El jueves comenzamos el día por separado cada uno en la ducha, correspondiente desayuno completamente desnudos todos entre besos toqueteos lamidas y mamadas.

Después del desayuno me acicalo y me pongo un vestido muy cortito medias el calzado que traía y otra de las pelucas me pinto un poco bien perfumada. 

Doy por hecho que hoy no ejerzo de chacha. 

A las diez en punto toca la bocina y me manda abrir la puerta, en la entrada hay dos hombres uno sobre los cuarenta y el otro cincuenta largos o sesenta. 

Ambos bien parecidos sin decir una sola palabra entran a la vivienda por mi cabeza pasan un millón de cosas morbosas calientes y a su vez me veo ensartada por todos los sitios. 

A los dos hombres les ordenan que se desnuden ambos llevan pantalón corto y una camiseta, los dos morenos de piel algo de Bello y sus zonas genitales depiladas, el más joven sobre un metro setenta y cinco compresión más bien delgado y el mayor sobre mi altura uno ochenta con presión fuerte sus pollas están en reposo las dos escondiendo sus capullos. 

La pareja habla susurrando entre ellos y al mayor y a mí nos dicen que nos vayamos, yo pongo cara de circunstancias y la señora me dice que ni una sola palabra, y ahora ni en el camino. 

Con un teléfono que le entrega el maduro hacen una llamada para decir a la persona que está al otro lado te mando al maduro y a mi puta. 

Salgo detrás del maduro montando en el coche, y como he podido comprobar el teléfono no ha sido colgado ya en el coche mi acompañante me indica con un dedo que mantenga el silencio. 

La situación es extraña estoy montado en el coche con un tío que como yo parece ser sumiso de alguna manera habiendo sido rechazado por mis dominantes me dirijo a un destino incierto. 

Hacemos treinta y pico kilómetros de carretera llegando a la capital de la provincia una vez que empezamos a callejear mi nerviosismo va a mayores ya que se ve gente por la calle en abundancia y por muy bien arreglada que vaya alguien podría darse cuenta que soy un hombre o incluso poder reconocerme ya que es una época en la que se mueve mucho la gente por provincias limítrofes. 

Llegamos hasta una zona en la que estando un poco más apartados del centro sigue habiendo mucha gente directamente con un mando entramos en unos aparcamientos dejando el coche nos dirigimos a los ascensores viendo que por la zona sale y entra coches continuamente. 

Llegamos hasta la planta y se abre una de las puertas por donde entro yo primera seguida de mi acompañante. 

El medio del salón un hombre de unos cincuenta y cinco años sobre el metro 85 y unos cien o ciento y pico kilos. 

Sobre una mesa hay varios consoladores dildos alguna fusta pinzas preservativos lubricante un poco de todo. 

El hombre se dirige hacia mí acercándose junto a mi cara para decirme que solo hable si se me pregunta y que obedezca todo si quiero volver a mi destino. 

Estoy acojonada una cosa es ser bisexual travesti y con un buen toque sumiso y otra es el dolor. 

Bueno putita estás aquí de prestado si satisfaces mis deseos podrás irte tal como has venido. 

Asiento con la cabeza y espero órdenes, mi acompañante de viaje ya está completamente desnudo y a una llamada de este macho dominante aparece una mujer delgada completamente desnuda con pinzas en sus pezones y su zona vaginal, está bastante roja al voltearse se puede apreciar que sus nalgas han sufrido algún tipo de castigo a pesar de parecer guapa tiene la cara un tanto desencajada, el macho se dirige hacia ella para decirle que su marido ha sido intercambiado por mí. 

Seguimos teniendo dos putas y de vuestro comportamiento depende el final. 

Dirigiéndose a mí me ordena que empiece a dar placer al hombre que me ha traído hasta aquí y que lo haga bien. 

En la estancia suena una fuerte palmada seguido de un grito de la chica. 

Me acerco al macho y este me agarra por las largas obligándome a besarme primero suavemente hasta que éste introduce su lengua hasta mi campanilla momento en que agarrándome fuertemente de las nalgas me estruja contra su cuerpo sintiendo como en la parte de abajo un bulto empieza a hacer presión contra mí. 

El macho alfa me ordena que le haga una buena comida de polla a este hombre, y yo obediente me agacho para encontrarme una polla sobre quince dieciséis centímetros pero gruesa con unas buenas pelotas colgando completamente descapullada y mostrando un capullo brillante empiezo pasando mi lengua desde sus pelotas subiendo por todo el tronco y jugueteando con la uretra sacando jadeos y suspiros a este macho hasta que me la incrustó completamente la boca empezando a hacerle una buena mamada y agarrándome a sus nalgas durante diez o quince minutos mi lengua y boca dan satisfació a este macho hasta que mi anfitrión me ordena una buena comida de culo. 

