mi marido si ellos lo habian visto «No!, no me vieron porque yo estaba escondido» me respondia Alfonso. «Desnudos los dos?» pregunte y me contestaba que no… que la vecina estaba con su ropa subida hasta la cintura y su calzon en una tapa de los contenedores de la basura. Le aconseje a mi esposo que se olvidara de eso y que evitara problemas porque ese vago era el hermano del encargado del edificio. La historia de Alfonso me habia dejado pensativa y con preocupacion porque a veces me tocaba ir a botar la basura al sotano. Estabamos en la cama y Alfonso con las misma jodienda pensando en lo que hacía la vecina del lado y de la nada yo le dije dije «A lo mejor le gusto el huevo del vago» no sé en que momento se me ocurrio decir tal cosa y Alfonso respondia «Oh! pueda que sea eso porque cuando ellos terminaron de coger tuve la oportunidad de ver el huevo del vago y te cuento que ese vago tiene un buen huevo que a lo mejor eso es la que la entretiene a la vecina» Me quede en silencio y me preguntaba que clase de huevo podria cargar ese vago loco.

              Salia de mi apartamento para hacer compras y me vecina llegaba y al vernos de inmediato nos saludamos sin malicia alguna, pero Rita, mi vecina tenia una sonrisa de mucha felicidad en sus labios o quizas yo me estaba adelantando a los hechos de juzgarla como una mala mujer. Baje las gradas de mi tercer piso y a dos cuadras mire al vago de lo mas tranquilo como si nada pasara. Al pasar cerca de él me llama por mi nombre para saludarme sin ninguna malicia y mi vista iba directo a la cremallera de su pantalon encontrando con mi mirada un bulto que me dejaba en que pensar. El hermano del vago llega y le dice al vago que es su hermano que tiene que limpiar el edificio y luego se va. El vago me mira y hace un gesto como querer decir que no hay alternativa alguna que el de ir a limpiar. Me mantuve seria todo el tiempo con él, pero note que ese vago tenia algo que hacía caer bien. Fui a la tienda y me imaginaba al vago limpiando el edificio cuando se me ocurrio en comprar algo de comer para él.

              Busque al vago para darle lo que habia comprado para él, pero no lo encontre en el edificio y pense que podria estar en el sotano y de pensarlo senti un recelo ir a buscarlo ahi. Senti que la adrenalina se disparaba en mi y se convertia un reto que me anime ir a buscarlo al sotano. Baje las escaleras del sotano y escuche algo que me recordo de inmediato a Alfonso y ese ruido invitaba mas para ir averiguar lo que pasaba cuando comence a ver os contenedores de basura y escuche una voz femenina que decia en susurro «Que nuna se te vaya a ocurrir a decir de esto» en una tapa de los contenedores habia un calzon bikini color rojo y en el otro contenedor la mujer del encargado del edificio estaba sentada en la tapa del mismo y el vago en medio de las piernas de la mujer del encargado del edificio. Ella se lo cogia por lo visto con todas sus ganas hasta hacerce correr y soltaba al vago que dejaba al descubierto esa tremenda berga de vago. Sali de prisa antes de ser descubierta y me llevaba conmigo la comida que habia comprado para el vago.

               Nunca pensé en contarle nada a Alfonso y sentí un regocijo en ver coger al vago  como tambien burlarme del engrido encargado del edificio de saber que su hermano se cogia a su propia mujer. Cada vez que yo llego al vestibulo del edificio miro a la puerta que lo lleva al sotano y siento que me mojo, cosa que nunca antes habia sucedido, pero ahora si porque sé lo que pasa ahi con algunas damas de edificio. Un dia caminaba por la calle del vecindario cuando note que algunos hombres que me miraban se iban directo con sus miradas a mis partes intimas y muy tarde me daba de cuenta que vestia el short que dibuja el tamaño mi panocha cuando me encontre al vago y este sin perder tiempo clavo su mirada ahi en mi panocha y me saludaba de manera en que no perdia las esperanzas de tenerme algun dia. Al pasar por el lado de él escuche que me dijo que queria sino todo por lo menos un pedazo de mi pastel (Panocha) El vago me mandaba al baño bien caliente y terminaba bien masturbada pensando en la berga del bago. Llevaba la basura para el sotano cuando encontre la esposa del encaragado del edificio y se me ofrecia «Lucy, voy para el sotano deja que te lleve la basura» senti que la mujer casi me habia arrebatado la basura de mis manos y note que iba lista con un short para el sotano.

             Me espere hasta ver a que hora ella regresaba del sotano y tres cuartos de horas despues escuche que ella salia del sotano y pretendi que buscaba algo del correo y me preguntaba «Lucy, todavia aqui?» Se notaba que venia bien cogida a la vista y mire que por sus piernas correba un liquido biscoso y le conteste «No, apenas llego aca porque el correo acaba de llegar» Ella parecia estar de prisa y me decia «Te veo despues, necesito de un baño» y subia las gradas a las ligeras. El vago parecia despues y nos encontramos en el vestibulo y me decia «Tu eres inteligente y sabes lo que pasa aqui. Mi hermano me robo un dinero y preferi no volver a trabajar hasta que me pague en total todo el dinero que me debe por ahora me desquito con mi cuñada». El vago se marchaba dejandome atras toda pensativa. Semanas despues Alfonso llego tomado y me decia que habia golpeado al vago y me senti muy incomoda al haber ecuchado lo que Alfonso le habia hecho al vago. Alfonso me decia que nadie sabia de la golpeada que le habia propinado él al vago «Lo sé yo Alfonso y eso basta» le conteste yo. El encargado del edificio y esposa iban de vacaciones por dos semanas y el vago quedaba encargado del edificio que comenzaba a recuperarse de la golpiza.

             Llegue a tocar la puerta del encargado del edificio sin que nadie lo supiera y el vago aparecia y le preguntaba a él si podia entrar y me dejo entrar diciendome que ese apartamento no era de él y que podia entrar. El vago me decia que estaba a punto de irse a bañar, pero que podia esperar por él hasta que terminara con su baño. Acepte y esperaba en la sala y escuchaba la ducha de la bañera que me tentaba abrir la puerta y meterme a bañarme con él y cuando salia del baño conoci el otro lado del vago del barrio y me decia «Yo pense que habias ido aponerte aquel shot con el que te vi la otra vez. Me fui a mi apartamento y me ponia el short dejand dibjada mi panocha en mi atuendo. LLegue de regreso a cuarto y el vago se ponia de rodillas para darme mordizcos en la panocha hasta elevar un par de grados de calor en mi cuerpo. Me llevo a la cama y me decia «Vamos a ver si es verdad que esta cosita es real o es algo que llevas puesto para que se vea asi de grande. Me bajo el short y aparecio ese pastel hecho de pura carne que dejo atolondrado al vago «Es real» dijo e vago y me la mamaban hum! delicioso. Pensando en Alfonso decia «Esto es por lo que le hicistes al vago y este dia se la va coger el vago del barrio» Me abrian las piernas y me dejaban ir todo esa berga dentro de mi panocha que hasta hizo sacudir a todo mi cuerpo de la fuerte embestida penetracion. Mis talones de mis dos pies me los lleve hasta la espalda del vago que despues supe como se llamaba…Mario. He vuelto pecar con esta historia de fantasias eroticas aceptando que el pecado tambien tiene su sabor. Espero que sea de sus agrados lo que van a leer…hasta la vista baby!