diciembre 13, 2014

5848 Vistas

diciembre 13, 2014

5848 Vistas

una noche de verano

0
(0)

Una noche de verano salí de fiesta muy escotada y muy mona con tacones y maquillaje. Esa noche iba a ver a una de mis orquestas favoritas y de la cual me gustaba uno de sus cantantes. Con la escusa de que yo cantaba (que eso en realidad era cierto) quedé con él en el descanso con él en el escenario. Lo que yo no sabía es que yo a él también le gustaba a pesar de los 10 años que me llevaba. Bueno, pues terminaron el primer pase y subí al escenario como habíamos quedado. Nos pusimos a hablar y antes de que me diera cuenta ya nos estábamos besando. Poco a poco se fue calentando la cosa y me empezó a meter mano. En ese momento, nos fuimos corriendo a la parte de los camerinos del escenario. Nunca había entrado en uno. Tenía un colchón al fondo y me empujó haciendo que me cayera en él. Al momento, ya tenía a la fiera encima de mí arrancándome mi corsé rojo y besándome el pecho. Yo nunca antes lo había hecho y empecé a sentir placer cuando empezaba a tocarme abajo con sus manos mientras me mordisqueaba el pecho. Yo me empecé a poner bastante cachonda gracias a sus manos, sus mordiscos y sus besos. Yo ya me encontraba absolutamente sin nada de ropa, excepto los tacones. Tenía miedo a hacer lo que estaba pensando porque jamás lo había hecho pero al final me lancé. Lo empujé para atrás para quitarlo de encima de mí y así poder tomar yo el control de la situación. Cuando ya estaba encima de él empecé a mordisquearle el cuello para después seguir bajando y le quité su camiseta. No sabía que tenía esos perfectos abdominales que estaba viendo en ese momento. Me había puesto aún más cachonda al verlos. Seguí hacia abajo recorriendo con mis labios cada esquina de su torso. Seguía y seguía hasta llegar al punto más caliente. En ese momento, me acojoné un poco pero me lancé y seguí adelante. Le desabroché los pantalones y sin esperar más le quité toda la ropa que le quedaba puesta hasta dejarlo completamente desnudo ante mí. Cuando vi la polla que tenía me asusté pero al momento me entraron muchas ganas de hacerlo y no dudé en llevármela a la boca. Nunca se la había chupado a nadie y no sabía nada más que lo que veía en los vídeos porno que estaba acostumbrada a ver. Intenté hacer lo que veía en los vídeos y, en mi opinión no se me da del todo mal. Cada vez lo iba haciendo con más fuerza y más ganas y él empezaba a dar unos pequeños gemidos hasta tal momento que me agarró con fuerza la cabeza y me obligó a hacerle una garganta profunda. Casi no podía respirar y me estaba ahogando pero aún así me gustaba. Seguí un rato con ella en mi boca hasta que él me cogió y se volvió a tirar encima de mí. Esta vez era para chuparme el coño aún virgen. Empezó suave para que no sintiera mucho dolor al principio y poco a poco fue acelerando. A mí me daba mucho placer y pronto empecé a gemir. Estuvimos así un buen rato hasta que decidió que era hora de pasar a la acción de verdad. Yo estaba bastante nerviosa, ya que era mi primera vez. Yo le pedí que empezara yo debajo y gustosamente aceptó. Le besé los labios, le cogí de las manos y empezó a introducirla poco a poco para que no sintiera mucho dolor. Empecé a sentir algo de dolor e intenté gritar un poco pero sus labios me lo impedían. Por fin estaba toda dentro. Tampoco me había dolido tanto. Pero cuando la fue sacando, volví a sentir ese ligero dolor que me produjo un pequeño grito que esta vez sus labios no me impedían. Empezaba el juego y el placer se iba apoderando de la situación a medida que lo íbamos haciendo. Mis gritos se convertían en gemidos y el ritmo se iba aumentando cada vez más. Tras un rato en esta posición, decidí pedirle que me dejara dominar a mí y me senté encima de él, introduciendo su polla con mis manos en el lugar indicado. Empecé a subir y bajar mientras que él me agarraba los pechos y ambos gemíamos de placer. Lo hicimos en muchas posiciones y, como ya estábamos algo agotados, decidimos que era hora de terminar. Yo me había corrido varias veces mientras lo hacíamos pero él había aguantado hasta el final. Una de mis fantasías era poder chupársela y que terminara en mi boca. Sin que me dijera nada, me arrodillé ante él y me metí su polla en la boca sacándola y metiéndola a mi ritmo. Cuando ya estaba preparada, sentí como su corrida salía a chorro golpeando mi paladar haciendo que me tragara parte de ella y la otra se escurriera por entre mis labios y se deslizara por mi cuello. Había sido una noche alucinante y, menos mal que habíamos acabado ya porque sus compañeros de orquesta comenzaban a subir porque ya se estaba acabando el descanso. Ahora cada vez que nos vemos en una fiesta, nos citamos en el descanso y echamos un polvo en los camerinos del escenario.


¿Que te ha parecido este relato?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 0 / 5. Recuento de votos: 0

 

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este relato.

2 respuestas

  1. nindery

    Еstоy cоmpletamеntе desnudo. ¿Quiеrе ver una imаgen? – http://analsex4.fun

  2. helenx

    Stop jerk off. I know a site where thousands of single girls are waiting to be fucked. Look at them: http://xnice.fun/rt

Deja un comentario

También te puede interesar

El otro cartero de Neruda

anonimo

22/11/2015

El otro cartero de Neruda

Mi amiga, su hijo y yo

anonimo

08/02/2020

Mi amiga, su hijo y yo

Hasta el Fondo se la puso parte III

niebla

12/01/2021

Hasta el Fondo se la puso parte III
Scroll al inicio