Este hombre se apoya sobre el sofá abriendo sus piernas completamente y mostrándome una profunda raja sin poder ver su agujero oscuro separó sus nalgas y empiezo a deleitarle con mi lengua sacando auténticos suspiros y jadeos durante unos minutos alentado por nuestro amo dominante infrijo placer a este otro hombre . 

Dirigiéndose a la mujer ves es más puta que tu marido, si queréis servirme tenéis que ser más sumisos. 

El macho alfa me pide que me acerque diciéndome que le toca a él recibir placer, haciéndome señas hacia su zona genital empiezo a bajar sus pantalones encontrándome una polla completamente tiesa cercana a los veinte centímetros gruesa con unas grandes pelotas colgando todo ello depilado completamente. 

Ver semejante tranca me produce lujuria y no me lo pienso dos veces y me trago todo lo que puedo sintiendo auténticas arcadas pero a su vez pensando que cuando esta polla me penetre me va a partir en dos. 

Si putita se hizo guarra sigue mamando qué bien lo haces puta pásame la lengua por los huevos cómeme toda la polla qué zorra eres como me gusta que bien lo haces sigue ahora me vas a comer el culo a mí también. El trasero de mi amo es gordo con una raja profunda y aún separando con ambas manos me cuesta llegar a su orificio hasta que este se espatarra para enseñarme un agujero que parece estar trabajado como el mío. 

Mi lengua juguetea con ese agujero negro metiéndola lo más profundo que puedo e intentando satisfacer los deseos de este macho creo que la muchacha y yo misma dependemos del placer y la entrega como sumisos a este hombre para poder salir de esa vivienda. 

Después de un veo como ofrece la polla a la chica pidiendo mi intervención también para hacerle una mamada a dos bocas aprovecho la ocasión para saborear la lengua de la muchacha y aprovecharme la medida que puedo de compartir semejante verga, viendo que a nuestro macho no le importa lo más mínimo que nuestras lenguas se entrelacen la chica no rechaza la mía, a follar toca chicas. 

La muchacha yo nos sentamos en el borde del sofá y ambos hombres se colocan de rodillas para empezar la faena, el macho alfa se le incrusta completamente en el coño hasta las mismísimas pelotas dando esta un pequeño grito mientras el otro hombre maduro purga en mí esfínter con algún consolador de la mesa lubricando la zona para enseguida sentir como apoya su capullo a la entrada de mi año  y ejerciendo una pequeña presión empieza a penetrar lentamente sintiendo como aquella polla entra hasta el fondo no es larga pero si gruesa y poco a poco empieza un mete saca mientras la muchacha jadea y suspira agitadamente mientras el macho alfa maltrata a sus pequeños pechos manoseándolos y palmeandolos. 

La chica jadea suspira lloriquea y parece que esta polla es demasiado gorda para lo delgadita que es la chica., mi culo no está llevando mucho mejor castigo ya que este empieza a bombear con más fuerza mientras la chica empieza a jadear y suspirar por la proximidad de lo que parece un orgasmo y nuestro macho alfa  empieza a bufar también próximo a un inminente corrida, sí sí putita toda toda toda para ti toda la leche dentro de tu puto coño puta guarra dos o tres embistes y el macho saca la polla del coño de esta terminandole por regar tripa y parte de su cuerpo aún con la polla palpitando es a mí al que se la mete en la boca para seguir descargando un par de trallazos más que trago sin más. 

El otro hombre sale de mí para empezar a correrse desde la entrada del coño de la chica hasta tripa y pechos de esta para luego hacerme la limpiar las últimas gotas a mí. 

Nuestro macho alfa impregna su polla en ambas corridas para ir alternando entre la chica yo y el otro macho 

Muy bien putita dirigiéndose a mí ahora creo que tienes que terminar tu trabajo y dejar este coñito bien limpio veo como un reguero de leche va cayendo desde ese coño estrecho hasta llegar a sus nalgas y manchar la sábana con la que está cubierto el sofá mientras yo me afano en que no caigan más gotas a dicha sábana

La limpieza del coño de la chica me lleva unos minutos más bien por el placer de comerme una almejita que por la lechada que tiene dentro pero aún así intento hacer mi trabajo bien levantando a la chica del sofá para llegar a limpiar su ojete que veo que está bastante abierto también aunque no me imagino ninguna de las dos pollas estas que lo haya penetrado. 

