Pues en una de esas rotaciones llegó una cajerita con la que en un inicio solo fue trato cordial, algunas veces hablábamos pero solo se limitaba a cosas de trabajo y de su universidad varias veces la llegué a ver con uniforme de enfermera.

A mí la verdad no sé me hacía atractiva porque además nunca quería lucir su cuerpo o cuando lo hacía era cuando llevaba blusas escotadas y yo solo me limitaba a ver discretamente

Con el tiempo nos hicimos más y más cercanos, ya hablábamos de cosas y en una de esas me mostraba chats de Instagram que le mandaban y había weyes muy intensos, ahí fue cuando pude ver mejor su cuerpo, nada del otro mundo la verdad, culo pequeño pero bien formadito, su abdomen era su fuerte porque tenía un piercing en el ombligo muy bonito de mariposa, las tetas eran también otro de sus fuertes, no muchas pero si firmes y bonitas, de cara no era tan agraciada pero los piercings que tenía le daban un toque sensual, tenía en la lengua, nariz y en la ceja

Cómo dije nunca la vi con morbo, en las pláticas que tenía con ella siempre la hacía reír mucho y ya saben el dicho que dice dónde entra la risa, entra la riata, pues bien en una de esas pláticas salió el tema de sus perforaciones me mostró la lengua y ella dijo: Ella: Está perforación es la que hace magia Yo tarde un rato en entender porque si bien habíamos platicado de nuestra vida sexual y como nos gustaba hacerlo, ella lo dijo como en un tono más coqueto, y aquí yo solo le seguí la corriente, pensando, chicle y pega Yo: Apoco si? Pues que hace o que? Ella: Pues tendrías que averiguarlo… (Mientras me veía la entrepierna) Yo: Síguele he! Yo si te voy a empinar después y no vas a aguantar Ella: Hazlo Yo: El jueves saliendo te llevo a tu casa, tráete algo bonito y un tupper Ella: (se ríe) me vas a dar para llevar? Yo: y para comer ahí también Ella: bueno ehh (más risas)

En la semana en lo que llegaba el jueves estuvimos «haciendo hambre» Cuando no había nadie en caja aprovechaba para darle masajes en el cuello y espalda, le desabrochaba la blusa y le daba besitos por todo el cuello y lamidas en la espalda, esto la volvía loca, apenas besaba una parte de su espalda alta y se mojaba y varias veces terminando los besos se iba al baño a limpiar (me lo confesó después)

También en esos días como ella no usaba bra pues discretamente metía la mano y manoseaba sus tetas pequeñas, duritas y suaves, tenía piercings en ambos pezones y se me ocurrió torcer uno de esos piercings para ver si aguantaba y para mí sorpresa soltó un gemido medio fuerte cosa que casi instintivamente le tape la boca con mi mano libre y eso como que la prendió más porque bajo su mano y me tocó la verga por encima del pantalón que ya estaba medio parada pero cuando empezó a sobarmela está empezó a crecer y crecer (team sangre) En una de esas apretó demasiado mi verga que me hizo ahogar un gemido y como venganza que le aprieto la teta y solo así me soltó y después me dijo: ya por favor Ya? Yaaa, necesito tu verga yaa Cuando escuche esas palabras se me elevó el ego bien cabron y le dije al oído: Quiero que me des tu culito… A lo que ella solo asintió con un leve gemido y moviendo la cabeza diciendo si…