Ahora me toca limpiar tanto a mí como al otro macho a la chica al cuerpo pasando las leguas por los chorretones ya esparcidos anteriormente por la polla de nuestro macho alfa e intercambiando nuestras lenguas con la corrida yo me tomo la libertad de traspasar parte de esta leche a la mujer siendo aplaudida mi iniciativa . 

Terminado el trabajo me lleva mi macho alfa a la cocina donde me indica que me apoye sobre la mesa abriendo las piernas la mesa se estrecha por lo que mi cara asoba por el otro lado de la mesa donde el otro macho me planta la polla en la boca mientras empiezo a sentir como con algo de lubricante empieza a hacer presión la polla del macho alfa al lado nuestro se encuentra la chica observando mi estado de sumisión, y recordándole el amo que es lo que tiene que hacer su marido. 

Empiezo a sentir como ejerce mayor presión y traspasa el capullo el umbral de mi esfínter sintiendo un pequeño pinchazo de dolor retirada su polla para volver a comenzar la maniobra así ganando centímetro a centímetro y yo notando como me parto en dos sin poder quejarme ya que tengo la otra verga incrustada en mi boca, siento dolor pero a su vez una gran lujuria estoy siendo empalado por un pedazo pollón y por otro por culo y boca, en la cocina se oye en jadeos de ambos machos y quejidos míos. 

Ambos hombres van acelerando sus movimientos hasta que siento como en mi boca empieza a correrse la leche espesa del primer macho mientras mi empujador me dice que no me la trague toda y que la comparta con la muchacha, estas acerca hacia mí y escupo la totalidad de mi leche sobre su boca para volver a hacer ella lo mismo y así varias veces y tragando poco a poco esa corrida entre los dos los besos de leche con la mujer muy satisfactorios y la mujer no parece disgustarle demasiado. 

Es ahora cuando abandona mi culo el macho alfa para regarnos la cara de la muchacha y la mía y penetrar nuestras bocas para seguir corriéndose buena cantidad de leche que tragamos y limpiamos al otro con nuestras lenguas. 

Me duele el culo como si lo tuviese partido en dos dolorido y escocido mientras mi cara me huele a leche y sexo.

Nuestro anfitrión nos invita a darnos una ducha refrescante, el macho alfa con la muchacha y yo con el otro hombre que evidentemente es una continuación de mucho sexo oral besos y penetraciones. 

Una vez en el salón el macho alfa quiere ver como la chica y yo lo hacemos. 

Intento darle el mayor placer posible comiendo su vagina culo sus doloridos pechos y pasando mi lengua por cada rincón de su cuerpo viendo que ella goza y disfruta siento sus mismas caricias abriendo mi culo para incrustar su lengua hasta más allá de mi esfínter y así juguetear los dos uno con el otro. 

Poniéndola al borde del sofá y yo de rodillas se la clavo en su coño para empezar a follarmela, acto seguido siento como se para mis nalgas para follarme otra vez no es nuestro macho alfa este los deleita entregándonos la puya y el culo para que se lo chupemos alternandolos en dicha labor yo ya la tengo clavada entera y mis movimientos son los que marcan mi propia follada, ahora me como el culo del macho mientras la chica le come la polla volviendo a cambiar para yo comerme su pollón y la chica jugar con el culo del macho. 

La chica da muestras de estar gozando no sé si por comer la polla del macho y el culo o por las embestidas que yo le doy mientras en visto a esta hembra yo misma estoy siendo taladrada con el consiguiente dolor para mi culo. 

Es primero el hombre que me taladra el culo el que sacando la polla los la ofrece a la chica y a mí para correrse en las caras de ambos y comernos esa polla mientras nos besamos y saboreamos el elixir de esa leche. 

He paró de taladrar a la chica mientras nos comemos la polla de este y el macho alfa me dice que elija dejarme preñada o que nos traguemos la leche entre los dos dejo elegir a la chica por cortesía y esta me dice que puestos ya lo que el macho quiera este decide echarnos la leche para que no la bebamos mientras ha comenzado a follarme el dolor es superior al placer ya ni siquiera me preocupo en follarme a la chica ya que mi polla ha perdido su dureza por el dolor cuando esté ya está a punto por sus jadeos y  respiración agitada sabemos lo que nos espera otro río de leche inunda nuestras caras para que compartamos con nuestras lenguas dicha corrida.

Ahora continuó follando a la chica para en pocos minutos derramar mi leche dentro de ella ofreciendo mi polla para que me la limpie ella sin que nadie me diga limpio el coño de ella con mi lengua son las dos de la tarde nuestro anfitrión nos da un tentempié y promete que tendremos una tarde movidita.